Perspectiva de Till.

-Till si te disculpas, yo... yo saldré contigo- Aquella frase retumbo en mi cabeza por lo menos 5 veces.

Salir con Flake era una locura, no es como que esté enamorado de él, bueno, quizás lo estoy, pero sólo un poco, está bien, tal vez mucho, pero... no lo sé, hay algo en él que me mata, sus palabras tan afiladas como navajas, él nunca da rodeos, no busca excusas, la verdad le es suficiente, le duela a quién le duela y juro que me ha herido tantas veces, me hace sufrir, pero me fascina, ni siquiera se da cuenta de que no tiene piedad.

-Accede o rechaza antes de que decline la oferta, no es como que esté emocionado- dice tronando los dedos, sacándome de mis pensamientos

-Creí que no intercambiabas favores por citas- digo de manera burlona, creí que iba a ofenderse o apenarse pero su rostro sigue inexpresivo

-Tomaré esa respuesta como un no- dice sin pensarlo mucho

-Nada de eso, ya que es una excepción tuya, no puedo darme el lujo de perdermela, realmente quiero esa cita-

-¡¿Eso significa que te disculparas?!- pregunta Schneider sorprendido

-Lo haré- digo serio aunque no me agrada la idea, disculparme nunca ha sido lo mío, y aún no entiendo porqué tanto drama de parte de Richard, pero supongo que yo también tendré que hacer mis excepciones

-Bien, ya que todo ha quedado claro, vamos de una vez- propone Oliver

-Falta una cosa importante y es... ¿A qué hora paso por ti, nene?- dirijo una mirada llena de picardía hacia a Flake, él sólo gira sus ojos en señal de disgusto

-Mañana a las 6:00 pm- dice sonando como una orden

-Ok- no puedo evitar soltar una sonrisa por unos segundos, pero termino por controlarme

-¡Vamos!- ordena Oliver que nos subamos al auto para ir con Richard

Oliver maneja, yo voy en el asiento del copiloto mirando a través de la venta, no puedo evitar estar felíz, deseo con ansias que el día de mañana llegue, miro hacia mis compañeros, atrás va Paul triste en la ventana, enmedio Flake recargado en su hombro y al lado Doom (Schneider) mirando hacia Oliver, no entiendo porqué tienen que venir todos, esto va a ser una completa humillación pública, bajamos del auto, tocamos la puerta y esperamos, pareciera que no hay nadie en casa, buscamos las llaves donde siempre las deja y no están.

Seguimos esperando, sentados o parados en la entrada, se escucha el sonido de unas llaves no muy lejos, una risa un tanto escandalosa, estoy seguro de que es su voz, y un encendedor, definitivamente es él, no puede pasar ni un minuto sin prender un cigarrillo, a veces más por costumbre que por gusto o necesidad, ni siquiera se da cuenta de que está fumando, es como respirar para él.

Richard se para frente a nosotros, tiene una sonrisa que borra de su rostro en cuanto nos ve, su acompañante lo mira interrogante, termina de guardar un encendedor en su bolsillo, y abraza a Richard del brazo, mientras éste juega con las llaves.

-Richard, todos venimos a pedirte disculpas- dice Doom parandose del suelo

-Fuimos muy desconsiderados con tus sentimientos- agrega Oliver

Todos me voltean a ver esperando a que me disculpe, sin embargo estoy en una terrible situación, no es el hecho de que me disculpe con Richard, es que no entiendo qué demonios hace junto a Linda, mi ex-novia.

Volteo a ver a Flake, por él tomo valor, también me levanto del piso, miro fijamente a Richard a los ojos, paso saliva.

-Lamento haberme burlado de ti.- digo con voz firme y sincera.

Todos están sorprendidos, lo cual me parece exagerado, menos Flake, el parece alegre, como si estuviera disfrutando de la situación, guarda su compostura.

-Si tienes la amabilidad de disculparnos, nos gustaría que siguieras en la banda, incluso si no podemos ser amigos, podemos tener una buena relación de trabajo- propone Flake.

Al escuchar aquello Paul se entristece, noto que a Paul le interesa demasiado Richard.

-Por favor Richard, no puedes dejarnos así, eres un excelente guitarrista y amigo- pide Paul

Yo comienzo a desesperarme de esta situación, supongo que Richard está incrédulo por dentro, por fuera parece normal, como si no le interesara, sólo fuma su cigarrillo sin decir nada, avienta lo que queda de éste al suelo y lo pisa, luego se masajea las cienes con las llaves aún en una de sus manos.

-Descuiden no dejaré la banda, supongo que ya saben que soy tan ególatra como para hacerlo-

-Si, así como ahora que estás haciendo un drama por algo que no vale la pena- respondo sin pensarlo

-¡¿Cuál es tu problema conmigo?!

-Detenganse chicos- nos pide Linda

-¡Te buscó sólo para darme celos!

-¡Esto no es sobre ella Till!

-¡Todo es sobre ella!-

-...-

-¡¿Tú crees que no me dolió cuando le hacía el amor y ella gritaba tu nombre?! ¡No fui nada para ella, sólo un medio para que llegara a ti y así fue, ustedes dos salían a mis espaldas!

-Eso no fue así-

-Luego sales con el cuento más estúpido de que yo te gusto, como si no te fuera suficiente arrebatarmela, también querías humillarme, lo único que hice fue voltear la jugada-

Linda mira a Richard extrañada, éste se sonroja como si fueran ciertos sus sentimientos por mí.

Flake se retira, sabe que necesitamos privacidad para arreglar nuestros asuntos, atrás de él va Paul y Linda, en cambio Schneider y Oliver sacan una bolsa de cacahuetes que trae Oliver en el bolsillo, se sientan y nos observan cual novela dramática.

-Lo lamento Till, lamento que Linda me prefiera, ahora que estuve triste ella vino a mi casa y sucedieron cosas...-

-¿Eso significa que te quedarás con ella?-

-No estoy seguro Till.-

Me doy la vuelta, quiero huir de está situación sin embargo me mantengo de pie dándole la espalda a Richard.

Varios recuerdos se me vienen a la mente, como cuando vivíamos todos en mi casa mientras nos tomábamos unas vacaciones de tantas giras y grabaciones, fue ahí donde le presenté a Linda a los muchachos, debí de percatarme que siempre había fuego en sus ojos cuando miraba a Richard.

Una vez, terminando de hacer el amor me sentí triste porque mencionó su nombre, tomé mi ropa normal y un abrigo, olvidando lo que había en el bolsillo de éste, un anillo de compromiso, llevábamos 3 años juntos y ella estaba loca por mi amigo y compañero de banda.

Caminé con el corazón destrozado por el enorme terreno que conformaba mi patio, observando la vegetación, como cuando era un niño y escapaba al campo más cercano de lo que el alcohol hacía con mi padre.

Esa noche escuché unos pasos tras de mi, me sentí como una presa siendo observada por un depredador, miré tras de mí, era Flake con su teclado a punto de golpearme

-Lo siento, creí que algún extraño había entrado a tu patio, pero sólo eres tú-

-La mayoría de personas toma un bat de béisbol, un sartén, o algún tubo para enfrentar a un ladrón, pero tú traes tu teclado...- comenté de manera divertida

Flake empezó a reírse sin parar cosa que no es muy común con él, el único que parece tener su confianza es Paul.

-¿Qué haces aquí tan solo?- pregunta

-Observo- respondo -¿Quieres acompañarme?

No dice nada, caminamos por el terreno, no muy lejos vemos las luciérnagas volando sobre una pequeña laguna.

-Es hermoso aquí- menciona

-Lo sé- digo mientras miró su rostro sonriendo

Nos quedamos en completo silencio, yo me acerco cada vez más a Flake, sólo soy un corazón herido buscando sanación, aferrándose al amor.

-¡¿Y si te golpeo con mi teclado en el escenario, luego tú me lo quitas y lo destrozas?!- propone -¡Los fans amarian eso!- dice como si fuera la idea más increíble de todas.

-Sólo si finjo violarte en el escenario-

-No ¿Por qué harías eso?-

-Eh...- lo pienso rápido -para la canción de bück dich- respondo

Flake me mira como si yo estuviera loco, luego comienza a reírse y me doy cuenta de que comparte mi misma locura.

Caminamos un poco más, hasta que nos quedamos sentados bajo unos árboles, hablamos durante gran parte de la noche, luego canto y él hace como que toca el teclado, ya que no hay donde conectarlo, mientras imita los sonidos con su boca, sólo somos un par de mentes creativas haciendo de las suyas, no es como que tan pronto haya caído en la forma de ser de este flacucho lunático con una afilada veracidad.

-...y puedo jurarte que nunca pasó nada entre ella y yo mientras estaban saliendo- dice Richard con toda sinceridad, haciendome volver al presente.

Suspiro, sé que he sido injusto con Richard, después de todo siempre noté que él trataba de evitarla, aunque ahora esté junto a ella, sé que debo dejarla ir, concentrarme en lo que ahora me provoca felicidad, concentrarme en Flake, pero me será muy difícil, más si tendré que ver a Linda junto a Richard y si me doy cuenta de que Flake no me quiere de la misma manera en que lo quiero.

-Está bien Richard, no pasa nada, supongo que estamos a mano- le digo volviendo a verlo.

-¡Un abracito de reconciliación!- pide Schneider de forma risueña y se acerca a abrazarnos, luego se une Oliver y comenzamos a reírnos.

Flake que va llegando junto a Paúl nos observan sin saber que ha sucedido, pero están felices de que ya todo haya pasado, luego llega Linda y nos mira más que nada confundida.