"Todoroki, entrenamientos, Atsuhiro y Jin"

La pecosa se recostó en su futón y suspiro, recordando los sucesos recientes y esperando que su "compañero de habitación." Terminara sus entrenamientos para poder comentarle sobre la situación.

— Te prometo venir todas las tardes.— dijo Inko con lagrimas en sus ojos.— siento que tengas que pasar por esto de nuevo, mi niña.

La pecosa sonrió para tranquilizar a su madre:— no es igual, ahora me están protegiendo, así que no te preocupes mamá.— ambas se unieron en un abrazo.

En aquel momento la casa del heroe de fuego se encontraba casi repleta de héroes profesionales, después de todo nadie quería volver a darse el lujo de que la chica fuera secuestrada de nuevo, sin embargo, no le permitían a la menor de los Midoriya estar en aquellas reuniones. La pecosa se sentía horrible, un sabor amargo se encontraba en su boca. La chica entendió su mano hacia arriba, tapando la luz de la bombilla, realmente se sentía inútil ¿realmente podía ser una heroína si tenían que salvarla cada cinco minutos? Para la pecosa, en aquellos momentos, la opción de un "final feliz" era algo que veía muy alejado.

— ¿____?— es escucho la voz del mitad mitad por lo cual la pecosa se levantó rápidamente.

— Hola, Sho-chan.— dijo esta con una sonrisa.

— no es que me moleste, de hecho me alegra que estés aquí, pero. ¿Que haces aquí?— pregunto el chico con heterocromia.

La chica palmeo dos veces el futón frente al suyo, haciendo que por inercia el chico se sentara y la observara con un semblante serio:— veras, puede que hayan intentado secuestrarme de nuevo...así que, tu padre me esconderá aquí hasta que la persona que me quiere sea atrapada.— explico la pecosa.

Shoto se mantuvo en silencio:— realmente solo será hasta que entremos de nuevo a clase, así que no será mucho tiempo, ¿te mencioné que tendré escoltas?— el mitad mitad abrazo a la chica, sorprendiendo a esta.

— Se que escondes tus sentimientos, y no es que quiera verte llorar, pero, esto que haces no es sano. Déjalo salir.— aquellas palabras hicieron que la pecosa comenzara a temblar.— creo que solo te he visto llorar una vez, te prometo que no le diré a nadie.

La pecosa apretó la camisa del chico, sientiendo picazón en sus ojos y su nariz, luego de una roto las lágrimas comenzaron a salir. El menor de los Todoroki apretó sus labios, odiaba ver a la persona que tanto amaba de aquella manera, le dolía ver a ____ rota. Una pequeña lágrima se resbaló por la nariz de Shoto, este no tardo en limpiarla y frotar sus ojos, cuando la chica terminó de llorar suspiro.

— seguramente la pasarás bien aquí, el viejo te quiere más que a nosotros.— intento bromear Shoto, aquello funciono, haciendo a la pecosa reír ligeramente.

Ambos se separaron, mirando fijamente a los ojos del otro, Shoto no tardó mucho en limpiar las lágrimas en las mejillas de la chica y luego sonreír:— Traere Soba, ya verás que te sentirás mejor.— el chico se levanto y se retiro del lugar.

La pecosa suspiro.

Pensando que Shoto era quien abría la puerta sonrio, sin embargo al ver que Hawks, Aizawa, gang orca y Endeavor solo giró la cabeza con confucion:— Ey, _____, hay algo que tenemos que decirte.— dijo Hawks.

— Queremos que tomes terapia.— dijo Endeavor.

— Si...yo lo hubiera dicho mejor, pero, básicamente.— dijo el rubio cruzado de brazos.

La pecosa desvió la mirada con el ceño fruncido:— no confio en los psicólogos.— dijo ella, sorprendiendo a los presentes.— Solo son chismosos.

Hawks no pudo evitar reír, Gang orca suspiró:— en mi agencia tenemos un buen programa de psiquiatría, podríamos ayudarte a lidiar con tus ataques de ansiedad.— la peliverde se tensó.

— Lo pensaré.— finalizó esta.

Los presentes se retiraron, después de todo debían seguir con la reunión, minutos después el mitad mitad llego con un gran tazón de Soba en sus manos. La pecosa aplaudió con emoción, recibiendo este y comenzando a comer para evitar pensar en lo que sucedía a su alrededor.

— Por cierto, mis hermanos también se quedaran aquí.— el de heterocromia no tardó mucho en ahogarse con sus fideos.

Eran aproximadamente las doce de la madrugada, la menor de los Midoriya se encontraba jugando con su teléfono plácidamente mientras sus hermanos y Shoto dormían, después de todo los Izukus no permitirían que el mitad mitad durmiera solo con su hermana. Com una sonrisa la chica comenzó a mover sus piernas, después de todo habia logrado ganar la ruta de Unknown en Mystic messenger, al terminarla suspiró, dispuesta a dormir. Una llamada entró en sus celular antes de que la pecosa apagara este, era de un número desconocido. Las dudas no podían ser aún más grandes en la mente de la pecosa, si bien podía rechazar la llamada la curiosidad era un más grande que la razón, razon por la cual contesto.

— ¿No crees que estas desvelandote demasiado?— una voz que no tardo en reconocer sonó del otro lado de la línea.— a demas, no debes contestar llamadas de número extraños.

— Bueno, tu haces muchas cosas que no deberías hacer.— susurro la chica, haciendo a Dabi reír.

— Touche.— dijo.— solo quiero decirte algo...te estaremos cuidando, así que, no te preocupes por nada ni tengas recaídas. Estas en mi casa ¿no es cierto?

— bingo.— respondió esta.— los extraño, no alcance a visitarlos...ojalá tuviera un Quirk más normal, así no pasarían este tipo de cosas.

— Si lo tuvieras nunca nos hubiéramos conocido.— respondió el hombre.— no lamentes cosas que están fuera de tu control.

Gritos se escuchaban de fondo en la llamada de Dabi:— ¿qué haces?— pregunto la chica.

— solo me deshago de unas plagas, puedes sentirte más segura ahora que ya no están rondando por ahí.— se limito a responder.— no llames a este número, me desharé del teléfono.

El hombre colgó, incinerando al teléfono desechable que había comprado para llamar a la peliverde, después de todo todos en la liga se aprendieron el número de teléfono de esta gracias a que ninguno podía tener un teléfono propio ya que sería fácil de rastrear.

— ¿Donde está Destro?— pregunto el hombre, desganado. Dabi ya había asesinado a veinte personas que rondaban por la residencia Todoroki.

— Destro la conseguirá y todos ustedes se van a pudrir en el...— antes de terminar Twice rompió el cuello de la mujer, asesinando a esta al instante.

— No me gusta que hablen de esa manera de mi esposa...¡Tal vez deberíamos secuestrarla y llevarla con nosotros!— dijo Twice con euforia.

— si se queda con nosotros será un blanco aún más fácil, destro no dudaría en atacarnos y llevársela.— explicó el pelinegro mientras quemaba aquel cuerpo, reduciendo este a cenizas.

Narra ____.

Mande a volar aquel saco de boxeo con el que me encontraba entrenando, estoy realmente estresada, me han mantenido como una princesa recluida en una torre, y entiendo la situación, pero, realmente es molesto no poder salir a ningún sitio. Suspire y traquee mi cuello para luego comenzar a estirar todo mi cuerpo, llevo aproximadamente cuatro horas entrenando, o bueno, la verdad no sé; a veces entreno con Laito durante las tardes cuando Enji y Shoto salen, Aizawa viene todos los martes y entrenamos como era usual antes de las vacaciones, sin embargo, desde hace un tiempo las noticias sobre el paradero de Ángel habían dejado de llegar a mí.

No creo que haya hecho algo realmente malo, solo deje salir otra parte de mi ¿está realmente mal? Si no lo hubiera hecho probablemente hubiera muerto hace un tiempo, en mi opinión yo tengo la razón, Ángel solo se comporta como una niña. Dejé salir un suspiro y comencé a estirar mi cuerpo, Aizawa me enseño que era necesario para tener una buena flexibilidad, lo cual, es perfecto para el combate cuerpo, otra cosa es que hace un tiempo he tenido un dolor de espalda realmente molesto, hace tiempo me ha molestado, pero se vuelve cada vez más fuerte ¿Haile habrá dañado algo en mi columna? Que pesadilla. Algo positivo es que pronto volveremos a clases, en mis años de secundaria nunca pensé que algo así me alegraría, por más que siga estando encerrada las clases y mis amigos serán algo realmente bueno para distraerme, aunque sinceramente lo único que necesito es que toda esta locura con Destro y el secuestro se acabe. ¿Geten sabrá de algo sobre esto? Realmente espero que no. Hablando de villanos, la liga suele contactarme todos los días por medio de teléfonos desechables, es un detalle lindo ya que no puedo salir a verlos.

Me gire para salir de la habitación de entrenamiento, sin embargo me encontré con una hermosa sorpresa: — ¡chicas!— exclame, acercándome a ellas.

La primera en abrazarme fue Momo seguida de Jirou, Mina y Toru me abrazaron al tiempo al igual que Tsuyu y Ochako:— Endeavor—san contacto a mi padre, creyó que te estabas sintiendo sola así que le pidió que viniera, así que traje a las demás conmigo.— abrace a Momo, realmente Enji es genial.

—gracias. — dije con una sonrisa, después de todo estaba realmente feliz. — iré a cambiarme de ropa y vuelvo enseguida.

Usualmente cuando Endeavor y Shoto no están suelo entrenar solo con un sostén deportivo y un short, esa es la principal razón por la que quiero cambiarme, sin embargo, antes de poder irme un par de manos me detuvieron. —  no es necesario. — dijeron Uraraka y Mina al unísono, no las entiendo, sin embargo les hice caso por un rato.

Narrador omnisciente.

Por otro lado, mientras la pecosa disfrutaba un buen rato con sus amigas, dos personas se encontraban vigilando la residencia Todoroki, mientras uno de estos bebía café el otro hombre observaba a la peliverde con unos binoculares que robaron de Prolab semanas atrás,Toga río:— Mi esposa es tan hermosa, aunque aún no nos casamos.— dijo el rubio mientras observaba a la pecosa.

El del sombrero de copa uso sus propios binoculares, sonriendo al ver a la pecosa y tomando casi de inmediato un teléfono desechable y marcando al teléfono de la chica, esta no tardo mucho en contestar:— ¿Hola?— dijo la pecosa.

— Buenas tardes, princesa.— dijo el hombre, acomodándose y sonriendo al escuchar la voz de la peliverde.

— Oh, Atsu.— dijo la chica con emoción, al ver la sonrisa de la pecosa con sus binoculares el nombrado sonrio.

— ¿¡Que haces hablando con mi esposa!?— pregunto Twice, casi gritando.

— antes de que me quiten el teléfono, ponte algo de ropa, te puedes resfriar.— dijo el hombre.

— tengo ropa puesta.— dijo la pecos en signo de rebeldía, Atsuhiro río por lo bajo.

— Bueno, no digas que no...— antes de terminar el teléfono el fue arrebatado por Jin.

— ¡_____! Cariño, te extraño tanto, te prometo matar a Destro. Aunque es muy poderoso.— dijo el hombre.

— Jin.— dijo la pecosa para luego reír.— también te extraño, cosita bien hecha.

El nombrado chillo cual fangirl y con una sonrisa que no se notaba por su máscara dijo:— ¡Lo mataré lo más rápido que pueda para poder estar juntos! ¡te amo! Adiós.— el hombre colgó.

— ¡¿escuchaste cómo me dijo?!— grito el rubio con felicidad.— ¡Nos casaremos por la mañana!

Atsuhiro suspiró y desvió su mirada.

Extra.

Eran las doce de la noche y la pecosa no lograba dormir, después de todo se encontraba constantemente estornudando y tosiendo. Una llamada entrante hizo que la peliverde se distrajera de su sufrimiento.

— ¿Aló?— dijo la pecosa con su nariz tapada.

— Te lo dije.— la voz de Mr. Compress hizo a la pecosa gruñir.

— te lo dije.— la pecosa imito al hombre, cambiando todas las vocales por "i"

Sin esperar a la respuesta del hombre la pecosa colgó y se tapó con la sábana de pies a cabeza, por su parte Atsuhiro reía:— buenas noches para ti también.— dijo para si mismo mientras sonreía.

Hola caracola.

Hoy es sábado de capítulo chill.

La verdad no tengo mucho que decir, no planeaba publicar nada pero no se, la costumbre, es por eso que el cap es tan corto.

Ahora no piensen que porque este cap fue chill que el del lunes lo será.

No siendo más, me despido, lxs quiero.