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Si no comentan me iré por un mes.

"Solo disfrútalo."

- Quitate la ropa.- ordenó la peliverde.

Toga no tardó mucho en obedecer, se sentía extraña, siempre había creído que ella sería la activa, sin embargo, gracias a su obvia falta de práctica no podía tomar ese rol, aún, después de todo Himiko seguía siendo virgen. Por su parte la pecosa observaba la escena sin expresión alguna, sentada en su cama y cruzada de piernas, solo se limitaba a observar.

- También quiero que sueltes tu cabello.- la de cabellos rizados, levantándose y tomándo las dos ligas que ataban el cabello de Toga, observando y detallando su blanca y, en algunos lugares, sonrojada y tersa piel.

Nadie podría decir que esa chica era una villana a simple vista.

Con su dedo índice la peliverde empujó a Toga, colocando este en el lugar en medio de los pechos de la rubia y tirandola a la cama, colocándose inmediatamente sobre ella:- Sabes, Toga, me gusta tener mi privacidad.- la pecosa, manteniendo su semblante levanto el mentón de la mencionada, haciendo que la sonrojada chica la observabara con un gran sonrojo, el cual solía caracterizarla al asesinar personas.

- Lo siento, _____-chan, solo quería visitarte.- tartamudeo la chica de ojos miel mientras desviaba la mirada de los pechos de la peliverde.

La pecosa chasqueó la lengua:- Mirame.- ordenó, tomando el rostro de la rubia con una de sus manos y haciendo que ma observara.- Eres demasiado desobediente, Himiko-chan, por no decir mala.

El corazón de la mencionada estaba a punto de estallar, ¿desde cuándo _____ había tomado un rol tan dominante? Ella siempre había sido bastante tímida con respecto a aquello temas, sin embargo, ahí estaba, sentada sobre ella, obligando a Toga a seguir sus órdenes. La peliverde unió sus labios con los de la menor en un beso húmedo y apasionado, una nueva sensación para Toga, actualmente la rubia podía decir que la peliverde frente a ella en tan solo unos minutos la había echó sentir tantas nuevas y exquisitas sensaciones que quería más.

- Voy a obligarte a obedecerme toda la noche.- la chica desabrochó el sostén de la contraria, haciendo a Toga sonrojarse a un más.- ¿No es lo que querías? Intenta gritar si no te gusta, nadie podrá escucharte, mi habitación tiene aislante de sonidos.

Obviamente no gritaría, esa era la situación que Himiko quería, con confianza la de cabellos rizados tomó uno de los pechos de la rubia con sus manos mientras chupaba el otro, jugando con sus pezones, mordiendo su piel, haciendo todas aquellas cosas que quería que fueran para ella. Toga no hacia más que jadear antes el tacto. Usando su mano libre la chica comenzó a acariciar las piernas de la rubia, específicamente la parte interna de estas, rozando, a propósito, la intimidad de la rubia.

- _____-chan, por favor tocame.- la peliverde se detuvo, sonriendo con satisfacción al escuchar aquellas palabras salir de la boca de la villana.

La pecosa tomó la mano de la menor, colocando esta sobre su intimidad, aún cubierta por la tela de su ropa interior, acercando a su rostro la de ella dijo:- Tocate para mi.- El corazón de Toga comenzó a latir mucho más rápido, por su parte la menor de los Midoriya pasó su lengua por su labio superior, observando la entrepierna de la chica, esperando a que comenazara a masturbarse.

- No puedo...-

- ¿Crees que estoy bromeando? Es una orden.- dijo ella de forma autoritaria, interrumpiendo a Toga.

La rubia envolvió a la peliverde con brazos:- prefiero que esas cosas las hagas tu, a demas, nunca antes me he masturbado.- la peliverde observó a la rubia con una ceja levantada, mostrando un rostro serio y medio disgustado.

- Bien, creo que no se puede evitar.- Tomando la cintura de Himiko, la peliverde hizo que la rubia quedara de espaldas a ella, apoyándose sobre su pecho.

Con delicadeza ______ retiró las bragas de Toga, mostrando su húmeda intimidad, la pecosa humedeció sus labios de nuevo, observando la intimidad de la chica frente a ella, la peliverde pasó uno de sus dedos al rededor de esta, torturando a la rubia y haciéndola jadear. La pecosa retiró su mano, abrazando a la chica por la cintura y apoyando su barbilla en el hombro de la rubia.

