ENCONTRÉ EL AMOR

CAPÍTULO 62

Aisha Jiménez

Desde el primer día que Lucas y yo comenzamos a vivir juntos ha sido todo una completa maravilla, como de un arcoíris después de que la fuerte lluvia apareciera para deslumbrarnos con aquellos colores, como por ejemplo el color de sus hermosos ojos azules eléctricos que son mi luz y guía en este punto de la vida.

No niego que hemos tenido una que otras discusiones pero dialogando logramos aliviar cualquier problema o discusión que tengamos, y eso está bien, a gritos no lograremos nada al contrario se empeoran mucho más. Septiembre se ha asomado, pero así mismo se está yendo tan rápido que tan pronto como un espabilo octubre nos dirá bienvenidos a halloween; estamos a solo tres meses de acabar este año lleno de tantos recuerdos que cada vez más quedan en lo que uno ya pasado, la universidad es un completo lío se logra sentir que ya nos queda dos años en la universidad ya quiero pronto terminar, y dedicarme a surgir y darme a conocer en mi carrera, lograr cada uno de mis objetivos y sobretodo estar al lado del hombre que más amo en esta vida, compartir un poco de tiempo con él al terminar es lo que más quiero.

Hoy quiero sacarle tiempo a mis papás e ir a visitarlos aunque también mi madre me pidió llevar a Lucas para que revise a papá que se encuentra enfermo pero es tan terco que no quiere ir al medico y que lo chequeen para que estemos tranquilos así que le llevaré a este médico que es de mi total confianza.

—¿Estás segura que tú papá querrá que yo lo revise? —pregunta Lucas mientras vamos en el auto.

—Tendrá que dejarse porque no quiero sorpresas peores después.

—Eso es verdad cariño, siempre hay que revisar por si es algo que se pueda atender a tiempo.

—Por eso es que prefiero que lo revisen ahora ya que si es algo que hay que empezar a cuidar podemos hacerlo a tiempo.

—Me sorprende mi mujer que bien ha aprendido de mí.

—Algo debo aprender de ti aparte de saber coger ¿No crees?

—Es muy cierto.

—Además que aún no me siento preparada como para perder a alguno de mis padres.

—Te entiendo perfectamente cariño porque yo siento lo mismo con los míos.

—Pues si pero...

—Tranquila cariño seguro no es nada grave, no te preocupes.

—Está bien.

***
—Hola mamá ¿Cómo estás?

—Bien hija ¿Y tú cómo has estado?

—Bien mamá ¿Cómo está mi papá?

—Pues en cama reposando pero aún no deja que lo lleve al médico sigue igual de terco.

—No sé porque tiene que ser tan terco por dios, yo traje a Lucas para que medio lo revise y nos diga que podemos hacer para que el deje de andar comprando cosas sin fórmula en la farmacia y terminé ocasionando una tragedia peor.

—Comprendo pero no perdamos tiempo llevemos a Lucas a la habitación donde está él.

—Listo vamos. —Responde Lucas con toda la tranquilidad del mundo mientras yo estoy completamente ansiosa por saber que todo está bien.

Después de unos minutos Lucas termino de revisar a mi papá y lo vemos bajar las escaleras quitándose sus guantes quirúrgicos, mientras que su vista se ropa con la mía.

—¿Cómo está mi papá? —Pregunto con desesperación.

—Al parecer todo está bien, tiene la presión un poco alta pero me ha dicho que ha tenido mucho estrés en su trabajo así que puede ser parte de un choque de emociones y tal vez se alteró demás, sin embargo le pedí completo reposo, le dejé unas órdenes para hacerme unos exámenes rutinarios para descartar cualquier otro motivo, y le dejé unas pastillas para controlar lo de su presión.

—Gracias amor, sé que se hará esos exámenes mi mamá o yo lo llevaremos a qué se los realice.

—Tranquila cariño, no te preocupes.

—Lucas gracias por venir atender a este hombre terco en tu día libre.

—No se preocupe es mi suegro, somos familia no puedo negarme y por eso soy médico para ayudar a quienes lo necesitan.

—Te lo agradezco de todas formas ¿Se quedarán a comer?

Miro a Lucas quien me hace unas señas de que acepte, siempre se deja convencer con la comida de mi mamá.

—Por supuesto que sí. —Le digo a mi madre mirando fijamente a Lucas.

—Aunque a Aisha no sé hubiese quedado yo sí porque me encanta su comida, cocina delicioso, pero no le diga a mi mamá. —Hace cara de súplica ante lo último.

—Tampoco cocino tan bien.

—Eso cree usted, su comida me hace chupetearme los dedos y querer repetir, no pude haber tenido una mejor suegra que usted. —Lucas echándole piropos a mi mamá es cosa seria cuando quiere comida.

Terminamos de almorzar y pasamos el día en casa de mis papás. Ellos siempre se ponen felices cuando los venimos a visitar es por eso que queremos hacer una fiesta de Halloween entre los dos para las dos familias para que no se sientan solos, aunque obviamente invitaré a Isabella con Andrés y creo que Lucas invitará a Sam no sé aún ya que su universidad está en el otro  extremo de la ciudad, espero que todos podamos estar y disfrutar en lo que yo considero mi familia.

***

‹Andrés›

Ha pasado mucho tiempo desde que se sabe de mí, pero no saben lo feliz que estoy que ya son dos años de estar junto con Isabella. Hemos sobrepasado tantas cosa juntos que no logran imaginarse lo feliz que me hace sentir que nuestro amor es tan fuerte que no han logrado derribarlo no por más que lo han intentado; es por eso que yo quiero formalizar esto como la ley lo dice y casandonos, vivimos juntos desde hace mucho tiempo y creo que es hora que yo le pida matrimonio para estar como bien dicen "Hasta que la muerte nos separe" es por eso que en la fiesta le haré la propuesta de matrimonio además que será sorpresa para todos por qué ni siquiera a Aisha le conté sobre la propuesta porque sé que si le decía me arruinaría la sorpresa «ella es mala guardando secretos de este tipo» por lo que es obvio que no quería arruinar este día tan especial para mí y para ella.

