La promesa
A la mañana siguiente.
Después de escuchar la historia de sus orígenes y enterarse de que tenia un hermano mayor, uno al cual su mamá no había logrado encontrar aún, se decidió a que él lo haría y su primer paso para eso es convertirse en cazador, uno de los mejores para que así tuviera más chance de encontrar a su hermano.
Milo: debo encontrar la forma y se que soy el único que puede lograrlo - se dijo así mismo mientras caminaba por aquel espeso bosque, guiándose de las indicaciones que su madre le había dado.
¿Qué estaba haciendo ahí? Bueno, después de semejante revelación le pregunto a su mamá si podía ir a donde todo había comenzado para ellos, por lo cual le indico donde exactamente había sido el accidente de su tío y el lugar de descanso de su padre y aunque Mystoria no estaba muy seguro de si ya tenía la edad suficiente como para enterarse de eso, lo dejo ir, no lo acompañaba porque el pidió ir solo.
Milo: creo que aquí es - susurró mientras veía la entrada de la cueva, habían sido ya diez años de ese acontecimiento y la naturaleza ya había hecho lo suyo, nadie pudiera imaginar que ahí ocurrió una tragedia hace años atrás.
Suspiró para después con cuidado entrar al lugar, donde camino hasta llegar al fondo de todo, donde vio la otra entrada cubierta por rocas gigantescas y una mancha oscura justo a la mitad.
Milo: ¿podría ser? - preguntó mientras se acercó, se arrodillo delante de la mancha y la observo con bastante
detenimiento, hasta que confirmó que en efecto era sangre - vaya... - susurró apenado pero después suspiró para después ver al frente donde suspiró - hola papá, acabo de enterarme de todo gracias a un sujeto bastante raro - dijo refiriéndose a Camus - perdón por venir a molestarte y claro que se que no estarás de acuerdo con la decisión que tome, pero debo recuperar a mi hermano. Mamá dice que el abuelo se lo llevó cuando éramos bebes, estoy seguro que Sasha y Saori también querrán conocerlo al igual que yo. Pero te prometo que aunque sea cazador, no voy a hacerle daño a los demás vampiros ¿si? ¿Me crees? ¿Me das permiso? - pregunto inocentemente mientras veía a todos lados.
Una brisa suave llego a jugar con su cabello, por lo cual emocionado acepto eso como un si, su papá lo había escuchado y le había dado permiso, por lo cual sonriendo se puso de pie y dijo.
Milo: tomaré eso como un si, gracias papá, veras que no te defraudare - dijo mientras tomo su mochila y la abrió, dejando una pequeña flor blanca que le había pedido a su tío Cardinale antes de salir del pueblo - vendré a visitarte después para contarte como esta todo, adiós papá - se despidió para después salir de la cueva para regresar a casa.
Le había prometido a su mamá volver rápido, así que aunque quería seguir hablando con su papá lo dejaría para otro día, porque sí, pensaba volver a regresar para hablar con él. Debería sentirse muy solo ahí dentro ¿no?
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10 años después...
Al lado de su madre sonreía orgulloso mientras veía a sus dos hermanas menores al lado de su tío ahora y aunque no quisiera admitirlo estaba igual de nervioso que ellas, la última prueba para ser cazadoras estaba frente a ellas.
Milo: hay aun recuerdo cuando pase por esto - susurró angustiado.
Mystoria: ¡Ja! Dímelo a mi, jamas entendí porque todos mis hijos me salieron sin sentido común habiendo tantas profesiones útiles y seguras escogen la más peligrosa - dijo molestó mientras Milo río.
Milo: ¿de quien será? - preguntó sarcásticamente, para después escuchar a Krest hablar.
Krest: bien. La última prueba y la que decidirá si son dignos y capaces de sobrevivir a los monstruos que habitan el bosque en estos días a llegado, los jóvenes presentes aquí serán los encargados de la seguridad en un futuro y me enorgullece bastante ver lo mucho que an crecido niños, como saben, la prueba de hoy será algo no tan sencillo - dijo mientras Mystoria veía todo algo impaciente por saber que era lo que iban a perseguir esta vez. Milo por su parte, recordando lo duro que era ese examen únicamente les deseo suerte a sus hermanitas - hoy les traemos algo bastante particular que los cazadores con más experiencia atraparon esta mañana - dijo mientras abría descubrían una gran jaula que tenía.
Y ahí fue donde todos vieron como una vampiresa de cabellos plateados se movía de forma agresiva viendo a todos, por lo cual todos se vieron sorprendidos.
Krest: les presento a la que posiblemente iba a convertirse en la nueva reina de los vampiros - dijo mientras todos se vieron impresionados.
Milo: ¿Cómo que la posible nueva reina? - preguntó.
Mystoria: el maestro se volvió loco, si lo que dice es cierto, nos estaremos metiendo en un gran problema si el actual príncipe la quería - susurró mientras Milo lo vio.
Milo: ¿no podría ser la novia de mi hermano? - preguntó mientras Mystoria negó.
Mystoria: ante los ojos de tú abuelo, tú hermano aún es muy pequeño para recibir el título de príncipe heredero, así que el actual príncipe debe ser alguien de la rama de la familia, recuerdo que tú papá me contó que tú abuelo cuidaba aún sobrino suyo con el cual habían crecido prácticamente como hermanos, el ya estaba casado, así que puede ser que se trate del hijo mayor de ese primo - le respondió mientras Milo paso a ver a la mujer, a la cuál estaba a punto de abrir la jaula, ¿tendría que ir a asegurarse de que sus hermanas no corrieran peligro?
Krest: muy bien aprendices, una vez se libere a esta cosa, estará suelta por el bosque, su trabajo para pasar el examen será cazarla, no importa si individual o deciden trabajar en grupo, lo que importa serán sus métodos ¿quedó claro? - preguntó mientras los demás asintieron.
Milo por su parte suspiró, decidió de que si, iba a ir a vigilar a sus hermanitas, no es que no las creyera capaces, solo era que estaba preocupado de que el prometido de la vampiresa se le ocurriera aparecer, que era lo más obvio que iba a ocurrir debido a la hora.
Continuará...
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