Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capitulo 12

Día de salida. Día de irme para el infierno llamado hogar.

Yo no quería, lo juro. Lo que menos quería es volver a casa. Y sabía que lo debía hacer en algún momento.

Yeonjun me acompañaba a recoger la ropa. Pasaría conmigo toda la mañana, hasta la tarde, que es la hora en la que me debo ir al aeropuerto.

Si, ya se. Es muy ridículo de parte nuestra irnos en avión a Gwanju cuando Corea es bien pequeña. Pero mi madre es tan exagerada que decidió mandarnos en vuelo directo.

Solo no entiendo como puede. Hasta Hoseok se va con nosotros en ese viaje.

—¿Me pasas la camiseta azul?—le pedí mientras doblaba los shorts

El asintió y se arrimo al closet, donde agarró la camiseta azul y volvió al sitio de mi cama donde se encontraba sentado.

—Si, aquí tienes, amor—me la entrego en las manos

La agarre, la doble y la eche en la maleta junto a las demás cosas.

—Gracias—sonreí  y bese su mejilla

—Lo siento por no ir—hizo puchero, por lo triste que estaba—Pero...

—Esta bien—sonrei—no te sientas mal, el mismo 1 de enero, estaré aquí de vuelta, lo prometo

—Lo se—esbozo una sonrisita y besó mis labios dulcemente.

Me quedé a escasos centímetros de su cuerpo. Agarre el borde de su camisa y lo acerque a mi cayendo los dos completamente la cama, uno encima del otro. Metí las manos dentro de su pecho, pero el las detuvo, haciendome mirarlo confundida.

—¿Que pasa?—cuestione aún encima de el y lo vi levantarse, quedando sentado en este momento.

—No podemos....—dijo con decepción en su voz.

—¿No tienes....?

—No es eso—respondió—Tengo que ir a la escuela hoy. Más bien, ahora.

Suspiro, con frustración. Cómo si odiara todo. Y se acomodo la ropa y el cabello.

—¿Ni un rato?—pregunte decepcionada—me voy...hoy

—No, no me pongas esa carita, amor—acaricio mi rostro.

—Pero si ya todos están de vacaciones—masculle sin comprender

—Falte a las tutorías....

—¿Pero por qué faltaste a las tutorías?—hice un mohín—¿Fue por tu abuelo?

—No—nego—Era para pasar tiempo contigo

Vaya. No lo esperaba

—¿C-como? ¿Pero por qué? N-no...

—Ya se que no tenía que haber hecho eso, ¿vale?—me miró—pero yo preferí esta contigo—sonrio—ahora estarás fuera y mataré el tiempo en eso. Solución encontrada—palmeo sus manos satisfechos

—Podías haberte buscado un problema, Yeyo....—dije preocupada

—No me importan los problemas, me importas tú—me abrazo

—Eres demasiado bueno, no me canso de decirlo. No tenías que hacerlo.

—Lo hice, porque te quiero, hermosa—deslizo mi cabello y me beso suavemente en la mejilla.

Y por alguna razón, me sentí culpable.

*****************

—Son demasiadas maletas, joder—se quejo Sully mientras intentaba arrastrar la suya

—Solo estás cargando la tuya—rode los ojos

—Ya, ¡pero faltan!

Yo tenía una maleta más una mochila. Sook había escogido dos, pero pequeñas. Hari tenía una, pero en la otra llevaba su excesivo maquillaje y también estaban los bolsos con las laptops y esas cosas.

No las podía dejar, porque eran mi única manera de estar entretenida.

—No podemos cargar todo esto—Hari suspiro y se sentó en la cama—Hannie, busca ayuda. .

—¿Y por qué Hannie?—pregunte yo en tercera persona, indignada

No respondieron, simplemente siguieron en lo suyo. Refunfuñé molesta y termine agarrando mi celular, buscando en las llamadas a alguna persona.

Llamando a Jungkook...

¡¿QUE?! ¿¡CUANDO YO TOQUE ESE BOTON?

¿Cómo? Si yo no quise llamarlo a él. Fue un error.

Como si el teléfono fuera a funcionar solo....

¡Callate! Estoy intentando no entrar en pánico.

¿Y por qué no cuelgas?

