Desde el día en que llegaste
Caminamos de la mano
Y a medida que crecimos juntos
He llegado a comprender
Que actúas para lo mejor de mí
Y me colmas de encantos
Pero tu agarre se ha vuelto más fuerte lentamente
Y debería estar más alarmado

He estado viviendo en un paraíso

Es terriblemente agradableSi no lo piensas dos veces ©Living in Paradise — Jason Orbaum

A veces, Voldemort casi se pierde los días en que Harry era perfectamente consciente de las cosas y no tenía que inventar todo un espectáculo para ponerlo suavemente en su lugar si el niño se escondía. Además, no tenía que, como ahora, dar instrucciones claras a los Mortífagos sobre la próxima celebración del cumpleaños del Elegido.

El recuerdo impagable de las indescriptibles expresiones en los rostros de sus sirvientes fue una de las pocas ventajas de este evento. El otro es la alegría sincera de Harry por la próxima celebración.

— Las relaciones no son solo felicidad ociosa, sino también trabajo duro — se tranquilizó Tom. Y en este caso, sus esfuerzos serán más que rentables. Él seguirá esto.

***

Obtener lo que quería de Tom no era tan difícil, como descubrió Harry. Es como caminar por un campo minado con los ojos vendados. Distraer periódicamente a una manada de perros agresivos que corretean con trozos de carne. Asegurándose de que no lo confundan con carne. Nada complicado.

Fue suficiente para darle a Tom lo que quiere. No demasiado obvio y activo; la iniciativa excesiva puede parecer sospechosa para un hombre. No mostrar ni una sombra de descontento, esto también puede afectar negativamente su estado de ánimo. Pero si haces todo bien, puedes avanzar significativamente ... El mismo Harry no sabía lo que quería lograr. Su maravillosa vida se convirtió en una especie de pesadilla paranoica, y comenzó a pensar cada vez más en el hecho de que en realidad estaba enfermo. Harry estaba regularmente atormentado por la culpa por desconfiar de la persona que amaba y que había hecho tanto por él, pero ya no podía contener sus dudas.

Por alguna razón, algunas cosas que antes parecían evidentes de repente se volvieron demasiado notorias, como hilos blancos en un lienzo negro. Las manos de Harry ansiaban cortar esos puntos y ver qué había detrás del velo.

Y estaba dispuesto a pagar por ello.

***

— Qué criatura tan encantadora — Tom arrulla a Harry, quien está cómodamente sentado en su regazo, y le da de comer una tras otra grandes fresas dulces. Harry los atrapa obedientemente con sus labios, su boca y barbilla ya están pegajosas con jugo. Qué codiciosa boca dulce.

Tom muerde una de las fresas y, sosteniéndola en su boca, alcanza a Harry, se fusionan en un largo beso de fresa. Riddle empuja la pulpa de fresa en la boca del chico con la lengua, lame el jugo que aparece en las comisuras de sus labios, muerde suavemente su labio inferior.

A Harry le gusta que su amante sea tan amable y cariñoso, pero últimamente no se ha sentido muy cómodo con algunas de las acciones de Tom. Ambos son adultos, después de todo. Aunque Tom es algo mayor que Harry, a veces se comporta con él como una niña pequeña con su muñeco favorito. Esto hace que Harry se sienta un poco incómodo, como si fuera una especie de maqueta de una persona a la que solo se le pide que reaccione de la manera correcta ante todo lo que le hacen.

Tom se tomó el día libre, así que por la mañana lo arrastró al baño nuevamente, como el día en que Harry estaba prácticamente inmóvil, y lo bañó completamente, sin dejar que hiciera absolutamente nada por su cuenta. Luego lo envolvió en una bata de baño y tomó este extraño desayuno de fresas.

— Te ensuciaste tanto — se ríe Tom — Mira, tendrás que bañarte de nuevo — Harry tragó nerviosamente.

