『Doce』
Canción del capítulo: I Wanna Be Yours X I'm Yours (Mashup)
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Capítulo 12
Te amo
Hye fue sentada sobre la mesa de billar, sus piernas estaban a ambos lados de la cintura delgada de aquel atractivo hombre. JungKook acarició su labio inferior con su pulgar antes de besarla demandando que quería mucho más de ella, HyeLin introdujo sus manos debajo de su camiseta acariciando lo que encontrara a su paso, los chasquidos de sus bocas juntas no tardaron en escucharse, JungKook deslizó la camisa de ella un poco repartiendo algunos besos en su hombro expuesto dejando suaves mordidas que le hicieron suspirar.
—¿Jugamos otro juego?—insinuó con voz ronca.
—Pensaba lo mismo—respondió ella. Ambos compartieron una sonrisita cómplice, JungKook colocó su mano en la espalda baja de la castaña empujándola un poco para acercarla mucho más. Hye acarició su miembro al introducir su mano en el pantalón de algodón que tenía, el beso se hizo un poco más intenso cuando las lenguas de ambos rozaban a la otra. El chico disfrutó de las caricias allí abajo dejándole escuchar algunos jadeos de su parte acelerando su respiración, deslizó lo suficiente las bragas de la castaña y con ayuda de Hye se introdujo en ella escuchándola gemir.
HyeLin se sostuvo de la mesa de billar con una mano mientras la otra jugaba en la nuca de él. Las embestidas fueron profundas y continuas dando paso a los gemidos, sus muslos se tensaron abrazando la cintura de JungKook, tuvo que interrumpir el beso viéndose en la necesidad de gemir al sentir su miembro penetrarla una y otra vez. No eran dulce, pero tampoco tan rudo, estaba siendo perfecto, Hye abrazó su cuello dejando un camino de besos por allí sabiendo que le excitaba. Regresó a sus labios mordiendo aquel labio que tenía el piercing siendo su gesto favorito, JungKook sonrió con una ligera mueca de dolor.
HyeLin se recostó sobre la mesa de billar al inclinarse hacia atrás, JungKook siguió embistiendo más fuerte colocando sus manos en las caderas de ella, apretaba sus muslos, los acariciaba y repetía. Estaba seguro que dejaría alguna marca, la camisa que Hye tenía fue abierta por él teniendo más libertad para acariciar su cuerpo. La presión en el vientre de ella se hizo más intensa hasta acabar sintiendo como era llenada por el pelinegro, JungKook depositó un beso en la cicatriz de su abdomen causándole cosquillas.
—No creerás...que el juego termina aquí, ¿No?—Hye se apoyó sobre sus codos observándolo.
—No pensaba...que este fuera el final.
—¿Quiere tomar... un baño conmigo, señora Jeon?
Aquella invitación le hizo reír. Depositó un beso en sus labios aceptando con gusto.
La llave del agua fue abierta empapando el cuerpo de la pareja que estaba dentro de la ducha. JungKook aplicó shampoo a ella lavándole el cabello e incluso ayudándole a quitarse la espuma de éste. A simple vista la imagen podía considerarse tierna, sobretodo cuando Hye hizo lo mismo teniendo que colocarse de puntitas, JungKook bajó su cabeza dándole más facilidad a ella, depositó un corto beso a su boca sacándole una risita cuando el shampoo se mezcló con dicho beso dándole un sabor raro.
—Por supuesto, es muy romántico comer shampoo hoy en día—bromeó ella escuchándolo reír.
—Es el romanticismo moderno, ¿No sabía?—dejó que con el agua sacara la espuma de su cabeza. Luego de eso, fue él quien tomó la esponja de baño la cual al aplicarle el jabón creaba mucha espuma. La situación dejó de ser tierna volviéndose...subida de tono. JungKook paseó la esponja por el cuerpo femenino frente a él, besó su boca unos minutos descendiendo por sus pechos, acarició uno de ellos con la esponja mientras el otro fue mordido y succionado por él, sólo ese gesto hizo que las piernas de HyeLin temblaran.
—JungKook—gimió generando eco en el baño. El agua seguía cayendo sobre ellos volviendo más erótico el momento.
El pelinegro siguió descendiendo a su abdomen plano, fue dejando que la espuma se quedara allí quedando de rodillas. Hye aferró su mano a su cabello, JungKook bajó más por su vientre y el placer no tardó en llegar al usar su lengua en su intimidad. HyeLin gimió alto disfrutando aquello, el chico colocó su pierna sobre su hombro permitiéndole profundizar.
—Oh, Dios—su rostro se contrajo por el placer que invadía su cuerpo—JungKook—jaló de su cabello—Mierda—inclinó a un lado su cabeza sintiéndose venir. El pelinegro bebió de ella como si se tratara de agua, volvió a colocarse de pie con una sonrisita pícara.
—¿Lo disfrutaste?
—Me encantó—la posición cambió colocándolo de espaldas a la pared. Justo como ella estaba segundos atrás, tomó la esponja dejando que el agua la limpiara primero—Es mi turno, debo atender a mi esposo, ¿No?
