Capítulo 4
Dos semanas pasaron increíblemente rápido, más rápido de lo que realmente le agradaba.
Dejó de hacer cirugías de otros médicos luego de aquella reunión, por lo que su carga de trabajo había disminuido considerablemente y el no tomar pacientes nuevos le hacía sentir que estaba teniendo sus primeras vacaciones luego de tres años de trabajo diario.
Era un hombre ocupado de casi treinta y cuatro años.
Se aseguró de que estuviera todo en orden en su departamento antes de tomar su maleta y salir de este, para luego dejarle encargado un aseo mensual y cuidado de su auto al amigable señor que estaba en la recepción del edificio donde vivía.
Afortunadamente, retiró las cosas más importantes de su oficina el día de ayer y la dejó estrictamente cerrada con llave por si las dudas.
Nunca se sabe quién podía intentar entrar y dejar o buscar algo con lo que perjudicar su imagen.
Dio la parada a un taxi que justamente se encontraba pasando fuera del edificio, encaminándolo al aeropuerto.
Estando ahí, suspiró, un poco ansioso.
Eran apenas las siete de la mañana de un día viernes y su vuelo salía a las nueve.
Caminó hasta el grupo que reconoció como sus nuevos compañeros de trabajo e inició una extraña conversación (según él) con Chanyeol, quien se había acercado hacia él en cuanto lo vio.
El castaño que quería evitar estaba a unos cuantos metros de distancia, escuchando al cardiólogo rubio hablar con emoción sobre todas las cosas que podrían hacer en Londres.
Hora y media después, finalmente estaban dentro del avión.
El lugar de Taehyung estaba en el lado contrario a Jungkook, sin embargo, aún así el castaño podía observarlo.
Se preguntaba... ¿hablarían en algún momento? ¿El azabache lo odiaba?
Probablemente sí.
Reprimió sus impulsos de levantarse, caminar hacia él y calmarlo cuando lo vio aferrarse a su mochila en el momento en que anunciaron que pronto despegarían.
Jungkook no les tenía miedo a las alturas, pero si recordaba que tenía un extraño miedo a volar en aviones.
Sin embargo, se relajó un poco cuando Park Chanyeol se sentó a su lado y comenzó a hablarle para distraerlo, haciendo que no se diera cuenta del momento en que el avión tomó vuelo.
Taehyung desvió su mirada antes de ser descubierto y dejó su atención en el rubio emocionado que estaba a su lado.
Finalmente, después de once horas, el avión aterrizó en Londres.
La diferencia de horario entre Seúl y Londres era de ocho horas, por lo que, a pesar de ser el medio día, todo el equipo se encontraba un poco cansado.
La temperatura era agradable. Siendo agosto y estando en pleno verano, el calor no era tan alto como Jungkook pensó. Le gustaba.
—Pongan atención, equipo— Llamó el Doctor Park Bogum, haciendo que todos le prestaran atención. —Necesito que formen grupos de cuatro para subir a los taxis que han sido enviados y que nos llevaran a la residencia. Ustedes ya tienen el número de su habitación, ¿verdad?—
—¡Sí!— Respondieron al unísono.
—Tendrán el fin de semana para acostumbrarse a la diferencia de horario, por lo que nuestro primer día en el hospital será el lunes de la próxima semana, ¿quedó claro?—
Volvieron a responder de forma afirmativa y comenzaron a formarse los grupos.
Jungkook agradeció internamente que Chanyeol se acercara a él; al menos conocería a alguien del grupo.
Sin embargo, no contaba con que cierto rubio y cierto castaño se acercaran a ellos, el primer mencionado proponiendo que se juntaran. Y el más alto tenía que abrir la boca antes que él y aceptar.
El azabache estuvo a punto de chistar, mas simplemente optó por callarse.
Pero realmente quería golpear a Park por tener las piernas tan largas y ser un poste, porque si no fuera así, el más alto no hubiese tenido que sentarse en el asiento de copiloto y Jeon no hubiese tenido que sentarse junto a la ventana con Kim a su lado.
Según alcanzó a oír del rubio que no recordaba su nombre; para tener cercanía con él y "seducirlo".
Quiso reír ante eso.
Taehyung no sabía seducir, era muy tímido respecto a eso y sólo conseguía sonrojarse hasta las orejas y tartamudear.
Lo recordaba a la perfección.
Y no le gustaba.
El trayecto del aeropuerto a la residencia se hizo más largo de lo que realmente era, en el cual trató de pegarse lo máximo posible a la puerta del auto. No obstante, el cuerpo de Taehyung seguía rozándose con el suyo, sintiéndolo tan tenso como él lo estaba.
Cuando, finalmente, llegaron a su destino, Jungkook fue el primero en abrir la puerta y bajar del vehículo.
Esperó a que el conductor afirmara que podían abrir el maletero para sacar su maleta y de paso las de sus "compañeros".
Y no de buena persona, por supuesto que no, es solo que la suya estaba de las últimas y no tenía de otra más que sacarlas también.
Luego de que el jefe les diera el pase para ir a sus habitaciones, Chanyeol lo detuvo un momento para preguntarle si estaba bien y por qué había bajado tan rápido del auto, a lo que respondió con la excusa de que se había mareado en el camino.
Park pareció creerle, porque no preguntó más.
Su habitación se encontraba en el cuarto piso de la residencia.
Subió las escaleras mientras se preguntaba si su cama sería lo suficientemente cómoda, pensamiento que se disipó cuando vio y escuchó a Taehyung maldecir porque no podía abrir la puerta que estaba frente a su habitación.
Esto debe ser una broma.
Observó el error que estaba cometiendo y negó suavemente con la cabeza.
—Tienes que insertar la tarjeta y luego escribir la contraseña, no al revés, la bloquearás si sigues así— Dijo con desinterés a la vez que caminaba hasta su propia puerta.
El castaño se sobresaltó al escuchar su voz y lo miró mientras se encogía un poco en su lugar. —G-Gracias...— Susurró.
Jungkook hizo un sonido de afirmación, abrió la puerta de su habitación, entró en ella y, cuando estuvo a punto de cerrarla, la voz de Kim se escuchó de nuevo.
—Es bueno volver a verte—
El azabache suspiró y levantó la mirada, conectando sus ojos con los contrarios. —Qué lástima que no puedo decir lo mismo— Y cerró la puerta.
Taehyung hizo una mueca, tampoco es como si esperara una respuesta positiva, pero definitivamente ese no era el Jeon Jungkook que conoció en la universidad. Y pensar que el cambio haya sido por su culpa era realmente horrible.
Por su parte, el azabache recargó su frente en la puerta cerrada, escuchando minutos después como la puerta contraria se abría y cerraba, indicando que el castaño finalmente estaba dentro de su habitación.
—Idiota— Susurró. —Eres muy idiota, Kim Taehyung, ¿cómo se te ocurre aparecerte de nuevo? Dijiste que te olvidarías de mi y que yo debía olvidarte... ¿cómo lo hago si vuelves cuando finalmente lo estaba logrando?—
Pero eso era algo que nadie más debía saber.
[Hi. Demoré un poquito más en actualizar, perdón, pero estaba terminando de organizar mis tareas y no me había dado cuende la hora.
Hasta el viernes, bye.]
Extrañaba a mi bebé consentido 😢😭
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