Baekhyun tenía muchas cualidades.

Era inteligente, extrovertido, amable, divertido y observador.

Cuando un nuevo alumno llegó a la universidad en que estudiaba medicina, no dudó en acercarse a él al ver lo solitario que se veía, ignorando a los idiotas con los que había estado hablando.

Lo primero que le llamó la atención era su apariencia.

Siendo más específicos, la mirada en sus ojos.

Nublada, oscura y triste.

No tardaron mucho en hacerse amigos, ganaron confianza bastante rápido. Sin embargo, cuando el rubio preguntó por su triste mirada, el castaño únicamente respondió que había cometido un error y estaba arrepentido.

No logró sacarle más información y decidió olvidar el tema cuando comenzó a recuperarse.

No obstante, el sexto sentido de Baekhyun volvió a activarse cuando fue testigo de las lágrimas que se acumularon en los ojos de Taehyung al ver a Jungkook en la sala de conferencia, la mirada de aquellos años volviendo sólo en segundos.

Tenía muchas ideas:

1-. Taehyung conocía a alguien con el mismo nombre y no le traía buenos recuerdos.

2-. Jungkook se parecía a alguien que Taehyung conocía.

3-. Jungkook y Taehyung se conocieron en el pasado y estuvieron relacionados de alguna forma. Posiblemente el azabache relacionado con el regreso de la triste mirada de su amigo.

Fuera lo que fuera, Baekhyun iba a descubrirlo.

Primer paso del plan del rubio: analizar las situaciones en que se encontraran juntos o cerca.

Por eso, a propósito, distrajo a su jefe Park Bogum con una falsa alarma de robo y reorganizó los registros de su computadora, cambiando su habitación con la del Doctor Jeon. Y obviamente sacando provecho para su propia situación.

Fue medianamente accidental y medianamente no dejar solo a Taehyung con Jungkook en el recorrido. Estaba planeado, pero no de esa manera.

De todas formas, su cabeza se llenó de más dudas cuando encontró a su amigo castaño con los ojos rojos e hinchados en su oficina.

—¿Dónde estabas?— Preguntó luego de cerrar la puerta, tratando de ocultar su ceño fruncido. —Te perdiste al menos la mitad del recorrido—

El castaño carraspeó bajito. —Tenía suficiente con saber dónde estaba lo referente a cardiología— Respondió sin mirarlo, sus ojos divagando frente a la pantalla del computador.

Baekhyun se cruzó de brazos y se paró delante del escritorio. —¿Pasó algo con Jeon?— Las acciones de Taehyung se detuvieron por unos segundos. Esa respuesta era suficiente. —Bien, no digas nada—

Se dio media vuelta, teniendo intenciones de salir e ir a decirle unas cuantas cosas a aquel neurocirujano.

—¿A dónde vas?— Su voz interrumpió las acciones contrarias.

—Voy a comprar a la panadería de la esquina—

—Eso es mentira. Irás a hablar con Jungkook—

—Si sabes, ¿para qué preguntas?— Preguntó mientras se giraba molesto.

Suspiró. —Por favor, no lo hagas—

—Te hizo llorar—

Demoró un poco en responder. —No lo hizo, tengo una alergia—

—Claro, y yo soy más alto que tú— Negó con la cabeza. —A mi no me engañas, Taenie—

—Lo siento— Hizo una mueca. —Pero, por favor, no vayas a hablar con él y hacer un escándalo—

—Prometo ser amable— El castaño le dedicó una mala mirada y resopló. —Bien, no iré—

Taehyung sonrió aliviado. —Gracias—

—¡Jeon Jungkook!—

Baekhyun abrió la puerta de la oficina del nombrado de golpe, logrando que diera un pequeño saltito en su lugar por la sorpresa.

—Doctor Byun, ¿sucede algo?— Preguntó extrañado.

—No me vengas a hablar a mi con buenas palabras después de lo que hiciste— Dijo mientras se acercaba, deteniéndose frente al escritorio y recargando su cuerpo en este.

—Creo que no lo estoy entendiendo—

—Esto es una broma— Susurró. —Acabas de hacer llorar como magdalena a Taehyung y ¿ahora te harás el desentendido?—

Los ojos de Jungkook se abrieron aún más ante las palabras del contrario. ¿Hizo llorar al castaño?

Bien, lo admitía, quizás fue un poco duro, pero... no para hacerlo llorar.

O eso creía él.

—Yo-—

—No me interesa lo que digas, no quiero escucharte— Interrumpió. —Pero te prometo que si sé que volviste a hacer que llorara, te cortaré la cosa que tienes entre las piernas de la que probablemente estás orgulloso— Se enderezó. —Hasta pronto, Doctor Jeon, espero que piense en lo que le dije— Y sin más, abandonó la oficina.

El puzle de cien piezas comenzaba a armarse en su cabeza.

Por otra parte, el azabache se encontraba en una crisis consigo mismo mientras miraba un punto ciego de la habitación.

No sabía si creer en sus palabras.

Y si eran ciertas, su única pregunta era...

¿Por qué?

[Hi.

¡VOLVIIIIIII! ¡NO SÉ CUÁNTO HA PASADO EXACTAMENTE PERO YA VOLVIIIIIIII PARA QUEDARME!

Aaaah, lxs extrañé mucho :( 💜

Pasaron cosas y me estaba ocupando de otras tantas, no había podido escribir. Lo siento por tardar tanto.

Pero volví, aquí estoy para seguir la historia.

Volví y Ending Scene tenía más de 100 votos y más de 600 lecturas :") Muchas graciaaaaaaaaaaaas 💜💜💜💜💜💜

Tengo una pregunta. ¿Alguien aquí leyó "Who Are You"? Si la leyeron, ¿entendieron la referencia no tan referencia que hice?

Si alguien la atendió y me lo dice; le dedico el próximo capítulo ;) (obviamente tiene acertar)

Y si llega a ser más de una, pues doy las dedicatorias según orden de llegada de los comentarios.

No me ignoren :<

Hasta el viernes (ahora sí), bye.]