- Vamos, inténtalo.- la rubia, dudosa, colocó su manos sobre su intimidad, acariciando esta lentamente y soltando pequeños jadeos ante el tacto en aquella zona tan sensible, la chica siguió acariciando aquel sitio, soltando gemidos y jadeos que eran como música para los oídos de la de ojos verdosos.- Pon tus dedos dentro.

La rubia no tardó en obedecer a la mayor, gimiendo mientras que la pecosa observaba como metia sus dedos dentro de su intimidad, con delicadeza ella giró la cabeza de Himiko, haciendo que la mirara y por consiguiente besara, acariciando uno de sus pechos en el proceso, aquello solo se detuvo cuando la rubia terminó con su masturbación.

- Estas tan mojada, Toga-chan.- dijo al ver a la rubia echar su cabeza hacia atrás, llegando al orgasmo, sin embargo, al ver como sus piernas temblaban no pudo evitar sonreír, después de todo, al parecer Himiko no había liberado la tensión de todos sus músculos.- Te enseñaré a hacerlo bien.

Aquello último fue dicho en un susurro al oído de la rubia justo antes de que la peliverde comenzara a besar su cuello mientras acariciaba la intimidad de la chica, presionando su clítoris:- Este es un botón maravilloso ¿no los crees, Himiko?- la mencionada soltó un jadeo aún más fuerte al sentir como la peliverde metía dos de sus dedos a su intimidad mientras que con su pulgar acariciaba su clítoris.

La chica aumentó la velocidad, gracias a esto la chica de ojos miel arqueó su espalda, echando su cabeza hacia atrás, apoyando esta en el hombro de la peliverde, quien la miraba con detalle, al notar que la chica había llegado a su segundo orgasmo saco los dedos del interior de la rubia, observando con indiferencia como sus dedos estaban cubiertos de aquel líquido viscoso que desprendió Toga al llegar al orgasmo.

Toga jadeo con cansancio, feliz ante ral éxtasis que le era proporcionada por parte de la peliverde, sin embargo, no tardó en sobresaltarse sentir como la pecosa cambiaba su lugar y ahora se encontraba entre sus piernas, lamiendo su intimidad:- ¡Ah! No, espera, me acabo de...- antes de terminar la pecosa hizo tal movimiento con su lengua que la hizo estremecerse y volver a gemir.- ¡Espera! Yo...

La chica de ojos verdosos separó su boca de la intimidad de Toga, observandola con una sonrisa juguetona y el entrecejo ligeramente fruncido:- Lo que dices no concuerda con las reacciones de tu cuerpo.- la chica sonrió algún más, trazando un camino con su lengua desde el abdomen bajo de la rubia hasta su cuello mientras que con la mano que anteriormente había usado la masturbaba.

- Al parecer esta es la única manera en la que eres obediente.- la peliverde comenzó a dejar mordiscos en el cuello de la rubia.- No puedo evitar querer premiar tu buen comportamiento.

La pecosa se deshizo de su ropa interior, quedando completamente desnuda, con agilidad levantó la pierna de la Himiko, sosteniendo esta para que quedara arriba para que de tal manera pudiera tener su intimidad sobre la de la chica rubia, y, así, apoyando su mano en la otra pierna de la chica. La pecosa comenzó a moverse, haciendo a Toga jadear mientras que por su parte ella la imitaba, soltando jadeos y gemidos, los cuales, esperaba que nadie más escuchara.

- Solo disfrútalo, Himiko-chan.- dijo ella entre gemidos, moviendo sus caderas para continuar frotando su intimidad contra la de la rubia.

La peliverde abrazó la pierna de la rubia, haciendo el movimiento más rápido, provocando que los gemidos aumentaran, luego de un rato, cuando ambas llegaron al orgasmo, la chica peliverde se sentó sobre la pierna de la rubia, observando a esta jadear de cansancio, observando como su mirada lasciva se cambiaba por una satisfecha.

- Te pertenezco, _____-chan, siempre te obedeceré.- dijo la rubia con una sonrisa y un sonrojo.

La pecosa la observaba desde arriba con una sonrisa victoriosa y egocéntrica, triunfante ante aquel nuevo encuentro que había tenido. Después de todo ya eran dos aquella semana. Definitivamente no podía quejarse de su vida sexual.

¿Que cosas no?

Nunca antes había escrito lemon Yuri, disculpen si hay algún error.

Ejem, bueno, me iré.

Dejen aquí quien será el próximo ->

Opiniones del cap aquí por fa ->

Me retiro lentamente.

Lxs amo, gracias por leer.

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