<< Esto es demasiado >>

— Tom, no lo hagas — los ojos azules se volvieron más fríos unos buenos diez grados — Quiero decir, ¿podemos hacer algo más interesante? Estoy tan contento de que estemos juntos todo el día de hoy, no quiero pasarlo en el baño —

Tom sonríe con benevolencia — Estás en lo cierto, mi amor. ¿Qué es lo que quieres hacer? —

— Mm... ¿Puedo dibujarte? — Harry pregunta tímidamente — Quiero tanto tu retrato, pero de memoria no sale del todo bien... —

— ¿Por qué quieres mi retrato? — Tom se ríe — Tienes un yo vivo y real —

— A veces te extraño tanto cuando no estás ... — Harry bajó la mirada — ¡Por favor! ¡No tardaré mucho! —

— Para ti, cualquier cosa, mi alegría — Tom besa a Harry suavemente en la nuca.

***

— Eres tan guapo... — comentó Harry fascinado y no se inmutó << Tom es un hombre muy, muy atractivo >> — No creo que pueda transmitir ni un tercio de tu belleza, lo siento —

— Me gusta — Tom admiró su retrato — Eres un chico muy talentoso — No me importaría posar un poco más para ti, en caso de que extrañes algo más que mi cara —

— ¡Tal vez! — Harry rió tímidamente — Pero es más fácil para mí dibujar caras que cuerpos Tom ... ¿No tienes una cámara?.. —

— ¿Una cámara? — Tom preguntó desconcertado.

— Sí, solo recuerdo que solía tener una de esas cosas y realmente disfrutaba tomando fotos — compuso Harry mientras avanzaba — A menudo tomaba fotos de mis padres y amigos... todavía había fotos tan cuadradas que aparecían instantáneas — sonrió con amargura — Tal vez estas fotos están en otro lugar... —

— Lo dudo — Tom lo miró de cerca — ¿Tomaste fotos de tus padres? ¿verdad? —

— Sí, al menos así lo recuerdo —

— De todos modos, no tengo una cámara, ninguna — espetó Tom — No soporto todas esas cosas modernas y absurdas —

Harry sintió que el hombre se soltaba del anzuelo y disparó artillería pesada.

— Es una pena... Si tuvieras una cámara, tendrías mis fotos, por si te aburres en el trabajo... Podrías tomarme todo tipo de fotos —

Tom se congeló ante las posibilidades que tenía ante él en las que no había pensado. La sangre se precipitó a la ingle de las imágenes que aparecieron en la fantasía.

— ¿Todo tipo de fotos, mi alegría? —

— Sí, todas las que quieras — sonrió Harry juguetonamente.

— Lo pensaré — prometió Tom.

***

Harry nunca se atrevería a negar que disfrutaba del sexo con Tom. El hábil y cariñoso amante hacía que Harry se derritiera con cada toque. El chico no recordaba si había tenido a alguien antes que Tom, pero a veces vagas imágenes y recuerdos de los toques de otras personas pasaban por su cabeza. Ni siquiera estaba seguro de que Tom fuera su primer hombre, pero aun así hizo que su primera vez fuera lo más gentil y placentera posible, como si Harry fuera virgen.

Poco a poco, Harry aprendió a dar placer a cambio, descubriendo todas las caricias especialmente amadas por un hombre. Sensual y apasionado, Tom se encendió fácilmente y no se desvaneció hasta que ambos estuvieron completamente marchitos.

El sexo también era la forma más fácil de evitar un invierno nuclear a los ojos de Tom si algo salía mal de nuevo.

La víspera de su cumpleaños, Tom llegó a casa chispeante de tensión, con voluminosas bolsas opacas en las manos. Sus labios fruncidos se rompieron en una sonrisa depredadora al ver a Harry jugando pacíficamente con Sirius.

— Arriba — dijo secamente a modo de saludo.

— Hola, Tom — Harry caminó hacia el hombre y lo abrazó, recibiendo un suave beso en la parte superior de su cabeza — ¿Qué quieres para cenar? —

— A ti — el hombre sonrió — Deja al perro en paz, sube al dormitorio y espérame allí —

— Está bien, solo lavaré las patas de Sirius, ha estado lloviendo recientemente... ¿Y tal vez la cena primero y después eso? —

— Harry, ¿tengo que repetirlo varias veces? — Tom preguntó con mucha calma. Demasiado tranquilo. La tormenta está cerca.

