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🍯; jeongho
min bottom¡!
jeong top¡!
🍯; smut, fingering, largo
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— Quiero hacerlo — soltó Minho de repente, sin quitar la mirada de la televisión, llamando la atención de su novio.

Se encontraban en la casa de Jeongin, en la sala de estar haciendo un maratón de películas, habían decidido verse después de un tiempo pues recién habían estado ocupados debido a los exámenes de la Universidad.

Jeongin frunció el ceño sin entender lo que le decía, mirando a su novio con curiosidad — ¿A qué te refieres?

— Hazme el amor, Jeongin.

Llevaban alrededor de un año saliendo y nunca habían hablado sobre aquel tema, quizás de repente los besos se volvían llenos de fervor, pero nunca pasó a más. Cuando eso sucedía, Jeongin bajaba la intensidad y volvían a darse pequeños besos tiernos. A ninguno le molestó aquello, Minho tampoco hizo algún comentario al respecto.

Nunca quiso ir más allá y había una razón: Minho era virgen.

Sin embargo, eso no significaba que fuera inocente porque quizás Minho en más de una ocasión se había masturbado, pero nunca le había dicho a Jeongin que quería que tuvieran relaciones. De cualquier forma, a Jeongin no le molestaba aquello para nada, respetaba la decisión de Minho, sea cual fuere.

Las palabras de su novio le sorprendieron, no esperó a que ese momento llegara, sabía que había una posibilidad de que le pidiera que dieran ese paso, sin embargo, también sabía que había la posibilidad de que no sucediera.

— ¿Estás seguro, cariño? — preguntó Jeongin poco después, mirándolo indeciso.

— Más que seguro, Innie. — confirmó mientras asentía un poco, y esta vez sus miradas se encontraron — Quiero hacerlo contigo.

Jeongin le regaló una pequeña sonrisa y pronto, tomó una de sus manos, llevándolo hasta su habitación. Agradecía que sus padres habían salido debido a un trabajo de negocios y no regresarían hasta la próxima semana. Una vez en la pieza, Jeongin empujó ligeramente a Minho, pero sin ser demasiado brusco, provocando que cayera sobre la cama y pronto colocó sus brazos a cada lado de él para apoyarse. Jeongin se acercó y comenzó a besarlo con fervor, siendo correspondido en seguida.

Pronto, Jeongin comenzó a quitarle la camisa de botones con desesperación a Minho sin dejar de besarlo, quitándosela y tirándola en alguna parte de la habitación. Se separó de él y Jeongin vio por primera vez su pecho. Estaba ligeramente bronceado, sus pezones estaban erectos y eran de un color café, tenía los abdominales trabajados, pero no demasiado, lo que lo hacía ver más atractivo. Jeongin no pudo evitar pasar su mano sobre el torso de su novio, acariciando con lentitud cada parte de él, sintiendo a Minho estremecerse bajo su tacto debido a lo frías que estaban sus manos.

Llevó dos de sus dedos a uno de los pezones, comenzando a jugar con este haciendo círculos y jalándolo un poco de vez en cuando, escuchando los ligeros gemidos y suspiros que Minho soltaba. Poco después se detuvo y acercó su boca peligrosamente hacia el otro, lamiendo alrededor del botón y mordiéndolo levemente. Luego se separó y con urgencia comenzó a bajarle los pantalones al igual que su ropa interior, liberando su miembro que ya estaba erecto.

Tenía un tamaño normal, no era ni demasiado grande ni demasiado pequeño. Quizás estaba en el promedio.

Comenzó a masturbarlo con lentitud, mirando con atención las expresiones que Minho hacía y joder, podría correrse sólo con verlo. Sus ojos se ponían blancos, haciendo una perfecta 'o' con su boca, mientras echaba la cabeza hacia atrás y mordía su labio inferior con fuerza. Jeongin sonrió de lado y se colocó de rodillas, lamiendo sus labios antes de meterse el miembro de su novio a la boca, comenzando a chuparlo cual paleta, escuchando los gemidos de Minho que se volvían cada vez más fuertes. Su cabeza empezó a moverse de arriba hacia abajo rápidamente, casi ahogándose con su pene, pero no le importó. No cuando Minho había comenzado a tomar sus cabellos con bastante fuerza.

— Jeongin, mierda. — maldijo en voz baja entre gemidos, moviendo sus caderas para buscar más contacto con su boca — Voy a correrme, bebé.

