Canción del capítulo: Chris Brown ft. Ariana Grande - Don't Be Gone Too Long.

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Capítulo 26
Asume la culpa

Sabía que no podía ser cierto. Sabía que era imposible que HyeLin le hubiera pedido algo así a JaeWang, mucho menos a alguien como él. Caminó de un lado a otro sin pensar con claridad, Hye debía seguir con vida, Jae sólo la escondió. Era seguro, era típico de él, asesinarla sería muy aburrido para el gánster, JungKook intentó calmarse, intentó respirar aunque su apariencia era la de alguien teniendo una crisis de ansiedad, NamJoon lo detuvo sujetando sus hombros.

—Tienes que detenerte, estás mareándome.

—¿Por qué no ha aparecido?—habló un poco más bajo—Agust D entraría en escena en cuanto JaeWang nos atrapara.

—Aparecerá, tienes que mantener la calma—YoungOk intervino.

—¿Te parece que puedo tener calma cuando no sé que demonios le hizo a Hye?

—JungKook, conocemos a JaeWang, no pudo haberla asesinado.

—Ese audio...

—Te aseguro que debió obligarla a decirlo, tal vez la grabó en algún momento.

Incluso cuando sabía que podía ser cierto, el no saber donde estaba su novia lo estaba inquietando más que encontrarse encerrado en ese sótano. Tomó asiento en uno de los escalones llevando sus manos a su cabeza, ese plan había sido muy sencillo y por eso salía mal, los chicos llevarían a YoungOk, le harían creer a Jae que se había salido con la suya mientras que los hombres de Agust D entrarían en acción dándole la entrada al rival de JaeWang, allí lo atraparían en su casa.

Pero todo debe salir diferente.

Todo debe irse a la mierda otra vez.

—¿Señorita Shin?—escuchó una voz ronca a lo lejos, era masculina, fue haciéndose más nítida a medida que sus ojos se abrían con lentitud adaptándose poco a poco—Señorita Shin, ¿Puede escucharme?—desconocía esa voz por completo.

La castaña tenía una intravenosa en el brazo la cual se conectaba a una bolsa transparente colgada en alto, Hye se encontró en una habitación de hospital amplia, no se sentía del todo bien todavía, pero sí un poco mejor, la ventana de aquel lugar daba hacia el pasillo donde el personal del hospital, pacientes o familiares pasaban. Por último se fijó en el hombre que estaba sentado junto a su camilla, la cicatriz en su ojo fue lo que más llamó su atención.

—¿Quién es usted?—su voz fue baja.

—El doctor dijo que se recuperaría si guarda reposo, se alimenta bien y descansa, ha estado bajo mucha presión, todo su malestar es producto del estrés—aquel cabello negro iba peinado hacia atrás exponiendo su frente.

Lo último que podía recordar era la habitación donde JungKook la dejó, creyó ver a JaeWang luego de eso tomando su teléfono, en efecto, la castaña no lo traía consigo.

—¿Dónde está JungKook?

—En la casa de JaeWang con NamJoon y YoungOk—comentó como si nada.

—¿Qué?

—No te preocupes, estoy dejando que JaeWang crea que ganó.

—Debemos sacarlos...—hizo el intento de apartarse la aguja del brazo, el tipo la detuvo sosteniendo su mano—¿Dijo YoungOk?

—El detective te trajo aquí por órdenes mías—indicó—Hay un infiltrado en casa de Jae, él no lo sabe, no pensaba usar ese as bajo la manga, pero tu novio me cayó bien, todos tenemos el mismo fin, acabar con ese imbécil—la soltó—Antes de ir por tu chico quería conocerte, he escuchado tu nombre muchas veces, JungKook me contó tu historia, no se lo dije, pero...conocí a tu madre en una oportunidad.

HyeLin estaba muy quieta procesando aquello.

—¿Mi madre...lo conoció?

—Shin DaRin—asintió—No pienses mal, nunca me aproveché de ella, la conocí en un bar, tu madre comenzó a conversar conmigo gracias al alcohol en ella, fue sencillo notar su alcoholismo—juntó sus manos entrelazando sus dedos—Me dijo que tenía una hija, que siempre fue muy mala con esa hija, no me dijo el nombre, pero recuerdo el suyo—sonrió un poco—Eres físicamente muy parecida a ella.

Hye contuvo las lágrimas apartándolas de inmediato.

—Ella decidió quedarse...

—Lo sé—asintió—También se lo que hizo JaeWang y lo que te ha hecho.

—Quiero tener una vida normal, estoy harta de escuchar su nombre, harta de toda esta mierda...

—¿Serías capaz de matarlo?—la pregunta la tomó por sorpresa—No puedes dudar, no debes dudar siquiera. Lo preguntaré de nuevo, ¿Eres capaz de matarlo, HyeLin?

—Sí.

—Voy a capturarlo para ti, mientras tanto necesito que te quedes aquí.

—Pero JungKook y NamJoon...

—Tienes que estar en reposo, si JaeWang no sabe donde estás tendré mayor ventaja—se levantó—Hay dos de mis hombres vigilando tu puerta, estarás segura aquí.

—Espera, no estoy entendiendo nada, ¿Quién eres tú?, ¿Dónde está el detective Kwon?, ¿Qué...?

—Todo es parte de un plan, querida. Soy Agust D—se presentó—Y ese hijo de puta de JaeWang también me debe mucho. Ya sabes, relájate—caminó hacia la puerta bajo su mirada—Te llamaré en una hora...o quizás menos.

—No tengo mi teléfono...

—Mis hombres te darán uno.

—¿Dejaste a la chica en la clínica que te dije?—JaeWang no dudó en preguntarle al chico encargado de eso. Uno de sus hombres.

—Sí, señor—hizo una reverencia ocultando la verdad.

—Bien. Pongamos fin a esto—sacó la pistola de su espalda quitando el seguro. Salió de la sala indicándole a tres de sus hombres que lo siguieran al sótano, JungKook no dejaba de caminar de un lado a otro, se detuvo al escuchar la puerta. Distinguió a JaeWang con otros hombres, ni él ni NamJoon pudieron adivinar el siguiente movimiento, el sonido del disparo aturdió a ambos, la sangre salpicó a Nam quien estaba más cerca de YoungOk, acto seguido el cuerpo de la mujer cayó al suelo con una bala en la frente, el charco de sangre se expandió—Una zorra menos—sonrió satisfecho.

—Acabas de asesinarla.

—¿Quieres ser el siguiente o mejor me enfoco en nuestro querido amigo tatuador?—miró a JungKook quien estaba inmóvil, le encantaba ese odio en su mirada. Después de todo, terminaría muriendo como debía ser—Vamos, sabes que HyeLin pedía a gritos que la ayudaran a irse al más allá—se burló. Como si fuera un gran chiste.

—Ella no está muerta—dijo entre dientes con sus manos convertidas en puños.

JaeWang avanzó sin mucha prisa hacia él, NamJoon comenzaba a dudar sobre Agust D, ¿Acaso todo fue una farsa?, ¿Qué pasó con el detective Kwon?

—¿Quieres escuchar la grabación de nuevo?

—HyeLin jamás le pediría eso a alguien como tú—sus ojos oscuros estaban cargados de impotencia. Un poco más y explotaría—La conozco perfectamente, sé que la escondiste, te aprovechas de que está enferma, sigues infectándola como un puto virus, ¿Dónde la tienes, JaeWang?

Jae levantó su mano indicándole a sus hombres que no hicieran nada.

—¿La conoces tan bien que ignorabas sus ganas de morirse después de la muerte de su madre?—insinuó—Pero que pésimo novio eres, JungKook, no la salvaste en el pasado y no la salvaste en el presente—se encogió de hombros—Admítelo, HyeLin murió por tu culpa, agradece que no volví a cogerla como el año pasado, aun no olvido sus gritos...

El puño acabó estampándose en el rostro de JaeWang, el arma cayó al suelo, NamJoon iba a ayudarlo siendo detenido por uno de los dos hombres. El enfrentamiento era correspondido por ambas partes, JungKook estaba defendiéndose en una pelea trayéndole el recuerdo a Nam de cuando lo conoció en la cárcel, en ese entonces era golpeado la mayor parte del tiempo. Esta versión era muy distinta, JaeWang presionó su cuello con sus manos al tener ventaja sobre su cuerpo, JungKook sentía el sabor de su sangre en su boca, terminó escupiéndola en su rostro logrando distraerla, golpeó sus costillas con su puño, giró en el suelo quedando sobre Jae, imitó lo que hacía asfixiándolo, quería matarlo, necesitaba verlo muerto.

Esa sonrisa estúpida en sus labios lo hacía más desesperante, las manos aferrándose a su cuello como si su vida dependiera de ello y JaeWang no estaba luchando. Algunos ruidos se escucharon arriba, aun así la pelea seguía abajo, JungKook al percatarse que los otros dos iban a detenerlo tomó de prisa el arma alejándose de JaeWang apuntándolo, escupió la sangre al suelo teniendo su rostro tan maltratado como él.

—Voy a matarte, hijo de puta—el arma no temblaba en su mano.

—Hazlo—su risa amarga le enfadó más—Incluso si muero no tendrás a tu chica. Debiste verla cuando me suplicó que la matara, ella quería estar en paz y no pensó en ti ni siquiera al morir.

—¡Cierra la boca!

Justo cuando iba a presionar el gatillo, los disparos arriba llamaron la atención de todos. Agust D había llegado en el momento exacto, de los tres hombres de JaeWang había un infiltrado, éste rápidamente le disparó a los otros dos. JungKook no soltaba el arma aún, estaba cegado con su ira.

—Jeon JungKook—NamJoon lo llamó—Oye.

Sus ojos estaban fijos en JaeWang, su mandíbula estaba tensa, respiraba con algo de agitación, estaba fuera de sí. YoonGi hizo una llamada colocando el alta voz, al segundo repique respondieron.

—Puedes hablarle—informó.

—¿JungKook?—aquella voz la reconoció en el acto—¿JungKook, puedes escucharme?—su mano titubeó con el arma. Sus ojos fueron abandonando aquella ira pasando a una de dolor, volteó el rostro hacia YoonGi, la adrenalina se había ido.

JaeWang estaba perplejo. Todo había sido una puta trampa en la cual cayó sin problema.

—Está viva. El detective Kwon la llevó al hospital y te llevará allí si me das esa arma—indicó.

—HyeLin...—su voz tembló—Él...dijo que...

—Estoy viva, JungKook. Lo que te haya dicho es mentira—escuchó esa voz de nuevo—Deja que Agust D se encargue por hoy, ¿Sí?

JungKook miró a JaeWang en el suelo. Podía dispararle, podía convertirse en un asesino y manchar la inocencia que en un principio reclamó cuando lo encerraron injustamente. Bajó despacio el arma entregándosela, YoonGi quitó el alta voz no sin antes decirle a Hye que su novio estaría en camino.

—Ve arriba, el detective Kwon estará esperándote. Yo limpiaré este desastre.

—¿Por qué llegaste tan tarde?

—Todo era parte del plan. Luego te lo explicaré, ve.

Y eso haría, no pensó dos veces en apresurarse a la puerta, su mente sólo estaba en Shin HyeLin, siempre sería así.

Enserio que LolaBritez26 me ha salvado muchísimo con esta historia, le debo mucho.