23 de marzo, 2030

Simon

Alguien dígale a Kiara Harmony que no puede dejar de usar esos conjuntos nunca, me vuelven loco, por completo. Se pasea de un lado a otro en el salón en el cual nos dejaron mientras preparaban todo afuera. Hoy es la presentación de nuestro libro y nuestra primera firma. Han sido meses de malas noches que por fin están viendo sus frutos.

—Aún no sé cómo voy a firmar —me dice, parándose frente a mí y dirigiendo uno de sus pulgares a su boca.

—¿No estuviste practicando ya?

Asiente.

—Sí, pero, ¿y si lo olvido?

—No lo harás.

Empieza a mordisquear su dedo y tomo su mano para entrelazarla con la mía.

—Simon, tengo miedo.

—Nadie afuera va a comerte —le aseguro.

Me da un golpecito en el pecho.

—¿Y si no les gusta?, ¿y si lo compran, pero luego lo odian?

—No puedo asegurarte que todo el mundo lo amará, sería mentirte y no iré por ese camino. Pero, Kia, si lo están publicando es por algo, ¿vale?

—Publican muchos libros malos —insiste.

Espero que su labial sea de los buenos porque el único modo que encuentro de calmarle la ansiedad es distraerla, y no con palabras. Tomo su rostro entre mis manos y sus ojitos me ruegan que calle las voces en su cabeza.

Envuelvo sus labios con los míos y me encargo de besarla tratando de transmitirle toda la calma posible, este es su momento y su ansiedad no puede arruinárselo. Delineo su boca, me deleito con sus suspiros y no me quejo cuando enreda los dedos en mi cabello, despeinando el orden que intenté imponer en mis hebras. Yo si soy cuidadoso con su peinado, sé que tardó horas dejándoselo así y no quiero causarle otro motivo para ponerse nerviosa.

—Te amo —deja salir en medio de una exhalación.

Mi corazón se detiene por un segundo y vuelve a latir con fuerza cuando Kiara abre los ojos y sonríe, como confirmándome que escuché bien.

» Que sí, te amo, Davis, no estás alucinando.

Me rio y acabo suspirando aliviado.

—¿Y eso?

Niego.

—Nada, también te amo.

Frunce el ceño y se aparta un poco.

—¿Solo así? —parece algo indignada y me causa gracia.

La tomo de la cintura y vuelvo a pegarla a mi cuerpo.

—Vengo diciéndote que te amo desde hace meses.

Arruga la nariz y niega.

—Mentiroso.

—Puedo jurarlo —le sonrío—. Despierto amándote y, cuando nos vamos a dormir, descubro que te amo un poquito más que en la mañana, y así es todos los días.

Me mira con duda, no termina de creerme.

—¿Por qué no lo dijiste?

—No quería presionarte —me encojo de hombros.

—Me desagradas.

Me echo a reír y ella frunce los labios.

—Acabas de decir que me amas.

—Te amo, pero me desagradas.

Tomo una de sus manos y la dirijo a mi trasero.

» No seas idiota, no voy a manosearte, estamos en público.

Me rio.

—Saca lo que hay en mi bolsillo, anda.

Obedece y me enseña el papelito que cargo conmigo a todos lados.

—¿Qué es esto?

—Lo escribí la noche en la que me di cuenta de que te amaba, lo he guardado desde entonces, aguardando porque tú lo sintieras también.

«Son exactamente la una y quince de la madrugada y tú duermes plácidamente en tu lado de la cama, me he levantado y ni siquiera lo has sentido. Estaba a punto de quedarme dormido también, desconozco por que es que no he cedido al sueño, solo sé que, cuando iba a cerrar los ojos, vi tu rostro, tus suaves facciones y un sentimiento, ajeno a todo lo que alguna vez he sentido, me envolvió.

"Creo que es amor", pensé a primeras, luego sonreíste entre sueños y confirmé mis sospechas. Es amor y estoy seguro de ello. Algo tan bonito y maravilloso como lo que siento al verte solo puede ser amor, ninguna otra emoción lo iguala, y, si bien no lo he sentido antes, no tengo dudas de lo que es.

De algún modo, lo presentía, ¿sabes?, mi corazón empezó a latir diferente hace ya unas semanas, no sé, creo que, al fin y al cabo, como todo, es un proceso, ¿Qué lo notas de golpe? También, no es mentira, pero ahora que estoy seguro de lo que es, soy capaz de identificar el camino que me trajo hasta aquí.

Cuando empezamos esto sabía, con plena certeza, que, eventualmente, te amaría, era algo que tenía clarísimo, pero, joder, ¿suena infantil si digo que me emociona amarte? En fin, firmaré un compromiso silencioso para amarte bien, porque no mereces menos que eso. Mereces que te ame con cada átomo de mi corazón y mi cerebro, que te ame con el pensamiento, con las miradas, con caricias. Desde ya te digo que no pienso darte menos de lo que mereces, porque sería un idiota, más de lo que ya crees que soy, si decidiera amarte y no lo hiciese bien.

