En Peligro
Cinco años después.
Pueblo de los cazadores.
Se encontraba revisando que todas sus armas tuvieran el seguro y bajo un lugar seguro, sentado detrás de él sobre un sofá estaba el pequeño Milo, que veía hacia la ventana, viendo a algunos niños pasar corriendo por ahí. Por la pequeña abertura que había en las cortinas de la misma.
Se sentía triste, su mamá no lo dejaba salir, decia que el sol podía lastimarlo y cosas así, no creía que el sol fuera malo, de hecho veía que a los demás niños no les afectaba.
Lémur: ¿Que haces Mystoria? - preguntó apareciendo el mayor.
Mystoria: ¿no haz visto mi ballesta? - preguntó serio mientras lo veía.
Lémur: eh... tengo cosas que hacer - respondió mientras el peliceleste serio lo siguió.
Mystoria: Lémur ¿acaso tú la tomaste sin mi permiso? pregunto serio mientras lo seguía.
Él pequeño Milo al ver que se quedo solo se bajo del sofá y se fue siguiendo a su mamá y a su tío, que nervioso después de abrir la puerta principal se dirigió a otro lado con intenciones de alejarse de su mami que de lejos se veía molestó. Sus ojos azules brillaron al ver la puerta abierta, no había salido de la casa desde que tenía memoria, por lo cual era momento oportuno ¿no?
Lémur: ¿Cómo crees que yo podría haberla tomado? Las mantienes bajo llave - aseguró refiriéndose a las armas mientras le daba la vuelta a la mesa, dejando a su politico hermano menor del otro lado.
Mystoria: ¿conociendo lo bueno que eres con los cerrojos crees que me voy a comer ese cuento? Lémur, sabes que no me gusta que tomes mis cosas y menos que entres a mi habitación sin mi permiso - le regañó.
Lémur: hay vamos lo hice solo esta vez, prometo que no volverá a pasar, ¿esta bien? - pregunto nervioso, ya sentía venir el zapato de Mystoria sobre su cabeza.
Mystoria: espero sea la verdad - le dijo serio.
Lémur: claro, ¿que ganaría yo con mentirte? - preguntó de brazos cruzados.
El peliceleste suspiró para después dirigirse de nuevo a su habitación, el otro tranquilo suspiró al ver que se había salvado por un pelo, hasta que escucho como Mystoria a paso apresurado regreso.
Mystoria: ¿Dónde esta Milo? - preguntó.
Lémur: ¿no se quedó en tú cuarto? - le pregunto de brazos cruzados, hasta que recordó algo, por lo cual nervioso vio hacia la salida, Mystoria le siguió con la vista lentamente.
Y cuando vio la puerta abierta de par en par, sintió que el corazón se le iba a salir, corriendo se acerco, únicamente para ver que su hijo no estaba por ningún lado. Regreso a ver todo en la sala rápidamente y al ver que no estaba preocupado salió a buscarlo, Lémur también le siguió.
Mientras tanto.
Con Milo.
Un niño de cabellos lilas de su misma edad al parecer, lo llevaba de la mano mientras que alegre cantaba, no tenía mucho que había salido de su casa y el niño apareció y le pidió acompañarlo.
Mü: ¡Un brujo curandero que no puede más. Hacia un bosque de bambú se va a pasear, de repente va y encuentra algo singular, una carta, una carta de amor que rota está! - cantaba alegre - vamos Milo canta conmigo pidió alegre.
Milo: no me se esa canción - respondió.
Mü: a ¿como que no? Pero si se a vuelto muy conocida, después de que el maestro Sage encontró una carta de amor en el bosque - aseguró el peli lila mientras Milo confundido lo vio - ¿tampoco sabes quien es Sage? ¿eres extranjero o que? - preguntó confundido.
Milo: no... siempre e vivido aquí lo que pasa es que mi mamá no me deja salir de casa - respondió.
Mü: eso explica porque están tan palido eres bastante raro le dijo.
Shion: Mü, esa no es forma de tratar a tú invitado - le regañó su mamá mientras se acercaba.
Mü; ¡Ay! Perdón, perdón - se disculpó con el peliazul que únicamente sonrió.
Shion: ¿Quién es el invitado? - preguntó.
Mü: dijo que se llamaba Milo, lo encontré frente al árbol de manzanas que está frente a la casa del señor Mystoria respondió.
Shion: ¿Milo? ¿Entonces tú eres el bebé que se quedo con Mystoria? - preguntó mientras el menor lo veía confundido.
Al ver esto rápidamente se cubrió la boca, algo le decía que Mystoria aún no le había dicho lo de su hermano al niño, aunque el pequeño se distrajo de lo que había dicho gracias a Mü.
Mü: mira, te presento a mi hermanito Kiki - le dijo mientras enseñaba al bebé que el tenía en brazos.
Shion: baja la voz Mü, esta dormido - le pidió mientras él pequeño se cubrió la boca.
Mü: perdón mami - pidió.
Dohko: ¿Que es todo este alboroto? - preguntó mientras salía de su casa.
Shion: tú hijo acaba de descubrir y secuestrar al hijo de Mystoria - le dijo mientras el castaño confundido pasó a ver a su hijo, que ya estaba dando vueltas con Milo, hasta que ambos cayeron sentados al suelo de lo mareados que estaban.
Dohko: ¿ese niño es el hijo de Mystoria que quedo en el pueblo? - preguntó confundido - mira, si es cierto que tiene cierto parecido con ya sabes quien ¿no? - preguntó mientras el otro le metió un codazo en el estómago.
Shion: Cállate, ¿como se te ocurre dudar así de Mystoria? Vaya que la víbora ponzoñosa de Odysseus si a sabido meterse en tú mente ¿no? - le dijo molestó mientras el otro avergonzado sonrió - además si así fuera ya hubiera muerto, los vampiros no pueden tener contacto con el sol o los matará - le aseguro.
Dohko: si es verdad... bueno ¿Quién quiere comer pastel? Acabo de hacer uno de Zanahoria riquísimo - aseguró mientras se acercó a ambos niños que seguían mareados, y arrastras los metió a la casa mientras Shion negó, para después también entrar a la casa.
Mientras tanto.
Territorio de los vampiros.
Zaphiri desde la puerta de la habitación vigilaba a su nieto, sin duda alguna y como Dégel lo había dicho, parecía haber perdido prácticamente su parte humana, no había nada que lo delatara como un híbrido como muchos les hubiera gustado.
Zaphiri: sin duda alguna Dégel a hecho un trabajo perfecto contigo - aseguró mientras lo veía dormir.
Estaba feliz, porque así como había olvidado su lado humano, también lo había hecho con su madre y su hermano, para el Dégel era su madre y Kardia su padre, aunque ya sabía de quién era realmente hijo.
Continuará...
Me disculpan por el salto temporal, pero no soportaba la idea de hacer sufrir a Mys por algunos capítulos, aún sufre pero tiene la certeza de que encontrará a su bebé, así que...
¿Que creen que pase?
By: Andrómeda 123.
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