Aquella sonrisita en HyeLin significaba peligro para JungKook. La dejó repatir besos por su pecho mientras enjabonaba su cuerpo, al llegar a su abdomen la castaña dejó pequeños mordiscos con algunas lamidas, su rostro quedó frente al miembro de su "esposo" frotándolo con su mano para animarlo un poco más. La respiración de JungKook fue en aumento, la boca de Hye comenzó a brindarle placer haciéndole sexo oral, colocó su mano sobre la cabeza de su "esposa" empujando sus caderas para profundizar más. HyeLin succionó probando como si fuera una paleta, lamió la punta haciéndole acabar más rápido que ella.
Aquel líquido blanco se mezcló con el jabón, HyeLin se colocó de pie asegurando de limpiarlo teniendo una sonrisita victoriosa. Sabía como hacerlo enloquecer en segundos, JungKook devoró sus labios por unos minutos mientras el agua caía sobre ambos.
Una ronda más había iniciado cuando Hye pretendía vestirse. JungKook la abrazó por detrás dejando besos en su hombro desnudo, sólo las toallas cubrían la desnudez de ambos. HyeLin lo empujó a la cama tomando asiento sobre sus piernas, el cabello mojado de la chica caía suelto por su espalda, pasó sus dedos por la melena oscura y húmeda de él sonriendo divertida entre los cortos besos.
—¿Mi esposo no está satisfecho?—éste negó con la cabeza haciendo un puchero que le causó gracia. El teléfono de Hye vibró en la mesa de noche con un mensaje, quedaría en segundo plano al estar ocupada. JungKook deshizo el nudo de la toalla exponiendo el cuerpo femenino de ella, HyeLin tenía una figura delgada, no necesitaba ser voluminosa, no necesitaba tener curvas extravagantes, le gustaba como era, le gustaba sus muslos delgados, le gustaba sus pechos pequeños, le gustaba la forma de su cintura cuando la acariciaba, le gustaba toda ella.
HyeLin, por su lado, le estaba gustando ser admirada por él, sólo por él. Inconscientemente sus mejillas se tornaron rojas.
—¿Por qué te sonrojas?—admiró aquel color en su rostro.
—Es tu culpa.
—Incluso cuando te conocí te sonrojabas.
—Sólo contigo, no suelo hacerlo con otros idiotas.
—Me alegra saber que no soy uno de esos.
—Eres un idiota mínimo—bromeó. A JungKook le gustó verla así de risueña, depositó un corto beso a sus labios que ella alargó. HyeLin deshizo el nudo de la toalla del pelinegro dejando que él la acomodara entre sus piernas introduciéndose en ella, Hye jadeó apretando sus hombros sintiéndolo llenar ese vacío en su interior, JungKook abrazó su cintura con sus brazos pasando a un beso más intenso. Las lenguas de ambos parecían tener su propia danza, con rozarse provocaba una corriente en ambos cuerpos, Hye había iniciado un vaivén teniendo el control de los movimientos al estar sobre el chico.
Se escucharon gemidos ahogados de su parte empujando sus caderas dejándose llevar por el placer del momento. Acarició las mejillas cálidas de JungKook mirando sus ojos mientras seguía moviéndose sobre él, escuchó un gemido bajo por parte del pelinegro animándola a seguir. Hye mordió su hombro tatuado sintiendo las manos de él ayudarle. JungKook apoyó una en su espalda baja y la otra en la cama.
Dejó que lo llenara de besos disfrutando cada segundo. La dejó tener el control de la situación ayudándola un poco cuando parecía cansarse, cuando los movimientos se volvieron más rápidos se abrazaron como si pudieran fundirse en el otro, Hye gimió inclinando su cabeza hacia atrás, el espejo de la peinadora dejaba ver la imagen de la cama, a HyeLin le trajo el recuerdo de la primera vez que estuvo con JungKook luego de ocho años. Podía verse totalmente desnuda sentada a horcajadas sobre él dejando que repartiera los besos que quisiera, los brazos fuertes de su "esposo" se mantenían rodeando su cintura ayudándola a moverse.
La imagen era excitante, su mirada se encontró con la de JungKook a través del reflejo, ambos agitados, con el cabello húmedo, sintiendo el cuerpo del otro entre embestidas, caricias y besos. Una pequeña sonrisa pícara se dibujó en sus rostros, más bien de complicidad, Hye tomó control de su boca moviéndose en un frenesí.
Los gemidos volvieron a escucharse hasta que ambos alcanzaron el clímax. JungKook apoyó su frente en su hombro respirando tan agitado como ella, HyeLin acarició su nuca alcanzando a decir:
—Estoy...un poco cansada.
—Me siento igual.
—Necesitábamos esto—Hye buscó su mirada. Depositó un beso en sus labios diciendo unas palabras que lo sorprendieron—Te amo, Jeon JungKook.
Bueno...ya les tocaba su momento xD
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