En seguida el aludido se separó y miró a su novio, quien tenía la respiración agitada y lo miraba con el ceño ligeramente fruncido.

— Lo siento, cariño. Te haré una mamada después y te correrás en mi boca, pero como es tu primera vez haré que te corras mientras te esté haciendo el amor — explicó, antes de acomodar a Minho mejor sobre la cama, sin dejarlo objetar.

— Eso no es justo. — habló Minho mirando a su novio, quien alzaba una ceja al no entender de lo que hablaba — Estoy completamente desnudo y tú traes toda tu ropa.

Jeongin en seguida soltó una escandalosa carcajada, asintiendo de acuerdo con él — No te preocupes, bebé. Justo iba a quitarme la ropa.

Sonrió ladino y le guiñó el ojo, antes de quitarse la camisa por arriba, dejando ver su pálido torso, con el abdomen bien trabajado, nada comparado al de su novio, aunque igual Jeongin pensaba que era atractivo. Luego se quitó los vaqueros, haciendo lo mismo con sus bóxers después. Una vez desnudo, notó que Minho lo miraba atentamente, mordiendo su labio inferior y luego relamiéndose estos.

— Chúpalos — ordenó, cuando le mostró dos dedos y Minho en seguida acató, metiéndolos a su boca y lamiéndolos por un rato hasta que Jeongin los sacó cuando creyó que era suficiente.

En seguida introdujo el primer dedo en la entrada de su novio, moviéndolo dentro de él con lentitud y Minho comenzó a soltar leves gemidos. Luego metió un segundo dígito, haciendo un movimiento de tijeras para que así se acostumbrara, pronto Minho comenzó a arquear su espalda mientras tomaba con fuerza las sábanas de la cama. No mucho después empezó a acelerar sus movimientos, provocando que su novio gimiera demasiado alto, echando su cabeza hacia atrás.

Cuando creyó que era suficiente, los retiró, escuchando a Minho quejarse debido al vacío que sentía. Jeongin no pudo evitar soltar una pequeña risa. Se estiró un poco y de la mesita de noche sacó un sobre de un color metálico, abriéndolo con sus dedos, y lo colocó en su miembro. Tomó sus piernas, acomodando estas a cada lado suyo.

Pero al instante se detuvo, mirando a Minho, quien fruncía el ceño.

— ¿Estás seguro de esto, Honnie? — preguntó Jeongin en voz baja, notando que su novio relajaba su expresión y sonreía con ternura.

— Claro que sí, Innie — ni siquiera lo había pensado demasiado.

El aludido hizo una pequeña mueca, pero asintió antes de comenzar a introducir su miembro poco a poco en la entrada de su novio, quien gruñía debido al asalto y Jeongin en seguida se detuvo, pero no salió de él.

— Mierda, — maldijo — dame un segundo, ¿sí? — pidió, en lo que se acostumbraba al tamaño. Jeongin no hizo nada más que asentir, dándole el tiempo que necesitara su novio — Muévete.

Jeongin en seguida lo hizo, pero con lentitud y se mordía el labio con demasiada fuerza, evitando soltar un gemido de placer. La entrada de su novio se sentía tan bien que se moría por ir más rápido sin embargo no quería lastimar a Minho así que estaba aguantándose.

No pasó mucho hasta que Minho comenzó a mover sus caderas contra su miembro para más contacto y Jeongin entendió al instante, comenzando a moverse cada vez más rápido, ambos gimiendo y jadeando.

— Te ves tan lindo así, joder. — dijo Jeongin con la voz ronca mientras seguía embistiendo a Minho con fuerza, provocando que este gimiera y se sonrojara. Pronto, Minho llevó una mano a su boca, evitando ser más escandaloso — No, bonito. — habló Jeongin, con una mano quitándole la ajena — Déjame escucharte, deja que la gente sepa que te estoy haciendo el amor.

Ante aquellas palabras, Minho no pudo evitar sentir su pene contraerse del puro placer. Mentiría si dijera que no había sido demasiado caliente. Por lo que hizo lo que su novio le había pedido, soltando gemidos agudos mientras que sus manos se aferraban a las sábanas y los dedos de sus pies se enroscaban.