No creo que sea una tarea difícil eso de amar bien, después de todo, el amor es un sentimiento bonito, si lo sientes por alguien como yo lo siento por ti, hacerlo de la manera adecuada no puede conllevar demasiado trabajo. Eres una persona fácil de amar y resulta increíble lo correcto que se siente estar haciendo esto contigo, me entusiasma que seas la primera mujer que amo, mi primera elección y la última, si de mí depende. ¿Nos ves en el futuro juntos? Porque yo sí que lo hago, con una casa y una biblioteca enorme, con un armario para todos los libros que publicarás, otro para los míos. No sé si quieres tener hijos, pero si es así, los quiero yo también, si no, quizá podamos adoptar mascotas... no sé, el futuro es algo incierto, a veces no va como lo planeamos, pero sé que quiero compartir esas incertidumbres contigo. He leído los libros de romance que me has recomendado, lo he hecho y ninguna de tus parejas literarias se iguala a nosotros, somos superiores, así que espero estar cumpliendo con cada expectativa que puedas haber tenido gracias a esos libros, y si es que no, avísame, me pondré a ello de inmediato.

Te mereces el sol, la luna, las estrellas y todos los astros que existan en nuestro universo, mereces que el mundo caiga a tus pies y veneren lo increíble que eres. ¿Tienes una idea de lo afortunado que soy de amarte? Ya quiero escucharte decírmelo, imagino que, por lo menos, el corazón se me detendrá por un instante antes de que empiece a palpitar pronunciando tu nombre con cada latido... si estás leyendo esto es porque ya me lo has dicho y porque, efectivamente, tengo el corazón como un loco reaccionando a la idea de que la mujer que viene amando lo ama también.

No te enfades si no te lo he dicho antes, si te soy sincero, quisiera hacerlo ahora mismo, despertarte y decirte lo mucho que te amo, pero a veces siento que te presioné con los te quiero, que quizá no te dejé vivir la experiencia de descubrir que me querías. Quiero que vivas este proceso, así como lo he hecho yo, de a pocos, sin empujoncitos, que sientas como el sentimiento se desarrolla y tengas tu momento de iluminación cuando sepas que lo que sientes es, nada más y nada menos, que amor.

Te amo con cada fibra de mi ser y mi alma, Kiara Harmony y si llegaste hasta aquí es porque me amas también, lo que me convierte en el hombre más feliz del universo.

Ahora avísame, porque me imagino que muero por besarte, así que solo baja el papel y déjame hacerlo.»

—Definitivamente eres el idiota que amo —se ríe y enreda los brazos en mi cuello.

—¿Entonces puedo besarte?

—Este labial me ha costado una fortuna y espero sea así de bueno como lo pintan —me dice—. Bésame, por favor.

Lo hago, me cuesta controlarme para no arruinar su cabello, pero consigo solo besarla, con todo el amor que he guardado solo para ella en estos meses, le acaricio la boca y trato de fundir su alma con la mía, de coordinar mis latidos con los suyos, de asegurarle por completo que la amo a ella y solo a ella.

Cuando nos separamos, su labial sigue intacto y eso me hace sonreír.

—Tenías razón —susurra.

—¿Con qué?

—He tenido mi momento de iluminación —sonríe—. Te amo, Simon Davis.

—Excelente noticia, porque también te amo, Kiara Harmony.

Salimos juntos al escenario desde donde podemos ver a nuestras familias, están juntas, ocupando, al menos, tres filas del auditorio. Kia me aprieta la mano y yo le devuelvo el apretoncito, asegurándole, de manera silenciosa, que todo saldrá bien. Se infunde de confianza y, cuando le corresponde, empieza a hablar del proceso de creación, de la idea, de cómo surgió, de cómo la desarrollamos, de los altibajos y demás. Yo me encargo de hablar de la parte fantasiosa, de lo que pueden esperar, de por qué van a amarlo y de lo que hemos sentido al escribirlo.

Cuando firmo mi primer libro y veo a Kiara hacer lo mismo, el pecho se me llena de orgullo y confirmo que los sueños que surgen entre corazones y letras son los mejores, no hay duda alguna. 

FIN

BUENO, LA DEMORA ES CULPA DE LA UNIVERSIDAD

Estos parciales me han dejado hecha leña :') pero ya acabaron, así que aquí les traigo el epílogo y la despedida de Simon y Kia y de esta historia que me ha entretenido tanto escribir, espero que la hayan disfrutado tanto como yo <3 gracias por llegar hasta aquí. 

Tengo planeados algunos extras, espero poder escribirlos pronto para subirlos <3

Las adoro mucho <3 gracias por todo, y ya saben, si les gustó, compartan así llega a más personitas, también les digo, en caso de que no sepan, que tengo dos libritos más, en caso de que gusten algo de leer <3 Ojalá nos leamos prontooo. 

Que tengan felices lecturas <3