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20. Un viaje incongruente

El ruido de un trueno me despertó de mi pequeño trance y me removí en el asiento del bus, abrigándome con mi sudadera para intentar no pensar en lo que me había mantenido despierta toda la noche. Ni siquiera llegaba a comprender la razón por la que me encontraba yendo a ese estúpido viaje de una reunión a la que Finstock nos había obligado a asistir luego de lo sucedido anoche, pero supongo que no quería quedarme en casa.

No cuando mi propia madre no podía quererme tampoco.

Finstock sopló su silbato, haciéndome gruñir por lo bajo. Me dolía la cabeza a horrores, hasta el más mínimo zumbido retumbaba en mi ser.

— Regresa a tu asiento —le ordenó el entrenador a uno de los estudiantes.

Mi vista viajó entre los estudiantes que se encontraban en el bus. En los asientos del frente en el lado izquierdo se encontraban Boyd y Isaac, unos asientos más atrás en el lado derecho estaban Danny y Ethan —también conocido como el gemelo gay de los alfas— y a lo último, en el lado izquierdo se encontraban Scott y Stiles. Payton y yo estábamos sentadas en el asiento contiguo al de nuestros amigos.

Scott estaba con la cabeza apoyada contra la ventana, viendo los autos pasar. Él también estaba afectado por la muerte de Derek, pero no tanto como yo.

— Oye, Scott. Scotty —Stiles chasqueó sus dedos frente a los ojos de su mejor amigo, intentando llamar su atención—. ¿Sigues conmigo?

— Sí, perdón —murmuró Scott en un tono bajito—. ¿Cuál es la palabra?

Stiles había encontrado una forma de 'distraernos' de lo ocurrido y se encontraba con su iPad fuera y una larga lista de palabras para estudiar de los PSAT. Aunque debía concentrarme en ello, me resultaba imposible.

— Anacronismo —repitió Stiles la palabra que había dicho antes.

— Algo que existe fuera de su tiempo normal —definió Scott.

Me alegraba en cierto modo que él se estuviese enfocando en su futuro. Debía hacerlo, encontrar algo que lo motivara a continuar viviendo y pasando por tantas desgracias. Enfocar su mente en un objetivo lo ayudaba a atravesar la tormenta con fuerzas.

— Bien. Siguiente palabra: incongruente —leyó del iPad.

Scott dudó.

— ¿Puedes usarla en una frase? —preguntó.

Payton a mi lado rodó sus ojos.

— Yo tengo una frase para ello. Es incongruente que estemos sentados en un autobús y que crucemos el país por una estúpida reunión después de lo que pasó. Incongruente —dijo mi prima, sus palabras llenas de sorna.

Scott pareció comprender el ejemplo que Payton le había dado.

— Fuera de lugar, ridículo, absurdo —definió.

Stiles elevó su pulgar. — Perfecto. Siguiente palabra. Darach. Darach es un sustantivo.

Cerré mis ojos, suspirando.

Lo que Stiles me había comentado al principio del viaje, un Darach era un druida —aquellos emisarios de las manadas de hombres lobos— que se había vuelto oscuro. Según las pistas que había dejado Harris en sus exámenes corregidos antes de desaparecer, ya que, al parecer, fue tomado en uno de los sacrificios. Estos sacrificios eran en grupos de tres. Tres vírgenes —Heather, Emily y el chico de la piscina— y ahora tres guerreros —Kyle, el profesor de música y Harris—.

Otro dilema que tener en mente.

— No empieces, Stiles —masculló Payton.

— Debemos hablar de eso tarde o temprano —insistió Stilinski—. Vamos a estar aquí cinco horas, ¿por qué no hablar de ello?

Inhalé con fuerzas, sosteniendo el puente de mi nariz.

— Quizá porque el tema de las muertes apesta —hablé por primera vez desde que nos montamos en el autobús.

Stiles me miró sintiendo un poco de lástima por mí y no me gustó eso. No quería que sintieran lástima por mis propios actos o por la forma desastrosa en la que lucía.

— Siguiente palabra —continuó Stiles, resignándose a que no hablaríamos del tema de los sacrificios—. Intransigente.

— Terco, obstinado.

— Si buscas intransigente en el diccionario te saldrá de ejemplo el nombre de Mie...—Stiles me tapó la boca antes de que pudiera continuar diciendo su verdadero nombre.

— Oh, vamos. Debes parar de meterte en los archivos personales de las personas —me reprendió Stiles, aunque la verdad era que no lo había hecho desde hace muchísimo tiempo.

En ese momento, el autobús cayó en un pequeño bache, pero como íbamos en el último asiento, lo sentimos más fuerte que todos. Scott se quejó demasiado, agarrando su costado con ambas manos.

— ¿Estás bien? —le preguntó Stiles con un deje de preocupación.

Sin embargo, yo sabía lo que le sucedía. Scott seguía herido por lo de anoche, aunque era muy extraño porque todos los demás habían sanado. Solo él seguía herido físicamente y también se encontraba agotándome por momentos, absorbiendo mi energía.

Estúpidos vínculos personales.

— No debimos haber venido —dijo Payton.

— Aunque me sorprenda decirlo, Payton tiene razón. No debimos haber venido —coincidió Stiles.

— Teníamos que venir —dijo Scott—. Hay seguridad en grupo.

— También hay muerte en grupo. Se llama masacre —le recordó Stiles—, baño de sangre, matanza, sacrificio, carnicería. Vaya...—Scott emitió otro quejido de dolor—... Le diré al entrenador que...

— No —lo interrumpió Scott—. Estoy bien —aseguró.

— No te ves bien. Tampoco lo hace Scar —insistió.

Le dediqué una mala mirada, pateándolo desde mi lugar.

— No me llames así —espeté entre dientes.

— Olvida lo que dije, ella está bien —murmuró y volteó a ver a Scott—. ¿Me dejas verla?

Scott se tensó.

— Estoy bien —repitió.

— Déjale ver la maldita herida, Scott —ordené.

Mi tolerancia había disminuido bastante en las pasadas horas. Era una mezcla de falta de sueño, la pérdida de Derek y el rechazo de mi madre lo que me tenía de tan mal humor.

— De acuerdo —accedió mi mejor amigo.

Se levantó la camisa, girando un poco su cuerpo para permitirnos ver las profundas heridas que iban desde su pecho, bajando por el lado izquierdo de su torso hasta llegar a su espalda.

— Amigo —comenzó a decir Stiles.

— Sé que está mal, pero es porque son de un alfa —le dijo Scott—. Tardará más tiempo en sanar.

— ¿Cómo es que Isaac y Boyd están bien? ¿Cómo es que Payton está bien? —señaló a mi prima con su pulgar.

Scott apoyó su cabeza de nuevo en el cristal de la ventana del autobús, su mirada perdiéndose de nuevo.

— No puedo creer que esté muerto. No puedo creer que Derek esté muerto —susurró.

Cerré mis ojos y apoyé mi frente en el espaldar del asiento continuo. Yo tampoco podía creerlo, y a mí me dolía más que a todos ellos juntos.

* * *

— ¿Qué parte de 'vuelvan a sus asientos' no comprenden? —gritó Finstock y sonó su silbato de nuevo—. Ustedes dos, vuelvan a sus asientos —los señaló.

Apreté mis manos en fuertes puños, clavando mis uñas en las palmas para intentar controlar mis ganas de gritarle de vuelta.

Anoche había llorado tanto que me había dejado con una jaqueca incontrolable y el hecho de que Scott estuviese debilitándose por sus heridas, no mejoraba mi situación. Mi humor empeoraba con cada segundo que pasaba y podía sentir mi rostro palidecer poco a poco, tal y como lo hacía el de Scott.

— Alguien que lo haga callar —murmuré mi petición, echando mi cabeza hacia atrás en el asiento.

— Dudo que eso sea posible —me dijo Payton—. Quizá debas pelear por el poder definitivo como lo hiciste con el silbato —comentó, señalando el silbato que se encontraba alrededor de mi cuello.

Quizá debería.

— Jared, otra vez. ¿Tienes mareo? ¿Cómo te subes al autobús? —le preguntó Finstock a uno de los estudiantes que iba en los asientos delanteros del lado derecho. Jared llevaba todo el camino reprimiendo sus ganas de vomitar—. Mírame. No me mires. —cambió de opinión con rapidez—. Mira el horizonte. Mantén la vista en el horizonte.

Desde mi lugar pude ver a Jared asentir, una expresión de asco cubría su rostro por completo.

Pobre chico, ya se había sumado a la lista negra de Finstock donde también se encontraba Greenberg.

— McCall, ¿tu también? —cuestionó el entrenador al ver el aspecto de Scott.

Mi mejor amigo seguía con la cabeza apoyada en el cristal, su aspecto desmejorando con cada minuto que pasaba sin sanar. Su rostro estaba pálido y estaba adornado por una expresión de dolor permanente, como si se encontrara en agonía.

— No, entrenador, estoy bien —aseguró, mintiéndole.

Era obvio que no se encontraba bien, pero Scott es un maldito testarudo.

— Scott, estás sangrando de nuevo —observó Stiles—. Y no me digas que está tardando más en sanar.

Me enderecé en mi asiento y giré mi cabeza para poder ver la camisa gris de Scott manchada por la sangre, sin embargo, esta no era roja, sino negra. Su cuerpo no estaba sanando, estaba empeorando.

Payton los mandó a callar.

— Él está escuchando —les dijo, señalando al gemelo con su mentón.

— ¿Hará algo? —preguntó Stiles, analizando sus movimientos.

Era muy poco probable que lo hiciera. La verdad es que no sería conveniente que hiciera algún movimiento dentro del autobús. Él podía ser un alfa y toda la cosa, pero estaba en su mayor capacidad de poder con su hermano y este no se encontraba ni en los centros espiritistas. Estaba solo en un autobús que tenía cuatro hombres lobos y una elemental de fuego. Las probabilidades no estaban a su favor hoy mismo.

— No frente a tanta gente —dijo Scott.

— ¿Qué hay de las dos bombas de tiempo que están cerca de él? —Stiles señaló a Isaac y a Boyd.

Isaac era un cachorro, por más dolido que estuviese por la muerte de Derek, sabía lo que le convenía.

— Oye, una de esas bombas de tiempo es mi...eh...¿novio? —le reprochó Payton, dudando de sus propias palabras. Su rostro adquirió un toque rojizo y se hundió en el asiento, cubriéndolo con su cabello.

— No, ellos no —aseguró Scott—. Aquí no.

Aunque sus palabras parecieran que intentaba convencerse más a sí mismo que a nosotros.

— ¿Y si lo hacen? ¿Vas a detenerlos? —interrogó Stiles, poniendo a prueba mi paciencia y la de los demás con sus constantes preguntas.

— Si lo hacen, yo los detendré —intervine.

Stiles me miró, elevando una de sus cejas como si no me creyese.

— Tú no te ves en condiciones de hacer esos esfuerzos, Scar-lett —añadió la última sílaba al ver mi mirada de advertencia.

Odiaba el apodo más que nunca. Me recordaba las heridas que había dejado con el paso del tiempo, como rompía cada cosa que tocaba y como dejaba las heridas abiertas hasta que solo quedaran en una cicatriz. Yo era una cicatriz permanente ante los ojos de mi propia madre, aquella que le recordaba lo que había perdido y que nunca podría recuperar.

— Créeme, puedo hacerlo —aseguré.

— Stiles, déjala hacerlo —opinó Payton, tomándome por sorpresa.

De hecho, nos tomó a todos por sorpresa. Ella siempre buscaba detenerme de tomar riesgos en situaciones así, pero, por alguna extraña razón, no lo hizo esta vez. Estaba haciendo todo lo contrario. Me estaba impulsando a meterme en medio de una posible pelea de hombre lobo.

— ¿No se supone que tú la proteges de todo? —cuestionó Stiles, moviendo sus manos para darle más énfasis a sus palabras.

Mi prima rodó sus ojos con un toque de irritación. Tenía un ligero presentimiento de que ella apenas soportaba a Stiles y que él tampoco la soportaba mucho a ella. La verdad era que ninguno de nosotros realmente soportó mucho a Payton hasta que le permití acercarse a mí.

— Stiles, Scarlett puede con ello. Ellos podrán ser hombres lobos, pero no son aprueba de fuego —le dijo.

— Peter podría confirmártelo. Varias veces —añadí, ladeando un poco mi cabeza.

Scott se removió en su asiento, notando algo que nosotros no nos dimos cuenta.

— Chicos, Boyd hará algo —anunció, captando nuestra atención.

— ¿Cómo lo sabes? —preguntó Stiles.

— Mira sus manos —señaló Payton con un toque de obviedad. Por la expresión de su rostro, supe que ella estaba controlándose para no darle un golpe en la frente.

Todos miramos en dirección a Boyd, específicamente la zona de sus manos donde largas garras salían en lugar de sus uñas.

Oh, Boyd, ¿qué demonios crees que estás haciendo?

_______________

Luego de 7 días sin luz en los que ya estaba dejando de vivir en una urbanización y estábamos en un yucayeque eligiendo al cacique de la aldea, volví a la universidad y tengo luz e internet. ¡Por fin!

Preguntas: ¿Y ahora qué pasará con Derek teniendo en cuenta que Scarlett está en el viaje? 😈 ¿Notaron que hice énfasis en lo que Payton dijo de 'A prueba de fuego'? ¿Pueden adivinar la razón? 😏

Por cierto, pronto estaré dedicando los caps pasados y este también. Es que estoy desde el celular actualizando y con todo este lío de Irma se me ha dificultado todo.

Anyway, chau y hasta la próxima, los amo ❤️

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