La fiesta se encuentra a otro nivel, esto se está disfrutando al máximo nadie se sienta todos nos encontramos bailando y disfrutando de la fiesta, es increíble como pasa el tiempo rápido, ya son las once y creo que ya es hora de dar la sorpresa por fin. Me acerco un poco dónde están los parlantes para tomar el micrófono que se encontraba allí respiro hondo con la mayor de mis fuerzas para no desmayarme aquí justo ahora que pienso por fin hablar.

Le bajó un poco a la música de fondo para que puedan escucharme sin tanto esfuerzo. Nadie me ve, todos están en los suyos incluso Isabella se encuentra charlando con Aisha tranquilamente hasta que voltea a mi después de que su nombre fue nombrado a través del micrófono.

—¿Puedes hacerme el favor de venir?

Ella poco a poco se acerca a la pista quedando nuestras miradas frente a frente y ella haciéndome caras queriendo saber que ocurrencia haré pero no se imagina cuan grande es esta ocurrencia y es la de querer estar con ella toda la vida, en un mundo de ensueño dónde formemos una gran familia llena de triunfos y superación.

—Buenas noches a todos los aquí presentes quienes serán testigos de este momento cuál quiero sea inolvidable en nuestras mentes y corazones. Hoy el amor que siento por tí Isabella será marcado para la historia. —Me acerco a ella está vez sin micrófono para que escuche mi voz natural y sea entre los dos, al llegar a ella me acerco para que nuestras miradas se fundan en el brillo que nos respalda las fuertes miradas de nosotros tomo un respiro para proseguir con mi plan. —Isabella, yo sé que hemos tenido momentos malos que tal vez se llegan a empeorar en algún momento, pero que gracias a nuestro amor y comprensión logramos volver ese terror en mundo de corazones volando, por eso es que creo que tú eres la chica indicada en mi vida para compartir a tu lado cada segundo de ella, es por eso que quiero que tu mirada sea siempre lo primero en ver al salir el sol y al llegar la luna, y tú cuerpo sea lo único que mis manos recorran sin cansarme de el, —Saco el cofre que tiene el anillo —es por qué hoy quiero pedirte que seas mi esposa.

—Yo... —Isabella parece estar en shock, no parece creerselo por completo —Sí, si acepto ser tu esposa.

Ella se acerca estampando un largo y candente beso, mientras los aplausos se hacen presente entre nosotros, dejamos el beso para que yo pueda ponerle el anillo el cual representa estar comprometida conmigo y esa idea me hace enloquecer de emoción, ella lo es todo para mí.

—Te amo Isabella.

—No sabes lo feliz que estoy de todo esto, no me lo esperaba en absoluto, pero te amo tanto que en estos momentos nada más me importa que solo sea nosotros dos.

Veo a Lucas junto a nuestra mejor amiga acercarse.

—Obviamente soy la madrina.

—Amigo, me has fallado. ¿Porqué no me lo contaste? Me siento traicionado —Comenta Lucas en un tono de dolor burlesco.

—Vamos Luc sabes que se lo hubieras dicho a ella —señalo a Aisha— y ella me hubiera dañado todo, es muy difícil que se guarde algo, y así me dañaba toda la sorpresa.

—No discuto esa parte, si casi me dice lo del departamento porque no se aguantaba tanto el secreto o ahora imagínate si hubiera sabido lo del anillo, sé hubiese vuelto loca al saberlo.

—Que tanto hablan nuestros hombres —comenta en un tono de voz interrumpiendo nuestra plática.

—Nada que te interese, solo cosas de hombres.

—¡Solo cosas de hombres! —Hace mofa por lo que había dicho.

—Tranquila cariño no es nada. —Comenta Lucas dándole un beso a su fiera loca.

Narrador Omnisciente

Las semanas pasaron dándole paso a las vacaciones de fin de año, estos pobres muchachos lo necesitaban con todo y el aire que respiran.

Estaban completamente estresados.

Lucas al salir de su trabajo decide irse al departamento con mucha prisa para terminar de empacar su maleta e irse con su mujer de vacaciones no sin antes ir a despedirse de sus familias, no es mucho tiempo que tienen para hacer eso, pero aún así irán.

Isabella les hará el favor de llevarlos al aeropuerto y así aprovechar para despedirse de la más traviesa del cuarteto de locos que son juntos, solo separados es que la gente logra descansar de tantos gritos locos que podrían despertar y ensordecer a cualquiera, y grave pensar que hayan dejado el departamento a cargo de esa loca, pero confían en que no lo encontrarán quemado o patas arriba sin encontrar nada de lo que era anteriormente.

Por lo bajo Lucas escucha a Isabella decirle a Aisha que revise tiendas de novia para poder encontrar un vestido hermoso pero candente a la vez, solo a ella se le ocurre ambas cosa en una mente traviesa, lo que no entiendo que diferencia hay entre las tiendas de allá con las de acá se supone que es lo mismo ¿O me estoy equivocando?

Poco a poco vemos cómo por fin ellos se adentran al aeropuerto para buscar el avión con su destino Paris/Francia la ciudad del eterno amor.

Esperemos que vivan unas felices vacaciones, dónde disfruten del uno y del otro sin importar lo que pase a su alrededor.

Amense sin final.

Yarenis Guzmán.