N/A: Se vienen unos capítulos con bastante sexo en la narración o algo que da a entender que aquello ha sucedido, debido a que poco a poco los personajes deben crear un vínculo sexual muy estrecho para continuar con la trama y haceros entender a los lectores que eso ha sucedido. Espero que lo comprendáis y que disfrutéis de la narración, ya que quizás en un tiempo, esta continuidad de sexo se vaya por tema de trama y sea escasa.

El ambiente apestaba a alcohol y marihuana, las risas y voces estaban mezcladas, la música estaba altísima y la luz era muy tenue.

Definitivamente odiaba las fiestas.

Se hicieron paso entre la multitud. Algunos bailaban, otros hablaban casi a gritos, algunos jugaban a juegos y algunos animaban a una persona la cual bebía tequila directamente desde la botella.

— Vamos a buscar a Namjoon. — Dijo Jin. —

Su amigo era el que iba delante del grupo, dirigiéndolos.

— ¿Alguna vez has estado aquí, Jin? — Preguntó el peli menta. —

— Alguna vez, sí... —

El chico que iba delante saludó a alguien a lo lejos y se acercaron.

— Habéis venido. — Dijo Namjoon sonriente. —

— Ha sido difícil, pero al final los hemos convencido a todos. —

— Me alegro mucho de que estéis aquí, os prometo que os lo pasaréis genial. — Habló Jimin mientras miraba a Yoongi al que vio sonrojarse. —

El rubio soltó una pequeña carcajada, lo suficiente alta para que lo escuchara McKagan, pero no el resto, este casi lo mataba con la mirada.

Jungkook, no estaba presente, tampoco quería que estuviera y soltara algún comentario delante de sus amigos, mejor que las cosas fueran así.

Jin hablaba con Namjoon, quien lo sujetaba discretamente de la cintura, Jimin les dio un tema de conversación, que terminó después de que un chico interrumpiera al peli naranja, ya que le comentaría algo.

— Vayamos a por algo de beber. — Propuso Hoseok.

— Ten en cuenta de que esta vez no te dejaremos beber tanto. —

Caminaron hasta lo que simulaba ser la barra en una gran cocina y como las bebidas estaba allí para poder servirte lo que quisieras, el pelo platino agarró sin miedo y preparó una mezcla de alcoholes que según él estaba bueno.

— Probad esto, es lo mejor que se puede beber. —

Williams agarró la cañita del vaso mientras su amigo lo sujetaba y probó. El sabor amargo y el ardor en la garganta se hicieron presentes, pero había una mezcla con una bebida energética, la cual le daba un punto dulzón.

Estaba bueno, pero prefería no ir tan a saco.

— Mejor empezaré con algo más ligero, luego ya me enseñarás la receta de ese cóctel. —

Hoseok levantó la mano con la que sujetaba el vaso como si fuera un brindis y sonrió.

— Sabía que te gustaría. Prueba Yoongi. — Le ofreció y al mayor le gustó al igual que a él. —

════ ∘◦❁◦∘ ════

La media noche se acercaba y un pelinegro acababa de entrar a la fiesta, después de casi 3 horas de haber comenzado. Este pasaba entre la gente y no precisamente desapercibido. Las chicas y gente que lo conocía, aunque fuera de vista, lo saludaban e incluso alguno trataba de iniciar un tema de conversación.

Cuando se libró de sus compañeros de futbol y de la multitud o grupos que trataban de hablar con él, se situó junto a su amigo peli naranja.

— Ya era hora de que llegaras. — Musitó Hudson mientras le pasaba un vaso con una bebida la cual no sabía que contenía. —

— Gracias... — Agarró el vaso. — No podía venir antes, he tenido que montar un maldito mueble de mi hermana. —

— ¿Tu hermana vendrá? —

— No, le he dicho que los de primero no están invitados. —

— Tampoco lo están... — Dio un sorbo. — El rubio está ahí, ha venido. — Hizo un movimiento de cabeza, indicando la dirección en la que se encontraba Williams. —

Taylor bebió mientras miraba en su dirección. El chico estaba junto a su amigo peli menta hablando mientras bebía probablemente cerveza de una lata. Taehyung vestía con unos zapatos vans, un pantalón tejano de mezclilla azul, el cual iba acompañado de un cinturón negro, una camiseta metida por dentro del pantalón pegado al cuerpo negro, con el cuello en forma redonda y una especie de torera de algodón negra con un montón de botones blancos. En el cuello llevaba un colgante que brillaba, probablemente de oro blanco.

No era lo que solía llevar y estaba seguro de que la ropa no la había escogido por sí mismo. Podía confirmarlo gracias a su estancia en el cuarto de baño mientras escuchaba al delegado y su grupo de amigos hablando de distintos temas, aunque algunos no pudo escucharlos, ya que hablaban más bajo y las palabras no eran identificables.

A pesar de que la ropa le daba un toque femenino muy sutil que lo hacía ver bien, igual aunque vistiera más femeninamente o masculinamente, se le veía terriblemente bien.

El conjunto probablemente lo había ayudado a escoger el delegado o el de pelo platino.

— Sabía que vendría. —

— ¿Ah sí? ¿Ahora os habláis? —

— No, solo ha habido un pequeño percance y gracias a eso lo sé. —

El menor no preguntó nada y se limitó a apoyarse contra la barra que no estaba en funcionamiento.

— El capitán de básquet se ve bien... — Soltó en el aire. —

— ¿Qué? —

— Le he pedido que tengamos sexo. No me ha dicho que fuese virgen, así que no hay problema. —

— ¿Y por qué decías que no querías nada con él? —

— En principio no lo estaba... Ahora tampoco mucho, pero como no encuentro a nadie más y hablamos de la opción que era McKagan, pues decidí proponérselo. —

— ¿Y Namjoon? — Cambió el tema. —

— Con Jin. — Lo señaló. —

Los dos chicos hablaban sentados en un sofá mientras tenían una copa entre sus manos y estaban muy cerca, desde fuera se veía la tensión.

Se fue a otra sala y jugó junto a Jimin con sus amigos de futbol y de Hudson de danza a juegos que trataban de beber y beber.

Una vez se cansaron del estúpido juego que los haría emborracharse, yendo nuevamente a esa barra que no funcionaba.

Jungkook, inconscientemente, buscó al rubio con el que había estado teniendo sexo durante las últimas semanas. Este estaba rodeado de muchos amigos suyos, quienes lo animaban a tomar alcohol de una botella.

— No va a aguantar. — Dijo en voz alta, llevándose una mirada de su amigo peli naranja. —

Williams agarró la botella de Whisky y se bebió media de golpe mientras los otros lo animaban a gritos.

— Va a pagar factura. — Rio Hudson. —

Y tanto que lo hizo, media hora después estaba con el alcohol hasta arriba, se notaba por la actitud que llevaba y lo mal que caminaba. Jungkook solo lo observaba, con algo de curiosidad y risa.

Algunas personas se le acercaron a lo largo de la noche, mientras él bebía alcohol poco a poco para no llegar a emborracharse y poder llegar en coche a casa más tarde.

Vio al de pelo platino reír junto a Taehyung, con la cabeza pegada al del rubio, ambos estaban muy bebidos. Yoongi, junto al chico que se estaba emborrachando probablemente por primera vez, bailaban. Mucha gente también bailaba, así que la multitud estaba aglomerada en medio del gran salón de la fraternidad.

Williams agarraba por la cadera a Yoongi, quien estaba pegado a él mientras se movía, totalmente rojo por el efecto del alcohol.

— ¿Tú crees que esos dos han follado? — Preguntó el peli naranja relamiéndose los labios. —

— Quizás... —

Vio como el menor de ambos amigos con un movimiento seco, giró al peli menta para seguidamente besarlo. Un ruido de sorpresa se escuchó de Hudson y una sonrisa inconsciente suya apareció en sus labios.

Definitivamente es demasiado excitante.

Se estaban comiendo la boca literalmente en medio de la fiesta, mientras el mayor de ambos tenía los brazos al rededor de Taehyung y este lo acercaba por la espalda. Seguramente no les importaba que hubiera tanta gente por la cantidad de bebida alcohólica ingerida. Aunque tampoco nadie se daría cuenta por qué muchas de las personas del alrededor tenían drogas ilícitas corriendo por su sangre y no recordarían nada al día siguiente. Ya que el hecho de que el capitán de básquet y el jugador de voleibol se estuvieran besando, era algo indiferente para la gente presente.

— Ve apartando a tu rubio, que me voy a llevar a ese chico... —

Jimin no era la clase de persona que iba proponiendo tener relaciones sexuales con algún chico. Él iba en búsqueda del amor de su vida y si le pedía a alguien algo así era porque estaba totalmente desesperado o porque pensaba que podría ser una opción del amor de su vida. No tenía idea de qué fue lo que le llevó a Yoongi McKagan, pero definitivamente no era por pura desesperación.

Vio, como su amigo, se introdució en la pista de baile improvisada y se movió entre la gente hasta llegar al peli menta, quien ahora estaba separado de Taehyung, mientras bailan y reían, mirándose a una distancia considerada.

Logró ver a Hudson agarrando a Yoongi para girarlo hacia él y le dijo algo al oído, mientras Yoongi se agarraba a los hombros de su amigo y asentía, para más tarde desaparecer entre la multitud.

Williams se quedó solo, así que salió de esa aglomeración de gente, dirigiéndose como podía hacia la barra en la que estaba Taylor, aunque probablemente no era consciente de que él estaba ahí.

Se apoyó contra la barra, y suspiró.

— Ey, hola. — Captó su atención. —

El rostro de Taehyung era un desastre, su piel acanelada se había convertido en algo rojiza en la parte de sus mejillas, las pupilas de los ojos castaños mezclados en verde estaban dilatadas y parecía que el iris ni siquiera estaba. El pelo rubio estaba más despeinado de lo habitual y algo mojado por sudor que caía de su frente, y por último, sus labios estaban con un tono rosado oscuro y brillosos, probablemente empapados en saliva suya y del peli menta por el reciente beso que se había dado con este.

El alcohol estaba pasando factura y no quería imaginarse como lo haría después de aquella noche.

— Hola. — Dijo el chico. —

Notó la mirada de Williams en todo su cuerpo, menos en su cara.

— Qué descarado estás hecho. — Sonrió. —

Lo miró, ahora sí, a la cara y se sonrojó aún más, apartando su mirada.

El silencio que se creó fue demasiado incómodo y, ya que Taehyung parecía que no tenía ganas de hablar, se movió a punto de irse.

— Jungkook. — Lo llamó. —

— ¿Sí? — Se giró sobre sí mismo. —

— Te ves muy bien... —

— Tú también te ves muy bien. —

El menor sonrió y relamió sus labios, con una sonrisa coqueta en los labios. Se acercó, sin miedo alguno, y agarró el cuello de su camisa, arrastrándolo hacia algún lugar que desconocía.

— Ey... — Dijo algo alarmado. —

Subieron las escaleras hasta llegar al baño y Taehyung cerró la puerta, seguidamente, lo estampó contra la pared y empezó a besarlo.

Finalmente, ambos acabaron manteniendo relaciones en el pequeño cubículo, Williams alzado por el pelinegro en contra la pared, mientras este lo follaba.

════ ∘◦❁◦∘ ════

Al día siguiente levantó algo confuso, estaba en su cama. Su cabeza ejercía una presión dolorosa y sentía que todo daba vueltas.

Dios mío, qué sucedió ayer.

Intentó levantarse y sintió el dolor que habitualmente sentía después de mantener relaciones, pero aún más doloroso.

Asustado, miró las sabanas de su cama, tratando de buscar algún resto que indicase que se había tenido sexo allí.

Pero las sábanas eran distintas a las que dejó puestas antes de irse a la fiesta. Trató de hacer memoria, confuso por estar en su cama, vestido con ropa de dormir y con nuevas sábanas puestas. Quizás había sido uno de sus amigos el que lo encontró muy borracho y decidió llevarlo a casa, por casualidad había vomitado en sus sábanas y por eso las cambió.

Aquello tenía sentido, pero su memoria no decía lo mismo.

Vio en la mesita de noche unas pastillas junto a un vaso de agua.

¿Quién ha sido?

En ese momento, recordó gran parte de lo sucedido.

...

— Jungkook, fóllame sin condón, por favor. — Rogó. —

Era probablemente la sexta ronda y la caja de preservativos se había quedado sin ninguno dentro.

— Amor, no puedo hacer eso, tú me dijiste que no. —

— Me da igual lo que dije, solo métela. —

Taylor suspiró, después de insistir tanto, hizo lo que le pedía.

— Luego no me reproches esto... —

— Te lo prometo... bebé. — Ronroneó y seguidamente gimió al sentir al pelinegro dentro suyo de golpe. —

La sensación era distinta, pero era terriblemente increíble.

— Bebé... — Repitió el pelinegro ante ese apodo que le había puesto. — Me gusta. — Gimió mientras lo embestía. —

...

Se sonrojó demasiado al recordarse a sí mismo pidiéndole a Jeon después de varias rondas sin condón y en las que el pelinegro se había corrido en la espalda del rubio, que se corriera dentro suyo con ese apodo que le había puesto al contrario, cosa que el chico hizo y de inmediato recordó la sensación caliente en su interior.

Había sido excitante y demasiado caliente.

Soy idiota.

Respiró y tomó la pastilla que estaba encima de la mesita de noche. Todavía no tenía explicación a cómo estaba acostado allí, totalmente limpio, cambiado y con las sábanas cambiadas.

...

El agua caía sobre él, estaba sentado en la bañera del baño común que había en su casa. Jungkook estaba en frente de él mientras mojaba su cuerpo, moviendo la alcachofa de la ducha al rededor de su anatomía.

— No hace falta que hagas esto... — Murmuró algo mareado. —

— Si te emborrachas así la segunda vez que bebes, pues probablemente morías si te dejaba solo. —

El pelinegro agarró la esponja y le puso algo de jabón, después la mojó un poco y estaba a punto de ponerlo sobre el hombro del chico, pero este habló.

— Puedo hacerlo solo... —

— Vale, iré a por tu ropa y cambiaré las sábanas. —

— Todo eso está en el armario. — Le informó mientras el chico salía. —

Jungkook, después de un rato volvió, Taehyung estaba sentado, mientras pasaba la alcachofa por su cuerpo para aclarar el jabón.

— Aquí está el pijama... — Comentó el pelinegro mientras dejaba lo nombrado encima del váter que estaba con la tapa bajada. —

Agarró una toalla, y le ayudó a levantarse sin caerse, lo enrolló en esta y lo secó. Más tarde lo cambió y se aseguró de que estuviera en la cama.

— Gracias... — Dijo mientras se arropaba. —

Taylor no dijo nada y se levantó para irse.

— Quédate. — Pronunció. —

Jungkook lo miró y asintió.

— Me quedaré hasta que te duermas. — Se sentó en el bordillo de la cama. —

Williams sentía sus ojos pesados, mientras se quedaba dormido, notó la mano del pelinegro acariciarle la cabellera, probablemente pensaba que estaba dormido, pero no mucho después, lo hizo.

...

Abrió el chat de Jungkook, pero no había nada en este. Solo los mensajes de la última vez en la que hablaron, acordando que el domingo, es decir, aquel día, quedarían para repasar por última vez las presentaciones de literatura, ya que al día siguiente presentarían.

Se arropó, muerto del frío y escribió.

"Gracias por lo de anoche"

Dejó el teléfono de lado, pero no mucho después le entró una llamada.

Era Yoongi. Contestó y activó el altavoz.

— ¿Sí? —

— Tae... Anoche lo hice con Jimin, acabo de llegar a casa. —

— ¿Has dormido con él? —

— Sí. —

— Explícame, ¿ha ido bien? —

— Sí, todo perfecto, gracias por ayudarme con eso, si no, hubiera muerto con eso. —

— ¿Te ha gustado? —

— Repetiría sí... Aunque no solo he sido el pasivo. —

— ¿En serio? —

Su amigo le explicó lo sucedido, no con detalle, pero sí como fue la experiencia, y él lo escuchó con atención. Le preguntó respecto a si llegó a casa bien, ya que, le recordó estaba con mucho alcohol en el cuerpo, que Jin estaba con Namjoon y que no sabían nada de Hoseok.

— Yo creo que quizás se fue con alguien por hacer autostop y ahora está secuestrado. —

— ¿Los llamamos? — Propuso McKagan. —

Decidieron meter a sus otros dos amigos en la llamada y Jin contestó casi de inmediato.

— Hola chicos... —

— ¿Tú dónde te habías metido? —

— Estaba con Namjoon y ya sabéis, sucedió eso. —

— Yo también Jin... Yo también. —

— ¿Con quién? —

Antes de que Yoongi pudiera contestar, Hoseok entró en la llamada.

— Buenos días, ¿qué tal? —

— ¡¿Dónde te habías ido?! — Lo regañaron los tres. —

— Me fui a mi casa luego de no encontraros a ninguno de los tres. Contadme, ¿vosotros dónde os encontrabais? —

— Jin follando con Namjoon y Yoongi con Jimin. —

— ¿Qué? — Preguntaron el peli platino y el castaño. —

— Sí, amigos, he triunfado, estoy hecho de oro. — Aclaró Yoongi mientras Williams reía. —

Hablaron un rato entre ellos y el chico que le había ayudado a llegar a casa le escribió.

— ¿Quedamos hoy? — Preguntó Jin a través del teléfono. —

— No puedo, he quedado para acabar de repasar el trabajo de literatura, mañana lo presento con Jungkook. —

— ¿Sigues con ese trabajo? Qué tortura trabajar con ese ser incomprendido. —

Ese ser me ayudó a llegar a casa y me cuidó...

— Sí, aunque solo quedaré un rato con él. —

Los cuatro se despidieron y colgaron, quedando el rubio en silencio en su habitación, contestó al mensaje, el cual decía "de lo borracho que ibas, pensé que no te acordarías de que yo te llevé a casa".

Suspiró y no le contestó.

Iba a estar todo el día tirado en cama.

Despertó por una alarma que le había sonado, eran las tres de la tarde y debía estar en una hora y media en casa de Taylor.

Se alistó como pudo después de tomar una pastilla, comió algo ligero porque si no lo vomitaría y agarró la tarjeta de transporte para irse al autobús.

Estuvo sentado junto a su mp3, durante 40 minutos para llegar a casa del chico.

Llamó a la puerta, esperó a que alguien le abriese, pero esa persona no fue el mismo Jungkook Taylor, era su hermana, Olivia Taylor.

— Hola... Venía para acabar un trabajo con Jungkook. — Comentó. —

— Mi hermano no me había dicho nada... Pasa, pasa, él estaba entrenando, pero puedes pasar, es la puerta del fondo, probablemente haya acabado y esté recogiendo. —

— Gracias... —

Pasó y caminó en dirección a donde le había dicho la hermana del pelinegro, y abrió la puerta, ya que al llamar no le había contestado nadie.

Jungkook estaba ahí dentro, bebía agua sentado en una banca, con el sudor al rededor de su cuerpo, llevaba auriculares negros, de los cuales se escuchaba música de lo fuerte que estaba el volumen.

Taehyung no pudo evitar fijarse en la ausencia de la camiseta, su respiración era agitada, haciendo que su pecho subiera y bajara con rapidez, el sudor hacía que la luz se reflejara sobre su pectoral y abdominales. Notó como sus mejillas se sonrojaron.

Rápidamente, el mayor se dio cuenta de la presencia del rubio y se giró, apartó uno de los auriculares y lo miró.

— ¿Qué haces aquí? — Preguntó algo molesto. —

— Venía para lo del trabajo. —

— ¿Qué estás di...? — Se acordó en ese instante. — Cierto... Lo había olvidado. —

Se atrevió a acercarse y ponerse de pie entre las piernas de Jungkook, las cuales estaban abiertas.

— No importa. — Enterró sus dedos en la cabellera negra y mojada por sudor. —

El chico no lo miró, tenía la mirada apuntando hacia abajo. Acarició y enredó sus dedos en el pelo del contrario, consiguiendo un pequeño sonido semblante a un ronroneo por la parte del mayor.

— Tampoco habríamos hecho mucho. — Sonrió y pasó su pierna izquierda al lado de la pierna derecha de Jungkook, para que la pierna de este quedara entre las suyas. —

— No creo... —

El pelinegro agarró la cintura de Taehyung por debajo de la camiseta, Williams notó de inmediato el tacto rasposo de la venda para gimnasio negra, provocándole algo de incomodidad. Lo sentó encima de sus piernas y lo miró directamente a los ojos.

— Tus ojos siguen igual de dilatados que ayer... — Susurró cerca de sus labios. — No creo que esta vez sea por el alcohol. — Le acarició el rostro. —

— Mmm... Yo tampoco lo creo. — Lo besó. — Gracias por lo de ayer. —

— No hace falta que sigas agradeciendo. — Se quejó con un pequeño sonido. —

— Claro que hace falta... Y a la próxima, no me hagas caso si te digo que te corras dentro mío, una cosa es que no tuviéramos condones. —

— Tú sabes que te gustó. —

— Claro que me gustó... Bebé. — El pelinegro jadeó al escuchar ese apodo. — Opino que deberíamos repetirlo, sin condón... —

— Me gusta que me llames así, amor... Y no tengo problema con repetirlo. —

— A mí también me gusta que me llames amor. — Lo siguió besando. —

— ¿Quién te ha abierto? — Preguntó al separarse. —

— Tu hermana. —

No dijo nada más y todo se calentó rápidamente, volviendo a la misma ferocidad de siempre, la ropa desapareció y acabaron manteniendo relaciones sobre ese banco de gimnasio, Jungkook levantando sus caderas, penetrando a Taehyung, mientras este clavaba sus uñas en la espalda del que lo penetraba mientras movía las caderas para más roce.

Aquel orgasmo fue distinto al resto, pero totalmente placentero, más que otras veces, para ambos.

Una vez terminó aquella única ronda, ambos se fueron a la ducha y allí se repitió el acto. Hasta que acabaron en la habitación de Jungkook, para que ahora sí, acabaran repasando el trabajo por última vez antes de la presentación.

Una vez lo hicieron, hablaron un rato, sobre distintas cosas, algo un poco más íntimo.

— La semana que viene me iré de concentración. — Compartió Taehyung. — De domingo a domingo. —

— ¿Eso quiere decir que no tendré sexo en una semana? —

— Creo que sí. —

— Entonces deberé disfrutarte esta semana... —

— Mmm... Yo creo que sí. —

— Podría ayudarte con la maleta. — Sugirió el pelinegro. —

— Claro, eso estaría bien. —

— Pues el sábado que viene nos podemos ver para eso. —

Era sorprendente que ambos adolescentes quedaran para algo que no fuera sexo y que Taylor se ofreciera para ayudarle, para hacer una actividad fuera de lo que tenían acordado y algo que haría cualquier amigo. No quería considerar a Jungkook su amigo, porque dudaba que lo fueran, pero quizás este quería que lo fueran. Todo era muy extraño desde la noche anterior en la fiesta.

Perdón por el retraso, espero poder compensaros por el capítulo atrasado. Muchas cosas han cambiado según lo planeado para este Fanfic, pero debéis estar agradecidos, que sé que os gustan estas cosas. Nos vemos MUY pronto y no olvidéis darme estrellitas, que son señales de apoyo y demuestra que queréis más.