13. Nido de pantera
- ¡_______! ¡¿Estás aquí?!
Abrí los ojos al escuchar la voz de Chrome.
Por supuesto que tenía que ser él.
Me asomé a través del nido de ramas y salí de mi escondite, Chrome estaba bajo el árbol mirando hacia arriba en mi dirección.
- No me preguntes si ya sabes que sí
- No lo sabía
- Claro que sí, siempre vengo aquí
En una parte específica del bosque, siguiendo el curso contrario de un río, hay un par de gruesos árboles que crecen juntos.
Sus ramas se entrelazaron de una forma curiosa, dejando un gran espacio en medio de ellas y formando un escondite resistente y seguro en su interior.
- Lo hacías cuando éramos niños, siempre que te escapaba de la aldea. No pensé que aún siguiera esto aquí
- Yo no pensé que aún resistieran las ramas
Me metí de nuevo en el refugio creado por las ramas de ambos árboles.
A través de unos huecos entre las ramas, vi que Chrome se sentó entre las raíces.
- _______, ¿Qué sucede? Sé que no sueles ser muy bueno hablando con la gente, pero no entiendo la dinámica entre tú y Senku
- ... él es mi compañero. Su marca en la muñeca completa la mía
- Ohh, ahora lo entiendo. Vaya suerte la tuya, si Senku no hubiera despertado de su petrificación...
- Yo hubiera podido vivir tranquilo
Se hizo un silencio por algunos minutos. Yo estaba comenzando a cabecear de nuevo cuando escuché la voz de Chrome de nuevo.
- Dices eso, pero llevaba tiempo sin verte tan bien como estos últimos días. Ya no usas tanto esa piel y máscara, e incluso hablas con Kohaku y Suika... ________, lo de hoy solo fue un accidente. Le pudo haber pasado a cualquiera
- Sabes que no fue así. Los accidentes son sin querer, y yo bajé con toda la intención a ese estúpido manantial.
Tú y Kohaku se quedaron esperando, como yo debí de hacerlo también
- ¿Por qué bajaste? Ni siquiera te gusta tanto el agua
Me acurruque en mi lugar.
No siquiera yo sé por qué lo hice. Fue puro impulso.
Quería ver qué teníamos que recoger en ese lugar, simplemente era eso. Y quería recogerlo para Senku primero que todos.
- ... ¿Eso importa? Bajé, y por eso casi mato a Senku
- No digas eso
- Hasta donde sé si es mi culpa cuenta como que yo lo maté, ¿No? Él tenía razón, nos hubiera matado a ambos por mi estupidez
- Senku también se pasó un poco, no te tuvo que gritar de esa forma... Pero lo hizo porque lo preocupaste
Bufé y retorcí una esquina de la tela de mi ropa, molesto.
- Por supuesto que se iba a preocupar, si yo moría él iba a terminar muriendo también
- Eso es una exageración, los compañeros tienen vínculos fuertes pero no a ese nivel...
- ¡Lo he visto, Chrome! Ellas murieron por eso, ¡Murieron por las malditas marcas! Y no quiero que lo mismo me pase a mí, ¡Ni a Senku!
Maldita sea, mis estúpidos ojos... Nunca lloro, pero ese cebollín imbécil hace que se humedezcan fácilmente.
- ... Mañana volveremos a ir, estuvimos trabajando en unas máscaras de gas y no pienso dejar ir solo a Senku, así que Iremos los dos. A mí... A los dos nos gustaría que tú también vengas
- ¿Él te dijo que me quiere ahí?
- Pues... No precisamente, pero estoy seguro de que es así
Siento inquietud al pensar en Senku llendo de nuevo a ese sitio. Después de todo, aunque vayan con esas "máscaras de gas" no tienen garantía de que funcionen, ¿O sí?
- Vayan ustedes, me quedaré aquí
- ¿Ni siquiera vas a regresar a dormir? ¡No puedes esconderte en un nido gigante solo porque cometiste un error!
- ¿Qué no puedo? ¡Mírame!
Asomé mi mano por el hueco que usaba de entrada y le hice una seña no muy amigable a Chrome.
El chico bufó y se quedó ahí sentado otro poco.
- ________, estás portándote como un idiota
Oh, no sé, ¿Será porque lo soy?
- No puedes vivir de esta forma, alejándote de algo que ni siquiera sabes si va a ocurrir
- Por supuesto que puedo
- No, no puedes. Porque Senku es tu compañero, tú lo necesitas y él te necesita. Además, vives en el reino científico con nosotros, ¡No te puedes esconder para siempre!
- ¡Entonces me largaré de ahí en cuanto tenga oportunidad! Ahora vete, si vas a ir mañana necesitarás dormir
- No voy a irme si no vienes conmigo
- Entonces mejor ponte cómodo, porque no pienso regresar hoy
Me eché sobre el suelo de ramas y me acurruque, hace un poco de frío pero la madera es ligeramente cálida. Con eso me basta.
Debieron de pasar varias horas durante las cuales lo único que rompía el silencio eran los llamados ocasionales de Chrome, los cuales ni me molesté en responder.
Debía de pasar ya de medianoche cuando finalmente escuché pasos al pie del árbol.
Chrome se fue, al fin.
Me removí en mi lugar, pensando que ahora sí podría dormir al fin, pero no logré conciliar el sueño de ninguna forma.
Terminé pasando prácticamente toda la noche en vela, repasando todo el día de hoy en mi cabeza e imaginando mil y un cosas que hubieran podido salir infinitamente mejor de no ser por mi culpa.
Volví a la base hasta el día siguiente, un buen rato después de que me desperté.
El sol ya había salido y me sentía algo más calmado, así que me tomé mi tiempo para llegar.
- Oh, regresaste
- Buenos días, abuelo... ¿Ginrou?
El viejo parecía estar trabajando en otro recipiente de vidrio, pero lo que me tomó por sorpresa fue que Ginrou estuviera a su lado, simplemente mirándolo trabajar.
- Él tampoco fue con ellos, le ganó su cobardía
- ¡Cállate, no quiero morir!
El guardia le reclamó al viejo y después me miró en busca de ayuda. Parece que ya no le da mucho miedo que la maldición andante esté cerca de él.
- Tu lo entiendes, ¿Verdad? ¡Tú casi mueres ayer!
- Gracias por el amable recordatorio. Iré a dormir otro poco
- _______, antes de que te vayas...
El abuelo me llamó y me ofreció algo entre sus manos.
Recibí el objeto con curiosidad, parecía una especie de máscara.
- ¿Son las máscaras de gas que hicieron ayer?
- Sí, Senku hizo esta para ti y me pidió que te la entregara cuando regresaras. Aunque se van a llevar una sorpresa cuando te vean, después de cómo regresó Chrome no parecían tener esperanzas de verte en días
¿Por qué ese cebollín me dejó esto? Aunque fuera verdad que me quería con ellos, dije que no quería ir. Esto solo me hace sentir peor.
- Ah, que mal de mi parte. Ayer me emocioné tanto haciendo las máscaras que hice un equipo adicional a los tres que ya habíamos hecho. Supongo que lo dejaré por aquí antes de ir a tomar una siesta larga y profunda que un viejo como yo necesita....
Okey... Un comentario sospechosamente específico e innecesariamente hecho en voz alta.
El abuelo se puso de pie y se comenzó a alejar, pero se detuvo antes de marcharse del todo.
- Tener miedo es normal, la muerte es algo que la naturaleza esconde tras su belleza. Sin embargo, el enfrentar los miedos con la valentía de nuestros corazones es la razón por la que los humanos nos abrimos paso a través de ella... Y el estar juntos siempre nos da más fuerza para cuidar lo que queremos
Ese viejo... En verdad se hizo más sensible con la edad.
Miré la máscara en mis manos, conque estar juntos nos da más fuerza, ¿Cierto?
Bueno, es verdad que nadie murió ayer gracias a que íbamos todos nosotros.
Pero también es verdad que ese riesgo fue puramente culpa mía...
- ¡Ya me cansaste, abuelo!
Ginrou se puso repentinamente de pie y fue a tomar una la máscara extra que había mencionado el abuelo, y comenzó a cargarse el filtro en la espalda mientras lo aseguraba a la máscara.
- ¡Yo también puedo ser valiente como Kinrou! El escolta que cuida al grupo en ese manantial infernal, ¡Soy yo!
- ¿Qué está haciendo?
- ¡Iré con ellos! ¡Y tú vienes conmigo!
- Si, claro. ¿Por qué debería de hacer eso?
El abuelo regresó y ayudó a Ginrou a ajustar correctamente su máscara a su filtro.
- Porque no recuerdo del todo dónde estaba ese sitio...
- Olvídalo, no pienso volver
- ¡No voy a dejarte a que te quedes ahogandote en tu culpa si me puedes ayudar a liberarme de la mía!
