Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

🍍

Narra maestro kogg:

Ya pasó un día completo y link no se a dignado a volver, me preocupa que ese niño esté en un lío donde no pueda defenderse o simplemente haya sido atrapado por la guardia real, solo de pensarlo hace que mis nervios sean aún mayor, pero ahora que recuerdo....dijo que iría a ver a ese chico pez...pero...oh no, link...su celo

-¡Chicos, empaquen todo, iremos a buscar a mi pequeño niño!- grite dando la orden, varios de mis secuaces se prepararon con arcos y sus manobles huracanes, todos estábamos listos para ir a aventurarnos sobre aquella región, no sería fácil llegar pues ahora habían más guardias, pero todo sea por mi pequeño racimo de plátanos.

Nos aproximamos a la región, ibasmos dispersados para así no llamar tanto la atención, dos de mis secuaces y yo nos adentramos a aquella región, nos quedamos a una gran distancia mirando si estaba por ahí link.

-tú, ve abajo y camuflate como otro viajero, busca a link y tráelo acá- dije en un tono firme hacia uno de mis secuaces, este rápidamente acato mi orden y fue a hacer su misión, por mientras que aquel otro yiga hacia su trabajo me quedé mirando de lejos aquella región, realmente es linda pero no, no aceptaré que mi hijo pertenezca aquí.

Narrador:

El yiga que fue mandado por el maestro kogg hizo lo que tenía ordenado hacer, empezó a preguntar sobre el hylian haciéndose pasar como uno de sus compañeros de viaje, ningún zora supo darle una respuesta hasta que uno de los niños de la región le dijo que estaba con el Rey Sidon, el yiga se preocupo por aquello preguntándole mejor a aquel niño de dónde localizar a su rey, el menor lo guío hacia donde estaría Sidon y este siemplemente tragó saliva antes de dirigirse hacia aquel gran zora.

-con que tú eres el mentado Sidon...- hablo para el mismo pero el zora logro escucharlo, posicionando su mirada en el ahora.

-¿Disculpa?- alzó una ceja con una leve expresión de enfado y cansancio, se le ponían notar unas pequeñas ojeras por la falta de sueño de aquella noche.

-disculpado- dijo con una gran sonrisa el yiga cosa que no le pareció gracioso al zora.

-¿Quién eres y quién te trajo acá?- en este momento Sidon alzó la voz haciendose ver cómo la gran autoridad de la región, el yiga se puso algo nervioso pues no esperaba aquella reacción del zora.

-yo...bueno...me trajo un niño zora por qué ando buscando a un pequeño chico rubio...me dijeron que estaba por acá y como no ha vuelto al campamento en toda la noche pues mi grupo y yo nos preocupamos - el yiga jugaría con sus manos tratando de no ver al mayor a los ojos, escucho como Sidon se acercaba a él y se empezó a sentir aún más nervioso por aquello.

-¿Chico rubio?- se agachó para poder quedar a su altura, el yiga a nada de darle una respuesta acerca de aquello pudo notar las pocas feromonas de aquel Omega proviniente de su contrario, este lo miro con una cara seria y a nada de tratar de atacarlo Sidon se reincorporo en su postura y empezó a caminar, haciéndole una seña de que lo siguiera.

El yiga confundido con aquello decidió seguirlo, (por qué el chisme lo puede todo), se sintió aun más confundido cuando estaban frente a una gran puerta.

-¿Y esto que?, Te pedí a un chico rubio no una puerta- este comentario hizo reír un poco a Sidon quien estaba cabeceando un poco.

-link está ahí adentro, solo no hagas tanto alboroto que nadie más sabe que dos yigas están aquí y no quiero preocupar a mi gente, ahora sí me disculpas debo seguir con mis labores reales- soltaría un bostezo antes de retirarse de ahí, el yiga tomaría un suspiro antes de entrar a aquella habitación y encontrar ahí a su querido racimo de plátanos, dormidito envuelto cual taco entre las sábanas.

-oh link...creo que llegamos algo tarde para defenderte de ese zora- susurro pues no quería despertar al hylian, se acercó para así mirarlo dormir, notando que tenía una gran marca gracias a Sidon, estre hizo una mueca de disgusto antes de negar con la cabeza. -bueno, eso sí es grave...-

Como pudo seco algunas marcas de sangre que estaban alrededor de aquella mordida, miro hacia la ventana que estaba en aquella habitación antes de asomarse y darles una señal al maestro kogg y a su otro compañero, si debían hablar entre todos lo harían con tal de dejarle en claro a link sobre la gran decisión que tomo.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro