52- La guerra y la paz
Hades estaba conociendo a Valentine y haciéndose a la idea de tener un yerno...
Era un joven muy dulce pero de carácter, trabajaba junto a su hijo, se complementaban muy bien y hasta había dado sabios consejos en la corte.
Abel se presentó ante su rey y, previa reverencia, se sentaron a desarrollar estrategias para la guerra que se avecinaba... hablaban sin reparos creyéndose solos pero sin notar que Valentine les escuchaba...
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España
-Hay un mensajero que pide hablar con el rey Francisco y con el príncipe Shura...
El paje habló y se retiró.
Al ser traído frente a la realeza, donde también se hallaba Krest, el joven habló con seriedad:
-He venido desde Portugal para proponer una salida al conflicto... mi señor Hades no está muy convencido de los motivos que los llevarán a pelear y quién saldría beneficiado con todo esto es Abel y sus mercenarios...
Ellos desean la guerra para que la fabricación de armamento siga en auge, pero, ¿qué sucedería si ustedes se alían con Portugal? Ellos no podrían ir contra Hades...
-Hades desea la guerra tanto como Abel... no hay nada que pueda hacerlo cambiar de parecer...
-Yo creo que sí... a pesar de ser un hombre duro y poderoso, valora mucho a su familia...
-¿Qué está proponiendo? No haremos nada contra otra persona... además conocimos al hijo de Hades y es un hombre excepcional...
-Lo sé perfectamente... no olviden que soy su esposo...
Todos quedaron mirando al joven parado frente a ellos
-Y también seré la madre de su hijo... estoy esperando a su bebé! Sé que Hades no pondría en riesgo a su familia por una guerra sin sentido...
Shura se acercó al joven y sonriendo, le estrechó la mano.
-No sólo bendigo a tu bebé sino que eres bienvenido a nuestro reino al igual que Radamanthys!
-Muchas gracias majestad... si me atreví a venir fue porque ustedes demostraron tener gran sentido de justicia y anteponen los sentimientos al poder...
Cuando Radamanthys llegó a Portugal con vuestro guardia, Kanon, yo sentí que se terminaba mi mundo...
Sabía lo que ese hombre significaba para Rada, pero luego lo escuché hablar con Hades, le hablaba bien de mí e hizo entrar a su esposo y sus dos bebés...
Tuvo el valor de ir al reino enemigo a pelear por su familia... yo quiero hacer lo mismo por la mía...
-¿Qué crees que podemos ofrecer a Hades y sobretodo a Abel, para que desistan de luchar?
-No creo que Hades sea problema... en cuanto a Abel, podríamos asegurarle compras de armamentos y logística anuales para abastecer a nuestros ejércitos y tenerlos siempre preparados, además de renovar los búnkeres... sería un trato justo ya que abastecerían a tres reinos!
Shura y Francisco meditaron un momento, se comunicaron con Degel e hicieron llamar a Camus y los gemelos...
Todos fueron presentados formalmente a Valentine, estableciéndose una empatía rápida entre ellos...
El pelirosado miraba de reojo a Kanon, no se atrevía a decirle nada pero el gemelo se daba cuenta de que tenía su mirada encima...
-Valentine, me contó Shura que tendrás un bebé de Radamanthys en pocos meses... ¿me ayudarías con los gemelos?
-Claro... sí...
El joven se puso nervioso más pronto vería que no tenía porqué.
Salieron rumbo a la casa de los gemelos, que no distaba mucho del Palacio Real...
Kanon llevaba ambos pequeños en brazos y al llegar, le pidió si le sostenía a uno para abrir la puerta...
-Él es Ángel, un verdadero angelito enviado por Dios para alegrar nuestras vidas... y este pequeño es Apolo, significa "belleza de hombre"...
Saga y yo nos tardamos mucho en darles un nombre así que todos aportaron ideas hasta que elegimos estos... ¿qué te parecen?
Kanon hablaba mientras se sentaban cómodamente en el sillón y cada uno le daba la mamadera a un bebé.
-Son muy bellos... tus hijos y sus nombres...
-Valentine... yo no deseo que me veas con recelo... yo sé que vivir a la sombra de un fantasma es feo, pero yo sólo vi a Radamanthys una vez y luego hasta que me trajo del coma, jamás supe de él...
No soy una competencia para ti ni para nadie, yo vivo para mi familia y me gustaría que pudiésemos vernos y tratarnos...
-Yo estuve mucho tiempo celoso de ti, de tu recuerdo y lo que significabas para Rada, pero veo que me apresuré a juzgar...
Creo que nos llevaremos muy bien y nuestros hijos también podrán hacerlo...
-Por supuesto que sí!
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Llevaban horas reunidos, Abel no se daba por vencido...
Degel le ofrecía comprar armamento variado, lo mismo Shura, además de equipos de seguridad y supervivencia...
El mercenario no se veía muy convencido y le pedía apoyo a Hades, quién estaba entre las dos posiciones.
-¿Acaso te apiadas de ellos porque ahora los monarcas son jóvenes?
-No es eso... es que tanto el rey Degel como el príncipe y pronto monarca Shura, son padres recientes y deberán ir a la guerra...
No me gustaría que mi Radamanthys pasara por lo mismo...
-Eso es una tontería! Las guerras hay que lucharlas! esas victorias te dan poder y puedes tener otros reinos bajo tu yugo...
Shura veía que la posibilidad de paz era cada vez más lejana... todos estaban presentes, la realeza francesa, la española y la portuguesa, reyes y herederos... todos escuchando atentamente lo que se planteaba allí...
Camus estaba junto a Kanon, sus manos entrelazadas y en silencio, orando por un milagro que parara esa locura...
Radamanthys observaba a los amigos y Valentine a su lado, se sentía mareado...
-Hades, el hecho que los monarcas sean padres no significa nada para nosotros... tú no tienes-
Su monólogo fue interrumpido por el grito de Radamanthys, al ver a su consorte desvanecido.
Un revuelo generalizado se produjo y Hades corrió a ayudar a su hijo; tendieron al joven sobre el sofá y Camus le trajo agua y paños húmedos...
Pronto empezó a volver en sí y se vio envuelto en fuertes brazos...
-No me vuelvas a asustar así... iremos con el doctor ya mismo...
-No es necesario...
-Bueno, entonces sigamos o demos por terminada esta reunión inútil...
-El hecho que mi hijo aún no tenga descendencia, no significa que yo no piense en los niños de los demás...
-Su descendencia viene en camino, señor Hades... estoy esperando un hijo de Radamanthys...
Los ojos del lord de Portugal se aguaron y se acercó al joven, que era sostenido por un sorprendido Radamanthys...
-Estamos esperando un bebé?
Ante su afirmación con la cabeza, fue abrazado con mucha ternura y luego Hades, hizo lo mismo.
-Suficiente... esto es lo que más he esperado en mi vida... que mi hijo me diera un heredero... yo ya no tengo nada que pensar, para mí la guerra acabó antes de empezar... no pondré a mi nieto ni a su madre en peligro...
Abel vio que acababa se perder a su mayor aliado... vio y revisó su situación y no le quedó de otra que hacer trato con los reinos aliados...
No era que saldría perdiendo después de todo, era justo lo opuesto... obtendría ganancias seguras aún en tiempos de paz.
La paz estaba asegurada... los herederos reales y sus retoños la habían sellado!
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