Las invito a leer este capítulo con Ojos cerrados y mente abierta.
Después entenderán el por qué.
Es el final, disfrútenlo.
Caracola/Lola

Jimin corrió hacia su casa, Jungkook por detrás lo siguió de cerca, cuando lo alcanzó, lo levantó, lo sentó sobre su cintura y caminó con él en brazos hasta llegar a la orilla del mar hasta meterse al agua tibia. Besó y acarició su rostro de niño con ternura. El rojo se aferró aún más a la cintura de su amado para besarlo feroz.

—Te amo, Jungkook, ¿Eres mío verdad?

—Todo tuyo, mi amor.

Jimin estaba loco, no sabía cómo hacer para fusionarse con su Alfa y ser uno solo, la inseguridad que le provocó la loba no se le iba de la piel, se angustió tanto que Jungkook lo pudo sentir.

—Jimin, basta…

—Ella es linda.

—Tú eres lindo.

—Tiene tetas grandes.

—Ja, ja, ja ¿qué dices?

—Eso, que tiene tetas…

—¿Y qué? A mí me gustan tus botoncitos.

—Es loba, a ti te gustan las lobas.

—No hagas eso Jimin, no vayas por ahí. A mí no me gustan las lobas, a mí me gustas tú y estoy loco por ti.

Él no sabía qué había ocurrido en ese enfrentamiento silencioso que Jimin tuvo con la loba, pero nada bueno era para que Jimin se sintiera tan inseguro.
Rasgó sus prendas para lamer sus pezones y demostrarle que él amaba sus tetillas dulces y pequeñas.

—Te amo… —jadeaba con el manjar en su boca.

Se recostaron sobre la arena mojada y se besaron hasta el infinito. El aire les traía un tenue aroma de jazmines y sal que los llevó sin prisa a un mundo donde solo estaban ellos y sus latidos. La sensación de estar amándose bajo las sombras que proyectaba la luna era similar a lo que habían sentido la mágica noche frente a la aurora boreal, aquella que daría inicio a la vida que hoy llevan.
Allí tomaron conciencia que eran felices, que se pertenecían el uno al otro y que cada día se seguían eligiendo.

Sus cuerpos mojados y desnudos eran placer en estado animal, la boca de Jungkook se detuvo en el vientre ajeno y bebió el agua salada que se había juntado en el ombliguito de su niño bello y lo sintió temblar bajo su lengua.

Bajó a su sexo y lo saboreó con la misma ganas que comería una de esas frutas jugosas que acababan de conocer y no se detuvo hasta que sintió a Jimin llorar de placer sobre la playa húmeda.
El rojo acarició sus pezones, llevó las manos a su abdomen, rasgó sus propios muslos, sus dedos llegaron a sus partes más íntimas y jugó con su lubricación frente a la mirada caníbal de Jungkook.

—Entra en mí, por favor.

Llevó su dedos lubricados con delicioso caramelo a los pectorales de su macho y los arañó con sus uñas cortas, Jungkook le gruñó al oído antes de meterse en su cuerpo con una arremetida brutal, gimiendo en su boca sin dejar de embestirlo y demostrar de la forma más primitiva, a los cielos, al mar y a cualquier ser sobre la Tierra, que la criatura bajo su cuerpo era suya, de aquí a la eternidad.

El agua salada se llevó la corrida de ambos pero no el deseo, con sus cuerpos salados iniciaron otra ronda de fricción y lujuria. Jungkook se metió tan fuerte en él que ninguno de los dos pudo reprimir sus aullidos, Jimin jadeaba como loco y le mostró su cuello en señal de sumisión, quería que su Alfa le destrozara la garganta y le dejara una herida en carne viva, una marca más fuerte que cualquier otra, una que doliera y que sangrara, el placer ya no le era suficiente, ahora suplicaba dolor.

—Cambia.

Con su Alfa dentro de su cuerpo, el Omega volvió a exigir.

—Cambia, Jungkook.

Entre jadeos y sin dejar de moverse Jungkook le respondió un "no", tajante.

—No, no lo haré.

—Quiero a tu animal dentro de mí.

Para ese momento JK quiso detenerse pero Jimin no se lo permitió, se movió más fuerte incitando a su hombre a que fuera más rudo.
Y le habló bajo y sensual.

—Conozco cada parte de ti, mi amor, amo cada centímetro de tu piel, cada célula y cada poro. Necesito a tu Alfa en estado puro, en estado animal.

—No somos animales...

—Pero te necesito, necesito a Sialuk penetrándome y haciéndome el amor.

Algo en esas palabras excitó tanto a Jungkook que necesitó meterse tan adentro que Jimin gimió de dolor.

—Cambia y también lo haré, amémosno como lo que somos, humanos pero también animales.

Jungkook no pudo negarse ante eso que él también deseaba como loco y permitió que su alaskan malamute llegara con fuerza.
Jimin jadeaba ante lo que ocurría, sentía la metamorfosis de su hombre dentro de su cuerpo, el enorme perro de nieve dentro de él fue sublime y entonces, también cambió dándole lugar a que su husky siberiano ocupara su cuerpo.

Le había prometido a JK que harían el amor con sus formas primitivas, ambos con sus animales a flor de piel y sin perder la conciencia. Jimin amaría a su Alfa en la única forma en la que nunca lo había hecho. Él necesitaba ese acto de amor animal para sellar su unión en todas, absolutamente todas las formas que los habitan.
Y fue allí frente al mar, sobre la arena y bajo una luna menguante, altiva y esplendorosa, un alaskan malamute y un siberiano rojo, grabaron en la memoria de los tiempos que ellos eran almas destinadas a estar juntas hasta el confín de la existencia.

Cuando despertaron, Jungkook llevó a Jimin en brazos hasta el mar y lo lavó con ternura. Necesitaba agua dulce para lavar la marca brutal que su perro le había hecho a su hermoso bebé, entonces lamió la herida para calmar ardores.
Se quedaron por varios minutos en silencio, mirándose a los ojos y reconociendo en el otro al amor de sus vidas.

—Eso fue sublime, Jimin, ahora conozco hasta la fibra mas íntima dentro de ti. Gracias.

—Gracias a ti por amarme, por cuidarme y por hacerme tan feliz.

Regresaron de la mano, desnudos y con la certeza que son uno y que el amor que los une, trasciende frontera temporales y espaciales.

Un niño rojo y un huérfano sin estirpe juntos, por toda la eternidad.

Fin

Lloro. Siempre lo hago cuando algo termina.
Espero no haberl asustado a nadie cuando Jimin le pide que cambie...

¡Se amaron en su forma animal!!!

No es usual en los fic, pero a mí eso no me importa, me importa más explorar caminos nuevos y significativos para que experimentemos juntas/os diversas sensaciones a través del omegaverse.
Ojalá que les haya gustado, yo amé.

Gracias por acompañarme en este recorrido. Con una mano en el corazón, les confieso que amo al Niño Rojo por encima de todo, y que este final no cierra su historia con el Alaskan malamute dueño de su alma.
Ustedes ya saben que me gusta escribir capitulos especiales y extras a la historia, así que sepan que se vienen unos cuantos más! 

Realmente amo sus comentarios, amo que amen al rojo, sepan que ustedes son mi compañía en el momento más frágil de mi vida.

I purple U muchoooo 💜 💜 💜

Hoy es un día muy especial para mí.

Hasta pronto
Lola Caracola