El mundo está dividido, mortales contra sobre naturales, una lucha constante por territorio y alimento. Aunque por el lado mortal es mas bien no convertirnos en comida.

Es por eso que se entrenan grupos, los cuales tratan de proteger la seguridad de los mortales, capturando a todo ser sobe natural que entre en la ciudad designada.

-Jin que quieres hacer con él? – la suave voz de Hoseok resonó por el lugar.

Los chicos están inquietos, mas por que sus calculadores ojos no soltaban los míos, pues aunque su mediana melena lograba cubrirlos un poco aun asi podía ver y sentir su mirada.

-lo llevaremos con nosotros- al decir eso lo levantaron, haciendo que se notara la diferencia de alturas entre nosotros y el.

Cuando el vampiro paso por mi lado, su mirada aún seguía fija en mí, haciendo casi eterno el contacto visual entre nosotros.

-Jinie amor- la mano en mi cintura de Yoongi así como su forma tan cariñosa de hablarme, lograron romper ese momento, momento el cual en lugar de ser incomodo fue raro, pero agradable.

Extrañamente no dio pelea todo el camino, solo miraba la ciudad por la ventana, logrando mas tensión entre nosotros, rompiendo todo el estándar de como eran las capturas con ellos, ninguno llegando vivo a esta parte.

Todo el trayecto hasta la casa de seguridad fue en total calma, tensión y silencio, al llegar no fue diferente.

Ante la mirada de todos, el vampiro, para su sorpresa fue cooperativo, caminando hacia donde le indicaban, claro con sus esposas llenas de verbena.

Se dejo tranquilamente bajar al sótano, donde se encontraban las celdas, las cuales por protección contaba con luces uv para en caso de emergencias ser encendidas, permitió que se le encadenara muy tranquilamente, logrando desquiciar a Yoongi, la mano derecha de Jin, el cual en un impulso golpeo al vampiro directo en la quijada saliendo de ahí furioso.

-Min Yoongi, ¿qué demonios te ocurre? - el tomo de Jin era todo menos amigable, para muchos era la primera vez que lo escuchaban gritar.

-que que me ocurre, Jin, ese demonio trama algo, da la orden- lo miro suplicante – da la orden y yo me encargo de el.

Lo entendía, hasta para Jin era frustrante la tranquilidad de ese vampiro, pero el veía más, podía ser una oportunidad, su única para comprenderlos.

-retírate- fue lo ultimo que dijo Jin antes de bajar a la única celda ocupada.

Al entrar se inquietó aún más, pues el vampiro no dejo de mirarlo, a cada paso que dio dentro de esta, pero lo mas inquietante era que no pretendía luchar, solo estaba ahí sentado, soportando el dolor provocado por los grilletes con verbena.

-por que no intentas luchar, todos los que son como tu lo hacen, la mayoría logran escapar- comenzó Jin, sentándose a una distancia segura para él.

-y muchos de ellos muertos- al escuchar su voz una corriente eléctrica recorrió el cuerpo de Jin.

-no creí que hablaras- la curiosidad de Jin estaba a flor de piel, tenía tantas preguntas.

-te sorprendería saber que no somos tan diferentes, Jin- dijo el vampiro con una triste sonrisa adornando su bello rostro.

-como sabes mi nombre- pregunto Jin, tocando el relicario donde guardaba su verbena para evitar que leyeran su mente, acaso ya un funcionaba?

-todos te llaman así- dijo soltando una risita irónica. – soy Jong Suk.

Dicho esto animo a Jin a preguntar sobre su especia, todas las preguntas que no lo dejaban dormir, averiguando que todo era un mal entendido, y haciendo memoria sobre lo dicho, los únicos humanos que morían a manos de vampiros eran aquellos que los enfrentaban, descubrió que los que se llegaban a acercar era por curiosidad y simplemente buscando comida, bajo el consentimiento de las personas o por sus amantes, lo cual solo llenaba más de curiosidad a Jin, el cual tomaba más confianza con cada minuto que pasaba con él.

-a tu amante no parece gustarle que tengas tanto tiempo aquí dentro- menciono Suk con molestia en su rostro. Señalando con este la puerta, donde efectivamente estaba vigilando Yoongi, el cual con una mirada de Jin se retiró del lugar.

-no es mi amante, no somos masque compañeros de trabajo- dijo esto regresando su atención a Suk, el cual parecía ver felicidad en su rostro, con un toque de dolor por las quemaduras de la verbena.

Sin saber exactamente porque, Jin retiro los grilletes con cuidado, ante la mirada sorprendida del vampiro, el cual no se alejaba de ahí, solo dejaba que el humano hiciera lo que quisiera, como limpiar sus heridas con agua.

-se que no es necesario, que te curaras solo, pero creo que fuimos injustos al colocártelas- decía Jin sin mirarlo -y tú a....a que viniste?-

-mi pareja esta aquí, necesitaba conocerla- dicho esto le explico a Jin lo importante de las parejas para ellos, pues eran las únicas capaces de calmar su sed, también le explico que eran capaces de procrear.

-y ya la encontraste, de no ser así te podemos ayudar- fue lo que Jin dijo, pero sin entender porque su pecho dolía ante la mención de esto.

Sin aviso, los labios de Suk, se impactaron con los suyos, en un necesitado beso, dejando una sensación reconfortante en ambos, y Jin entendiendo porque Suk no peleo, a pesar de estar en peligro.

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