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-Emma-

Habían pasado como dos meses desde que todo esto comenzó, desde la última vez que vi a mi padre y desde que estamos viviendo con un grupo de personas a las afueras de Atlanta, no todo había sido malo, había conocido a gente buena como mis nuevos amigos Dave y  Ámbar y a un par de idiotas como los Dixon, en específico Merle y Dylan, Daryl me caía bien por lo menos.

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Me encontraba trayendo leña junto a Amy la hermana mayor de Ámbar cuándo escuchamos la radio, alguien se estaba tratando de comunicar, su voz me resultó familiar.

- si, ¿hola?- respondí.

-si alguien me escucha por favor conteste- se escuchaba entre cortado pero entendible y al fin reconocí al dueño de la voz, decía que se estaba diriguiendo a... ¡¿ATLANTA?!- me dirijo por la autopista 85 si alguien me escucha por favor conteste-

-¿hola?,papá, soy yo, ¿me escuchas?, estamos a las afueras de Atlanta...-nada- no entres a Atlanta, esta infestado de esas cosas-levante la vista y vi que estaba rodeada- repito, no vallas a Atlanta-

-se perdió Emma- dijo Shane poniendo una mano en mi hombro.

Me levanté enojada y con los ojos cristalinos, miré con resentimiento a Shane y me fui hacía el bosque, caminé un poco hasta encontrar un tronco caído en el cuál me senté y dejé que las lágrimas que había estado reteniendo salieran sin control.

Yo lo sabía, sabía que mi padre estaba vivo, pero nadie me creía, yo... Aunque suene extraño siempre puedo sentir en mi corazón si el esta vivo y no me refiero a algo que el cerebro te hace pensar para aliviar la tristeza, lo mío es real, como un sexto sentido, al igual que mis sueños, todo parece tan irreal que..

Salí de mis pensamientos al sentir como una mano tocaba mi hombro, en un ágil movimiento me levanté, tirandome sobre la persona al mismo tiempo que había sacado uno de mis cuchillos el cual se encontraba ahora sobre el cuello de... Dylan.

-¿que rayos haces aquí?- aún seguía sobre el mientras con una de mis manos sostenía las suyas y la otro sujetaba el cuchillo sobre su cuello.

-tranquila bonita, te vi salir corriendo y ...-

-me seguiste- dije fríamente.

-si lo dices asi...- tragó saliva- ¿Podrías soltarme?- dudé un poco pero al final lo hice, guardé el cuchillo y me volví a sentar en el tronco, el se sentó a mi lado- solo quería saber si estabas bien-

-lo estoy..- dije mirando hacia otro lado.

-escuché cuándo dijiste que era tu padre- lo miré sorprendida pero enseguida volví a ponerme sería.

De la nada salieron Erick, Dave y Ámbar mirándome preocupados.

-Emma, te hemos estado buscando desde hace un rato- dijo Dave recuperando el aliento.

-no me alejé tanto...-

-de hecho estuviste caminando por unos 10 minutos..- dijo Dylan con una mueca.

-crei que sólo había caminado un poco mas de  2 metros- miré al piso.

-¿por qué te fuiste peque?- preguntó Erick poniéndose a mi altura.

-nos preocupaste- habló esta vez Ámbar, al levantar la vista los cuatro me estaban rodeando con una mueca de preocupación.

-yo... el que habló por la radio- suspire y me obligue a no llorar- era mi padre...- miré a Erick quien se notaba sorprendido.

-pe-ro, mi hermano dijo...- interrumpi a Erick.

-te lo dije desde el primer momento, siento decirte esto pero tu hermano no es quién crees que es, el nos mintió, mi padre siempre estuvo vivo, yo.. lo soñé hace unos días- lo vi hacer una mueca, el jamás se llevó bien con su hermano, pero al fin y al cabo solo se tenían el uno al otro.

-se que Shane no es la mejor persona del mundo, ni siquiera se si es un persona buena, pero... ¿es capaz de mentir con la muerte de su mejor amigo?,¿no crees que es mucho?- frunció el ceño.

-¿podrían dejarnos solos chicos?- pedí mirándolos.

-bien, cualquier cosa llámanos- dijo Dave yéndose junto a los otros dos.

Erick se sentó a mi lado tomando una de mis manos.

- suéltalo todo...-