Capitulo 33
3 meses después
El sonido del timbre resuena en mis oidos en cuanto lo tocan. Ya es hora de salir de clases.
Me levanto de mi silla, con alivio y me doy cuenta al mirar a mi lado que Sully ha desaparecido.
Genial. Estoy sola.
Si, lo digo porque Sook, no ha venido a clases. Tiene entrenamiento desde temprano y se ha ido a hacerlo a la empresa. Solo yo lo sé y por supuesto que le estoy salvando la vida con respecto a su hermana. Tarde o temprano todo saldrá a la luz, pero está decidida a hacerlo en cuanto ya esté hecha una trainee oficial, para que nadie pueda detenerla.
Termino olvidandome de Sook en cuanto voy bajando las escaleras y veo un cuerpo familiar. Uno que no quería ver y he estado evitando.
Jungkook.
El estaba subiendo y yo, gracias a Dios lo contrario. Supongo que es lo único que me mantiene tranquila. Y no me ha visto, eso es otro punto
Por supuesto que trataras de que no se de cuenta de tu existencia
Me voy por el otro lado y coloco mi brazo del contrario de mi cara, para que pueda ser tapada y evite todo rastro de ser vista por él.
Y cuando creo que lo he conseguido, mi maldito piel falla y resbalo.
Joder, ¿no puedo ser más torpe?
Lo único bueno es que he caigo en la intervención de pisos de la escaleras. O sea, sigo tirada en el suelo, no rodando como una pelota.
Me intento levantar, pero es tan fuerte el dolor que siento debido al golpe en mi tobillo que vuelvo a echar hacia atrás
Maldita sea
Y entonces llega él
¿No podía simplemente evitar que estoy aquí? ¡Es sencillo seguir de recto!
¡Espera! Eso quiere decir que...¡Si me vio! No no.
—Deberias tener más cuidado, Hannie...—dice y acaricia mi tobillo. Descubriendo dónde tengo el dolor. Hace tiempo que no escuchaba su voz—estos golpes pueden tener complicaciones...
—Jungkook. No tienes que hacer esto. Puedes irte
—No lo haré
—Puedo sola
—¿Segura? Tu doble caída no lo asegura.
Y termino siendo cargada por Jungkook.
No tengo idea ni de como pudo ser posible, pero si fue. La verdad es que eso es lo que sucedió. Y además, me está llevando corriendo hacia....otro lugar. Uno diferente, que no es la dirección de su casa.
¿Se han cambiado de residencia?
Abre las puertas con sus llaves y me doy cuenta que es un apartamento, mil veces más pequeño, aunque con un poco más de toques oscuros y raros. Es...bonito.
Pero está vacío. Y me refiero a personas
Me deja encima del sofá oscuro y luego se dirige a la cocina que está conectada con la pequeña sala. Debe estar buscando algo.
—No recuerdo haber escuchado a las chicas decir que se mudaron...—digo
Y es que hace más de 2 semanas no me he aparecido por allí. He tomado la decisión de no encontrarme con cierta persona. Pero de todas formas, la vida seguirá siendo cruel conmigo
El regresa con un poco de hielo en bolsas y se acerca a mi. Luego lo coloca en mi pie
—Si, se te puede hinchar. Tendrás que soportar la frialdad—dice.
—E-esta bien—no lo digo. Pero si siento la incomodidad
—Y si. Me he mudado yo—responde él finalmente a la pregunta
—Este apartamento...
—Es mío. Vivo aquí solo.
—Oh—no se que más decir. El está sentado frente a mi, observando mi pie. No dice nada y yo tampoco.
¿Que vamos a decirnos? ¡Lo nuestro no termino bien!
—Puedo irme a casa...Ya mejorare, Jungkook.
—¿Por qué quieres irte en tu estado? Es muy riesgoso que te vayas y camines sin dejar al hielo actuar.
—No quiero molestar, Jungkook—digo algo incomoda
¿Por qué está tan tranquilo?