— ¿Se siente bien, cariño? — preguntó Jeongin, obteniendo sólo un asentimiento por parte de Minho, pues no se sentía capaz de formular una sola palabra. Jeongin en seguida se enterró con fuerza, provocándole un quejido a Minho — Te hice una pregunta y tienes que responderme.

— Mm sí... Tan bien — gimió Minho, mordiendo su labio con fuerza.

Jeongin sonrió ladino, llevando una mano al pene de su pareja para comenzar a masturbar este al ritmo de las arremetidas. Minho siguió gimiendo, echando la cabeza hacia atrás y poniendo sus ojos en blanco.

— ¡Jeongin! — gritó Minho cuando el aludido tocó su próstata — ¡Ahí, mierda! ¡Más, por favor!

Jeongin comenzó a embestirlo con rapidez, tomando una de sus piernas, colocándola sobre su hombro para que pudiera golpear su próstata con más fuerza y eso volvió loco a Minho. Se había vuelto un desastre; gemía por más, jadeaba y arqueaba su espalda, con los ojos llorosos debido al placer.

— Casi llego, Jeongin — dijo como pudo entre gemidos.

Y Jeongin no se detuvo, siguió penetrándolo lo más rápido que podía, sabiendo que pronto se correría también, aún masturbando el miembro de su novio. No pasó mucho hasta que Minho finalmente se corrió en su mano y abdomen, gimiendo un poco al sentir que Jeongin seguía embistiéndolo para poder llegar a su orgasmo que no tardó demasiado. Se corrió en el condón y cuando salió de su novio, se lo quitó, haciéndole un nudo antes de tirarlo al cesto que se encontraba a un lado de la cama.

Una vez que lo hizo, se desplomó a un lado de Minho, quien en seguida se apegó a él, apoyando su cabeza sobre el pecho desnudo de Jeongin y rodeando el torso de su novio, con la respiración aún medio agitada.

— Eso fue asombroso — habló Minho rompiendo el hielo, en voz baja.

Jeongin sonrió y le dio un rápido beso en su frente con ternura — Estoy de acuerdo.

— Qué mal que me haya perdido de lo bien que me hicieras sentir como hoy por tanto tiempo — le dijo, dibujando pequeñas formas imaginarias en el pecho de su novio.

Soltó una pequeña risa y negó divertido — No hay prisa, bonito. Lo importante es que podemos hacerlo cuando y todas las veces que quieras de ahora en adelante.

Minho en seguida alzó la cabeza mirando a su pareja y Jeongin notó que los ojos le brillaron por lo que no pudo evitar asustarse — Me encanta la idea. Pero no hoy, me acabaste por completo. La próxima.

Jeongin soltó una carcajada y asintió — La próxima será entonces, Honnie.

— ¿Y qué hay de la mamada? — inquirió Minho, apenas audible. Jeongin incluso tuvo problemas para poder saber de qué hablaba su novio.

Cuando finalmente entendió, sonrió burlón y alzó una ceja. Estaba asombrado, su pareja se había vuelto más directo y descarado. Pero no podía mentir, le gustaba ése nuevo lado — Cuando quieras, bonito. Me gustaría que me follaras la boca.

Minho abrió los ojos sorprendido por las palabras vulgares que le decía y le dio un ligero golpe en el pecho.

Ahora estaba avergonzado, pues escondió su rostro en la curvatura de su cuello. Jeongin rió fuerte al verlo así.

— Te amo — soltó Minho en un murmuro, sacando su rostro para mirar a su pareja.

— Mierda, Minho. — maldijo Jeongin y el aludido lo miró alzando las cejas, sorprendido por su respuesta — ¿Por qué eres tan lindo? Me encantas un montón, amor. También te amo.

Minho lo miró con ternura y unieron sus labios en un tierno beso, Jeongin rodeando la cintura de su novio para que no se separara del beso, aunque sabía que no lo haría.

Se mantuvieron en silencio por un rato y a Jeongin en realidad no le importó demasiado, hasta que notó que su novio se había quedado dormido mientras acariciaba sus cabellos y rió enternecido. Depositó un nuevo beso en su frente e inhaló profundamente antes de bostezar y cerrar los ojos para después caer dormido también.

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uhh este fue el primer os, así que espero les haya gustado <33 tuve un bloqueo hace tiempo pero hoy extrañamente me inspiré y según yo no quedó tan mal ?? díganme que no o lloro
pd: me la mamé, escribí 2000 palabras y no hice eso con el de chan en el primero 🤣🤣