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"Nuevo traje, casilleros, tenemos que hablar."
Izuku observó como Yaoyoruzu observaba a la entrada de los vestidores femeninos con impaciencia, era extraño, después de todo su hermana era la única que no había terminado de cambiarse con su traje de heroe. Yaoyoruzu, feliz y ansiosa, no podía evitar quitar la mirada, el día de hoy harían entrenamiento de campo y usarían sus trajes, razón por la cual se mejor amiga le habia anunciado que su nuevo traje de héroe estaba listo.
Cuando la peliverde salió Izuku abrió la boca con asombro:— ¿Que tal?— dijo ella, girando sobre su propio eje mientras mostraba su traje nuevo.
Con entusiasmo Momo se acercó a su mejor amiga, arrastrando a esta con ella hacia el área de entrenamiento donde se encontraban los demás integrantes de la clase:— ¡Kyoka, Mira!— gritó la azabache, colocando a su mejor amiga frente a su novia, sorprendiendo a las dos femeninas y haciendo que toda la clase las observara.
— Wow, es...muy diferente al anterior, te ves hermosa ______.— Dijo la de cabello corto mientras sonreiá.
— Gracias, Mei tardó en hacerlo porque insistió en usar nanotecnología para poder usarlo cuando quiera y que sea flexible a mi gusto, lo único en lo que ayude fue en el diseño de mi chamarra, en resto fue obra de Mei.— dijo la chica con una sonrisa.
— Es más discreto que el anterior, me gusta.— dijo Momo con una sonrisa.
— de hecho, Mei quiere que te pases por el taller, consiguió hacer una tela que puede ser rasgada y luego regenerada al instante, dijo que sería bueno para tu Quirk.— dijo la pecosa a Momo con una gran sonrisa.
— ________-chan te ves hermosa.— dijo Ochako con una sonrisa, acercándose al trio de mejores amigas.
— Aunque la mayoría de veces se ve hermosa.— Dijo Toru, abrazando a su amiga por detrás.
Tsuyu se acercó mientras sonreía:— Se ajusta muy bien a tu figura, Kero.— dijo la peliverde mientras sonreia, observando el traje de la de cabellos rizados.
— ¡Te ves fantástica!— exclamo Mina.
Mineta intentó acercarse solo para "ver el traje con más detalle" sin embargo Yaoyoruzu lo pateó lejos:— ¡No es justo! Ella tiene un harem de hombres y mujeres ¿por qué yo no tengo uno?— se quejó el chico de baja estatura, Kaminari soltó una risa.
— Amigo, sin ofender, pero, mirala y mirate.— dijo el rubio mientras reia a un lado de Sero.
Ángel, quien se encontraba allí de acompañamiento, observó a Aizawa, quien miraba a la hermana de Izuku sin expresión alguna, una sonrisa se escapó de los risa de la mujer, haciendo que el hombre la observara con el ceño fruncido.
— Te gusta el colágeno ¿no es cierto, Shota?— el hombre levantó sus cejas con sorpresa.— Me alegro de haber superado mi enamoramiento, aunque la verdad me decepciona no haberte tenido, si te dejo con ella estarás en buenas manos. Te deseo suerte con su fila de pretendientes.
El mencionado colocó su mano en su cuello, desviando la mirada hacia la entrada al campo de entrenamiento:— No se a que te refieres, ella es una niña.— dijo el azabache, devolviendo su mirada a la sonriente albina, observandola con fastidio.
— Shota, no nací ayer, a demas, estas de suerte. Me casaré en dos meses y solo tendrás a la molesta de Joke.— dijo ella con una sonrisa.
— Recibí la invitación, ¿en serio te casarás con alguien que no amas? — la mujer se encogió de hombros.
— Era algo que estaba acordado desde que tengo memoria, a demas, es un buen amigo mío. No tendremos hijos ni nada pero nos divertiremos.— dijo ella con una sonrisa.— No quiero dejar a un niño solo cuando muera en unos cuantos años, y él lo sabe, entonces te pido que, si te elige, la cuides.
Shota calló, soltando un largo suspiro mientras observaba a Katsuki soltar pequeñas explosiones:— En un mes ella y yo iremos a la prueba de vestidos, a demas, ella será mi dama de honor junto con Nemuri, invitaré a algunos niños de tu clase a ver si sucede algo interesante como el fin de semana. No puedo esperar.— dijo ella con una gran sonrisa, diciendo todo aquello con tranquilidad.
Katsuki abrazó a la peliverde con posesividad, gruñendo a todo aquel que intentara acercarse, sin embargo, lo único que recibió a cambio fue un golpe en la cabeza por parte de la peliverde, Shoto aprovechó aquello para tomar al chico del cuello de su camisa y lanzarlo lejos, siendo este ahora quien abrazaba a la peliverde, a pesar de ser más alto simplemente para los que los miraban parecía que el Todoroki fuera un koala agarrando a un arbol, siendo este último la cintura de la menor.
— Dios.— dijo Aizawa con cansancio.— mejor comienzo antes de que Bakugo mate a alguien.
(...)
— Nos vemos en clase.— Dijo la azabache, saliendo de los vestidores femeninos tomada de la mano con Jirou, quien sonreía tiernamente hacia la pecosa.— Quiero ir a comprar unas bebidas antes de ir a clase, siento no esperarte, te compraré algo rico.
— Claro, sabes lo que me gusta, hermosa.— la pecosa a las dos chicas, la cuales soltaron una risa antes de salir de los vestidores, dejando a la chica completamente sola.
La peliverde, al encontrarse sola, soltó un suspiro, relajándose y guardando su traje donde debía, comenzado con ponerse su falda para luego ponerse su camisa, abotonando esta y dejándola por fuera de la falda, como solía hacerlo, amarrando su corbata algo suelta e ignorando el saco del uniforme que colgaba en un gancho en su casillero. Luego de ello la chica prosiguió a colocarse sus largas medias y sus zapatos, terminando de vestirse y caminando hacia un espejo, tomando la liga de su cabello y amarrando este mientras observaba su reflejo en el espejo.
La peliverde sonrió y devolvió su vista hacia los casilleros, acercándose al suyo y sacando su mochila y su traje de héroe para ponerlo en su lugar, al girarse para dirigirse a la salida un corazón se detuvo por un milisegundo ante la sorpresa que fue ver a Izuki de pie frente a ella.
— Izuki, ¿que haces que aquí?— dijo ella tartamudeando con nerviosismo.
El villano, el cual poseía una expresión neutra, levantó una de sus cejas:— Me haz estado ignorando durante el fin de semana y este día completo.— dijo él, observando a la más baja, la cual no podía adivinar las intenciones del mayor gracias a la nula expresión en su rostro.
— ¿Que te dijo? He tenido muchas cosas que hacer ¡Oh! Mira la hora, se me hace tarde para mi clase de arte moderno con Midnight, recórcholis. no podremos hablar del tema.— dijo ella, intentando evitar al hombre y salir hacia su libertad, sin embargo, el mayor la tomó de la parte de atrás camisa del uniforme, haciendo que ella volviera a su posición inicial.— ¿Pasa algo hermanito?
La pecosa observo los fieros ojos del hombre, haciéndola desviar la mirada mientras reia, soltando una risa nerviosa, el peliverde la observó en silencio, haciendo que la chica colocara sus manos en su pecho, intentando alejarlo:— Vamos, tengo que ir a clase, lastimosamente escogí ser heroína.— el hombre tomó, con una de sus manos, las muñecas de la chica, colocando sus manos sobre la cabeza de esta.
El villano pegó su cuerpo al de la menor, arrinconando a esta contra los casilleros y dejándola sin escapatoria, con su mano libre el peliverde sujetó el cuello de la menor, obligandola a levantar la mirada, ambos se observaron por un largo tiempo, sin embargo el mayor rompió el contacto visual al acercarse al oído de la chica.
— ¿Así es como quieres jugar?— susurró el en su oído, su voz era más ronca de lo normal, denotando sus malas intenciones.— Se que te encantó, _______, no hagas como si no hubiera pasado nada ¿te gustó sentirme contra ti? Cada embestida te hacia más ruidosa ¿te gustó el tacto de mi mano contra tu piel? Vamos, pequeña. deja de jugar con fuego cuando eres de papel.
La peliverde cruzó sus piernas, cosa que el hombre notó, dándole una sonrisa cínica:— Ay, ________, ¿enserio quieres intentar jugar este juego cuando puedes ceder tan fácil y tener lo que deseas?— dijo él, apretando ligeramente el cuello de la chica, sin embargo, luego suavizó su agarre al quitar su dedo pulgar, comenzando a acariciar el labio inferior de la menor con este.
Acto seguido el hombre metió su dedo dentro de la boca de la chica:— Esa linda y sucia boca tuya no paraba de gemir ese día.— la peliverde se derritió, sus piernas ya no podían sostenerla más, razón por la cual el agarre sobre sus muñecas era lo único que la mantenía en pie.— Quiero ver cuanto tiempo aguantas sin mi.
La sonrojada chica levantó su mirada, observando los hambrientos ojos del hombre, al hacer aquello él de inmediato sacó su pulgar de la boca de la más baja, volviendo a sostener su cuello con firmeza, haciéndola levantar la barbilla, el hombre sacó su lengua, abrió la boca de la chica y la besó moviendo su lengua con fiereza dentro de la boca de la chica, jugando con la lengua de esta y haciéndola soltar uno que otro jadeo cuando este apretaba su cuello.
Al separarse, Izuki sonrió con satisfacción, observando como la peliverde frente a ella apenas podía estar de pie, sonrojada:— Pero, ahora mismo estás muy ocupada y tienes clases ¿no? Lo mejor es que me vaya.— el hombre liberó a la menor, dando la vuelta y quedando de espaldas a la menor.
Girando levemente solo para observar como esta se desvanecía en el suelo mientras miraba un punto invisible en este.
(...)
La peliverde se inclinó con su silla, echando su cabeza para atrás y echándose aire con una pequeña libreta que siempre llevaba, por más que intento disiparlo si rostro aún estaba sonrojado y, por más que lo quisiera, no podía sacar al tirano de su cabeza. Shoto observó a la chica con sus cejas levantadas, después de todo era primavera y no hacía calor, sin embargo, él no tardó mucho en tocar dos veces el hombro de la pecosa, llamando su atención.
La hermana de Izuku observó al mitad mitad, el cual, solo le extendió su mano derecha:— ¿Tienes calor? — la peliverde soltó una risa, observando al chico con ternura por un corto tiempo.
— gracias.— dijo ella, tomando la mano del chico sin dar mucha más información.
Shinso observó las revoltosa piernas de la peliverde cruzarse, moviéndose ligeramente y tensandose por un largo tiempo, notando aquello que el resto de la clase no notó, cosa que agradeció. Sin decir nada el pelimorado devolvió su vista a sus apuntes, sonriendo alegremente, intentando reprimir aquella felicidad un poco para que nadie notara que se comportaba extraño.
Nuestra protagonista, por su parte, apretó la mano del mitad mitad mientras observaba la pizarra frente a ella con cierta ansiedad.
(...)
Las pieles de los dos cuerpos desnudos frotándose entre sí, los gemidos que sonaban en la habitación siendo opacado por la música, el sudor que bajaba por el cuerpo de ambas personas:— Vamos, preciosa, dímelo. Quiero escucharte.— dijo él al oído de la chica, sonriendo mientras aumentaba el ritmo de sus embestidas.
La chica echó su cabeza hacia atrás, soltando un gemido largo y clavando sus uñas en la espalda del mayor, haciéndolo gruñir un poco:— ¡Más rápido! Izuki, más rápido, por favor.— dijo ella mientras soltaba más gemidos cuando su orden fue acatada.
— Como ordenes, princesa.— dijo.
La pecosa abrió los ojos, sintiendo como si escuchara los latidos de su corazón, ella levantó la cabeza de su pupitre, notando el aula estaba vacía y que llevaba el saco de alguno de sus compañeros en su espalda, seguramente era de Todoroki, afirmandolo al sentir el dulce aroma característico del chico, ella no pudo evitar cruzar sus piernas, observando a sus alrededores y esperando que nadie la haya visto en aquella situación tan bochornosa.
— Tengo problemas serios.— dijo ella, tapando sus ojos con sus manos mientras apoyaba sus codos en su pupitre.
Ella mordió su labio inferior, escuchando el ruido exterior, sin embargo, centrándose en sus propios pensamientos, intentando hallar una situación a su problema más grande y las reciente. Con el dorso de su mano la chica tocó su propia mejilla, notando lo caliente que está estaba gracias a su prominente sonrojo gracias a la vergüenza que aquel sueño generó en ella.
Extra:
Las clases de aquel día se habían acabado, todos se encontraban en la sala común charlando animadamente, a excepción de una persona, la hermana de Izuku, la cual solo estaba presente en cuerpo, después de todo sus pensamientos se centraban en cierto villano y en lo que había sucedido en los vestidores aquella mañana. Shinso, notando el estado de la más baja, sonrió, chasqueando su lengua.
— Creo que iré a tomar una siesta, nos vemos en la cena.— dijo ella, levantándose rápidamente y caminando hacia su habitación de igual manera.
Hitoshi levantó la mirada, procediendo a irse silenciosamente sin ser notado, logrando alcanzar a la menor de los Midoriya, sonriendo:— ________ ¿podemos hablar?— dijo él, sonriente.
La chica frunció el ceño, confundida:— Claro.— dijo ella, mientra observaba a los lindos y vibrantes ojos violetas de Hitoshi.
— ¿Puede ser en mi habitación? Quiero mostrarte algo.— dijo él con una amplia sonrisa, esperando una respuesta.
Ejem, bueno.
He notado que hay muchos capítulos +18.
Mmmmm.
Por cierto, aquí está el nuevo traje, lo tengo desde hace tiempo pero han pasado tantas cosas en la historia que no he tenido el tiempo de agregar la reacción de todos.
Para lxs que se preguntan como es Ángel, ahí les dejé una imagen en la multimedia xd
Por hoy me iré, no tengo mucho que decir y ya me tengo que ir a dormir, me obligan a dormir temprano por el colegio.
En fin, espero leer su opinión en los comentarios, me hacen realmente feliz con ellos.
Lxs amo, gracias por leer.
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