Pero qué amable de tu parte.
Estaba por negarme de nuevo, pero entonces tuve una sensación extraña.
Un presentimiento muy malo, relacionado con Senku.
- ... A la mierda, vamos a expiar nuestras culpas juntos. Abuelo, ¿Dónde está el otro filtro?
El viejo nos ayudó a ambos a terminar de ajustarnos correctamente el equipo, y de inmediato ambos partimos en dirección a ese maldito lugar.
No nos colocamos las máscaras hasta que pasamos ese conocido tramo en el que un pequeño río se asomaba entre las rocas cubiertas de moho.
- Ginrou, ¿Puedo preguntarte algo?
- ¿Qué cosa?
- ¿Por qué ya no me tienes miedo? A lo de la maldición y eso
Qué yo recuerde nadie le ha dicho que es solo una enfermedad inofensiva, tal vez Kohaku le dijo algo en privado.
Continuamos el camino, el chico tardó un poco en responder.
- Ayer, cuando te salvaron de morir, te veías muy asustado y confundido... No creo que alguien que mata a la gente con su maldición pudiera lucir de esa forma
- Ya veo... Supongo que tiene sentido
Llegamos a la base de esa pendiente tras la cual se debía de encontrar el maldito manantial esmeralda.
Pasé saliva con nervios.
Voy a hacer esto de nuevo, pero esta vez lo haré bien.
Senku
- ¡Chrome, el tubo de tu máscara!
Noté rápidamente el momento en que uno de los tubos que unía la máscara al filtro de Chrome se comenzó a corroer.
De inmediato me acerqué para ayudarlo con esa fuga antes de que fuera demasiado tarde, afortunadamente no fue difícil.
- Te dije que sería mejor ir acompañados antes que solos
- Lo que digas
Sonreí por debajo de la máscara.
Tiene razón, pero no puedo evitar estar algo inquieto porque ______ no vino. No pensé que me fuera a tranquilizar más tenerlo conmigo en una fosa ácida que tenerlo lejos en quién sabe dónde.
- Bien, sigamos. Aún tenemos que terminar de bajar para...
Me callé de golpe justo después de mover mi pie.
Chrome y yo lo escuchamos e intercambiamos miradas asustadas, justo antes de que el suelo cediera bajo mis pies.
¿Es alguna clase de maldito karma por lo de ayer? ¿O solo una cruel coincidencia que sea de la misma forma en la que casi muere ________ ?
Cierto, ________. Si yo muero... ¿Qué pasará con él?
En verdad espero que no muera... Maldición, soy un idiota. Voy a caer en una piscina de ácido, y lo último que le dije (mejor dicho le grité) fue que él me pudo haber matado.
Debí haber insistido más en que viniera, así aunque sea podríamos haber hablado mejor por última vez.
Pero qué último pensamiento más patético para un científico.
- ¡Te tengo!
Sentí un tirón en la base de mi espalda, junto con un roce frío y metálico que me sacó de mis pensamientos de resignación.
Mi caída se detuvo, y comencé a ser llevado de nuevo hacia la pendiente, siendo jalado desde mi ropa.
- ¿Pero qué...? ¡¿Ginrou?!
- ¡Se olvidaron la nueva lanza de plata allá!
¿Qué hace Ginrou aquí? Y parece que hay alguien más ayudándolo...
- ¡Idiota! No bajes por el mismo sitio que yo, el suelo está muy suelto ahí, ¡Se supone que eres listo!
______, vino también, ¿No hay alguien más que se haya decidido apuntar a último momento?
Entre Ginrou y la pantera me subieron hasta un sitio seguro, mientras que Chrome se apresuró a subir también con nosotros.
- ¿Qué hacen aquí? ¡Los dos se negaron a venir!
- El abuelo es bastante convincente... ¡Y no voy a dejar que una chica de un lago me gane!
No entiendo a qué se refiere Ginrou, pero bien por él.
Mi atención estaba más enfocada en ______, que simplemente se estaba acomodando el largo cabello detrás de una oreja.
¿Alguien se puede ver tan bien usando una máscara de gas?
La pantera notó mi mirada y enfocó su atención en otro sitio de inmediato
- Ya estamos a mano, así que... deja de estar molesto conmigo...
Eso último lo dijo en un tono de voz un poco más bajo.
Este tonto... No estoy enojado con él ni siquiera un poco.
Nunca antes había estado tan feliz de verlo de nuevo.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro