Tal y como se lo había propuesto, Leo volvió al mundo de sus amigos pero antes charlo con sus hermanos sobre lo que paso.
- ¿Ustedes que dicen?¿Quieren ir a la escuela conmigo? - dijo Leo feliz.
- Leo, ¿no estas muy grande para jugar a eso? - pregunto Donnie, la sonrisa de Leo desapareció y se transformo en mueca.
- Si no quieres ir di que "no", no tienes que insultarme - dijo Leo yendo con sus amigos - Hola, chicos - dijo con la voz apagada.
- Leo, ¿estas bien? Te noto algo decaído - dijo Claw.
- Mi familia cree que lo de la escuela es solo un juego - dijo Leo con un tono triste.
- Ellos se lo pierden - dijo Clawdeen tratando de animarlo - Ahora vamos que tienes que comprarte las cosas para la escuela.
- Clawdeen, yo no tengo dinero, ¿de donde lo saco? - dijo Leo.
- Yo te puedo dar trabajo - dijo el padre de Clawdeen - No necesitas mucha edad para ser repartidor, te pagare.
- Hecho - dijo Leo aliviado.
Las entregas eran numerosas y en lugares que no conocía pero con el tiempo se fue familiarizando con el entorno, ya conocía 3/4 partes del lugar.
- Bien Leo, tienes dinero de sobra - dijo Clawdeen felicitándolo.
- Lo se pero lo guardare por si necesito algo - dijo Leo guardando el dinero (el cual contaba) - Por cierto, ¿me enseñas a ser como tu?
- ¿Quieres ser como yo? - dijo Clawdeen entre "No me lo puedo creer" y "¡Que emoción!"
- Por supuesto, no conozco a una niña mas genial que tu. Ademas, no quiero que pases vergüenza solo por estar junto a un... des-adaptado - dijo Leo bajando la mirada-
- A) No me haces pasar vergüenza; B) Si soy genial y C) Por supuesto que te enseñare... ningún chico me había pedido algo como esto - dijo Clawdeen apenada.
- Muchas gracias, eres mi mejor amiga - dijo Leo abrazándola.
Clawdeen le enseño a combinar ropa (de hombre y de mujer), a posar para las fotos, a modelar y a tener actitud de "diva" pero sin pasarse. Sin embargo, 2 semanas mas tarde, Leo llego a la casa pero ni Claw ni Clawdeen estaban.
- ¿Clawdeen? - pregunto Leo a la nada - Vine por mi lección de moda de verano.
Leo no veía a nadie, de repente escucho unos ruidos raros así que decidió seguirlos. Se paro en frente de una puerta y la abrió sin tocar presenciando a los padres de Clawdeen teniendo sexo. Poco después, los adultos descubrieron la presencia del niño y se cubrieron con una sabana.
- Vuelvo mas tarde - dijo Leo alejándose de la puerta aun en estado de shock.
- ¡Mama, papa, volvimos! - dijo Clawdeen dejando las bolsas en "quien sabe donde" - ¡Leo, viniste! - dijo en cuanto lo vio - Leo, ¿que paso? - dijo al verlo pálido y con los ojos abiertos como platos.
- Por favor... no... preguntes - dijo Leo lo mas lento que pudo.
Clawdeen ignoro su estado de animo en cuanto cambio y siguió con su lección. Cuando Clawdeen cumplió los 13, Leo (como regalo de cumpleaños) le contó (en privado) el por que no volvió a su casa después de "ese" día. Para colmo, gracias a que "interrumpió el momento", Clawdeen tiene una hermana menor llamada Howleen.

Fin