—¿Profesor Lee...? —Aquel niño de cabellos rubios abrió sus ojos cual platos al ver como su profesor sostenía entre brazos a el castaño- ¿Q-Qué están haciendo...? -tragó grueso mientras retrocedía un par de pasos.

-O-Oh... -el mayor bajó su mirada con pena mientras que sus manos comenzaban a temblar- por favor, no lo mal interpretes, Jisung tuvo un problema y me mandaron a buscarla, -aclaró rápidamente- parecía sentirse desanimada y por eso lo abracé... -murmuró mientras soltaba su agarre liberando a el menor.

-.....-Lee alzó una ceja mientras entrecerraba sus ojos con sospecha- de acuerdo, -respondió no muy seguro de aquellas palabras- ¿Y a ti qué te pasó? -abrió inmediatamente sus ojos al ver la mejilla rojiza de la contraria- o-oye...

-Descuida, sólo me caí. -aclaró mientras sonreía alegremente- no debes preocuparte. -achinó sus ojos- "Que-ri-do" -respondió en tono juguetón logrando que el contrario frunciera su ceño y suspirara.

-Ven, -soltó un suspiro mientras tomaba la muñeca de el castaño y la jalaba hacia él- vamos a atender ese golpe, torpe.

-Púdrete. -susurró mientras observaba de reojo al pelinegro al salir de la habitación.

Minho por su parte, arrugó levemente su nariz mientras fijaba su mirada en el suelo, observó sus manos admirando como éstas aún estaban temblando levemente, soltó un suspiro y luego frunció su ceño, lo sabía perfectamente, él era un profesor y, debía comportarse como tal, amaba su trabajo y realmente.. no quería perderlo por mal entendidos estúpidos; nuevamente soltó un suspiro para luego, dirigir su mirada hacia la entrada de la habitación, no era el único que debía mantener su empleo.

-¿Insinúa que alcé mis manos hacia una estudiante? -la mujer frunció levemente su ceño.

-Eso mismo, Han Jisung tiene un golpe en su mejilla y, casualmente usted fue la última que tuvo contacto con él y, cómo olvidarlo. -Frunció su ceño- Usted fue quién me envió tras él.

-Profesor Lee, -la mujer se colocó frente al pelinegro- ¿Va a creer las palabras de una tonta niña mentirosa? -alzó una ceja- los niños siempre miente...

-Usted también fue una niña, por lo tanto también mintió, dígame, en su niñez.. ¿Alguna vez le han faltado el respeto? -alzó una ceja- ¿Alguna vez la inculparon de algo? -arrugó levemente su nariz- en estos momentos, una mujer adulta como usted, está inculpando a un estudiante, además de que lo está acusado de cosas graves sin pruebas. ¿Se ha molestado en escuchar su versión de la historia? -la contraria retrocedió un par de pasos- cerraré mi boca y no diré una sola palabra de esto al Director Bangchan, pero sólo, si va y se disculpa con Han.

-¿Piensas que me disculparé con una mocosa?

-¿Y usted cree que yo me quedaré de brazos cruzados y sin hacer nada? -Minho rodó sus ojos- si no quiere perder su trabajo, haga lo que le pido.

-¿Quién lo diría? -la mujer soltó una pequeña risa- El profesor Lee forzando a una mujer. -achinó sus ojos- Tal parece que separarte de tu pareja te cayó muy mal.

-No involucro temas personales con el trabajo, eso sería poco profesional. -respondió con obviedad- Y si desea decir que la estoy "forzando" adelante, es libre. -Sonrió alegremente- Pero recuerde que estará jugando su puesto de trabajo, -achinó sus ojos- ¿Qué es lo que hará?

-¿Qué te pasa rubia? -el castaño soltó una carcajada ante las leves cosquillas que el algodón húmedo hacía en su mejilla- Tienes mala cara desde hace un buen rato.

-Jisung... -el rubio soltó un suspiro mientras se sentaba frente a el contrario- sé que tú y el profesor Lee se llevan bien pero, ¿No crees que estás abusando un poco? -alzó una ceja- recuerda que tú eres una estudiante y él un profesor, si sigues dependiendo de él, le terminarás trayendo problemas.

-Ya lo sé, pero, me siento cómoda a su lado, -respondió alegremente para luego, recibir un pequeño golpe en la frente- ¿Qué?

-Te sientes cómoda con él porque le puedes contar lo que quieras ¿Verdad? -alzó una ceja- ¿Por qué... Por qué no me lo cuentas a mi...? -bajó su mirada- sé que tal vez suene algo raro pero, me gustaría de que si hay algo que te molesta, que me lo digas, si tan sólo quieres hablar de tus problemas o de lo que hiciste durante el día y demás... me gustaría que me lo contarás.. sueles ser muy alegre y si te soy sincero, eso me asusta.

-¿Te asusta? -el castaño alzó una ceja.

-Hace mucho tiempo mi madre me dijo que las personas más alegres, son las que más sufren. -soltó una leve risita- suena cliché, ¿verdad? -achinó sus ojos- pero.. hay veces en las que creo que es cierto... Jisung... se que tal vez sea difícil y tal vez raro pero, soy tu amigo, agradecería que confiaras un poco más en mi.

-Mmm... -el castaño arrugó levemente su nariz para luego, sonreír alegremente y asentir- supongo que el primer paso sería decirte la verdad, -respondió en tono juguetón a lo que el contrario alzó una ceja- no es un secreto que digamos porque.. hay unas cuantas personas que ya lo saben pero, -sonrió con travesura mientras acercaba su rostro al del contrario- realmente me das confianza y creo que puedo decírtelo... -soltó una leve risita al ver como el rubio se tensaba levemente ante la cercanía- Felix˜˜

-¿Qué? -respondió mientras arrugaba levemente su nariz.

-Soy un chico.

¡¡HOLAA!!

Hace muchísimo que no actualizo está historia, me siento súper mal, sinceramente no tenía ganas de actualizarla... trataré de subirles más seguido!!