Lo olvidé, ¿vale?

Iba a tocar el botón de colgado pero....

Ya estás jodida.

—Vaya Lanie, esto no me lo esperaba—ya había aceptado la llamada. Escuché una risita ronca por su parte. Juro que se está burlando. No lo juro. Lo sé.

—Necesito tu ayuda—masculle al borde de los nervios

¿Y donde esta el cara de Sunyu? ¿Para eso es tu novio no? —intervino con molestia.

—Jungkook, lamentablemente este botón se presiono solo y me saliste tu. Yeonjun no puede. Te necesito a ti.

No me subas el ego, preciosa. He tenido un día duro—murmuro acompañado de una risa que escuche a la perfeccion.

—¿Vendrás o no? ¡Son muchas maletas! —se noto en mi voz que estaba perdiendo la paciencia.

El día está muy bonito para quedarse en casa, ¿sabías?

—¡Vete a la mierda Jeon Jungkook!

De un solo tiro, presione el botón de "colgar" con fuerza y rabia. Deslice con el dedo en mis contactos y vi otro nombre. Y ahí llame a Taehyung.

Hola Hannie

—Tae, ¿como te encuentras? —pregunte con voz angelical, juro que estoy rogándole a todos los espíritus santos existentes  que él no me rechace también.

—¿La verdad?....mhm...¿.normal?

Que bien.....Eh.....¿podrías hacerme un favor? Necesitamos a alguien que nos ayude con las maletas. El viaje será en dos horas pero ya debemos salir—pedi con la voz temblorosa. No se a quien más pedirle ayuda.

—Estoy allí en 5 minutos, 3 si me teletransporto—rei por su comentario y sentí un alivio dentro de mi.

—Gracias, lindo—sonreí aunque el no pudiera verme—te queremos

**********

Me encuentro en la salida de los dormitorios. Con dos maletas en la mano. He visto la puerta más de tres veces con tristeza. Me adapte mucho a este lugar

Si, soy una dramática porque voy a regresar en una semana, pero no me es fácil separarme de este lugar.

Y para rematar...

Estoy al punto del borde cardíaco ¡y créanme que lo digo en serio!

¿Quieren saber? ¡JUNGKOOK ESTA AQUI!

¿Cómo? No lo se.

Si lo sabes, idiota.

Bueno, ¡ya vale!

Resulta que don Jeon si vino, acompañado de Taehyung pero lo hizo. ¿Y adivinen cual era su excusa?

—Me aburrí en casa—solto con la máxima tranquilidad que pueda existir en el ser humano. Se encontraba parado al lado mio viendo a los demás conversar.

¡De veras que este hombre me agobia! ¿Por qué tiene que ser tan confuso?

—Claro—rei amargamente—Estoy segura que igual vendrías, maldito.

—Si, tienes razón—sonrio brillantemente.

Estaba a punto de gritar. Lo odiaba tanto, que me estresaba su forma de estar tan tranquilo con todo. Su persona, significaba un juego de rompecabezas. Difícil de armar, una pieza que falta que está perdida. ¿Más irritante? No creo que pueda. El exhala mis niveles de paciencia.

—Ya es hora de entrar al auto—informo Hoseok, con las maletas de Sully y la suya en las manos—Taehyung y Hari, suban primero, luego que entre Sully y Sook, y por último Jungkook y Hannie.

¿Jungkook y yo? Ni tirándome por el puente.

—¿Puedo cambiar lugares?—opine incómoda por las señas que me había lanzado—Eh....me puedo ir con Sook y...

—Te quedas con Jungkook—reclamo Hoseok

—Ademas, el tiene tus maletas—Hari se encogió de hombros

Me giré sin entender y vi a Jungkook con TODAS mis maletas en la mano y entreabrí mis labios sorprendida. Yo estaba sin nada en mis manos, de hecho, con respecto al equipaje, estaba vacia.

Y solo con pestañear ya este chico me las había quitado para sujetarlas. Sin yo siquiera notarlo

—Deberia no dejar que las aguantes. Me habías rechazado el favor—lo fulmine con la mirada

—El día que me entiendas, la vida será diferente

—Ni veo la hora de que ese día llegue—solte con ironía

—¡Hora de salida!—grito Sook y Taehyung y Hannie fueron caminando hacia el auto junto con las maletas.

