Capítulo 32
— ¡Marinette abre la puerta! — grité golpeando con fuerza la compuerta que separaba su casa del cuarto.
— ¡No escucho, no escucho, soy de palo, tengo orejas de pescado! — escuché decir a la azabache del otro lado.
— ¡Alya déjame pasar!
— Marinette considera... Piper sólo quería tu bien — explicó su mejor amiga.
— ¡No! Me niego a verla.
— Marinette — expresamos al unísono la morena y yo.
— ¡Bien! Déjala pasar — cedió luego de diez minutos.
Hoy era domingo y aunque sólo habían pasado dos días de la terrible confesión, parecía que Marinette lo recordaría hasta el fin de los tiempos.
Subí lentamente los escalones precaviendo que la azabache no me atacara lanzándome uno de sus cojines. Por suerte, o no, fui yo la que se resbaló una vez dentro de su habitación.
— ¡Piper! — gritó Alya en respuesta del estruendo.
— No... no fue nada — dije levantándome y sacudiendo mi ropa —. Tú quédate con ella. Me preocupa más que Marinette arrojara algo a que yo vuelva a besar el suelo.
— ¿Cómo pudiste dejar que sucediera eso? Será fácil decían, no sufrirás decían — imitó Marinette "mis palabras".
— A ver, en primer lugar no fue mi culpa.
— ¿Y en segundo? — interrumpió Alya.
— A veces sólo hay una razón — expliqué excusándome.
— Adrien fue a parar en brazos de otra chica, me dejó plantada y no ha vuelto a aparecer desde el jueves — lagrimeó la chica dolida.
— Sólo han pasado dos días, Marinette — intervino su mejor amiga.
— Exacto — afirmé señalándola con los brazos.
— Aun así — gruñó la azabache.
— ¡Escucha Marinette ya me tienes hasta aquí con tus pequeñeces! — vociferé apunando más allá de mi coronilla — ¡Si supieras lo que he tenido que hacer... guardando secretos, investigando asuntos, todo por ti! ¡Creo que hasta luché contra Hawk Moth! — un nuevo recuerdo apareció en mi cabeza, una sola escena. Nuevamente un escalofrío recorrió mi lado derecho recordando aquel golpe.
Mis huesos habían crujido contra el suelo de una extraña habitación y una figura morada veía con orgullo mi sufrimiento hacia un lado.
— ¿Piper estás bien? — preguntó Alya acercándose a mí.
— ¡No! Y creo que tu amiga debe decirte algo.
— ¿Marinette? — cuestionó volviéndose a la azabache.
— Piper es Volpina — farfulló.
— ¡Oye! Eso no — inquirí ante la muchacha.
— Piper...
— Sí, sí Alya. Luego las explicaciones. Primero Marinette — dije presionando aún más a su amiga.
— So... soy.
— ¡No Marinette! — se escuchó una voz chillona salir se una esquina de la habitación y una pequeña criaturita se abalanzó sobre su portadora con el fin de defenderla — ¡Piper Smith creí que eras mejor persona!
— ¡Hey! Pues creo que te has delatado tú sola. El pez muere por su propia boca, o en este caso el bicho — reclamé tranquilizándome poco a poco.
— "Respira Piper" — pensé por onceava vez.
— ¿Y tú eres? — preguntó Alya confundida.
— Soy Tikki y... Marinette díselo tú, afronta tus responsabilidades.
— Emm...
— Ella es... — intervine alistando el golpe y siendo cortada de tajo por la azabache.
— Soy Ladybug — soltó sin más.
— Claro y yo soy Volpina — bromeó añadiendo —. Oh lo siento, Piper. Jeje.
— No importa... — igual lo serás.
— Y dime señorita "Ladybug". ¿Cuál es tu súper-poder? — dijo moviendo sus dedos en comillas imaginarias y sentándose en la cama donde Marinette estaba contraída contra las almohadas.
— La... ¿buena suerte? — explicó más bien en son de duda.
— Pff... no me hagas reír. Tú ¿buena suerte? Claro y yo vengo de Rispa.
— Bueno... — comenté agitando mis manos hacia ambos lados imitando a una balanza.
— Tú calla, Piper — ordenó fulminándome con la mirada.
— Alya... es verdad. Soy Ladybug — respiró hondo Marinette y prosiguió —, mira si vas a reclamarme diciendo por qué nunca te conté... uno fue para protegerte y dos debido a que no debías de saberlo.
— Y porque son las reglas — añadió Tikki.
— Continúen, esto se puso interesante — alenté desde el cómodo suelo desde donde podía apreciar la hermosa escena. Ni Shakespeare pudo ser tan emotivo.
— Viéndolo de ese lado estás en lo correcto Marinette... pero...
— Nada de "peros", Alya. Marinette hizo lo que tuvo que hacer porque sí. Algún día lo entenderás — defendió Tikki a su portadora de los sentimientos cruzados por parte de Alya.
Unas emociones tan enredadas, bien construidas y fomentadas en la confianza que ambas se tenían. Una red con un fino hilo que bien podía fortalecerse o bien romperse en un microsegundo.
— Es algo difícil de... procesar. Je... creo entender tus razones, em... — titubeó Alya.
— Lo siento — fueron las únicas palabras que salieron de la boca de Marinette, para abalanzarse sobre Alya y abrazarla fuertemente. El hilo se había fortalecido.
— Mari...
— Yo... no debía, ni podía ha... hacerlo.
— Lo sé y deja de llorar... — acotó secando sus lágrimas.
— Me... ¿disculpas?
— No, porque no hiciste nada malo para merecer una disculpa. Intentaste protegerme y con eso me basta. Además que mi mejor amiga es la mayor ¡Súper-heroína de París!
— Cof cof... em... — interrumpí el hermoso repertorio.
— Ah sí tú también, Piper.
— Gracias — sonreí y guiñé un ojo demostrándole mi confianza.
— Una pregunta.
— Sí, Marinette — respondí.
— ¿Qué viniste a hacer aquí?
— Ahh... ¿a consolarte?
— Claro... mira si vienes de parte de... Adrien dile que puedo soportar su decisión y que no me afecta.
— Ehh... no vengo por el rubio egoísta, si claro y decidí ya no hablar más con Adrien... por nuestro bien.
— ¿Qué? — dudó Alya.
— Como lo escuchaste.
— Okay — repitieron al unísono.
— Jaja y... la última vez que hablé con él fue... ¿el viernes? Sí, el viernes con Nath en Spring.
— Dejemos ese tema a un lado y ahora sí explícame ¿cómo es que eres Volpina? — preguntó Alya enarcando una ceja.
— Está bien — respiré profundo resignándome a cambiar de vía —. esta es Trixx y ¿comes trixx, no?
— ¡Piper! Hola soy Trixx y yo le permito a Piper transformarse en Volpina, es como algo provisional — explicó mi kwami.
— Trixx — reclamé — eso es asunto de "estado".
— ¿Cómo que de "estado"? — inquirió Marinette.
— Ahh... nada importante.
— ¿Y tú Marinette? ¿Qué tienes que declarar al respecto?
— Ella es Tikki, mi kwami y me da el poder de la buena suerte — dijo aguantándose la risa y prosiguiendo —. Desde hace ¿dos meses? Vengo combatiendo villanos con Chat noir y Piper. Y no, no conozco la identidad del gato tonto.
— ¿Qué hay de ti, Piper? ¿Sabes quién es Chat noir?
— Sé más de lo que piensas y no les voy a decir. Fue mi error revelarte nuestras identidades — expresé aniquilando con la vista a Marinette —, pero qué más se puede hacer. Y lo mejor sería que no sepas demasiado de este "mundo" para no salir lastimada.
— Como ordenes.
— ¿Es verdad lo de "luché contra Hawk Moth"? — preguntó Marinette.
— En parte sí y en parte no ¿Por qué? Porque sencillamente no recuerdo, las imágenes son difusas y... entre más presiono a mi cerebro, menos logro comprender — confesé.
— Tranquila algún día lo sabremos.
Las horas comenzaban a pasar siendo utilizadas en hablar como chicas que somos, maldiciendo un poco a Adrien (que si lee esto me disculpe), despejando algunas dudas mínimas que Alya tenía y viendo cómo los kwamis entablaban una extraña conversación de "perlas" y "secretos" que no logré comprender.
El sol descendía sobre la ciudad, dándole suma potestad a la lumbrera nocturna, bañando las calles de París con una ola y gamas de colores cálidos, dejando al descubierto las sombras y un hermoso paisaje que podía ser apreciado desde la ventana de una habitación.
Una más de todas, en la que vivía de incógnito la súper-heroína de la ciudad y la visitaba una antigua Volpina, acompañada de una que no tenía idea que su destino ya estaba marcado.
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Capítulo, capítulo, capítulo!!!! Yeii jejeje ¿cómo les va? yo aún superando a Michael Jackson por qué te moriste! Bueno me calmo, el capítulo de hoy estuvo inspirado en una publicación que el Hawkdaddy hizo en su instagram (sí ahora sí tiene instagram oficial). En el siguiente capítulo se viene algo que... no esperarían, algo inusual que espero que les guste y ahora vienen las preguntas: como ustedes saben las perlas y secretos fueron presentadas para la segunda temporada entonces ¿Para qué creen o cuando serán utilizados en este fic? ¿Piper se enoja demasiado? ¿La reacción de Alya fue la correcta?
La sorpresa está en camino y siendo sincera la escena la tengo en la cabeza pero todavía no escribo el capítulo, algo raro. Los quiero un montón y espero que les haya gustado el capítulo de hoy, la semana que viene inicio lecciones (otra vez) ruego porque acabe rápido.
Los quiero (otra vez jaja)
Nos vemos el próximo viernes,
Un abrazo,
Chao, The Writer ;D
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