🫒
Todo el comedor estaba en silencio pues no sabían quién iba a dar la pregunta sobre los tórtolos que estaban en la mesa, Riju puso sus brazos recargados en la mesa mirando tanto al zora cómo al hylian
-entonces...¿Cómo se conocieron exactamente?- hablo la chica gerudo con seguridad.
-pues, cuando fue mi coronación el estaba entre mi gente, lo noté a simple vista por si linda cabellera rubia- sonrió cuál niño pues estaba mintiendo sobre su encuentro real.
-si...eso, fue mera coincidencia haber estado justo en el momento cuando le ponían la corona- dijo link mientras miraba a Sidon con seriedad, sabía que esté había mentido y ahora debía seguirle aquel juego.
-¡Vaya!, A mí me hubiera gustado ir a la coronación pero los goron no somos buenos nadadores- Daruk puso su mano en su nuca mientras mostraba una sonrisa.
-lo mismo digo, no por el tema de nadar, si no por qué no pude dejar mi región ya que los yiga en ese entonces estaban merodeando cerca de mi pueblo- hablo Urbosa quién se encontraba cruzando sus brazos, link la regreso a ver pues el sabía que aquel yiga del que hablaba era el y sus compañeros, trato de no reír pues recordó aquel momento donde quería robar una joya de las gerudo.
-no se preocupen por no haber ido, de todos modos no fue la gran celebración que esperaba mi padre- miro al hylian de reojo notando que este estaba a nada de morir de risa, este no hizo nada mas que picarle un poco sus cosquillas en forma de broma haciendo que esté soltara su risa.
Todos se quedaron extrañados de la repentina risa de link pero yunobo se unió a las risas junto a Zelda, no sabían el por qué se la risa pero se les hizo contagiosa, suponían que se había acordado de algo.
-basta Sidon, me quería mantener serio- dijo entre risas mirando a su mayor, el Zora se empezó a reír junto a él.
-perdon, no pude evitarlo te veías tan serio que pensé que estabas molesto conmigo- le guiño el ojo pues sabía que el causante de su risa era lo que había dicho Urbosa, pero estos estaban tratando de despistar.
-que lindo que se lleven así, desearía tener a alguien con quién pasar mis dias- soltó un suspiro la princesa pues está estaba pensante en qué tendría que encontrar una buena pareja y más si se trataba de conseguir un omega.
-no se altere princesa, vera que tarde o temprano alguien aceptara con gusto ser su omega- hablo Teba quien se encontraba sentado en la esquina del comedor.
Siguieron hablando de temas aleatorios hasta que les llevaron el platillo fuerte pues lo que habían comido al principio solo fue una sopa de setas.
Todos los presentes se encontraban comiendo en un silencio agradable, menos el joven hylian pues no sabía que cubierto tomar, miro a los demás intentando ver cuál de tantos cubiertos tomaron pero no logro ver bien con claridad, suspiro tratando de tranquilizarse y solo tomo uno aleatorio y empezo a comer de a poco, no sabía exactamente que era pero le resultó realmente bien, esos sabores distintos hicieron que acelerará su acción de comer, terminando en menos de minutos su platillo.
El hylian quería pedir más pues su apetito aún no fue satisfecho, miro a sidon y le dio pequeños toques con su dedo indice llamando la atención de su mayor.
-¿Que pasa, cariño?- el Zora quién estaba a punto de meterse un bocado a la boca, miro con atención a su menor.
-me quedé con hambre...¿Me podrías pasar una de las frutas de la canasta?, O si puedes pasarme toda la canasta sería mejor- su tono de voz era baja pues no quería que alguien más escuchará de su conversación.
sidon asintió a su orden y tomo una manzana, este le pasaría la fruta de a poco para que no se notará que se quería comer toda la fruta de un golpe, link se detuvo cuando vio que Revali lo miraba con una ceja arqueada, el pelirubio frunció el ceño mientras le daba una mordida a un pedazo de sandía.
-¿Que me ves?- trago su bocado antes de dar otro un poco grande.
-nada, solo me diste curiosidad- regreso su mirada a su plato para así seguir comiendo.
-uhm, de acuerdo- tomo la canasta de fruta para así levantarse del comedor. -si me disculpan o no, debo de ir a tomar aire, con su permiso- dicho esto el hylian salió del gran salón, dirigiéndose a uno de los tantos balcones que habían en el área.
No sabía si podría seguir con la mentira de que no era hylian común y corriente, pero tampoco quería decepcionar a quien era su pareja de esa noche, el ojiazules comió más de las frutas tratando de calmar sus nervios, pero este momento de paz fue interrumpido por Sidon, quien lo siguió minutos después de que el dejara el comedor, solo se limito a abrazarlo por la espalda dejando que esté siguiera disfrutando de sus aperitivos.
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