Tercera temporada. Capítulo 15: Ahora son tres
Viernes 18 de enero de 2036. El escondite del Infierno.
JiHoon se había quedado un rato en la fiesta y después se había ido a su cuarto. Tenía tanto en la cabeza que prefería descansar. Por lo tanto, al otro día, no se esperaba recibir los golpes desesperados en la puerta de su nuevo cuarto.
Se levantó casi dormido y abrió.
-¿Qué...?-la persona que tocó lo hizo entrar y cerró la puerta.
JiHoon pareció despertarse de repente y notar que quien estaba en su cuarto era Luzbel. Se veía asustado y como un niño pequeño. Como el niño que conoció.
-Necesito hablar contigo-dijo bajo y con la voz temblorosa.
-Luzbel-JiHoon se sentó a su lado y tomó sus manos-Dime.
-Tuve sexo con alguien más-dijo Luzbel, JiHoon lo miró.
-Eh...bueno, normalmente esto no lo hablarías con tu ex pero si te hace sentir mejor...-JiHoon se encogió de hombros un poco divertido y otro nervioso-No tiene nada de malo, tú y yo ya no estamos juntos por lo que está bien si te acuestas con alguien más-dijo intentando tranquilizarlo.
-Me acosté con Set.
JiHoon se quedó de piedra y su mente en blanco al escucharlo. Ahora sí que podía decir que estaba sorprendido.
-Okey...eso...no lo esperaba...
-No sé qué hice... Solo...no recuerdo nada. Cuando desperté él estaba ahí y...-Luzbel se tomó de la cabeza-No sé cómo pasó, pero pasó.
-Bueno...creo que ahora no tienes nada que sacarme en cara-fue lo único que dijo mirando perdidamente al frente.
-¿De qué hablas? Tú te acostaste con mi padre.
-Y tú te acostaste con tu tío abuelo, el interés amoroso de Exael, tu tío y alguien que luchó para protegerte cuando eras niño.
-Gracias, no necesitaba sentirme mejor-dijo Luzbel rodando los ojos.
-Lo siento es solo que...me juzgabas siempre por lo mismo y ahora tengo mi oportunidad.
-Tú te acostaste durante años con mi padre-le recordó Luzbel mirándolo.
-Ajá y si quieres puedes follar con Set durante unos años para que estemos iguales. Puedo esperar-dijo JiHoon encogiéndose de hombros.
-No sé ni por qué vine contigo-suspiró.
-Porque siempre te sentiste bien conmigo. Irónicamente soy quien puede calmarte, siempre y cuando no sea yo el motivo de tu enojo.-JiHoon pasó su mano por la espalda de Luzbel-Puedes quedarte aquí si quieres, hasta que te calmes. No me molesta.
Luzbel se giró hacia él y lo abrazó. JiHoon correspondió y lo mantuvo a su lado hasta que él le asegurara que estaba tranquilo.
Ángel&Demonio
Set había salido con la ropa desarreglada del cuarto luego de darse cuenta de lo que había hecho. Había despertado cuando Luzbel salía y él aprovechó para verse en el espejo. Marcas de mordidas y chupetones tenía en todo su cuerpo. También de dedos en su cadera y trasero. Tenía un mapa que le decía prácticamente todo lo que había hecho con el nieto de su hermano durante la madrugada. Una parte de él se sentía culpable y la otra se sentía asqueado. ¡Maldición! No se acostó con cualquier persona ¡fue con Luzbel! ¡Un niño!
Set estaba impactado todavía mientras caminaba por el pasillo sin saber a dónde ir. ¿A dónde iría? Tal vez su cuarto pero con la conmoción no recordaba dónde quedaba.
-Set-dijo Abel saliendo de su habitación-, ¿estás bien?
-S-sí-afirmó con voz temblorosa-, creo.
Abel lo miró preocupado y caminó a uno de los cuartos donde tocó la puerta. Exael salió medio dormido, Set se paralizó al verlo, sintiendo como si hubiera hecho algo mal.
¿Por qué su hermano había ido por él?
-Creo que a Set le pasa algo-dijo Abel, Set quiso irse pero Exael estuvo pronto frente a él.
-¿Set? ¿Qué pasa? ¿Pasó algo malo?-lo tomó de los hombros para examinarlo, Set se cubrió y se hizo para atrás-Set...
-¿Qué es esto?-dijo Abel tocando con su índice uno de los chupetones que tenía en el cuello.
-No sé-mintió dando un paso hacia atrás-Quiero ir a mi cuarto.
Abel miró a Exael y este decidió regresar a su habitación para dejar solos a los hermanos.
Abel no preguntó nada y Set agradeció eso. Al menos era algo bueno.
Pero lo que no fue bueno, fue el desayuno. Ahí estaba Luzbel y él intentaba evitarlo a toda costa. Lo estaba incomodando su sola presencia. Era el desayuno más incómodo de todos los desayunos que vivió.
-Logramos hacer la replica del veneno-dijo Bjorn en mitad del desayuno-Así que cuando digan, vamos por esos cretinos.
-Exael ¿puedes traer alguno de tus inventos para tener algo extra que usar?-preguntó Lucifer.
Exael se veía realmente serio, parecía ser otro demonio diferente del que conocía.
-Iré ahora.-se levantó y se marchó.
Set sintió un nudo en el estómago y dejó de desayunar.
Ángel&Demonio
Kumiko no había abandonado su puesto en toda la noche. No le afectaba, ella acostumbraba a no dormir durante noches enteras. No era un superpoder, era solo una habilidad que desarrolló con el tiempo para poder disfrutar de doramas, series, mangas, animes y libros. Era adaptarse o morir. Bien, no tan exagerado pero así se sentía.
Suspiró decidiendo estirar las piernas caminando por el Castillo, más precisamente los lugares cercanos. Sentía que si se entumecía no podría dar un paso sin caerse.
Fue a la sala, grande y solitaria, que no parecía el hogar en donde creció y en donde seguía viviendo. Era un lugar hermoso y acogedor. Lástima que estaban estos tarados que buscaban molestar.
Escuchó pasos detrás y se giró pensando que era uno de sus hermanos. Pero en su lugar vio a un chico de cabello negro y blanco que la miró divertido.
-Shhh no grites.
-¿Quién eres?-preguntó Kumiko.
-Puede que me conozcas ya, soy Mammón.-Kumiko intentó aguantar la risa pero no pudo-¿Qué te pasa?
-¿Eres mamón?-Mammón la miró sin comprender la gracia-No mames-y Kumiko estalló en carcajadas.
-No es gracioso-Mammón frunció el ceño molesto.
-Ay, ese nombre se presta para tantos chistes. Seguro tu padre eligió el nombre por algo que le gustaba mucho.
-¿Cómo lo sabes?-Kumiko volvió a reír.
-Ay, pudo ser peor. Pudiste llamarte Vergón.-Mammón comenzaba a perder su paciencia así que alzó su mano-Hey, ya sé que mis chistes son malos pero tampoco para tanto.
-Lo siento, princesa, pero debo ir por mis hermanos-Mammón lanzó el primer golpe que destruyó la ventana sin tocarla.
Kumiko logró esquivarlo con éxito y hacerse hacia atrás para tomar el comunicador con el que podía hablar con su padre.
-Papá ¡se metió otro pejelagarto!
Y cuando tuvo que esquivar un nuevo golpe lo dejó caer para salvarse. Mammón, enojado, usó su velocidad para lograr patearla contra la pared y luego tomarla del cuello.
-Duraste menos de lo que pensaba-sonrió de lado.
Kumiko le escupió sangre en la cara, lo que lo hizo cerrar los ojos y cuando los abrió vio una pulsera en su muñeca que lo hizo perder parte de su fuerza. Por la sorpresa la soltó y ella aprovechó para colocarle la otra. Mammón sintió algo extraño en él, como si su fuerza desapareciera y para comprobarlo intentó golpearla, pero Kumiko le sostuvo la mano con tanta fuerza que le dolió.
-Ahora sí, reza lo que sepas, porque te voy a hacer sufrir-la sonrisa de desquiciada de Kumiko asustó a Mammón-Te haré mi putita.
¿Por qué lo habían enviado solo? ¿Por qué?
Ángel&Demonio
Cuando Lucifer vio a tres en el calabozo, supo que solamente habían enviado a uno de ellos para liberar a sus hermanos. Y le sorprendía saber que solo Kumiko lo había logrado.
-¿Cómo?-preguntó Lucifer a su hija.
-Se confió y no calculó las pulseras.
-¡Porque no las conocía, maldita desquiciada!-gritó Mammón quien estaba sangrando de la nariz-¡Eres peor que yo!
-Muchas gracias, lo heredé de mami.
-Bien, uno menos, ahora solo faltan los que están en la Tierra y luego iremos por los que quedaron en el Cielo.-dijo Lucifer antes de girarse a ver a Mammón-¿Quiénes quedaron en el Cielo?
-Tu vieja-respondió Mammón molesto.
-Se mamó el Mammón-dijo Kumiko haciendo reír a algunos.
-¡Ese chiste es horrible!-gritó Mammón.
-Como sea, mi vieja está jubilada. Ahora habla, además de tu padre ¿quién más está?-Mammón se negó a responder-Te dejaré como compañía a Kumiko toda tu estadía aquí. Y te aseguro que esto que conociste no es ni la mitad de lo que puede llegar a ser.
-No puede ser peor-negó Mammón mirándolo.
-Oh, creenos que sí-respondió uno de los primos de Kumiko.
Mammón los miró buscando rastros de mentira, pero al no hallar nada decidió hablar.
-Satanás y Aamón están en el Cielo. Belcebú y Belfegor siguen en la Tierra. No sé sus ubicaciones-dijo bajando la mirada rendido.
-¡Traidor!-gritó Leviatán desde la celda de al lado.
-¡Tú harías lo mismo si te amenazaran con esta maldita demente!-se defendió Mammón moviendo las cadenas cuando se sacudió enojado.
-Bien, era todo lo que necesitaba saber-Lucifer tomó a su hija-La dejaré custodiando.-Kumiko sonrió pero cuando salieron, su padre volvió a hablarle-Ve a dormir, lo necesitas.
-¿No estaría custodiando?
-Nop, eso fue para asustarlos. Como sea, ve, cubriste tu cuota mensual de Serafines Legendarios.
-Bien, si me necesitan estaré durmiendo. Toquen antes de verme recién levantada, no es agradable-y salió de ahí.
Ángel&Demonio
Seok Jin había escuchado lo acontecido y también había escuchado la hazaña de su hermana. A nadie le extrañó que un Serafín Legendario le temiera tanto. A veces hasta ellos se asustaban de sus cosas.
Como sea, ahora sabían a quiénes debían enfrentarse.
-Belcebú y Belfegor están igual de entrenados por lo que ninguno será sencillo. Si se ajustan a los cambios que hicieron JungKook y YoonGi, estoy segura de que lograrán capturarlos-dijo Marsyl mirándolos-Atacar a matar será inútil, ellos pueden aguantar el dolor y los golpes, como también podrán esquivarlos. Tendrán que ir diez pasos delante de ellos si desean ganar.
-Propongo usar los sabuesos para distraerlos. Soltarlos en mitad de la pelea-dijo Exael con tal seriedad que sus hermanos lo miraron pensando que era otro demonio.
-Bien, antes hay que localizarlos. Necesitamos un equipo de búsqueda. Nosotros estaremos esperando la señal-dijo Lucifer mirando a sus hijos.
-Nosotras iremos-las hijas de Semyazza se ofrecieron, entre ellas Jennie quien parecía haber recuperado vitalidad desde que JiSoo regresó.
-Bien, esperaremos su mensaje-dijo Lucifer asintiendo hacia ellas.
Todas se reunieron y en un chasquido desaparecieron. Natasha, Ruby y Marya estaban preocupadas por sus hijas mientras que Semyazza las veía orgulloso de sus guerreras. Él parecía ser el único que sabía que regresarían enteras.
-¿Cómo podemos saber que no vendrá otro mientras estamos en la Tierra?-preguntó Seok Jin mirando a su padre y a Marsyl.
-No lo sabemos-dijo Marsyl-. Aamón podría venir, Satanás puede solo con el Cielo, de eso estoy segura. Por lo que nada es seguro. Solo podemos arriesgarnos.
-En todo caso, puedo dejar algo aquí-Exael buscó entre sus cosas hasta hallar un frasco con bolas de cristal negras-¿Tienes potasio en tu laboratorio, Bjorn?
-Sí-respondió Bjorn-¿Qué es eso?
-Solo derrama una gota de potasio en una bola de cristal y estréllala contra algo, lo que sea. Y verás la magia-Exael le pasó el frasco-Iré a preparar a los sabuesos. Necesitan estar listos-sin decir más, Exael los dejó solos.
-Bien, Belial, Mefistófeles, Gadreel y Araquiel, ustedes además de Exael vendrán conmigo. Los demás ya saben quiénes son. Solo me quedaron confirmar ellos-dijo Lucifer-Marsyl...creo que si te quedas será mejor. En el Castillo, cerca de los calabozos para cuidar que no vengan por ellos.
-Entendido-asintió ella mirando a Lucifer.
-Caín, Abel, Set, ustedes van a ayudarme a mí con Belfegor mientras el resto se encarga de Belcebú. Necesitaré que uno esté atento para colocarle el veneno a Belfegor.
-Yo lo haré-se ofreció Set que parecía verse mejor que en el desayuno.
-JungKook, tú ayudas con Belcebú ¿entendido?
-Sí, ya lo tengo presente.
-Bien, ahora...solo queda esperar.
El Próximo es la pelea contra Belcebú y Belfegor uwu esperenla uwu
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro