3. Otro hombre lobo.
Mis padres me regañan luego de haber llegado a mi casa. En parte comprendo que se preocupen por mí y no quieran que salga tanto de mi casa por todo lo que ha ocurrido en las pasadas semanas. Ellos casi pierden a una hija en un baile que se supone que fuese seguro. No obstante, un accidente puede ocurrir en cualquier lugar, inclusive dentro de la casa. De hecho, considerando mi estado actual donde no se sabía lo que estaba sucediendo conmigo, estar fuera de la casa era lo mejor que puedo hacer.
Sin embargo, mi plan de salir se extravía durante casi dos días y para cuando me dan el permiso de volver a la escuela, ya es hora de que Lydia también volviera. Así que toda la atención estará puesta en ella porque, según lo que dijo, no recuerda nada del porqué estuvo corriendo por el bosque durante dos días.
Volver a la escuela es normal dentro de todo, puesto que el enfoque ha pasado de Allison y yo, a Lydia. Incluso algunos han comenzado a llamarla 'la loca del pueblo', cosa que se me hace bastante cruel, pero no puedo argumentar al respecto porque de mí también han dicho cosas horrorosas.
Mi teléfono suena anunciando la llegada de un mensaje cuando estoy de camino al campo de Lacrosse para ver el entrenamiento del equipo.
De: Sherlock barato.
Scott sintió otro hombre lobo en los vestidores.
Hago una mueca al ver que es un mensaje de Stiles, pero el contenido me llama la atención. Genial, ahora hay otro hombre lobo —cortesía de Derek— y hoy es luna llena. Simplemente perfecto, al parecer aquí está habiendo una invasión de personas que se transforman cuando su pulso se acelera, sus ojos brillan, tienen fuerza sobre humana, colmillos y garras.
Escribo una respuesta corta y apresuro el paso hacia el campo de lacrosse. Llego justo a tiempo para el comienzo del entrenamiento. Veo que Scott está en el puesto de arquero, aunque él odia esa posición así que deduzco que es parte de un plan para descubrir quién es el otro hombre lobo.
Scott sale corriendo cada vez que alguno se prepara para lanzar la pelota y los derriba para olerlos disimuladamente. Por «disimuladamente» me refiero a que todos se dan cuenta que los está olfateando y solo lo miran como si de un bicho raro se tratase.
— ¡McCall, la posición es arquero, no abandonarlo! —le grita Finstock luego de que Scott hubiera hecho lo mismo dos veces seguidas.
Finstock suena el silbato y Scott repite la acción, derribando a Danny. Veo que intercambian varias palabras y ambos se ponen de pie. El entrenador ya está molesto con el comportamiento de Scott, aunque es Finstock. Él es una persona de corta paciencia.
— ¡McCall! Vuelves a moverte de tu posición y haré que te suicides corriendo hasta que te mueras. Sería el primer intento de suicidio que realmente termina en suicidio —amenaza.
Me confundo con lo que dijo porque realmente no tiene sentido alguno, aunque es Bobby Finstock de quien hablábamos. Rara la vez él dice cosas con sentido. Sin embargo, sigue siendo uno de los profesores que los estudiantes adoran. Al menos yo lo hago en cierto punto. Siento que si termino siendo maestra seré como él.
Jackson no quiso pasar, alegando que le duele el hombro y da paso al siguiente. Es extraño, bastante de hecho, pero él anda actuando de esa forma desde que salí del hospital. Me refiero a que el día que fui a la escuela luego de que me dieran el alta, lo vi correr al baño sosteniéndose la nariz como si sufriera de algún sangrado.
El entrenador vuelve a sonar el silbato y le lanza la pelota al jugador, Lahey, si no me equivoco. Ambos corren a su encuentro, pero no es derribado como los demás porque ambos tienen y chocan la misma fuerza. Isaac Lahey es el hombre lobo.
Me pregunté quién pudo haber sido el alfa caritativo que lo convirtió, pienso con sarcasmo. Derek anda formando su manada de eso no hay duda.
Agarro mi teléfono y solo envío un mensaje importante. Ni siquiera me quedo a ver todo lo que sucede en el entrenamiento porque seguramente no me quedaré a terminar el resto de las clases tampoco.
Sí, esta vez dejaré que mi curiosidad reine y mande todo mi cuerpo, gobernando y decidiendo por mí.
Mi teléfono vibra, recibiendo la respuesta al mensaje y salgo del campo de Lacrosse como alma que lleva el diablo para dirigirme a la dirección que está escrita en mi teléfono.
* * *
— ¿Un almacén? —pregunto, entrando a la nueva guarida de Derek, pues ya no se encuentra ocultándose en las ruinas de la casa Hale. Esto es, en parte, nuevo. El almacén prácticamente está vacío y tiene un ferrocarril en desuso al fondo—. ¿Por qué un almacén, Derek?
Él me mira cruzando los brazos adoptando una pose que me dice que no responderá ese tipo de preguntas de mi parte. No puedo evitar rodar los ojos ante ello porque me fastidia e intriga un poco su insistencia de elegir lugares abandonados para ocultarse de los cazadores.
— ¿Qué estás haciendo aquí, Scarlett?
Separo mis labios para hablar, pero en lugar solo suelo un suspiro. Encojo mis hombros sin saber por dónde comenzar. ¿Debo hacerlo por su nuevo beta o por mis propias inseguridades? Es obvio cuál iba a elegir.
— Sé que mordiste a Isaac —digo porque la primera opción era más fácil que la segunda—. ¿Por qué?
— ¿Por qué realmente estás aquí? Isaac es un problema aparte.
Relamo mis labios antes de apretarlos en una fina línea. ¿Responder o no responder? Esa es la verdadera cuestión.
— Hoy es luna llena. No he mostrado signos de que me voy a convertir, pero mi cuerpo tampoco rechazó la Morida. Estoy preocupada, ¿vale? —respondo con sinceridad, moviendo mis manos para hacer más énfasis en mis palabras
Derek frunce el ceño, dando dos pasos hacia el frente para quedar más cerca de mí. Cruza sus brazos de modo que sus músculos lucen más grandes y atractivos a la vista. Sacudo mi cabeza para sacar esos pensamientos de mi mente.
— ¿Por qué no fuiste con Scott? —inquiere.
Buena esa, Derek. Gracias por preguntar lo que no quería decir en voz alta.
— Está más preocupado por Lydia e Isaac, supongo —murmuro con un toque de vergüenza y antes de que pueda decir algo más, recibo un nuevo mensaje en mi teléfono. Es Stiles de nuevo y esta vez dice que el padre de Isaac fue asesinado y creen que fue él—. Y tú ahora tienes problemas con tu nuevo beta.
Lo que digo confunde bastante a Derek, así que le muestro el mensaje para que pueda comprender mi comentario. Él solo maldice por lo bajo y busca las llaves de su auto en el bolsillo de su pantalón antes de jalarme con él. Durante el camino a la escuela Derek responde alguna de mis preguntas como el porqué eligió a Isaac. Fue más porque su estado de vulnerabilidad en su casa lo llevaría a aceptar su propuesta.
Scott está frente a la salida de la escuela cuando Derek detiene el vehículo para poder hablarle.
— Sube —ordena Derek.
Yo me encuentro en el asiento trasero, por lo que no me ve todavía.
— Es tu culpa. Tú hiciste eso —acusa Scott en un tono airado.
Derek suspira, dejando caer una de sus manos sobre su muslo en señal de rendición. Está doblando su orgullo para que Scott acceda a ayudarlo, pero no va a tener que ceder demasiado porque conozco a mi amigo. Él siempre ayuda a los demás.
— Lo sé. Ahora entra en el auto y ayúdame —vuelve a ordenar, aunque suena más como una petición.
Scott niega con su cabeza.
— Tengo una mejor idea. Voy a llamar a un abogado, ya que él tendría mejor oportunidad de sacarlo antes de que la luna aparezca —manifiesta.
— No cuando revisen su casa —argumenta Derek, haciendo que Scott deje de hablar y luzca confundido.
Me acomodo en el asiento trasero, removiéndome en mi lugar porque las cosas se están volviendo interesantes. Solo me falta el popcorn para poder admirar la función.
— ¿A qué te refieres? —pregunta.
— No importa lo que Jackson le dijo a la policía, lo que hay en la casa es peor —asegura—. Mucho peor.
Sí que lo es.
Según lo que Derek me dijo, Isaac fue maltratado física y verbalmente por su padre y no de una manera muy bonita. No era como si el maltrato en sí fuera lindo porque en verdad no lo es, pero la forma en la que su padre lo hacía era espantosa. Eso era lo que le daba la excusa a Isaac para matarlo, aun cuando no fue él. Hasta yo quiero matarlo y ni siquiera llegué a sufrir lo que Isaac tuvo que pasar.
Me levanto del asiento y le abro la puerta a Scott.
— Mueve tu trasero al asiento, Scott —exijo.
Scott me mira confundido, pero obedece como un buen perro. ¿Vieron lo que hice ahí? Perro...hombre lobo... Dios no es momento para mis bromas mentales en especial cuando hay posibilidad de que yo me convierta en mujer lobo, pero hay que tomarlo con humor, ¿no? Sonreírle a la vida, aunque esta te mate a golpes.
* * *
— Si Isaac no mató a su padre, ¿quién lo hizo? —pregunta Scott, rompiendo el silencio que se ha instalado entre los tres.
Nos encontramos en el interior de la casa de Isaac, pues Derek quiere mostrarle a Scott lo que Isaac sufrió, aquello que le da un motivo. Aprieto mis dedos alrededor de la linterna para iluminar el camino en la oscuridad. No debemos encender las luces porque eso atraerá la atención de las personas y haríamos todo peor teniendo en cuenta de que aquí hay evidencia importante que puede catalogar a Isaac como el asesino.
— Buena pregunta, Scotty.
— Aún no lo sé —responde Derek.
— Entonces, ¿cómo sabes que te dice la verdad?
Ruedo los ojos.
Scott no tiene ni la menor idea de cómo funcionan las cosas con los alfas, sus betas y sus sentidos de hombres lobos. Gracias a Dios que él es el hombre lobo y yo no. Sin embargo, es el instinto y el sentido común lo que te deja ver la realidad. Eso y que me he convertido en una experta de hombres lobos en estos pasados meses.
— Porque confío en mis sentidos y es una combinación de ellos. No solo es su sentido del olfato —mira a Scott, quien hace una mueca.
Aprieto mis labios en una fina línea para no reír porque simplemente no es el momento. La expresión de Scott vale un millón de dólares.
— ¿Viste lo que pasó en el campo de Lacrosse?
— Sí —contesta.
— ¿Realmente fue tan malo?
— Sí —esta vez somos los dos quienes respondemos a su pregunta.
Es que la verdad lo que hizo fue pésimo. Todo el mundo pudo notar lo que sucedió en el entrenamiento y cómo Scott olfateaba a sus compañeros. Simplemente todavía le queda mucho que aprender.
Caminamos por la casa hasta que Derek nos conduce a una puerta al final del pasillo que, al parecer, da al sótano. Él presiona a Scott para que utilice todos sus sentidos de hombre lobo. Tiene que aprender a utilizarlos y no solamente el olfato. En especial si vamos a estar lidiando con otro asesino.
Comenzamos a bajar las escaleras del sótano, Scott yendo primero, yo después y Derek al final. Está tan cerca de mí que casi puedo sentir su respiración en mi nuca, al igual que su olor varonil entra por mis fosas nasales.
— ¿Qué hay abajo?
Suspiro.
— Motivo, Scott —respondo.
Según bajo los escalones comienzo a sentirme incómoda como si supiera que algo malo ha ocurrido allí. Eso activa mi sensación de calor, el mismo que llevo sintiendo desde que salí del hospital. Emana de mi piel, haciéndome sudar un poco y muevo la solapa de mi chaqueta para abanicarme un poco de forma disimulada.
— ¿Qué pasó aquí abajo?
— El tipo de cosas que deja una impresión —dice Derek.
Suelto el aire de mis pulmones lentamente porque estoy comenzando a sentirme más acalorada a medida que me introduzco en el sótano. Derek tiene razón al decir que deja una impresión porque yo misma soy capaz de sentirla. Es un aura negativo, pesado y cargado de temor. Me estremezco un poco, pero continúo caminando alrededor del sótano. Scott se aleja de nosotros para buscar por sí mismo las cosas que activan sus sentidos.
Apago la linterna por petición de Derek, aunque la verdad es que no quiero hacerlo. Andar a oscuras en el sótano no me aprtecr para nada.
— ¿Estás bien? —pregunta. Asiento, dándole la linterna porque no quiero cargarla más y él casi la suelta al suelo—. Está caliente.
Trago en seco y sigo a Scott, alejándome de Derek. No sé lo que está ocurriendo conmigo, pero definitivamente no es normal.
A los pocos segundos veo a Scott parado frente a un congelador enorme. Derek aparece a nuestro lado unos momentos después y enciente la linterna.
— Ábrelo —le susurro a Scott. Él lo hace y ambos podemos ver las marcas de rasguños dentro del congelador. El padre de Isaac lo encerraba dentro para castigarlo. ¿Qué clase de persona hacía algo así? Es enfermo—. Esta es la razón por la que aceptó.
Derek asiente, dándome la razón.
— Todo el mundo quiere poder.
Yo no.
— Si te ayudamos, tienes que detenerte —dice Scott—. No puedes ir por ahí convirtiendo a las personas en hombres lobos.
Me aparto un poco de ellos, sintiéndome un poco más acalorada que antes. ¿Por qué siento calor cuando se supone que hacía frío? Agito mis manos frente a mi rostro para tratar de echarme un poco de aire y que el calor se vaya, pero no sirve de nada.
— Puedo si ellos están de acuerdo.
— ¿Le dijiste a Isaac sobre los Argent? ¿Sobre ser cazados?
Derek vuelve a asentir.
— Sí, y aún así lo pidió.
Scott está perdiendo su cordura.
— Entonces es un idiota —masculla.
— Y tú eres el idiota que sale con la hija de los Argent —acusa Derek. Scott lo mira ligeramente alarmado—. Sí, conozco tu pequeño secreto y si yo lo sé, ¿cuánto van a tardar ellos?
Las palabras de Derek se hacen más distantes para mis oídos porque todavía puedo ver su boca moverse. Él sigue hablando con Scott, pero yo no puedo escucharlo. El calor me está mareando, haciendo que mi vista se torne borrosa y temo que en cualquier momento mis piernas fallarán.
— Scarlett, ¿estás bien? —pregunto Scott alargando su brazo cuando me tambaleo un poco. Su piel solo hace contacto con la mía durante unos segundos porque aleja su mano inmediatamente, quejándose—. Está hirviendo, literalmente. Acaba de quemarme.
Derek me ilumina con la linterna y puedo ver la piel roja en la mano de Scott, sanando con rapidez. Mi respiración se agita y cuando veo mis manos puedo notar que mis palmas están rojizas.
— ¿Qué está pasando? —pregunto casi al borde de la histeria.
— No lo sé —susurra Derek igual de confundido que Scott y yo.
_______________________________
¡BAZINGA! Actualización sorpresa. Más Derek en este cap 7u7
Es la primera luna llena de Scarlett y este es solo el comienzo...¡teorías, teorías! Quiero leer sus teorías.
¡Besos calientes como las manos de Scarlett y como el abdomen de Derek para todos!
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro