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-03-

— ¿No podemos empezar a comer en un sitio distinto? — Se quejó Jimin. —

— No, venimos aquí desde hace un año, es como una tradición. — Comentó Namjoon. —-

— No, es lo más cercano al instituto. — Bebió Jungkook de su vaso. —

La puerta del restaurante se abrió, un grupo muy grande entraba, iban con la equipación del instituto, era la de voleibol.

Los tres chicos vieron como los 12 adolescentes del club se sentaban en una mesa cercana a la suya, hablaban y reían. El ruido era mucho mayor a cuando no estaban.

— Disculpa. — Se acercó un chico rubio. — ¿Está ocupada esta silla? — Le preguntó a Jimin.—

No reconocía el acento del chico, pero se notaba que no era de allí. Venía con el grupo del club de voleibol, ya que llevaba el chándal.

El rostro del chico era fino y expresivo, la piel era tersa, de un color acanelado. Las cejas eran rectas pero perfiladas, y algo gruesas. Sus ojos tenían un color verdes pero con toques marrones, con una mirada intensa y expresiva al igual que su rostro. Su nariz era bonita, los labios algo rojizos y no muy grandes. Y el cabello rubio y sedoso.

— No, puedes llevártela si quieres. — Respondió su amigo indiferente. —

— Gracias. — Agarró la silla y se la llevó. —

Vio como un integrante del equipo que conocía de vista, le dijo algo al rubio y este se sonrojó rascándose la nuca y agradeciendo. Después de eso los dos hablaron.

— ¿Jungkook? ¿En qué piensas? — Preguntó Nam.

— ¿Quién es ese chico? —

— ¿Cuál? ¿El chico coreano? ¿Park Hyun-Sik? — Dijo Jimin. —

— No, no, a ese lo conozco desde hace bastante, el otro, el rubio. —

— ¿El que ha pedido la silla? — Siguió Namjoon. —

— Sí. —

— No lo sé, no lo había visto nunca. —

— Averiguad quién es. — El peli naranja rio. —

— Como si fuésemos tus esclavos... No haremos lo que nos pidas. —

— Pagaré lo vuestro el resto del mes cuando vengamos aquí. —

— Trato hecho. — Jimin extendió el brazo. —

— Yo no he dicho nada... Pero me parece bien. —

════ ∘◦❁◦∘ ════

"Les informamos que el inicio de temporada de voleibol se llevará a cabo el jueves de la semana del homecoming, será el último partido antes del baile del viernes por la noche" Se escuchó por los altavoces.

— Tengo ganas de verte jugar Taehyunie. — Dijo Hoseok emocionado. —

— Yo también, por fin un deporte interesante. — Sonrió Jin. —

— ¿Podéis dejar de meteros con el deporte que practico? — Yoongi suspiró. —

— ¿Quién te ha dicho que hablaba de tu deporte? —

— Tú. —

— Yo no he dicho nada. —

— Has insinuado que por fin verás un deporte entretenido y al único al que vas actualmente es el básquet por mí. —

Los chicos siguieron discutiendo y Williams vio a su ahora nuevo amigo en la puerta de la clase, saludándolo con la mano. El rubio se levantó y se acercó.

— Hola Tae. — Saludó Hyunsik. —

El chico lo conoció en aquella comida de bienvenida a los nuevos del equipo y se llevaron muy bien. Hyunsik era un chico coreano que se mudó a Estados Unidos en su último año de secundaria, antes de pasar a High School.

No podía negar que era muy atractivo y a demás era gay como él, había una tensión rara entre los dos, que solo anhelaba cortarla de una maldita vez.

— Venía a buscarte porque tenemos reunión de equipo titular. —

— ¿De verdad? —

— Sí, le digo al profesor y podemos ir. —

— Oh claro. —

El mayor se acercó a la mesa del profesor y le comentó aquello, vio como el profesor asentía a su amigo y volvió.

— Vamos. —

Salieron del aula y caminaron por los pasillos.

— No estamos yendo al pabellón... —

— No, no hay ninguna reunión, solo quería pasar un rato contigo, vayamos fuera, al campo de futbol americano. —

════ ∘◦❁◦∘ ════

Jungkook esperó impaciente durante una semana, sus amigos no se esforzaron en absoluto por conseguir información del chico, cosa que le estresaba, el homecoming se acercaba, estaban a menos de una semana de que comenzara y lo único que le interesaba a Jimin era eso. Aquella era la razón por la cual no trató de buscar al chico que Taylor vio en el restaurante.

El pelinegro estaba comiendo lo que habían servido en la cafetería aquel día, esperando a Jimin y Namjoon que habían salido más tarde de su clase.

— Jungkook, Jungkook. — Jimin se sentaba rápidamente delante de él. —

El mayor no estaba muy interesado en lo que Hudson iba a contarle, probablemente sería algo sobre el baile del viernes del homecoming y su traje.

— Hemos encontrado al chico, sabemos cosas. — Comentó Namjoon captando su atención. —

— Contadme. — Apoyó sus codos en la mesa y la cabeza entre sus manos, atento. —

— Lo tenemos en la mayoría de clases, solo que duermo tanto que no me he dado cuenta hasta hace un par de días... Estábamos en clase de física y hacíamos unos experimentos, entonces él salió a hacer uno con el delegado... Y nos dimos cuenta de que era él, así que averiguamos cosas porque compartimos varias clases con él. Pero como tú no vienes a clase o cuando vienes no coincidimos con el chico, pues no te lo has encontrado. — Explicó Jimin. —

— ¿Y qué más? —

— Se llama Taehyung Williams, tiene 16, es nuevo, de segundo año, es jugador titular del equipo de vóley, es amigo del delegado y su grupo. Y suele encontrarse con el coreano, Hyunsik del equipo de vóley, quizás tienen algo. —

— Jimin, no sabemos si es gay. — Añadió Namjoon. —

— Si se junta con el grupo del delegado sí, todos ellos son gays, dudo que sea la excepción. — Contestó el peli naranja. —

— Podría ser el hetero del grupo, siempre hay uno. — Supuso Brownstone. —

— ¿Quién es el hetero de aquí? — Hudson preguntó sarcásticamente. —

— Me da igual si es hetero o no, en caso de que lo sea yo lo haré gay. — Taylor cortó la discusión. —

— Qué ego tan alto... — Jimin alzó las cejas. —

— No sería la primera vez que haga gay a un hombre. — Comentó el peli negro indiferente. — Iremos al partido de voleibol de inicio de temporada... —

— Nunca vas a partidos de otros deportes, la gente se dará cuenta si solo vas al de voleibol. — Dijo Namjoon. —

— Iré a todos los de la semana de homecoming si hace falta... Y si hablan, les partiré la cara. —

— Jungkook, los tres sabemos que no le partes la cara a nadie... Solo te haces el duro y todos se creen que eres duro. —

— Cállate, mejor si piensan que soy duro, así nadie habla de mí o intenta ir en mi contra. —

— Pero si eres un trozo de pan. — Hudson jugó con las mejillas de Taylor. —

— Para. — Apartó las manos del menor de su rostro. — Eres molesto. —

— Tendremos comida gratis un mes. — Canturreó Jimin feliz mirando a Namjoon. —

— Lo había olvidado... — Suspiró el mayor. —

Los días pasaron, la semana del homecoming había empezado, los carteles indicaban que aquella semana era el esperado evento. A Jungkook no le importaba en absoluto el baile o el resto de partidos, le importaba uno en concreto, el de voleibol. Aquella semana asistió a todos los partidos, aunque no le interesasen, para que no opinasen algo extraño.

Estuvo en los partidos más aburridos que vio en toda su miserable vida, pero no le quedó otra que aguantarlos mientras se quedaba medio dormido.

Por fin llegó aquel esperado jueves, no estaba ansioso, de hecho estaba tranquilo, sólo sería una conquista como cualquier otra, tendría sexo con Taehyung Williams y después no sabría nada de él nunca más.

— Sentémonos por aquí. — Indicó el peli naranja. —

Los tres amigos se sentaron en algún hueco libre, los del equipo visitante estaban calentando rematando pelotas, mientras que los de su instituto estaban en una pequeña reunión con el capitán del equipo Seojoon. Aunque no mucho después los chicos del equipo local empezaron a calentar, aunque Jungkook no supo identificar al rubio porque habían varios.

— Mirad... Están ahí el delegado y sus amigos, seguro vienen a ver al chico que buscamos. — Comentó Jimin. —

— Deberíamos acercarnos a preguntarles si saben qué número es el de Williams. — Añadió Brownstone. —

— Cómo queráis. — Musitó el mayor. —

Sus dos amigos se levantaron y Jungkook pensó que no lo decían en serio, pero le tocó ir detrás de ellos.

— Ey, hola, soy Jimin Hudson, no sé si me conoceréis. — Saludó cordialmente su amigo al delegado, al capitán del club de básquet y a un chico que no conocía. —

— Oh sí... Sabemos quién eres y también conocemos a tus amigos. — Rio levemente Jin. —

— ¿De verdad? ¡Qué bien! La verdad... Nos preguntábamos algo y llevamos un buen rato preguntando a la gente, pero no saben respondernos, quizás vosotros lo sabíais. —

— Decidme, quizás lo sabemos. —

— Bueno... Es la primera vez que venimos a un partido de voleibol en el High School, conocemos a algunos de los jugadores, pero hay otros que no sabemos quiénes son, ya que son nuevos, ¿por casualidad no sabréis sus nombres o qué número son los nuevos? — Preguntó Hudson. —

— Están repartiendo folletos con los jugadores que hay en ambos equipos... Es raro que no os hayan dado uno... Pero tomad. — El delegado le extendió un folleto a su amigo. — Nosotros tenemos 3, con 2 tenemos suficiente. —

— ¿De verdad? Gracias Jin, creo que lo rechacé al pensar que era promoción para el homecoming. —

— Están algo insistentes con eso, no te preocupes. — Comentó Jin. —

— Muchas gracias, chicos. Nosotros mejor nos sentaremos o si no, no tendremos hueco. — Sonrió el menor y marcharon. —

— Si no hubieses rechazado el folleto no habríamos tenido este problema Jungkook... — Suspiró Jimin estresado. — Vamos a mirar qué número es tu chico ideal. —

— Cállate Jimin, solo quiero follar y ya. —

— Los mismos de siempre... El coreano, el capitán... ¡Aquí! Nuevos fichajes... Wooshik Smith, es número 4 y líbero. Michael Jones número 11 y bloqueador... ¡Este es! Taehyung Williams, número 9, colocador. — Leyó el peli naranja. —

— Dame eso. — El peli negro quitó el folleto de las manos de su amigo. —

En el pequeño folleto hablaba de los titulares del equipo, suplentes y nuevos fichajes, junto a una foto del equipo, allí estaba el rubio, aunque la foto se veía demasiado borrosa como para ver bien su rostro.

La música empezó a sonar, la orquesta del instituto estaba tocando. Su amigo Brownstone aquel día no tocaba debido a que pidió un permiso para poder asistir al partido como espectador.

Los chicos estaban sentados justo mirando hacia los jugadores, en la parte lateral del pabellón, dejando ver desde atrás a su equipo y los números, lo más importante.

Había demasiada multitud, las gradas estaban llenas de gente, una parte era del equipo contrario y animaban a su equipo, pero la de su instituto no se quedó atrás. Todos iban con ropa del instituto y coreaban el nombre del equipo.

El timbre que indicaba el inicio del partido sonó, los jugadores se colocaban en sus posiciones y allí detectó el número nueve.

Jamás había visto un partido de voleibol porque era un deporte que le importaba muy poco.

— Empieza sacando uno de los nuevos. — Escuchó decir a una chica. — Esperemos que sea bueno. —

Vio como el número nueve con Williams grabado en la camiseta se ponía en la parte trasera y en medio, iba a sacar.

— No quiero imaginarme lo nervioso que está por hacer el primer saque de la temporada. — Susurró su amigo. —

— Nam, ya que tú estuviste de mánager del equipo de voleibol, explícame cómo va esto mientras vemos el partido. —

— Vale... Supongo te habrás dado cuenta de que Williams es el primero en sacar. — Taylor asintió. —

— El primer saque dice muchas cosas, por algo lo habrán puesto en esa posición. Aunque es raro que pongan a un nuevo fichaje a sacar la primera bola, suelen irse a lo seguro. —

— Hazle una ola a Tae, verás que todos los del instituto te siguen. — Escuchó decir al capitán del equipo de básquet a su amigo castaño. —

— Me estás vacilando. — Dijo Bailey. —

— Te lo juro, solo hazlo. —

— ¿Es verdad? — Susurró para preguntarle a Namjoon y este asintió. —

— Suelen seguir el rollo de las olas para animar a los jugadores que sacan o para el equipo completo después de marcar un punto. Solo lo hacen con los de voleibol, se hizo tradición en el instituto hace años porque un jugador pidió que hagan olas. —

— ¡Ese Williams como mola, se merece una ola! — Escuchó a Hoseok, la voz resonó por el pabellón. —

Este levantó las manos para iniciar la ola y el resto de gente le siguió, Jimin y Namjoon siguieron la ola riendo y como era de esperar, Jungkook no la siguió. La grada estaba acabando de hacer la ola, pero justo el pitido de que Taehyung debía sacar hizo que todos callaran.

El rubio votaba la pelota fuertemente contra el suelo, suponía que para prepararse.

— Tiene cinco segundos para sa... —Fue interrumpido por un chirrido de los zapatos del chico al que le tocaba sacar. —

Vio a este correr mientras lanzaba la pelota al aire y luego saltar, la golpeó fuertemente, sin dejar reaccionar a Jungkook, porque cayó directa en el campo contrario en menos de un segundo. Sonó un silbato, el árbitro de medio campo subido a una pequeña escalera junto a la red señalaba a su equipo, indicando que era punto para el instituto.

— No estaba tan nervioso... — Su amigo se sorprendió. —

— Voy a empezar una ola. — Dijo el peli naranja. —

— Ni se te ocurra. — Suplicó Taylor. —

— ¡Ese Williams como mola, se merece una ola! — Vio a su amigo levantar las manos emocionado y todos le siguieron la ola, haciendo reír a su amigo menor. —

— Esto sí es divertido. — Rio Hudson. — Me haré amigo de Taehyung solo para venir a los partidos y hacerle olas con el delegado y sus amigos gays. —

— Tú también eres gay. — Brownstone aclaró al menor. —

— Por eso mismo, 4 gays haciendo olas a su amigo. ¿Sabes que dicen que el capitán de básquet tiene un rollete con Taehyung? Lo escuché el otro día, dicen que el primer día de entrenamiento de voleibol antes de las pruebas Williams llegó con un chándal de McKagan junto a él.—

— ¿Y eso...? — Fue interrumpido por el pitido que indicaba que Williams volvía a sacar. —

Esta vez el chico no se esperó a último momento para sacar, nada más sonar el pitido, el chico lanzó la pelota mientras corría y saltó para golpearla nuevamente. La potencia que había en ese saque no era normal, según Jungkook, ya que solo lo había visto sacar a él. Pero el otro equipo la recibió con dificultad, pero mantuvo la pelota en pie.

— ¿Qué decías Kook? — Preguntó Jimin. —

— Que si eso era cierto, aunque si es así, confirmamos que es gay. — Siguió mirando el partido. —

— Lo dudo, aunque también dicen que con el coreano tiene algo, no sé, quizás le gusta coquetear con hombres para tener rollos y ya. —

— Mejor, solo busco algo de una noche. —

— Por eso mismo lo digo. —

El partido continuaba, todo iba tan rápido que no se dio cuenta de qué había sucedido, pero el equipo de su instituto había marcado un punto, obligando a Williams sacar nuevamente.

— Nam ¿qué es un colocador? — Preguntó tratando de sonar indiferente, pero tenía curiosidad por saberlo, no sabía nada del deporte. —

— Es como el centro del equipo, la torre para llamarlo de alguna manera. Es el que hace y decide las jugadas del equipo en el instante en el que recibe la pelota, sin el colocador, todo estaría perdido. Elige la jugada y mejor opción de ataque, pasándola a alguno de los rematadores o bloqueadores. Tiene que tener una visión muy amplia del campo, también una fuerza mental muy fuerte, es como un segundo capitán, es el pilar. Si él está nervioso o no está centrado, nada funciona, por eso mismo tiene que tener una capacidad y fuerza mental amplia, demasiada a mi parecer. Es la primera vez que le dan el titular a un novato, pero analizando la primera jugada, lo hace bien, mejor que el anterior. —

El partido continuó con éxito, el chico rubio era muy bueno según Namjoon, así que le creyó.

Durante el partido, Jimin y Namjoon animaron a otras personas para hacer olas, e incluso ellos dos se les unieron a los amigos de Taehyung para hacer olas, Jungkook solo los observó de lejos en su lugar, aunque estaba más centrado en el rubio.

El equipo de su instituto ganó.

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El agua fría caía por la piel acanelada del rubio, el sonido del agua caer era muy sonoro, debido a que en las duchas del lado había más adolescentes duchándose.

El chico estaba feliz, su equipo había ganado y ahora él, el equipo y amigos de los integrantes irían a celebrarlo comiendo.

— Bien jugado Taehyung. — Le dijo su capitán mientras caminaban fuera del vestuario. —

— Gracias. — Se sonrojó. —

— ¡Ese Tae como mola, se merece una ola! — Dijeron sus amigos a lo lejos, llamándolo. —

— ¡Tae! — Lo abrazaron sus amigos. —

— Has estado increíble. —

— Gracias, chicos. —

— ¡¿Sabes qué?! ¡El inalcanzable de Yoongi nos ha hablado y a demás, ha venido con el pervertido para hacer olas! —

— ¿Y habéis hablado? — Preguntó al peli menta. —

— No, porque cuando Hudson se ha acercado, se ha puesto al otro extremo. — Bailey le dio un golpe en la espalda a McKagan. —

Los chicos estuvieron regañando al peli menta mientras iban a cenar junto al equipo de Kim, fue una cena divertida y llena de risas, también vieron las mejores jugadas del partido que habían sido grabadas.

Cuando llegó a casa habló un rato con su familia y después cayó dormido de inmediato.

Aquel viernes sería un día especial, iría a un típico baile Estadounidense y además con muchos amigos.

Estaba medio dormido en clase de historia, con un compañero al que no conocía al lado y no paraba de pensar en el partido de anoche.

El día ocurrió lentamente, sin ningún tipo de problema, aunque se hizo algo pesado.

Aquel día el entrenamiento se anuló por el baile de homecoming.

Para el baile se puso una camisa blanca y unos pantalones de vestir básicos, estando formal, pero no mucho.

Aquella noche lo pasó increíble con sus amigos, bailó con ellos, rio con ellos, se tomaron miles de fotos en el photocall aprovechando que había chicos realizando fotos con cámaras profesionales e hicieron toda clase de poses, haciendo reír a los fotógrafos. También probó el famoso ponche de cereza que tanto se veía en las películas, le gustó demasiado.

════ ∘◦❁◦∘ ════

— Organizad una fiesta o algo así. — Comentó Jungkook. —

— ¿Y por qué no le hablas en clase directamente? — Preguntó Hudson. —

— Quiero hablar a solas con él. —

— Pues se lo pides. —

— No es tan sencillo. —

— ¿Para cuándo la quieres? —

— Esta semana, el miércoles, invita a todos los de último año. —

— Quedan 3 días para eso, ¿dónde lo piensas hacer? —

— En mi casa. —

— ¿Estás seguro? —

— Sí. —

No, no estaba para nada seguro. Las fiestas siempre se realizaban en la casa de algún chaval rico y que tenía a alguien que les recogiese todo el desastre de la fiesta, sin embargo, Jungkook tendría que recoger eso él solo. Tenía dinero para pagar a alguien para que limpie el hogar después de la fiesta, pero no quería gastar demasiado dinero.

Que ejecutara esa fiesta no le aseguraba que Taehyung Williams asistiese, tampoco ninguno de sus amigos. Pero él lo iba a intentar, en caso de que todo saliera bien perfecto y si no iba, se divertiría un rato, aprovechando haber organizado una fiesta.

— Ya te pasaré el presupuesto de todo. —

— Claro, cualquier cosa me dices, solo procura que todos se enteren de la fiesta. —

Taylor había pagado a su amigo para montar la fiesta, lo ayudaría en todo, pero él jamás había organizado una fiesta y Jimin sí.

Al día siguiente, lunes, todos los de último año hablaban de la fiesta que había organizado Jungkook Taylor, queriendo asistir.

El peli negro y su amigo peli naranja fueron a comprar alcohol, el necesario para cientos de personas. Debido a que eran menores de edad, le pidieron a un chico de la fraternidad universitaria en la que residía Hudson que los acompañase.

Namjoon aquel día no pudo acompañarles porque tenía ensayo con la banda. Jungkook por suerte tenía entrenamiento más tarde.

— ¿Sabes si Williams vendrá? —

— No, no esperes que me acerque al grupo del delegado a preguntar o a dar anuncio de la fiesta. Te tocará esperar un par de días. —

No podía esperar tanto, solo quería estar con Taehyung una noche para tener sexo, pero se le estaba complicando demasiado y era algo que a Jungkook no solía pasarle.

════ ∘◦❁◦∘ ════

Por todo el instituto se hablaba de la fiesta que habría al día siguiente, sus amigos habían comentado de probar e ir. McKagan se negó, ya que habría mucho alcohol y drogas de por medio, pero finalmente Jin y Hoseok lo convencieron.

Taehyung no sabía muy bien cómo pedir permiso a su nueva familia, las únicas veces que lo había hecho era para comer con los de voleibol después de partidos, entrenamientos o para ir a partidos de Yoongi.

Sabía que sus padres eran permisivos en aquella realidad, pero no sabía hasta qué punto.

"No sé cómo pedir permiso" Tecleó en el chat grupal.

"Diles que vamos a cenar cerca del instituto junto a bastantes alumnos, si les mencionas algo de fiesta no te dejarán" Contestó Bailey.

Respiró hondo y tecleó "Lo haré, deseadme suerte"

Entró al salón con seguridad y se sentó al lado de su madre, esta veía el televisor, aunque acabaron estableciendo una conversación, hasta que llegó el momento de pedirle lo que tanto miedo tenía de pedir.

— Por cierto, mamá... Mañana varios alumnos del instituto han organizado una cena y, ya que Jin es el delegado, me ha invitado... Me preguntaba si podía ir. —

— Claro, no hay problema, solo no vuelvas muy tarde. — Sonrió dulcemente. —

— Gracias mamá. —

Al día siguiente estaba junto a sus amigos en el coche del peli menta yendo a la esperada fiesta.

— Es la primera vez que voy a una fiesta. — Comentó el rubio en el asiento trasero. —

— Son una verdadera mierda. — Dijo Yoongi. —

— Qué ganas de ir le estás dando al pobre chico. —

Sus amigos le recomendaron llevarse ropa de recambio porque si no llegaría apestando a casa, por mucho que beba o no el olor del alcohol, tabaco y marihuana se pegaba a la ropa con facilidad.

Taehyung estaba ansioso, jamás había ido a una fiesta, porque no era común entre los adolescentes en Corea. También porque le parecía absurdo ir a beber y llenarte hasta arriba de alucinógenos.

— ¿Has probado el alcohol? — Preguntó el chico que se sentaba a su lado, Hoseok. —

Williams negó con la cabeza.

— Hoy lo probarás, pero no te dejaremos pasarte, mañana hay clase y si no has bebido nunca, no tendrás aguante, también hay que decir que eres deportista y eso es malo. —

Llegaron al lugar, era una casa enorme, con piscina. Había adolescentes en el jardín bebiendo, cantando, charlando y jugando a juegos.

Los chicos entraron al lugar, aquello apestaba a alcohol y a algo que no podía identificar, pero deducía que era algún tipo de droga y eso era muy desagradable.

════ ∘◦❁◦∘ ════

Jungkook bebía cerveza de un vaso, paseaba por la zona atento por si veía a la única persona a la que esperaba ver esa noche.

Sus amigos estaban sirviendo cócteles en una especie de barra que montaron y él estuvo un rato al inicio de la fiesta, pero Hudson y Brownstone le permitieron irse para vigilar si estaba Williams.

Habló con varias personas que le decían que la fiesta estaba muy bien o preguntaban el porqué de organizar esta fiesta, pero él solo respondió que era por comodidad.

Su vista vio al rubio de inmediato cuando lo vio entrar con sus amigos, iba vestido con una camiseta corta y pegada al cuerpo junto a un pantalón tejano ancho del mismo color, y su calzado era unas Converse básicas del mismo color que todo lo anterior.

Se acercó a la barra y les hizo la señal a sus amigos de que estaba allí, estos lo miraron sorprendentes y pudo leer en los labios de ambos un "suerte".

No quiso acercarse de primeras, porque los amigos estaban con él, buscaría un momento en el que se encontrara solo, aunque era prácticamente imposible.

Algo en lo que se fijó durante aquel rato que tuvo que estar esperando para poder hablar con él, se dio cuenta de que al vestir con una camiseta más apretada daba menos que imaginar. De hecho, se fijó que el chico no era tan delgado como aparentaba al llevar ropa ancha, la camiseta apretada marcaba parte de su pectoral y brazos. Dejando ver que el chico estaba en forma.

Aquello era un detalle que no había tenido en cuenta de Williams, pero siempre había tenido en otros hombres. Solía mantener relaciones con chicos más pequeños, físicamente y muscularmente que él, no había una razón en específico, pero por lo general le gustaban los hombres con piel tersa, algo afeminados y bonitos a la vista.

En aquel momento Taehyung no se veía para nada afeminado, todo lo contrario, parecía más masculino que él mismo, pero no ponía en duda que fuese el que muerde la almohada en la cama.

Estaba seguro de que era así, que el rubio era el pasivo debido a la manera en la que se comportaba con otros hombres que le coqueteaban, entre ellos, uno de los jugadores del equipo de voleibol.

Se centró tanto en sus pensamientos que no se dio cuenta de que los amigos de Taehyung estaban en la barra junto al chico, invitándole de un vaso, este agarró la bebida y dio un sorbo. De inmediato mostró una mueca de asco.

Era raro que un chico adolescente de último año de High School no bebiera, pero era el caso de Williams, su apariencia decía algo muy confuso. A veces decía que era un chico totalmente bueno, una de las escenas que demostraban eso era la que estaba observando. Y había momentos en los que decía totalmente lo contrario, como cuando coqueteaba en clase con el chico coreano Hyunsik.

No mucho después el grupo de amigos del delegado se fueron al centro de la pista a bailar, Williams no estaba muy animado, parecía agitado, luego de decirles algo a sus amigos se dirigió hacia las escaleras que subían al piso de arriba.

Bingo.

Era el momento, Jungkook esperó a que el rubio subiera para ir detrás de él.

¡Hola! ¿Cómo estáis? Espero que bien porque nuestros protagonistas por fin se van a encontrar. El próximo capítulo trataré de escribirlo lo antes posible porque estoy ansiosa por escribir esto.

Nos vemos y no olvidéis votar ♥︎

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