— Para nada — Harry se dio cuenta de que ahora no era el mejor momento para discutir — Estoy en camino, y mira, no me hagas esperar demasiado, yo también tengo bastante... hambre — El niño guiñó un ojo juguetonamente y sonrió, esperando que las comisuras de su boca no se movieran demasiado.

Después del día en que Harry había imaginado toda la pesadilla de la violación, todavía no habían tenido sexo completo, Harry le pidió a Tom que le diera tiempo para recuperarse de los falsos recuerdos. Tom estaba un poco molesto por esto, pero no lo demostró y no presionó con fuerza, especialmente porque Harry, como compensación, se dejaba alimentar, bañar, y también le daba placer regularmente con las manos y la boca.

<< Parece que la paciencia se ha acabado >> Harry se dio una ducha rápida y, mirando su reflejo en el espejo, suspiró y sacudió la cabeza. ¿Cómo llegaron a esto? ¿Desde cuándo el sexo con un ser querido ha sido igual a escalar el Everest?

Se escucharon pasos. Tom miró hacia el baño y sonrió con aprobación cuando vio a Harry, envuelto en una toalla, con el cabello mojado, ojos sin descaro inapropiado.

— Dios mío — el hombre se acercó y alborotó ligeramente los mechones mojados — Vamos, intentemos algo nuevo hoy —

— ¿Q- qué? — preguntó Harry, tratando en vano de evitar que su voz temblara.

— Acuéstate en la cama, boca arriba — ordenó Tom. Tenía en sus manos uno de los paquetes que trajo a casa.

Harry, un poco vacilante, se acostó << Dios, él no me va a violar. Si no me resisto, ¿no se consideraría violencia? Él me ama y no me hará daño. Además, podré contraatacar, hoy me siento bien, y él no es un luchador de la triple A, de hecho. ¿Qué estoy pensando? Es solo sexo con tu propio novio, no te pongas histérico >> razonó Harry sus pensamientos febriles, y llegó a cierto consenso consigo mismo, hasta que finalmente Tom se acercó a la cama. Con algo que parecen bandas elásticas. Lentamente, Harry se dio cuenta de lo que Tom había decidido intentar.

— Tom, no vas a... — Harry prácticamente saltó sobre la cama y se sentó, con las rodillas dobladas.

— Sí, te voy a atar — respondió Tom con calma, sujetando los tirantes a la cama.

— No quiero. En serio — dijo con una voz casi entrecortada.

— ¿Por qué? Muchas parejas hacen esto. ¿En qué nos diferenciamos de ellos? —

— ¡Porque no me gusta! —

— Ni siquiera lo has intentado — Tom ató la última corbata y metió la mano en la siguiente bolsa, cuyo contenido Harry ni siquiera quería adivinar — Compré todo esto para que te ayude —

— ¿Qué diablos puedes hacer para ayudar? ¡Estaré asustado! —

— Puedo ayudar con eso — Tom colocó sobre la cama una hermosa y gruesa venda para los ojos y un montón de otras cosas extrañas, cuyo propósito Harry no sabía — No es normal que me tengas miedo. Necesitamos trabajar el tema de la confianza en las relaciones —

— Mi confianza en ti será de gran ayuda si me atas y me azotas — dijo Harry con sarcasmo.

— ¿Azotarte? ¿Por qué tienes esas fantasías? — Tom preguntó con curiosidad — ¿Por qué debería golpearte? —

— No tengo idea de lo que está pasando en tu cabeza — espetó Harry — Tom, por favor. Tengamos sexo, sin eso, eso es todo —

Tom se sentó en la cama a su lado, suspirando — Así que la fiesta de mañana tendrá que ser cancelada —

— ¿Me estás chantajeando con celebrar mi propio cumpleaños? — Harry puso los ojos en blanco.

— No, lo celebraremos, por supuesto. Juntos. Si me tienes tanto miedo, los extraños en la casa podrían causarte pánico... No queremos eso, Harry, ¿verdad? —

— ¡Son invitados y esto no es lo mismo en absoluto! —

— Cariño — Tom hizo una mueca — Últimamente has estado exigiendo algo constantemente; una disculpa por una pesadilla, una fiesta en una casa con un alto régimen de esterilidad, una cámara- y sabes lo mucho que me disgusta la tecnología... Y en cuanto quiero algo para mí, me culpas por quien sabe que cosa. Las relaciones no son un juego unilateral, Harry ... Bueno, si no quieres, no, me voy a cenar y no sabré qué hacer conmigo en toda la velada que tengo libre para ti — El hombre se levantó bruscamente de la cama y caminó hacia la puerta.

— ¡Espera! — La cabeza de Harry comenzó a dividirse por la agresión pasiva en la voz de Tom. Además, tal vez el hombre tenga razón, está exagerando en esta situación — Está bien, estoy de acuerdo. Sólo... no me hagas daño, ¿de acuerdo? —

Tom se detuvo en la misma salida, se giró y miró fijamente a Harry.

— Por supuesto que no, querida — sonrió cariñosamente. Un escalofrío repentino recorrió el cuerpo de Harry.

***

— ¿No te aprieta demasiado? —  Tom pregunta solícitamente, tocando los dedos de Harry — ¿Te duele? —

—  No, está bien —  respondió Harry, continuando mentalmente << Excepto que no tengo ni idea de qué esperar de ti >> 

Según Tom, a pesar de la mirada de disgusto y la ansiedad evidente, su chico se ve increíble. Absolutamente desnudo, crucificado sobre una sábana verde oscuro (¡esto enfatiza el color de sus ojos!); brazos separados a los lados y bien sujetos con las palmas hacia arriba, debajo de la cintura una almohada alta, de la cual la cabeza es mucho más baja que el nivel del culo, las piernas separadas y las rodillas dobladas, no se mueva debido a las trabas de las piernas, los pies no tocan la superficie de la cama.

<< Los muggles saben cómo divertirse >> piensa Tom con deleite, quien por el bien de esto ni siquiera dudó en comprar en la "tienda para adultos" de Londres. Sería más fácil con la magia, pero no quería borrar el recuerdo de Harry de esto en absoluto, además, todavía podría usar la magia más tarde.

Tom sacó una mordaza con un pequeño anillo en una funda de silicona, para no dañar sus dientes.

—- ¿Para qué es eso? — Harry pregunta tenso.

— No quiero que contengas tus gemidos- no te dejará apretar los dientes — explica Tom — Abre la boca —

— Espera, ¿no deberíamos pensar en una palabra seguridad? ¿Cómo digo, si quiero que pares, yo... —

— Por supuesto, definitivamente encontraremos una palabra de seguridad — asegura el hombre, tira bruscamente al chico por la barbilla, le pone hábilmente el anillo en la boca y aprieta la correa.

Harry intenta decir algo, pero solo sonidos inarticulados escapan a través del anillo. Sin embargo, Tom ya adivina su contenido.

El hombre mira con satisfacción los frutos de su trabajo; las abrazaderas sujetan con seguridad al joven que se retuerce en todas direcciones, un hilo de saliva fluye por su barbilla, los ojos verdes están llenos de ira justa, no por mucho tiempo, quedan los toques finales.

— La privación sensorial tiene un efecto extremadamente positivo en la psique y el sistema nervioso — recita Tom — Además, esta práctica se usa a menudo en BDSM para establecer una relación más cercana y de confianza entre los socios. ¿Es eso lo que queremos, no, Harry? — él sonríe — Oh, lo siento, no puedes responderme. Pero ya no haré más preguntas estúpidas, no podrás oírme — pone unos gruesos auriculares con cancelación de ruido en la cabeza del hombre que respira de forma descontrolada. Busca a tientas en su bolsillo un tubo de ensayo, con una poción especial.

Tom se inclina sobre el chico, grabando con avidez su mirada, ya no está furioso, su mirada es suplicante. Besa suavemente la punta de su nariz y habla muy claro para que su querido niño pueda leer sus labios:

— Confía en mí —

Una gruesa máscara de seda desciende sobre el rostro de Harry. Él está gritando.

***

Harry se encuentra en completa oscuridad y silencio, solo con su propio pulso resonando en su cabeza. Golpea sin éxito en los grilletes, pero los pestillos, a pesar de su suavidad elástica, son sorprendentemente fuertes. Agarra el aire indefenso con la boca abierta. Tiene la misma sensación opresiva en la cabeza, como esa tarde que supuestamente no paso, como si una ágil serpiente se metiera en su oído y se enroscara en grandes anillos.

No pasa nada; un segundo, dos, una eternidad. La espera es insoportable. Completamente desorientado, no tiene idea de lo que le depara el próximo minuto. Tan aterrador como en esos sueños en los que fue crucificado en una piedra fría y dura.

<< Déjalo hacer lo que quiera y detén esto, por favor>> suplicó mentalmente Harry << Puedo soportar cualquier cosa, solo deja que todo termine y me escaparé, definitivamente me escaparé, incluso si muero... Ya no puedo hacer esto >>

Una lengua cálida y húmeda toca los labios resecos por la respiración frecuente, delineando suavemente el contorno con la punta, y se estremeció de sorpresa. Llega un olor desconocido: fresco y dulce, como fresas silvestres calentadas por el sol, unas gotas de algo agrio, con un ligero toque de regaliz, caen sobre la lengua. Harry no puede escupir el líquido, se mezcla con la saliva y se desliza por su esófago.

Se vuelve a dejar solo durante unos minutos. El primer miedo pasa, el cuerpo comienza a calentarse un poco y en algunos lugares incluso se calienta. La tela de la sábana parece demasiado áspera, como si de un momento a otro pasará de suave satén a arpillera.

Un ligero picor recorre su cuerpo, como si miles de diminutos insectos se precipitaran a la vez en todas direcciones desde un único punto de su estómago. Harry se mueve, tratando de deshacerse de la extraña sensación, hasta que algo más lo ensordece: una ligera brisa contra la parte interna de su muslo.

El flujo de aire se mueve hacia arriba, toca ligeramente el pubis, permanece en el estómago durante un par de segundos, pasa a través de los pezones en pequeños huracanes. Esto se debe a la falta de otros sentidos, excepto el tacto, o la droga desconocida que Tom vertió en su boca, o tal vez ambos, pero Harry se pierde por completo en caricias inusuales, la respiración se vuelve más profunda, ligeros gemidos se escapan de su boca. La brisa sigue explorando su cuerpo, le hace cosquillas en el cuello y los antebrazos, vuelve de nuevo al estómago, baja cada vez más... Era como si le hubieran pasado un pañuelo de seda por la cabeza del pene, sensaciones increíbles, deliciosas.

El chico solloza y recibe un beso tranquilizador en el tobillo. La caricia ingrávida continúa, las volutas de viento se reparten por todo el cuerpo, cada una ocupada con su propia función: excitar los pezones tensos, resucitar la carne sensible del pene, provocar con ligeros toques en el ombligo.

Las corrientes son cada vez más fuertes y sensibles, húmedas, el vapor se asienta en su piel, Harry siente pequeñas gotas por todo su cuerpo, se deslizan hacia la sábana debajo de él, dejando pequeños caminos calientes detrás de ellos. El miembro ha estado parado como una piedra durante mucho tiempo, deseando con locura una estimulación más fuerte, las caderas del chico bailan en un intento de acercarse a la fuente del placer. Tom se pasa las puntas de las uñas por dentro, en la misma ingle << Dios, ¿desde cuándo tiene las uñas tan afiladas? >> Harry intenta frotarse contra su brazo, casi llorando de emoción. El hombre no quiere atormentarlo y ya toca su pene: su mano está fresca como el agua del río. Un ligero chasquido en el estómago y descargas ardientes se esparcen por el cuerpo del tipo, como si estuvieran conduciendo un fuego de Bengala gigante sobre él. Las chispas son un poco dolorosas, Harry se retuerce y se agita,

Un orgasmo vertiginoso arranca el alma del cuerpo. Tom observa con deleite mientras el chico prácticamente se convulsiona, los dedos de los pies apretados, el pecho jadeando por aire, la polla llena de semen el propio vientre de Harry. La legeremancia es una habilidad maravillosa, la mente del adorado Horrocrux mismo le da las llaves de su cuerpo. Voldemort no podría estar más feliz, como si él mismo acabara de correrse violentamente, de jugar magia con el cuerpo de Harry inmovilizado, completamente en su poder, mucho mejor que cualquier cosa que hubieran hecho antes. El niño no es grosero, no provoca, no intenta escapar, no hace movimientos innecesarios. Se le puede restaurar la audición y la vista, o una cosa, fijo en cualquier posición, solo aceptará con gratitud y en respuesta el placer que Lord Voldemort quiere darle.

Tom le quita los auriculares y le susurra a Harry:

— Acabamos de empezar, amor —

***

Tan pronto como Harry respiró, una sensación no identificada ardió en su recto, como si una toalla caliente hubiera sido barrida abruptamente hasta las profundidades. Se retorció de dolor, pero una lengua cálida y húmeda tocó el anillo de músculo, lamiendo y consolando. Su cabeza resonaba de vergüenza, por un momento se imaginó a sí mismo desde afuera: sudoroso, sucio, abierto. La lengua penetró más profundamente, moviéndose metódicamente hacia adelante y hacia atrás en una especie de fricción. La tensión comenzó a aumentar de nuevo en mi ingle. El órgano que penetraba en él se volvía más firme o se relajaba, llenando la entrada de una seda suave y húmeda.

Más y más profundo, ya follando por completo, llenándose de cerca << ¿Cómo puede una lengua ser tan larga? >> el pensamiento surgió en la parte posterior de la conciencia de Harry, pero el órgano se enfrentó al tubérculo de la próstata y el chico perdió la oportunidad de al menos pensar de alguna manera. Ahora parecía que la lengua estaba completamente partida en dos- ambas puntas al mismo ritmo presionaban, acariciaban, frotaban, hasta que Harry lo alcanzó con un segundo orgasmo, no menos brillante, marchitando la carne y dejándole un zumbido en los oídos.

Un golpe de advertencia a través de los labios con el borde de una botella de plástico, un fino chorro de agua se derramó sobre su lengua y Harry comenzó a beber con avidez, agradeciendo mentalmente a Tom por tal previsión. Pero sería bueno que el hombre ya lo hubiera desatado; es poco probable que pueda terminar todavía, y está tan cansado ...

Los labios húmedos apretaron el pezón, los dedos recorrieron el miembro aún no completamente caído. Nada ha terminado todavía.

***

Cuando el niño ya no comenzó a gemir, sino a sollozar y aullar en el próximo orgasmo, Tom se dio cuenta con pesar de que valía la pena terminar: la dosis del patógeno se calculó durante tres horas y ya llevan más que eso, todo su cuerpo estaba entumecido por la fijación en una posición, la próxima vez que debería cambiar, cuando esté seguro de que no encontrará resistencia.

Primero, quitó los audífonos y advirtió — No tengas miedo —

Luego la máscara, los ojos están nublados, entrecerrando los ojos incluso por la luz apagada. Mandíbula después del anillo trajo con dificultad, los labios tiemblan. Desabrochado de los sujetadores. Besó cuidadosamente todos los dedos de manos y pies de su precioso niño. Lo abrazó. Harry apoyó su nariz contra el pecho del hombre y se quedó dormido al instante.

En el silencio y la oscuridad del dormitorio, con el Elegido durmiendo plácidamente en sus brazos, Tom se sintió verdaderamente feliz. Él ama y es amado, y nadie puede cambiar eso. Incluso el mismo Harry.

Continuara ... 

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