Por favor, por favor, por favor, por favor, no me mates

Solo dale una oportunidad a mi vidaY un pequeño lugar dentro de ti. Para que juegue y baile.

Viviré dentro de tu cuerpo, viviré dentro de tu mente.

Creceremos juntos y nuestrosdestinos se entrelazarán.

©Tardigrade Inferno - "Anfitrión encantador"

— Buen golpe, chico — se ríe el monstruo, golpeándose las rodillas — ¡10 puntos! — y luego condena fingidamente — Quién lo hubiera pensado- la violencia doméstica. Y pensé que eras un buen chico —

— Se lo merecía — responde Harry sombríamente.

— Por supuesto, él mismo entiende esto, de lo contrario no quedaría lugar para vivir — responde amablemente el monstruo — Y así, también pedirá perdón. Hugh, compasión de Lord Voldemort, quién lo hubiera pensado —

— ¿Lord Voldemort? — Harry pregunta — Maldita sea, ese nombre parece tan familiar... —

— Lo conociste un par de veces — el interlocutor se divierte.

— ¿Quién es él? Suena como el apodo de algún antagonista de los libros. ¿Y qué hay de Tom? De hecho, no entiendo nada de su disculpa —

— ¿Quién es Voldemort? ¿qué tiene que ver Tom con?.. — imita el extraño ser — Intentando desenrollar de nuevo la bola de la verdad, ¿mi alegría? —

— No te atrevas a llamarme así — dice el chico con los dientes apretados.

— ¿Qué, me vas a romper la nariz? — el monstruo toca el puente faltante de la nariz con un dedo largo — No tengo —

— Cierto — está de acuerdo Harry — Pero puedo dejar de hablar contigo. Ignorarte como si ni siquiera existieras. ¿Qué te parece esta opción? —

La luna desaparece del cielo como con el clic de un dedo. Se vuelve completamente oscuro y silencioso. Hay un roce en su ropa y Harry siente dedos helados en su barbilla, un cuerpo huesudo y frío presionando contra su espalda.

— Te haré gritar de terror y dolor, Harry Potter. Ni siquiera necesitas dormir para esto. Yo estoy siempre contigo, desde la infancia, cada minuto de tu vida. Puedo hacer de tu vida un infierno tal que nos suplicarás que volvamos a las conversaciones sencillas —

– No harás eso — dice Harry, exhalando con calma.

— ¿Por qué crees eso? — la punta de la lengua bífida toca la oreja, ardiendo de frío

— No me deseas el mal. Además, te gusto, y es por eso por lo que me ayudarás, a cambio de mantener relaciones pacíficas entre nosotros —

— Chico divertido — La otra mano del monstruo descansa sobre el estómago de Harry, sus dedos helados se arrastran debajo de su camiseta, las garras rasgaron su estómago — Tan cálido, tan vivo, cierto, ¿cómo puedes ofenderte? — la mano se mueve rápidamente desde la barbilla hasta la garganta, apretando y tirando ligeramente del cuerpo del chico — Y tan estúpido. No sobrevalores mis sentimientos por ti, no estoy de tu lado. Pero, lo admito — susurra, — tú también tienes algo de influencia sobre mí —

Harry se congela, permitiendo que las extrañas caricias continúen. El monstruo se acurruca contra él con un cuerpo exhausto, casi incorpóreo, aspira el olor de la piel y el pelo, lame el sudor que le ha salido. Respira roncamente sobre su oído, su boca sin labios toca la corona palpitante en su cuello. Luego lo suelta abruptamente, con evidente desgana.

— Que observador — sonríe — ¿Debo tomar esto como un anticipo? — Harry responde con un asentimiento silencioso — Maravilloso. Está bien, cariño, ¿Qué más quieres hacer para molestar a Tom? —

— Quiero huir, hacia la libertad — admite el chico. Su principal pesadilla ahora parece no ser más que un espantapájaros para niños, en comparación con la realidad — Que haga lo que quiera, no empeorará- ¿Me puedes ayudar?.. —

— Puedo ayudarte a salir. Nada más —

— ¿Cuál es la diferencia? —

— No te gustará la respuesta — sonríe Stickman.

— ¿Qué tan lejos puedes llevarme? —

— Fuera de la puerta. No veo ningún beneficio en ayudare más —

— He tenido suficiente, de todo esto —

Hay un momento de silencio antes de que Stickman hable, su voz ligeramente teñida de algo que podría confundirse con compasión:

— Harry... No es para nada lo que parece. Se pondrá peor —

— No me importa — respondió Harry con frialdad — Tengo que salir de este puto espectáculo de marionetas cueste lo que cueste. Y me ayudarás a lograrlo —

***

— En la mañana fui con los vecinos, nadie vio a Sirius — Tom bebe café, como si nada hubiera pasado. Harry mira la nariz completamente intacta de Tom con disgusto — Mi alegría, te compraré un nuevo cachorro —

— ¿Recuerdas que ayer confesaste que lo mataste? — Harry pregunta sorprendido, Tom lo mira confundido — ¿Acaso estás loco o imbécil? —

...

— En la mañana fui con los vecinos, nadie vio a Sirius. Mi alegría, hoy te compraré un nuevo cachorro ... —

— V-Vamos a buscarlo un poco más, Tom. ¿Qué pasa si simplemente se asustó y se escondió en algún lugar debajo de un arbusto? — Harry responde con un poco de lentitud, sus ojos son difíciles de enfocar en el hombre — Hoy no dormí mucho — se queja — Me duele todo el cuerpo, como si estuviera resfriado —

Voldemort sonríe satisfecho; logró corregir los recuerdos de ayer, aunque sea por segunda vez. El chico está molesto, esto es malo. ¿Tal vez tenga sentido buscar un perro idéntico? Y no puede sacar el tema de la boda todavía. Tendrá que esperar a que pase el período crítico en su relación << Esperar a que el hielo se derrita>> La ira surge desde adentro. ¡Él es Lord Voldemort! ¿por qué diablos tiene que andar de puntillas frente al jodido Elegido?..

— Tom, ¿estás bien? — Harry pregunta cuidadosamente — Tienes esa cara... —

— ¿Cuál? Tom espeta, incapaz de contener sus emociones negativas — ¿Qué diablos está mal de nuevo? Si no quieres un perro nuevo, mejor para mi —

— Solo estoy preocupado, amor —

— Será mejor que te preocupes por ti mismo — Voldemort se obliga a sí mismo a suavizar su tono — Deberías descansar si no te sientes bien. Creo que debes ahorrar energía y descansar, sin salir al menos por unos días —

— Hace un clima encantador afuera", respondió Harry — No me siento tan mal —

— Excelente clima con muchas bacterias y alérgenos — responde Tom — No quiero volver del trabajo para encontrarte tirado debajo de la reja, cayéndote del techo, o quién sabe qué más se te subirá a tu hermosa cabecita. ¿Me prometes no salir de casa o debo encerrarte en el dormitorio? —

— Mira, mi hábitat se está volviendo cada vez más pequeño — el chico hace una mueca.

— No seas dramático, cariño. ¿Puedo confiar en ti y esperar que no te vuelvas a lastimar? —

— Lo intentaré — dice Harry en voz baja.

— Bien hecho — sonríe Tom — Sólo un par de días —

***

— Incluso cerró las ventanas, maldita sea — dijo Harry enojado. — ¿Cómo es esto cuidar mi salud? —

El chico pasó toda la mañana tratando de encontrar una salida, pero la casa de alguna manera se convirtió en una caja hermética.

Era desconcertante que no pudiera recordar los eventos de ayer. Tom dijo que lo encontró junto a la cerca dañada, Sirius no estaba por ningún lado. Los vecinos informaron que Harry preguntó algo sobre el perro, dicen, que corrió hacia ellos, y luego se cayó y quedó inconsciente, e inmediatamente llamaron a Tom. La cerca tiene menos de dos metros de altura, pero ¿cómo pudo caer así? Tampoco pudo encontrar las fotografías de los amigos de Tom escondidas por toda la casa. ¿El hombre las encontró y, por eso, puso a Harry bajo arresto domiciliario?

Tenía muchas preguntas...

***

Mientras tanto, Voldemort ha reunido un pequeño consejo de Slughorn y la médico - bruja Janus Tyki, quien una vez estuvo involucrada en la rehabilitación de Lokons.

— Mi Señor — argumentó Janus desesperadamente — Lo siento, pero nunca he practicado Obliviate —

— Trabajaste con sus consecuencias, Tyki — respondió Voldemort secamente — Eso debería haberte dado suficiente información sobre los mecanismos —

— Le pido perdón, Maestro — dijo Slughorn tímidamente — Pero ¿no había dicho que no quería prescindir del Obliviate? —

— Tenía que usarlo hoy. En particular, Horace, porque no puedes hacer una opción estable y no adictiva. No, no hay excusas — Voldemort hizo una mueca ante el intento de Slughorn de decir algo — Ya hemos establecido la razón por la cual el niño es capaz de resistir tan fácilmente las influencias mentales. Habrá que hacer algo en el futuro cercano, y la única pregunta es cómo ralentizar el proceso en el futuro. ¿Tus ideas, Tyki? —

— Mi Señor — Janus vaciló — Lo único que se me ocurre es la máxima restricción de estímulos visuales —

— Continua —

— Los pacientes mostraron resultados máximos con una mayor estimulación de la memoria con acciones familiares, por así decirlo, una rutina, desde los hechizos más simples hasta atarse los cordones de los zapatos. Se puede suponer que cuanto más se aísla una persona de todos los aspectos de su vida habitual, más difícil le resultará recuperar la memoria —

Después de pensarlo un momento, Voldemort sonrió, enviando un escalofrío por la espalda de Janus.

— ¿Se supone que limitar el trabajo de los sentidos será lo más efectivo? —

— Yo... no entiendo muy bien lo que quiere decir, Mi Lord —

— ¿Sordera, ceguera, parálisis? — Voldemort preguntó casualmente. Slughorn sintió que las náuseas subían por su garganta << Joder, ¿qué más está tramando? >>

— Podemos suponer que sí — dijo Janus, palideciendo — Las lesiones siempre dan previsiones pesimistas de recuperación —

— Me has sido muy útil, Tyki — el Señor sonrió con satisfacción.

— Pero yo ... — la hechicera estaba avergonzada. Voldemort lo detuvo con un gesto perezoso.

— Se puede ir. Todavía la necesitaré en el futuro —

La medibruja salió de la habitación y el Señor Oscuro lanzó una mirada interesada al molesto Slughorn.

—¿Sientes pena por el chico, Horace? Ahora que lo pienso, Harry Potter fue su alumno más útil —

— ¿Qué quieres decir, Mi Lord? —

— Te mantiene con vida y en la cima de la cadena alimenticia, profesor, no lo olvides. Además del hecho de que, si vuelve a convertirse en un animalito amargado en la celda, su utilidad se agotará por completo. Mi buena voluntad hacia ti se basa únicamente en la buena voluntad de Harry hacia mí —

— Lo entiendo muy claramente, mi Señor — respondió Slughorn suavemente.

***

Harry Potter no puede calmarse y quedarse quieto; algo le susurra que necesita salir de la casa. Un susurro que pica haciendo que sea difícil pensar con sensatez. Si en otras circunstancias lo hubiera pensado cien veces, ahora sabe exactamente lo que debe hacer.

Su cuerpo parecía tener vida propia. Sus manos arden cuando rompen el cristal de una ventana cerrada con una delicada silla de comedor. En un abrir y cerrar de ojos, sus piernas lo llevan a la abertura resultante. Un poco más, y se congela frente a la puerta de hierro. Pasa los dedos por la puerta de metal frío, sobre su dibujo abultado. Un patrón extraño, Harry por alguna razón nunca pensó en lo que retrataba. Se inclina para mirar más de cerca y se sorprende, una elección bastante no trivial; muchas serpientes pequeñas.

<< Habla con las serpientes >> Harry de repente piensa para sí mismo << Pídeles que te dejen salir >>

— Eso es absurdo — tipo enojado.

<< Haz lo que te digo, estúpido>> dice la voz del monstruo irritada en su cabeza <<Dile a esas malditas serpientes que abran el pasaje>>

Harry suspira profundamente, sintiéndose como un idiota, mira hacia la puerta y decide:

— Abre —

Las serpientes se ondulan ante sus ojos, como pequeños peces plateados, dan vueltas alrededor de la superficie de la puerta, huyendo unas de otras, dejando vacíos detrás de ellas. El metal se vuelve más delgado y transparente, hasta que desaparece por completo, revelando detrás de él... no, no una calle, sino un pasillo oscuro << ¿Cómo es esto posible? >> Harry mira hacia arriba, los árboles sobresalen de la valla, una bandada de pájaros en el cielo << ¿Qué es esta extraña magia?>>

<< Cumplí con tu pedido >> dice Stickman << Disfruta de tu verdad, bebé >>

***

El medallón quema la piel con una advertencia sobre la defensa rota, Voldemort es atravesado por una aguda sensación de deja vu. A menos que esta vez el nombre del chico desaparezca del mapa por completo. Una melancolía sorda aprieta su corazón: esperaba unos días más en la reserva. Los pensamientos superfluos se pueden sacar fácilmente de la cabeza, recuperando la compostura.

Todavía hay opciones ... Ofrecer un trato. Persuadir, amenazar, privar de recuerdos selectivos. Formas comprobadas que ya han puesto los dientes en el borde.

Se traslada a la mansión, encuentra al chico en cuestión de un par de minutos. Camina como si nada hubiera pasado, examinando los muebles con ojos verdes sorprendidos. Voldemort no se pone la apariencia de Tom; su verdadera apariencia le dará credibilidad y será una especie de castigo para el Horrocrux rebelde.

— Harry — susurra, esperando divertirse maravillosamente.

***

— Harry — una voz familiar llama suavemente. Una voz del pasado, una voz de la que hace que su corazón empiece a latir como loco, como si quisiera salir de su pecho. El chico se da la vuelta lentamente ante la llamada.

Le toma unos segundos para reconocerlo, para que regresen sus recuerdos, al que suprimir sus primeros deseos: atacar o defender, acercarse o huir. Luego viene la fatiga. << Mordred >> está cansado.

— Tú — solo una simple declaración de hecho escapa de sus labios.

— No seas estúpido, Harry — advierte la voz — ¿Cuánto es lo que recuerdas? —

— ¿Qué año es ahora? — responde una pregunta con otra pregunta — ¿Cuánto tiempo he estado..? —

— Han pasado más de tres años desde el final de la guerra — responde Lord Voldemort.

— Mmm... — Harry digiere la información, organizando los fragmentos de sus recuerdos en su cabeza — No encaja. Así que ya me has hecho esto. ¿Cuántas veces? — se esconde en un grito — ¿Cuántas jodidas veces he recordado? —

— Esta es la tercera vez — El señor no ataca, no se acerca, solo mira expectante, su cabeza ligeramente inclinada hacia un lado en su forma favorita.

— Y en todo este tiempo, ¿no has encontrado una manera de sacarme tu maldito fragmento sin dañarlo? —

— No era mi plan antes — sonríe Voldemort — Hasta que el maldito fragmento te respalda en tu juego suicida de detective... No preví el increíble hecho de que él también es muy parcial contigo — se rió entre dientes — Así que tengan la seguridad de que ahora usaré todos mis recursos para encontrarles un nuevo hogar —

— Es bueno escucharlo. Espero que al menos me lo merezca — Harry se toca la mejilla con la lengua un par de veces en un gesto completamente indecente, lo que hace que el hombre se estremezca de disgusto ante tal vulgaridad — un castigo digno—

— Escucha con atención, muchacho — el mago mayor claramente se está quedando sin paciencia — No morirás. La inmortalidad te espera junto a mí, y tienes una opción: seguir fingiendo ser insultado por la inocencia y sufrir, o estar de mi mano voluntariamente, como una persona razonable. Te mostraré mis recuerdos, verás... todo siempre fue agradable entre nosotros, hasta que una vez más arruinaste nuestra relación. Eres terco, egoísta... —

— Detente — interrumpe Harry, sobresaltado — ¡¿Tuvimos una relación en las dos veces anteriores?! —

— Sí — responde Voldemort con orgullo — Sin Amortentia, sin coacción alguna. Cada vez que te enamoraste de mí, mi alegría. Estamos hechos el uno para el otro, tú y yo. Atados por la profecía —

— Mordred, Tom — Además del asco, Harry también siente una punzada de lástima — Mírate a ti mismo. Eres un viejo pervertido que mató a mis padres, mis amigos, destruyó todo lo que he amado. Me enamoré del apuesto y perfecto doctor que me salvó la vida, cierto, pero tan pronto como las costuras de la máscara comenzaron a romperse, también mi "amor" se enfrió. Nunca te amé —

— Estás mintiendo — dice Voldemort con calma — Si te importa tanto mi apariencia, en tu presencia siempre me verás como Tom. Realmente soy culpable ante ti, Harry, y estoy dispuesto a hacer ciertas concesiones. No te apresurare con la boda, con la Marca, con el regreso a mi cama — persuade al joven — Puedes vivir en la mansión, si quieres, caminar en un jardín real. Con el tiempo, recuperarás tu varita —

— Está bien — Harry sonríe, y el corazón de Lord da un vuelco por un momento — Dejarás el puesto de Ministro de Magia, liberarás a todos los presos políticos de Azkaban, pondrás a tus Mortífagos en las celdas desocupadas. Desaparece para todo el mundo mágico. Y luego, tal vez, pensaré en la perspectiva de seguir siendo el objeto de tus sentimientos maníacos —

— Buen intento, mi amor — se ríe el hombre — O tal vez debería preguntarte la próxima vez, ¿tal vez entonces serás más complaciente ? Harry, entiende, no hay nadie por quien sacrificarte. La guerra terminó hace mucho tiempo, la gente está feliz, no quiere nuevos sobresaltos. Te sorprenderá mucho saber que mi victoria no ha reducido a la bretaña mágica a cenizas y páramos. El tiempo de las medidas duras ha terminado. El mundo ya no necesita al Elegido — Se acerca a Harry con cautela — Nadie te necesita más. Excepto yo —

— ¿Mis amigos? — Harry pregunta en voz baja — ¿Maestros? —

— No todos sobrevivieron — Voldemort se encoge de hombros — Tres años en Azkaban es demasiado tiempo para escolares y ancianos. Los que hicieron concesiones fueron liberados hace mucho tiempo. Harry, sé razonable — Da otro paso más cerca — Discutiremos todo, como iguales, lo prometo. Por favor —

— ¿Por favor? — <<¿Lord Voldemort está pidiendo algo?>> Harry está temblando, por la inminente histeria, por el dolor, por una extraña sensación de liberación, no le debe nada más a nadie — Tu muñón en mi cabeza decía, por supuesto, que te estaba retorciendo con cuerdas, pero no sospeché que fuera tanto. ¿Un poco de sexo y te derrites, Tom? ¿Crees en la magia del amor? ¿Has estado senil desde los 70 años, o qué? —

— No sería tan grosero conmigo si fuera tú, Harry... En cuanto a los prisioneros en Azkaban, no sabes exactamente quiénes quedaron con vida. ¿Tal vez tu querido Weasley y su camada han sido indultados por mucho tiempo, y tomando té en casa, sacudiendo a su primogénito, mientras pasas tu vida en una lucha sin sentido? —

— Nunca se rendirían —

— Puedes comprobarlo por ti mismo, amor. Tal vez incluso visitarlos — La boca sin labios se estira en una sonrisa — Quieres eso, ¿no? —

— No puedes chantajearme con ellos para siempre, Tom. Vale la pena pensar en algo nuevo — sonríe Harry.

— Suficiente. Se me acabó la paciencia. Vuelve a casa de inmediato y no te atrevas a hacerme enojar otra vez. ¿Quieres un castigo realmente serio, mi alegría? ¿Crees que este es el comportamiento que espero de mi futuro esposo? —

— ¡No te atrevas a llamarme así! – Harry se precipita hacia el Señor, en un estado de pasión lo golpea fácilmente en la espalda, no se atrevió a sacar su varita.

— Qué prisa — sonríe Voldemort debajo de él. El niño respira agitadamente, brillando con ojos verdes, el hombre no puede evitar admirarlo — Dado que estamos en esta posición, podemos pasar inmediatamente al sexo conciliatorio. Harry, ¿todavía te quedan argumentos que quieras compartir conmigo, o ya te disté cuenta de que te estás comportando como un niño caprichoso? —

El rostro de Harry parpadea con una lucha interna.

— Nadie dejará Omelas — susurra.

— ¿Qué dijiste, amor? — Voldemort pregunta amablemente, acariciando suavemente el muslo del chico.

— No importa. Dime, si... si estoy contigo por mi propia voluntad, ¿guardarás mi memoria? —.

— Lo prometo — dice el Señor Oscuro con seriedad — Demuéstrame que puedes ser mi chico obediente favorito sin ninguna ayuda, y nadie más tocará tu mente —

Harry suspira suave y tiernamente, rozando tímidamente sus labios contra los de Voldemort. Él responde cuidadosamente al beso, ambos están perdidos en este extraño momento sensual << Esta es la primera vez que me besa sabiendo quién soy >> piensa Voldemort distante <<Para él, este es nuestro primer beso >>

La mano de Harry baja, penetra debajo de la túnica de Voldemort, acariciando a través de la túnica la polla momentáneamente dura.

—- Qué buen chico — ronronea el hombre — ¿Debo tomar esto como tu consentimiento? —

— Sí, Tom — susurra Harry. - Intentemos. El tiempo de la hostilidad ha terminado — ¿Puedes?.?— pregunta, avergonzado, desabrochándose los pantalones.

— ¿Solo así? — Voldemort está asombrado — ¿Podemos ir a la cama? —

— No, aquí — dice el chico con impaciencia — Por favor, fóllame — susurra acaloradamente — Cerremos nuestro trato —

— Como desees — Voldemort sonríe y levanta su varita, pero no para cumplir con la petición de Harry. El chico queda flácido bajo la influencia del paralizante, el Señor en un gesto casi aprensivo lo arroja y se levanta — Tus pensamientos están a la vista, Harry. Pensé que eras más inteligente y que se te ocurriría algo más interesante que sacar una varita mágica durante el sexo — el hombre mira al chico inmóvil a sus pies con pesar — Vamos a casa —

Un wingardium leviosa levanta fácilmente al niño del suelo, colgando los brazos y las piernas sin fuerzas, casi tocando alfombras costosas en el camino hacia la preciada puerta de su pequeño nido familiar. En el umbral de la casa, Voldemort vuelve a la forma de Tom y recoge su preciosa carga, riéndose de la ironía de la situación.

— Es como si fuéramos recién casados, Harry — comparte sus observaciones con el chico, disfrutando especialmente de no escuchar una respuesta — Tan tranquilo. Te sienta muy bien cuando tu hermosa boca no escupe todas estas cosas terriblemente groseras —

Entra en el dormitorio, coloca con cuidado el cuerpo sobre la cama, se sienta a su lado y lo mira pensativo.

— ¿Y qué hacemos ahora, mi alegría? — Así que no quiero empezar todo de nuevo. Para ser honesto, ya estoy terriblemente cansado de pasar por esto una y otra vez. Si no hubieras tomado tan agudamente las primeras manifestaciones de mis sentimientos por ti, entonces todo habría sido completamente diferente. No perderíamos dos años en mentiras e ilusiones. Sinceramente te pedí que no me rechazaras en ese entonces, en la celda, pero ni siquiera me diste una oportunidad, no pudiste vencer tu odio. ¿Dumbledore te enseñó eso, Harry? —

Los vidriosos ojos verdes continúan mirando fijamente al techo. Tom suspira y debilita ligeramente el efecto del hechizo paralizante.

— Aburrido — se queja — Estoy terriblemente aburrido sin ti. ¿Por qué Harry? ¿Qué es lo que te hace tan necesario incluso para mí, Lord Voldemort? ¿Por qué ya no puedo imaginar mi vida sin ti? —

La mano de Harry se contrae ligeramente. Tom lo toma entre los suyos, lo lleva a sus labios, lo besa. Él no necesita respuestas; Legilimancy le permite leer las emociones de este niño cuya mente literalmente grita con resistencia.

— Me lastimaste terriblemente con tu desobediencia e indiferencia, mi amor — suspira el hombre — No quiero que sea así, nunca quise. Horace me preguntó si elegiría tu vida o la integridad de mi último Horrocrux, y me di cuenta de que no podía sacrificarte. Encontraremos un nuevo camino hacia la inmortalidad, solo necesitas esperar y— aprieta la mano del chico con fuerza — ¡DEJA DE PELEAR! No pido mucho, ¿verdad? Siéntate en silencio, no discutas conmigo, ámame, sé obediente en la cama. ¿Es tan difícil, cariño? ¡¿Qué tengo que hacer para que dejes de ser tan desagradecido?! —

Las pupilas del niño se dilatan, un leve silbido escapa de sus labios cuando Tom se quita la ropa frenéticamente.

— ¿Recuerdas que hace menos de media hora rogaste que te follara? Creo que no te importa, de lo contrario, puedes negarte — el hombre se inclina sobre el rostro de Harry, escuchando sus intentos de hacer al menos algunos sonidos significativos con su boca que no escucha bien. No escucho objeciones — Es una tontería perder esa oportunidad, ya que ahora eres plenamente consciente de quién soy y quiénes somos el uno para el otro. Realmente fui innecesariamente cruel contigo en nuestros primeros tiempos — admite el Señor Oscuro, lanzando los encantos necesarios para el sexo cómodo y acariciando relajadamente el anillo de músculos, que, sin embargo, no resiste la invasión adicional de los dedos entrelazados — No sabía cuál era la mejor manera de tratarte, y reaccionaste a todo de manera asquerosa. ¿Qué necesitabas para ser un poco más amable? —

Voldemort levanta las piernas del chico en alto, prácticamente doblándolo por la mitad, y lentamente entra en el angosto, vivo, cálido y tierno, perdido en sensaciones, gimiendo en la rodilla de Harry. El niño inmóvil parece tan frágil, tan flexible que Tom es lo más cuidadoso posible, sus movimientos son lentos y suaves. Entra de cuerpo entero, apretando las caderas con tanta fuerza, como si tratara de entrometerse aún más profundo. Se inclina sobre el rostro del tipo, examina con ternura la hendidura de sus cejas, la arruga de su frente tensa, el labio mordido. Pequeñas lágrimas brillan en las esquinas de los ojos.

— Shh — lo tranquiliza Tom — No puedo lastimarte, soy muy cuidadoso. Te estás torturando con todas estas tonterías en tu cabeza. Todo volverá a estar bien, como antes, lo prometo —

Los empujones medidos provocan ligeros gemidos de Harry. El cabello despeinado que ha crecido durante el verano cae sobre su rostro, Tom se lo sopla para no perder ni un solo destello de emoción en los ojos de su amado. Quiere detener este momento para siempre, hacer que se congele en ámbar, experimentarlo una y otra vez.

— Estoy empezando a pensar que te he dado tanta libertad de acción por nada. Recuerda lo glorioso que era cuando yacías allí: mudo, sordo, ciego, solo capaz de sentirme. Tan sincero. Cada vez que empiezo a tratarte como un ser consciente, me decepcionas, Harry. ¿Entiendes a qué conclusiones me lleva esto, mi alegría? —

Los movimientos suaves y monótonos molestan rápidamente a Voldemort, un cuerpo demasiado relajado no proporciona la estimulación necesaria. Entonces pone una mano en el cuello y lo besa profundamente, y esto priva a Harry de la oportunidad de respirar. Su cara se pone roja, él trata de resistir para tomar un sorbo de aire, los músculos de adentro aprietan convulsivamente la polla de Tom y el hombre termina violentamente, casi enojado, sin salir del dulce y apretado cautiverio por mucho tiempo.

— Ahora vete a dormir — dice Lord Voldemort con calma, y ​​Harry deja la realidad.

***

Voldemort observa al elegido dormido; su rostro está sereno y tranquilo, parece un niño; incluso es una pena despertarlo. El deseo supera un ligero sentimiento de culpa, y mientras insta a Slughorn y Tyki a transfigurar un nuevo escenario, frota su pene contra los tiernos labios abiertos de Potter, penetrando ligeramente su cabeza entre ellos, recordando lo dulce que se siente esa hermosa boca en acción. Sin embargo, una estimulación muy débil e inocente conduce rápidamente a la descarga. El rostro pacífico y manchado de esperma casi hace que Voldemort tenga otra erección, pero el hombre logra controlarse.

El Señor Oscuro destruye todas las pruebas. Llama a Janus y Horace. Es la hora.

Harry Potter se despierta, mira a Tom con ojos soñolientos, le sonríe.

— Hola bebé — dice el hombre cariñosamente — Me alegro de que hayas vuelto —

Harry mira alrededor de la habitación. La habitación del hospital, la misma en la que despertó después del accidente.

— Oh, asustaste a todos, chico — Slughorn se acerca a la cama y, en broma, sacude el dedo hacia Harry.

— ¿Qué pasó? — Harry preguntó con voz ronca, bostezando — Recuerdo como quería apagar las velas del pastel, y luego la oscuridad —

— Alguien no desinfecto su ropa lo suficientemente bien antes de ir de visita — Tom hace una mueca — Tenias fiebre, perdiste el conocimiento —

— Tal vez incluso fui yo — dice Slughorn con culpabilidad.

— Sí, Horace — dice Tom con calma — Para mí, también eres el sospechoso número uno en este asunto.

— Eres demasiado duro, Tom — se ríe Harry — Bueno, supongo que me enfermé un poco. ¿Cuánto tiempo he estado aquí? —

— Dos días, querido — responde el hombre en voz baja — Te llevaré a casa pronto —

— Está bien — Harry está de acuerdo fácilmente — Me siento mucho mejor, para ser honesto — salta el chico de la cama — Estoy de muy buen humor, Sirius debe haber estado agotado sin caminatas, probablemente no hayas jugado con él... — Harry corre hacia la ventana bajo la atenta mirada de tres pares de ojos — ¿Quién es usted..? —

— Janus Tyki, señor — responde la medibruja — Soy tu médico —

— Wow, cuántos médicos tengo — se ríe Harry, pegado a la ventana, cada vez más y más — Tom, ¿estamos en el hospital ahora? — Se da la vuelta, sonriendo con picardía.

— Sí, mi alegría — se pregunta Voldemort — ¿Porque lo preguntas? —

— Ven aquí — dice el tipo con complicidad — te mostraré algo interesante —

El Señor Oscuro busca a tientas su varita en su bolsillo. No puede deshacerse de la sensación de que algo salió mal. El comportamiento extraño después de Obliviate es normal, Harry en realidad ha perdido una media luna de recuerdos, pero su chico se ve muy diferente a él.

Harry toma la mano de Tom, señala la ventana, saluda a alguien. La señora Figg le devuelve el saludo, saludando con la mano, uno de sus gatos aferrado al dobladillo de su vestido de casa.

— Tus mortífagos son tan idiotas que no pensaron en cambiar la vista fuera de la ventana, Tom — se ríe Harry — ¿O lo arreglaste todo tú mismo? ¿Quizás es hora de que veas a un médico, amor? —

Horace y Janus están entumecidos por el miedo, Voldemort hace una mueca de fastidio y saca su mano de la mano del tipo.

— Demasiado atento. La próxima vez debería estropear esos hermosos ojos — comenta Lord con calma.

Harry hace una mueca, enmascarando su pánico con sarcasmo.

— La próxima vez, puedes hacer un espantapájaros relleno de paja de forma segura, no notarás la diferencia —

— Ni siquiera te ofreceré una solución pacífica al problema, claramente no estás listo para negociaciones constructivas. Te advierto que la próxima vez mi oferta no será tan generosa — Voldemort sonríe — ¿Hay algo más que quieras decirme, Harry Potter, antes de que lo intentemos de nuevo? —

— Te odio — sonríe Harry — Y sé que cada vez que juegues con tu títere de mano que volverás a hacer de mí, este odio te perseguirá. Eres patético, Tom, nadie te amará nunca, siempre serás... —

El rayo golpea a Harry en el pecho, Voldemort frena la caída con un hechizo, lleva el cuerpo en silencio a la cama. Exactamente igual que hace unas horas.

— Ya no se resistió. Solo estaba tratando de derribarme, con la esperanza de que lo matara — dice en voz alta — Esa es una buena señal, ¿verdad? —

Se molesta por el silencio del maestro de pociones y el medimago.

— ¿¡Cierto, cretinos inútiles!? — gritó, apuntando su varita a ambos sujetos — ¡Dame una razón por la que no debería matarte ahora mismo! —

— Mi señor, las pociones necesarias estarán listas mañana por la mañana — Slughorn baja la cabeza. - He terminado algunos de ellos, como me pediste, puede tener como efecto secundario una leve fatiga y... en general, espero que quedes satisfecho —

— Si no estoy complacido, haré que el chico te mate con sus propias manos, Horace — sisea Voldemort — No creo que le importe. En cuanto a ti, taki, necesitaré consejos sobre cómo amueblar la casa para las necesidades actuales de Harry —

— Lo que desees, mi Señor —

— Váyanse de inmediato —

Ambos adultos, con una ligera reverencia, se retiran. Voldemort se queda solo con el durmiente Harry, besándolo suavemente en la frente fría.

— Pronto volveremos a ser felices, mi amor —

***

Harry Potter está muy feliz. Vive en una casa acogedora, donde todo está tan convenientemente ubicado que puede hacer casi todo por sí mismo. Hay un maravilloso jardín alrededor de la casa, huele a rosas y lirios. Harry espera no molestar a los vecinos cuando practica a tocar y a escuchar música, pero nunca se quejaron. Tom dice que ambas casas a cada lado de ellos están vacías.

Tom es su novio. Y él es absolutamente increíble. Tiene una voz increíble, tan aterciopelada y suave que le revolotean mariposas en el estómago cuando dice "Te amo, Harry". Podría haberse convertido en cantante o locutor de radio si no se hubiera convertido en médico. Tom dice que se enamoró de Harry a primera vista, cuando era su paciente.

Harry resultó gravemente herido en el accidente que mató a sus padres; una lesión grave en la cabeza, pero Tom no temía que él estuviera tan indefenso, dice que está muy contento de que Harry permita que lo cuiden.

Harry trata de causar la menor molestia posible. Empezó a desarrollar la motricidad fina y la audición; tocar la flauta ayuda mucho con esto. Ya es perfectamente capaz de moverse por la casa por su cuenta, e incluso aprendió a cocinar por sí mismo.

Además, Harry tiene una gran noticia que le va a contar a Tom esta noche. Recientemente, descubrió que ya puede ver los contornos de objetos grandes, y también puede distinguir la silueta de Tom, también de su médico, la Sra. Tyki, que a menudo acude a ellos para ayudar a Harry con algo. Tyki dijo que su visión podría comenzar a recuperarse y definitivamente se le debe informar de inmediato, pero Harry quiere complacer a Tom primero.

¡Tom estará tan feliz! 

Continuara ... 

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