Vi a los torotolos caminar, venían riendose de algo de lo cual obviamente no tendría idea, pero se les veía felices.

Tardaron unos segundos, yo estaba en silencio mirando lo que hacían, ni siquiera me había atrevido a mirar a Jungkook. Me ponía los pelos de punta porque cada vez que volteaba a hacerlo, ya el tenia sus ojos clavados en mi.

Quisiera saber qué clase de tensión es esta, porque no es una sexual, pero si que la hay y me molesta demasiado. Suerte que Yeonjun no puede ver esto. Terminaría cabreado como siempre.

Alce la vista directo a las gemelas, que iban como dos copos de nieve caminando, acompañadas de Hoseok que sostenía sus maletas y las ayudaba a montarse. Se habían demorado más de lo normal, algo que me hizo fruncir el ceño.

¿Que está pasando?

Me impulse a averiguar. Camine directo hacia allá preguntándome que había pasado por sus caras extrañas en el maletero. ¿No entraban? ¿Habían olvidado algo? Eso lo sabría ahora.

Pero no. Otro intento fallido más.

Jungkook con su brazo me detuvo. Lo supe porque lo sentí. Estaba más confusa aun. Me giré sin comprender y lo vi a los ojos. No me soltaba en absoluto, solo me retenía contra el campo que existía entre la distancia de su cuerpo y el mío.

—No vayas aún—su ronca voz me hizo estremecerme.

¿Por qué me miraba siempre de esa manera? ¿Por qué no lograba hacerlo yo también?

—Deben tener algún problema, iré a averiguarlo—dije quitando su mano de mi brazo.

Ahora el con su diestra había agarrado el otro mio.

¿Que demonios le pasa?

—¿Jungkook que tienes...?—cuestione confusa. Me estaba impidiendo caminar.

—No es lo que tengo, es lo que quiero y deseo tener—masculló ahora en un susurro, y eso solo pude oírlo yo. Lo aseguro.

—¿Pero que dices...? —mis cejas se encogieron, por mi expresión.—sueltame

—¿Por que yo si y tu no?—pregunto—¿que maldito universo es el que me hace esto?

No entiendo nada. ¿Que demonios le pasa?

—¿Pero que estás queriendo decirme? Explicate bien, Jungkook....

—El problema es...!

—¡Jungkook y Hannie! Vengan ya—la voz de Hoseok nos interrumpió. Mi corazón se detuvo al instante, por primera vez me había molestado una frase dicha por mi amigo. Y eso era, porque Jungkook calló al instante y estoy más que segura, de que se arrepintió.

Mierda. Doble mierda.

—Ya nos vamos—lo escuche decir con seriedad. Y ahí agarro mis maletas y comenzó a caminar a la calle donde estaba estacionado el auto. Dejándome atrás.

¡Maldita sea, Jungkook!

**************

Llegar a casa, no era lo mejor del mundo definitivamente. Mi mente siquiera pudo descansar durante el viaje. Y todo, todo, TODO

Por el maldito Jungkook.

—Las eché de menos—se tiro mi madre encima nuestro prácticamente asfixiando mi cuerpo y el de mi hermana.

—¡Mamá! ¡Apenas puedo respirar....!—chille con un poco de molestia

—Siempre de pesada—hizo una mueca y yo le respondí con una de vuelta—Son mis hijas, ¡es obvio que les eche de menos! ¡Tengo derecho a abrazarlas!

—Pues ya estamos aquí—solto Hari con obviedad—y por una semana, no hay necesidad de apretujarnos, mamá, Hannie tiene razón.

ESO ESO

—¿Por qué serán así? Yo pedí dos hijas y me salieron hogros!

—¿Ahora somos hogros? Porque delante de tus amigas somos ángeles—ironice

—Por esa razón tu relación y la mia no avanza —obstruyo con molestia.

—Subire a mi cuarto—avise y opte por subir las escaleras de primero.

Ya lo se. Apenas había llegado y ya me había pasado un poco con mi mamá. ¡Pero no puedo evitar quedarme con la boca cerrada!

¡Es muy molesto!

Abrí mi maleta y saque el primer conjunto que encontré para ponérmelo encima. Más tarde tomaría un baño y me volvería a cambiar.

Esta sería una tarde aburrida. Sook y Sully se la pasarían en casa y Hoseok también. Se le veía muy emocionado por ver a su hermana y ellas a su madre.

Tal vez soy la única escéptica que no se emocionaba por nada.

Me senté en mi cama viendo todo el lugar. Hacia tiempo no estaba por aquí. Desde los 17, que fue que me marche hacia Seul en la beca.

Mi cuarto no se le veía algún cambio relevante,  estaba limpio e impecable. Sonreí al ver las fotos de cuando era niña donde me encontraba con las chicas. Que recuerdos dios mio.

Mi celular vibro al instante. Era Yeonjun. Me había enviado un mensaje.

¿Por qué siento que quería que no fuera de el? Sino de otra persona?

Ya estás enloqueciendo.

Trague duro, ignorando lo que sucedía en mis emociones y me dedique a leer el mensaje.

✨Yeyo✨: Espero que todo haya marchado bien, mi amor. Al llegar a casa llámame.

Desbloquee el teléfono completamente y busque el contacto de Yeonjun para llamarlo. Necesitaba despejarme.

O despejar a alguien....

¡Yo no he dicho nombre!

Tu y yo sabemos que es quien estamos pensando. Somos una sola. Recuerda eso

Maldita conciencia traicionera.

—¿Preciosa?—escuche a mi novio tras la llamada—¿como te fue en el viaje?

Bien....supongo—respondi

—¿Supones?—afirme con un pequeño murmuro—¿Ya discutiste con tu madre?

—Tal vez...

Amor...

—¡No tengo la culpa! Ella es la que....

Calma hermosa, calma....—dijo en un tono relajante—estare para ti siempre, ¿de acuerdo?

—De acuerdo...—susurre

Anda, no estés así. Busca maneras de alegrarte.

—Ya estoy hablando contigo...

No puedo seguir ahora. Estoy ocupado. Lo siento...

—Esta bien, tranquilo—murmuré desanimada

Voy a colgar. ¿De acuerdo? Te quiero...

—Yo también...—y luego sentí el celular sin la llamada

Suspiré y me lance en la cama. No habían pasado ni 6 horas y ya quería regresar a la beca.

Toco acostumbrarse.

Sin más remedio, me dirigí a mi maleta y busqué mi laptop, quería ver alguna película o serie para no pensar en nada.

Pero todo se fue a la mierda cuando vi una cosa

Algo extraño

Algo diferente

Algo inusual.

Era un conejo de peluche. ¿De dónde había salido? Estaba envuelto en una bolsita transparente decorada con estrellitas color azul.

Abrí la bolsita y agarre el teléfono en mis manos. Confundida y sin comprender. Era muy suave y hermoso. Totalmente tierno.

Tenía por detrás un bolsillo, que claramente abrí al instante. Adentro guardaba caramelos, muchos caramelos, demasiados caramelos.

Y de todos los sabores.

Metí la mano más a fondo. Y ahí encontré un papel doblado. O más bien, una nota.

"Cuando estoy triste, le cuento mis problemas a este conejo. También lo acaricio y duermo con el. Suena tonto, pero este peluche era lo más importante para mí. Hasta que descubrí que alguien más lo necesitaba. Y esa eras tú. Te vi y lo noté en tu mirada. Por favor, cuida de Ruby mucho, le prometí que la amarías igual que yo.
Y no preguntes como llegó a tu maleta, ¿vale?

J.K...

Mierda. ¿Por qué demonios estoy sonriendo?
¿Que me sucede?

Estas feliz y emocionada, ¿tanto te cuesta admitirlo?

Pero yo no deberia....

Pero lo estás. Y es porque te lo dio Jungkook.

Mire a Ruby con la maldita sonrisa aún en mi rostro. No dejaba de mirar el peluche. Y tampoco paraba de pensar que había sido un detalle suyo. ¡Porque había sido el! ¡Jungkook no es así! ¿Por qué lo sería ahora?

Tengo algo de él. Un regalo suyo

Y ahora Jungkook, ya no es un simple desconocido, una amistad.

Era algo más que eso. Mucho más.









Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro