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El día estaba por terminar así que una vez despiertos Sidon y link se dispusieron a volver a la región zora, el hylian se despidió de su padre pero antes de irse recibió un abrazo grupal el cual fue con un motivo, recordarle sobre cuidarse con su embarazo y seguir comiendo cosas realmente comestibles (cosa que no entendió por qué saliendo se comió una libelula), caminaron un rato con la arena jugando con esta a su paso, todo era risas y diversión hasta que Sidon fue detenido por una voz familiar y link al escuchar aquel ruido simplemente se fue a esconder lo más rápido posible.
-¿Rey Sidon?, ¿Que hace por estos rumbos?- el mencionado se mantuvo quieto en su lugar volteando lentamente hacia la razón de aquella voz.
-pero si es la maravillosa Matriarca de las Gerudo, Urbosa- mostró una sonrisa nerviosa extendiendo los brazos. -¿Es una linda noche no cree?- trato de cambiar de tema posicionando sus manos detrás de su espalda.
-concuerdo con usted joven Rey, pero aún no responde a mi pregunta majestad- la Gerudo poso su mano en su cintura deladeandose un poco.
-uhmm...bueno...-busco con la mirada alguna excusa la cual podría usar para salir de aquella situación. -vine por algo de sandías, si eso, sandías para mí gente-
Urbosa, un tanto desconfiada con su respuesta simplemente lo dejo pasar, le diría que mandaría a sus guardias a dejarle cajas con fruta de la región para que así no arriesgará su vida estando por el área.
-escucha Sidon, está bien que te preocupes por tu gente pero no por eso debes arriesgar tu vida, los zora te necesitan con ellos y sería devastador que su Rey padeciera por unas sandias- ambos caminarían por la arena guiando al ojiambar a las afueras de la región.
-lo se, pero mira el lado bueno, no me pasó nada- le daría una gran sonrisa a su contraria.
-es verdad, pero no te confies mucho pues en las noches suelen salir más montruos incluyendo a esos del clan yiga, no se cómo le hicieron pero volvieron a entrar a la ciudadela, un día de estos me veré en la necesidad de velar por mi tribu para mantenerlas seguras de esos lacallos- la peliroja parecía molesta cosa que a Sidon no le agrado, mantuvo su postura para así evitar alguna discusión con la dama.
Una vez llegando a la entrada del gran cañón, Urbosa lo despidió dejando que siguiera su camino por el río, el zora no tuvo otro remedio que alejarse de aquel lugar lo más pronto posible, pero llegando al rio celeste este detuvo su camino esperando a que mágicamente apareciera link.
Pasando unos minutos link por fin apareció entre unos arbustos, el ojiambar respiro aliviado saliendo del río yendo a dónde estaba su amado.
-pense que te habías quedado atrás, ¿No te lastimaste?- lo alzó en brazos recargandolo sobre su pecho mojado.
-nah, de hecho estuve detrás tuyo todo el tiempo, tanto que escuché lo que dijo la Gerudo sobre mi clan...-su voz se notaba algo apagada alarmando de inmediato al mayor.
-no te preocupes por eso, tu familia estará bien...mientras no tomen otra cosa prestada- esto causaría una risa de parte del rubio, lo regresaría a ver con una sonrisa en su rostro.
-tú cuerpo está frio y húmedo- lo abrazaría por el cuello poniendo sus piernas al rededor de su torso (tipo, abrazo de koala).
-lamento eso, pero ir por el agua era la manera más rápida de alejarme de esa región- le daría un beso en la mejilla empezando a caminar en dirección al río.
-no te disculpes, ahora vayamos a casa que me está dando hambre- le regresaría el beso para así poder ponerse de pie sobre el césped, el zora al entrar al agua cargo a link poniendolo sobre su espalda facilitando mejor su traslado.
En el trascurso del camino iban dando pausas pues al rubio le entraba curiosidad de varias cosas que se encontraban, eso hasta que se le ocurrió alejarse de más encontrándose con un guardián y pues al traer el traje yiga puesto este lo reconoció como una amenaza y lo empezó a seguir, link rápidamente volvió a dónde Sidon y por suerte el guardián no prosiguio con su protocolo al notar al zora y este solo dio un paso atrás volviendo a su puesto.
-ahora entiendo por qué mi padre no me deja acercarme al castillo sin algún camuflaje- se pondría a reír por lo sucedido contagiando a su pareja.
-no deberíamos reír por esto sabes, podrías haber salido lastimado- lo volvió a poner sobre su espalda para seguir con su camino, llegando al río zora este busco como subir por las cascadas sin marear tanto al hylian, una vez viendo la forma subió por las cascadas hasta llegar a la que se encontraba bajo el gran puerta zora.
-te veo arriba- comento el chico bajando de la espalda del ojiambar, miro uno de los pilares empezando a escalar este.
-claro...con cuidado- trato de no reír nadando hacia una cascada para subir con más facilidad a la región, estando ya arriba Sidon se quedó esperando a link en la entrada de la región, logro ver cómo las manos de link se sujetaban del barandal para así poder subir.
-me tarde por qué vi un cangrejo y lo quice atrapar, a demás de que con la panza que me traigo me es difícil escalar- hablo tomando un pequeño descanso recargandose en aquel barandal, el zora, aún tratando de aguantar su risa se acercó a el tomándolo del hombro.
-cariño, ¿Y por qué no usaste las escaleras?- hablo entre pequeñas risas señalando aquel objeto mencionado.
El rubio volteo a ver las escaleras soltando un pequeño resoplido, miro con molestia a su mayor pero este enojo se disolvió al escuchar como se reía de la situacion, empezó a reír junto a el llamando la atención de los guardias de la entrada, ambos Zoras se inclinaron un poco al momento que Sidon pasaba a un lado suyo junto a link, seguían haciéndose leves bromas entre ellos mientras caminaban hacia la sala del trono.
Los Zoras miraron a su Rey juguetear con link, los viejos Zoras saludaron a ambos chicos, el ojiazules les devolvió el saludo mientras se despegaba del zora par apoder ir a darle un abrazo a Dorphan, el estar junto a ellos hacia que en cierta forma se ablandara, más si dejaba que abrazara en cualquier momento a Dorphan.
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