Narra link:

Por la Diosa, esto es fascinante, nunca espere que realmente me hiciera caso y me acompañará a ver a mi padre, ya decía yo que mi don dominante iba a servir para algo, pero bueno, solo quedaba llevar a Sidon con mi padre y esperar que sogg no esté cerca.

Arrastre a mi mayor conmigo ayudandolo a pasar por la guarida hasta llegar a un pequeño pasillo con escaleras, empecé a trepar estás hasta llegar al pequeño almacén de plátanos donde mi padre se encontraba junto a dos samurais, regrese a ver a Sidon pues aún no había subido y me pregunté ¿Estará esperando a que yo lo ayude?, Nah, no creo...pero obviamente me equivoqué pues la escalera al ser de madera no iba a aguantar el peso de Sidon.

-por la Diosa...espera aqui- le comenté al zora recibiendo un pulgar arriba de su parte, corrí a dónde mi papá para decirle que Sidon decidió acompañarme hasta acá pero que no podía subir a este lado de la guarida.

-¿Cómo es que no murió en el camino?, Si que el amor hace que uno se ponga en riesgo- eso dicho por mi padre me hizo reír levemente, ambos bajamos de nuevo por aquellas escaleras encontrándonos a Sidon mirando una de las antorchas del lugar, mi padre fue hacia el jalandolo del brazo, mire como lo llevo hacia el área de entrenamiento donde la mayoría estaba ahí, solo espero y no pase nada malo.

Narrador:

el zora miro el lugar con una sonrisa en su rostro pero también con cierta preocupación al ver el gran agujero del centro del área.

-tengo muchas preguntas acerca de eso- señaló aquel agujero antes de acercarse un poco, asomo la mirada tratando de ver si había suelo debajo de.

-creeme, tampoco se para que es eso- dijo link quien se puso a un lado del zora.

-oh vaya...bueno sera mejor no descubrirlo- alejo a link de ahí para así evitar que ambos cayeran, kogg los llamo pues estaban a nada de ponerse a cenar, el hylian camino hacia donde los demás jalando consigo a el ojiambar.

Se sentaron en el suelo para poder cenar en familia pues habían organizado un pequeño picnic de noche, los yiga le preguntaron algunas cosas a Sidon y este le respondía con total sinceridad

-bien bien, una última pregunta y ya, ¿Piensas tener más hijos con link?- está pregunta hizo que Sidon se ahogara un poco pues le agarro de sorpresa aquello, trato de recuperar la postura tosiendo de a poco.

-yo..no lo sé, eso es algo que no está del todo en mi- se taparía la boca pues seguía tosiendo de a poco, link le dio pequeños golpesitos en la espalda tratando de ayudarle con la tos.

-primero dejemos que esta criatura nazca y después hablamos acerca de otro- miro a su compañero con seriedad mientras seguía dándole golpesitos a Sidon, el zora logro clamar su tos pero ahora estaba algo nervioso, no pensó que le preguntarán acerca de tener otro hijo más, el yiga se quedaría con dudas y con ganas de preguntar más pero kogg le hablo entre dientes diciéndole que no preguntará ninguna otra cosa más.

-dejemos de lado las preguntas incómodas y mejor cuéntanos de ti, ¿Por qué te enamoraste de link?- el hylian se volvió a sentar a un lado de su amado esperando también una respuesta de el, el zora tomo un suspiro para así poder hablar.

-que les digo, me atrajo su mal carácter, es que miren, ¿Cómo no enamorarme de esta cosita tan bella?, Es tan tierno aún que parezca que puede atacarnos en cualquier momento solo por qué si, es cariñoso y aún que me echa pelea cada que puede no le quita lo adorable- los yiga soltaron una risa sonora por la exacta descripción de link, el hylian regreso a ver a Sidon con su cara de póker.

-que tierno que veas a nuestro platanito de ese modo, aún que tienes razón, ese niño nos puede atacar y no deja de ser adorable- hablo un samurai quien alzó un poco su máscara para poder comerse un plátano.

Siguieron la plática de como es que el ojiazules a pesar de ser chiquito podría derrotar a un grupo de monstruos el solo, la noche se empezó a hacer fría por lo cual obligó a todos a entrar, Sidon se despidió de los del clan mientras caminaba detrás del rubio, link llevo al zora así habitación pero este se quedó parado donde antes había una puerta.

-¿Por qué tú habitación no tiene puerta...?- pregunto el mayor mientras posaba su mano en el arco de la antigua puerta.

-por que la rompieron, aún que no entiendo el por qué si podían entrar así nada más- camino hacia un pequeño clóset que tenía para así poder quitarse su traje y ponerse algo cómodo, regreso a ver al zora notando que esté se tuvo que agachar para poder entrar a la habitación.

-esta demasiado bajo el techo aquí, pero también comprendo que está así por qué estás chiquito- se rió, causando que fuera atacado con una almohada.

-callate y ven a abrazarme que tenemos frio- una vez acomodándose en la cama, el pelirubio extendió los brazos esperando un abrazo de su amado, Sidon se acercó a el y subió con cuidado a la cama para así abrazarlo y acostarse junto a el en pose de cucharita.

-ya extrañaba estar así contigo, acostados, sintiendo nuestro calor corporal y futuramente también compartiremos este momento  junto a nuestro renacuajo- al decir esto el zora pondría su mano sobre la pancita de link, el chico miraría esto y pondría su mano encima de la del mayor.

-¿Que crees que sea?- alzaria la mirada para poder mirarlo.

-uhm...no lo sé, aún que no me importaría si es niño o niña, com tenerlo aquí me basta y sobra- se acurrucaria más en el abrazando por completo a su menor, link soltó un pequeño suspiro acomodándose mejor relajándose gracias al abrazo.

-descansa, sidon- menciono de forma suave y baja, dándole una palmadita en su brazo.

-igualmente, que tengan dulces sueños- el zora logro darle un beso en la cabeza a link pues al estar cubriéndolo casi por completo con su cuerpo se le fue más fácil.

Mientras estos dormían, el maestro kogg junto a un samurai miraban por la "puerta" aquella bella escena, decidieron darles espacio obligando a todo el clan no acercarse al cuarto de link, por ninguna circunstancia debían de molestarlos ni mucho menos hacer algún ruido cerca de aquella área.