—Nunca me has molestado. Mucho menos en este momento
—Jungkook. Estoy bien. Lo que pasó entre nosotros fue...horrible y es normal que estés así, ¿de acuerdo? Te entiendo...y...también estoy conciente de que no estás obligado a cuidarme.
—¿Olvidaste lo que te dije aquella noche? ¿Realmente me ignoraste?
—¿Q-que...?—interrogo confundida
—Te dije que yo siempre estaría ahí para ti...
«porque yo si me enamore de ti, Hannie»
—Gracias....no sé ni cómo decírtelo, porque la verdad. Me da hasta vergüenza estar aquí
—No tienes por qué sentirte de esa forma. Ya ha pasado mucho tiempo, ¿no crees?
—Si...
—¡Dejemonos de resentimientos!—se levanta del sillón y da unas palmadas—Buscare algo de comer—sonrie y se va hacia la pequeña cocina
¿Es que ya lo superó?
Era lo que querías, ¿no?
No me lo esperaba tan rápido
Pero es mejor así. Además, ya era hora.
¿Y por qué aún yo me siento de esta forma tan extraña cuando hablo con el?
—¿Prefieres el café con leche o con vainilla?—interrumpe mi debate mental.
—Con vainilla
Mi vista curiosa se dirige torpemente hasta su mesa, dónde hace un marco de una foto con los chicos con trofeos en la mano, pero específicamente encima de la superficie, hay un broche de ropa. Uno familiar.
Es como si ya lo hubiese visto en algún sitio, o en alguna persona.
Unos segundos más sigo observándolo. ¿Por qué demonios tengo que ser así? ¡Solo es un accesorio!
—¿Te gusta?—pego un brinco cuando Jungkook aparece de la nada enfrente, con dos tazas en su mano
—¿Eh?
—El broche...—lo señala. Me regaño por ser tan obvia
Veo como me ofrece la taza con el café y se sienta con la suya
—Gracias...—lo tomo con una media sonrisa
—¿No me piensas responder?
—¿Ah...? Eh, si...el broche...es bonito
—Te lo regalaría...—comenta—pero no era mío
—Oh...bueno, y ¿Conozco a la dueña? Puedo devolverselo
—Si, por supuesto. Es de Hyemin, la amiga de Sook—dice con una sonrisa de oreja a oreja
¿Que mierda...? ¡Con razón lo reconocía!
—¿Hyemin...? ¿La conoces?
—Es una fan. De verdad—hace una pausa— Y hace un tiempo ya nos hemos dado la oportunidad de conocernos. Vino aquí, y probablemente se le quedó aquí mientras se cambiaba de ropa
¿Es que ella acaso se quedó aquí a...?
—¿Podrias dárselo cuando la veas?—me pide.
—Eh...si—lo agarro en mis manos.
No me gusta esto para nada. Me siento completamente incómoda con todo este asunto.
Y ahora entiendo la razón por la cual está tan tranquilo conmigo. Me ha olvidado ya. Ha conocido a otra persona y está haciendo su vida.
Solo soy una egoísta que se siente enojada por ello.
Me odio a mi misma
—¿Te duele aún?
—No—sonrío. Y no es sincero—Me tengo que ir ya. Y...gracias, por todo, Jungkook...
Me levanto del sofá donde me encontraba tan atendida y termino parada. El sonríe con amabilidad y no veo ese brillo que había en sus ojos.
¿Me debería sentir tan mal?
—Eres la mejor amiga del amor de la vida de mi mejor amigo. Me sentiría mal con Sully y Hari también si te dejo allá fuera tirada con un golpe y encima no te ayudo. Eso sería horrible
Antes era especial. Ahora solo soy la mejor amiga de Sully.
—Gracias de nuevo. Y...lindo apartamento—ya con el broche en mis manos me dirijo hacia la puerta y salgo.
No sé si dijo algo, pero mi mente está tan bloqueada que no es capaz de escuchar algo. No ahora.
Tomo mi celular y llamo a Yeonjun. La única persona en quien me debo concentrar ahora, ¿verdad?
¿VERDAD?
Si, maldita.
—Amor, tendremos que vernos en la noche. Ahora mismo estoy en un trabajo extra importante teórico en la universidad aún
—¿No puedes adelantar las horas? Es tu cumpleaños....—explico. Quería hacerle algo bonito.
—La facultad no confía ni en estos días, cariño. Lo celebraremos en la noche, ¿si?
—De acuerdo. Nos vemos...—
Ni siquiera se despide, solo cuelga y yo me quedo ahí parada, con un vacío, completamente horrible. El día no puede ir peor.
********
—¡Y luego me dijo que en la noche! ¿En serio? Mejor no hagamos nada, ¿verdad?
Miró a Hari. Está tan conectada chateando en su celular que me doy cuenta que ni siquiera me ha estado prestando atención y no creo que me haya escuchado además.
—¡Hari!—le recrimino. Ella aún tenía esa sonrisa estúpida en el rostro—¡Hari! ¡Hey!
Es que es tan entretenida que ni gritando cae en cuenta de la realidad.
Agarro un pañuelo y se lo tiro rápidamente cae en su cara y se queja
—¡Ah! ¿Por qué eres tan pesada conmigo?
La molestia sube por mi sangre circulando por todo el cuerpo. ¿Es que será tonta?
—¡Me has dejado todo este rato hablando sola prácticamente!—ella se ríe avergonzada y vuelve la vista hacia su celular, luego hace otra risita típica de cuando algo le avergüenza—¡Deja a Taehyung en paz!
—¿A ti que te molesta?
—¡Que quien te necesita ahora soy yo!
Ella suelta el teléfono y lo apaga con rapidez. Me mira refunfuñando y suspira
—¿Que?—dice. Recuesta su cabeza en una mano y me mira con cansancio
—¿Sook ha estado extraña contigo también en estos días?
—Sook es la misma siempre.
—No estoy hablando de eso
—¿Entonces?—parecía decir algo después, pero si teléfono vibra y no se molesta en evitar encenderlo, sonreír como idiota y escribir el mensaje, otra vez. Genial
—Siento que quiere decirme algo, pero es como si....una fuerza lo impidiera por dentro
—No se que decirte. Conmigo y su hermana todo ha ido normal, que yo sepa.
—¿Eso quiere decir que si es conmigo? ¿Pero que? Sook y yo no nos ocultamos nada y lleva semanas así de extraña.
Hari se vuelve a olvidar de mi existencia con su teléfono en manos. Está demasiado enamorada para prestarme atención. Regreso a mi debate mental, porque si, tengo mala mania de hablar sola
¿Por qué Sook estaría escondiendo algo? Ya sabes lo de su carrera en la música. No tiene sentido
Flashback
—¿Crees que este ouffit me combine para ir a la inauguración del hospital?—le pregunto con mi ropa en manos.
—Si....supongo—dice y baja su cabeza
—Sook si tuviste algún problema puedes hablar conmigo. No soy experta en ese mundo, pero si es por ti te puedo ayudar—sonrio débilmente. Ella niega.
—Esta todo demasiado bien. Y tranquila.
—No me gusta tu cara—hago una mueca
—Entiendo. A veces la belleza deslumbra tanto que llega a molestar
—Sook, deja tu ego. Esto es serio. Entendiste bien por qué dije que no me gusta tu cara
—¿Por que no te vas a cambiar y no jodes tanto? ¡Deja de preguntar!
—¡Quieres decirme algo! ¿Verdad?—no responde—¡Solo dilo! Lo más fuerte ya lo sé, que es tan grande
—¡No es nada!
—No me estás viendo a los ojos
—¿Y ahora tengo que mirarte? Solo deja el tema.
Fin del flashback
Eso fue solo el comienzo. Me acuerdo a la perfección que durante todos esos días, me soltaba algunas frases como...
«Oye, Hannie, sabes...?»
«Si supieras que....»
«Necesito hablar contigo. Nah, olvídalo. Son tonterías»
Frases que así como se leen, quedaban inconclusas. ¿Por qué? Prometió no ocultar mas nada y ahora lo hace? ¿Por qué tiene volver al mismo error?
—Hey. ¿Sabes dónde puedo encontrar a Hyemin?—cuestiono. Hari se gira y asiente
—Me sorprende que no sepas
—Sook no la trae aquí.
—Ya, pero ella está saliendo con Jungkook. Y siempre está allí con los chicos.
La blusa que estaba doblando en mis piernas se me cae de las manos en cuanto escucho aquella respuesta. Un nudo se me hace en la garganta. Y es que no se ni por qué me sorprende. Sin embargo, siento un vacío extraño en el estómago como si me hubieran sacado algo de golpe
No estaba llorando ni con ganas de hacerlo, solo sentía esa sensación rara y las manos un poco frías. Supongo que es lo que se siente cuando algo que no esperaba te golpea de repente.
—Yo...no sabía
—Si. Se les ve que les va bastante bien—sonrie, pero no por eso, sino por el mensaje. Si, se distinguir sus sonrisas
—Nadie me había contado
—Es que se lo tenían escondido según Taehyung—suelta el celular y me mira, algo seria—Y Jungkook la va a buscar a la empresa donde ella trabaja con su hermano
Joder. No entiendo por qué razón se siente como un valde de agua fría.
¿Era eso lo que Sook quería decirme? Bueno, no es para tanto. No sé por qué será así.
Me lo callo de todas formas.
—Y los han visto...¿cómo pareja oficial?
—Esta viviendo solo en un apartamento—responde—No me sorprende nada. Sabes que Jungkook es reservado y no creo que lo diga. Es su intimidad.
Mierda y doble mierda. No puedo aguantar esta sensación tan extraña.
—¡Oh! Dice Taehyung que vayas a casa de Jungkook, según él la encontrarás ahí más tiempo que en su propia casa. Así que lo que sea que quieras ve a alli.
¿Otra vez? ¿Y encontrarme con una escena que no quiero ni imaginar de esos dos? ¿Ver en mi cara muestras de amor ajenas?
Tienes novio. Eso no es motivo de molestia.
¡Ay, es que la verdad soy un desastre!
Cuestión 1: Si Jungkook sabía que Hyemin iría a parar directamente a su casa y la iba a ver de nuevo...¡¿para que se molestó en darte el maldito broche?!
Porque es Jungkook. Así parece que no lo conozco. Su hobby es molestar. No sé ni de que me sorprendo.
*******
Bien. Ni siquiera se cómo es posible que haya parado al frente de un departamento a las siete de la noche. Pero lo voy a hacer. Y también, le voy a recriminar el hecho de que haya logrado llegar hasta aquí de nuevo, por nada más y nada menos que su mismísima y maldita culpa.
Ya había tocado el timbre más de 6 jodidas veces y aun no me ha contestado si quiera un "espera" o "ya voy"
¿Y si no está aquí?
Bueno Hannie, muchas cosas pueden pasar. Es solo la verdad.
—¡¿Ay sabes que?! ¡Vete al infierno!—grito y cuando estoy a punto de largarme, la puerta es abierta.
—Buenas noches....
La figura de Jungkook aparece frente a mi. Sinceramente me esperaba que abriera ella, ya que es lo típico y cliché que sucede en las películas. Pero no, por suerte, ha sido él.
Su cabello está muy mojado y tiene una toalla en la mano, escándalo con suavidad mientras me observa espectante. Trago duro al ver el pullover apretado que marca a la perfección su pecho tonificado, a diferencia de hace unas horas, que solo tenia camisa ancha. Al contrario de esa, este se encuentra extremadamente apretado.
¿Soy yo o lo veo con más volumen en sus brazos?
Joder . Deja de mirar tanto
—Oh....buenas noches
—Deberias disculparte por enviarme al infierno. Si te das cuenta, me encontraba dándome una ducha
—Ash—ruedo los ojos—Lo siento
El suelta una risita juguetona y me mira de arriba a abajo. Luego me ve otra vez y asiente
—Estas disculpada, Lanie.
«Lanie» Ese apodo hace tiempo no lo escuchaba. Y nunca me di cuenta de lo mucho que me importaba hasta que deje de oírlo salir de su boca.
Sin darme cuenta, ya había sonreído. Fue ahí, cuando, él abre los ojos sin dejar su curvatura en los labios
—Este era el momento donde me regañabas por llamarte así—comenta—y no ha llegado
—Supongo que me terminó gustando...
—Admitelo. Es mejor que tú propio nombre
—Dejate de payasadas Jungkook. Aún estoy molesta contigo—vuelvo a mi expresión sería
—¿Deberías...? Si mal no recuerdo, ese piecesito está en buen estado gracias a mi.
—No es por eso
—Perfecto. Entonces pasa y hablemos. Me interesa saber.
Abre la puerta más a su pasó y me da el acceso de entrar. ¿Hyemin no está aquí? Cómo sea...
—¿Entonces...?—se tira en el sofá
Yo me siento a un lado de él, pero debido a la cercanía, me aparto un poco hacia el otro lado. El está mirándome demasiado tranquilo.
Al parecer Hyemin no está realmente aquí. Ya hubiera aparecido o alguna otra cosa que revelará su instancia aquí
Me siento más calmada.
—Ten—le entrego el broche. El me mira confundido y lo agarra —esto es lo primero
—¿Que?—me mira con el ceño fruncido
—No entiendo por qué me dejaste llevármelo si al final ella iba a regresar.
—No comprendo. Puedes explicarte mejor.
—¡¿POR QUE NO ME DIJISTE QUE TU Y HYEMIN ESTABAN SALIENDO?!
—¿Cómo?
—Jungkook. Si tú hasta la vas a recoger a la facultad. ¿No podías dárselo tu mismo?
—¿Es eso?—cuestiona. Su expresión demuestra que se esperaba algo más.
—¡¿Es que te parece poco?! ¡Jungkook, vine aquí por tu propia culpa! Ni siquiera debería estar aquí.
—No te lo tomes tan grande
—¿Te imaginas si hubiera llegado aquí y me encontrará algo incómodo?—el suspira al escucharme— ¡Es más, me voy a largar de aquí, probablemente llegue y piense cosas que no son...!—me inclino para levantarme del sofá, pero el toma mis manos, haciendo que vuelva a carr sentada en él.
—¿Estás...celosa?—pregunta entre risas
—¿Por qué estaría celosa? Es tu vida, a mí no me tiene que importar si estás saliendo con ella y hacer lo que hagas.
—Hannie....—intenta contener la risa juguetona—¿Quien te ha dicho que toda esa información?
—¿¡Eso que importa?!
—Muchisimo
—Ni siquiera se que mierda estoy haciendo aún aquí...
—Todavia me quieres, ¿verdad?—presiona su mano contra mi brazo. Lo veo a los ojos, el está sonriendo, pero ahora no es divertido. Solo una pequeña curvatura de labios sin mostrar los dientes
—¿Que significaría?—hago una pausa— tu no lo haces.
—Yo no he dicho que haya dejado de quererte
El corazón se me hace un vuelco. Rebota de arriba a abajo y de un lado a otro. Siento como mi respiración se entrecorta y todo se descontrola
—¿Cómo dices?—sigo confundida—Pero si...
—No se que estúpido rumor es ese de que Hyemin y yo tenemos algo, pero no es verdad—toma mis dos manos y las levanta en el aire. Puedo sentir su calor y ahí mismo, se me corta el pulso—No tengo nada con nadie y jamas lo he hecho. Solo te quiero a ti y no creo que eso deje de sentirse en mi pecho, Hannie
—Es imposible que...
—Tienes que creerme a mi, Hannie—se acerca y sonríe con timidez—Todo es mentira. La única chica con la que quiero estar eres tú
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