- Lucy!!! - los gritos de su madre la despertaron - ¡Abre hija! ¡Por favor!

Se incorporo despacio y miro la puerta de la habitación,la puerta q su madre no paraba de golpear. Pero ella no iba a abrir no quería ver a nadie. Miro su cuerpo despacio y su dolor se volvió intenso, solo llevaba la ropa interior de la noche de bodas, la liga blanca , el encaje, los restos del vestido debajo de ella botado en el suelo. Recordó lo q debía suceder ayer, debía ser el día mas feliz de su vida, se había quedado dormida sobre los trozos de tela q ya no significa nada para ella.

- Lucy hija!!! - Laila seguía golpeando mientras lloraba - ¡¡Dejame ayudarte!!.

- ¡¡Nadie puede ayudarme!!! - Su voz salio como un rugido, un rugido desde el interior de su garganta, se levanto del suelo quedándose viendo su reflejo en el espejo,la pintura desecha, las ojeras bajo su rostro, hasta ella misma se daba lastima - ¡Vete!! ¡Quiero estar sola!!

- ¡Hija por favor!! - Laila no paraba de llorar - ¡¡Escuchame! ¡Debes hablar con Sting!!

- ¡No!! - Ese nombre le causo un tanto dolor q sus lágrimas no tardaron en salir de sus ojos como si fueran manantiales,y su alma volvió a encogerse de furia. Con el odio emanando en su cuerpo empezó a arrasar todo lo q había en su cómoda, tiro de na colcha de su cama,abrió el armario tiro toda su ropa al suelo. Todo absolutamente todo lo q había allí le recordaba lo q era ella,lo estúpida q era ,y lo q había llegado hacer con ella. Cogió el joyero lanzándolo contra el espejo - ¡¡Dejarme!! ¡Sola!! ¡Sola!!!.

- ¡¡Dios santo Lucy!! ¡¿Q haces?! - Laila se aferraba ala puerta preocupada al oír los gritos - ¡¡Para hija!! ¡¡Por favor!!.

- Lucy miro los trozos de cristal esparcidos en el suelo, se agacho agarrando un trozo, despacio lo depósito en su muñeca ¿Se atrevería a quitarse la vida? ¿por el? ¿Acaso el lo merecía?

- Ni siquiera mereces mis lágrimas - lanzo el cristal contra la puerta y paso sus manos contra su cara limpiándola - Juro q me vengare por lo q me habéis echo.

Con la mirada repleta de odio entro al cuarto de baño, abrió la ducha de agua fría y se metió dentro con la ropa puesta, libero su cabello de las pinzas bajo el agua y se sentó dejando q su cuerpo se limpiara, con la mirada pérdida.

No volvería hacer esa estúpida,una ilusa q creía en la felicidad,el amor. Nada existía. Ellos le habían arrebatado su esperanza su ilusión y si algo podía jurar en esta vida es q nadie, nunca jamas volvería a burlarse de ella. El odio recorría cada parte de su cuerpo, la furia hacia arder su sangre,pero aun peor el odio hacia enfriar su corazón. Salio de la ducha mirándose en el espejo del baño, se quito la ropa y allí mirando su reflejo se juro q la Lucy q conocían no volverá jamas.

Con un pantalones vaquero y sostene , sus sandalias y el pelo recogido en una coleta salio de la habitación. Solo llevaba su bolso nada mas, por q no necesitaba nada,dinero,tarjetas y por supuesto los billetes de avión. Cuando bajo las escaleras de su casa se encontró con la mirada de su madre quien la veía con los ojos llorosos, no la miro, siguió hasta la puerta.

- Lucy ¿A donde vas? - Su madre le siguió preocupada con la mirada.

Cuando están por abrir la puerta esta se abrió sola y por un momento sus ojos amenazaron en llenarse de lágrimas de nuevo, pero luego recordó su promesa y se secaron con el fuego de la rabia. Lissana se encontraba frente a ella bajo la mirada hacia al suelo si capaz de mirarla ¿Como había podido hacerlo todo este tiempo?

- Apartate - Las palabras de Lucy salieron de su boca con desprecio.

- ¿Vas a hablar con Sting? - Lissana se hizo a un lado,al fin alzo la vista con la preocupación en el rostro.

- ¿Debería hacerlo? - Cerro los ojos por un momento para ser capaz de soportar todo esto, mientras su madre miraba a ambas llorando - ¿No prefieres ir tu? - estoy segura q tu ...te entiendes mejor q yo... con mi marido

-Entonces no era tu marido - Lissana la miro embelesada - y si quieres q me disculpe, no soy la única q es culpable.

- Tienes razón tu eres mi hermana, solo por eso tu conciencia debería estar sucia - Lucy miro de reojo asu madre - Eso si tienes conciencia,pero la única culpable aquí soy yo, por confiar. Ahora ya se con quienes estoy alrededor.

- Es un hombre y yo una mujer - Lissana se escuchaba nerviosa - ¿como crees q deba soportar estar contigo sin sexo? Yo no he sido la primera, esto es tu culpa. Por no darle a tu novio lo q necesitaba.

- No eres mas q una zorra - Y ante la sorpresa de su hermana y su madre. Lucy levanto la mano y le dio un fuerte guantazo a Lissana. Había dejado salir todo su dolor,su rabia pero había aun mas en su interior - ¿De verdad crees q el ha sentido algo mas por ti? ¿Entonces por q se caso conmigo? ¿Por q me pidió matrimonio en lugar de ti,si eras tu la q le daba lo q necesitaba? No has sido mas q su zorra, pero eso es lo q te mereces.

- Lucy!! - Laila gimió ante las palabras de sus hija.

-No te preocupes madre - Camino hacia la puerta pero antes de salir se paro y se dio la vuelta para mirar a su hermana - ¿Lo quieres? Todo para ti, te regalo a mi maridito.

El alivio recorrió su cuerpo cuando salio de aquella casa ¿Y ahora? Ahora hacer fuerte, a cambiar de vida, a demostrar a todos quien era Lucy. La nueva Lucy. Subió a su coche y salio a toda velocidad de alli.

Una vez en el aeropuerto la mujer q le atendió se sorprendió al ver q no había maletas por facturar. Apenas quedaba una media hora para q el vuelo saliera, aun se sorprendía a ella misma al ir sola a ese viaje. Se suponía q era una forma de vengarse de Sting, se iba ala luna de miel, sola y estaba segura q al llegar ahí su vida cambiaría.

¿Q necesitaba? Tiempo valor, valor para hacer esa mujer q no había podido ser, pero ahora podría. Entró al baño y saco el otro billete de avión ¿Q hacer con el? Ladeó la cabeza mirándolo, saco un mechero de su bolsillo y lo prendió fuego.

- Espero q seas feliz - Dejo caer el papel ardiendo en el lavado - Por q te aseguro q yo lo seré.

Y en el avión directo a hargeon ella solo ,ese era su viaje de novios, su luna de miel sin embargo el asiento de su costado estaba vacío, como estaba su corazón, como estaba ella.

Jamas pensó q Sting le pudiera hacer eso, engañada y con su hermana, su hermana la mujer q había admirado por tanto tiempo ¿por ser atrevida? ¿por ser lo q quería? ¿por hacer lo q ella quería? ¿por ser libre? Pero ahora ella sabia lo q era,una zorra, una mujer sin escrúpulos q no había dudado en quitarle lo mas valioso q tenia. Pero si existía justicia en este mundo, ella pagaría por todo Ambos pagarían por el dolor q le habían causado.

Por q si algo tenia en claro, la dulce Lucy había muerto en el momento q los encontró ahí, en su propia boda ahora solo le importaba ella solo ella.

Al fin el avión aterrizó, y allí estaba ella en la puerta del aeropuerto, con su bolso y buscando un taxi. Tenrouhima, la principal isla de hargeon, el mismísimo paraíso y ella iba a vivir ,reír, saltar, ella iba a cambiar.

- ¡¡Taxi!! - Ella levanto la mano auno de los vehículos q pasaba por ahí, camino hacia el y cuando se proponía abrir la puerta otra mano le gano.

- Perdón tengo prisa!! - un hombre alto y moreno con el cabello rosa, entro al auto , lo cerro rápidamente y el vehículo desapareció.

- ¡¡He!! - Lucy apretó la mandíbula molesta ¿Como no iba a ser un hombre? Todos ellos no merecían la pena ,pero sobretodo ese color de cabello rosa!!! Definitivamente odiaba a los hombres.

Después de tomar otro taxi y dar la dirección al taxista saco de su bolsa su celular, y allí estaban llamadas , mensajes de texto, y mensajes de voz

Su madre,su amiga ¿y el? ¿Como se atrevía Sting a llamarla? No siquiera tuvo el valor de leer los mensajes ,apago su celular y lo guardó en lo más profundo se su bolsa.

- Hemos llegado señorita. Bienvenida a tenrouhima - El hombre la miro con una sonrisa.

- Gracias - con una sonrisa forzada pago al taxista,bajo del vehículo y se adentro al hotel, sin duda era precioso y muy caro,caro ,sin duda alguna Sting nunca escatimaba en dinero Cuando se trataba de ella .... Descarado. Por supuesto su padre no era menos un hotel muy lujoso y con los gastos pagados, pues bien ,gracias a ellos ella disfrutaría todo eso.

- ¿En q puedo ayudarla? - Una chica le sonrió detrás del mostrador, en su uniforme pudo ver su nombre levi.

- tengo una reserva - Lucy funcido el seno - la suite dulce paraíso.

-Un momento por favor - La chica empezó a teclear en su ordenador - ¡Ah si señora Eucliffe!. De luna de miel ¿Espera a su esposo o quiere la llave?

- No hay ningún esposo - La respuesta de Lucy fue brusca y la mujer abrió los ojos haciendo q mierda el labio nerviosa - Y por favor no me llame señora Eucliffe.

- Claro - La chica asintió - Disculpeme le entrego la llave, se giro y cogió la llave del armarito, después se la entrego - Espero q disfrute su estancia en nuestro hotel.

- Mucha gracias - Lucy asintió y camino rápidamente hacia dentro del hotel, tomo el ascensor ¿Señora Eucliffe? No ella no era esa, no era la mujer de el, por q la verdad ella jamas se había entregado a el y jamas lo ara.

Cuando llego Ala suite dulce paraíso, una mezcla de tristeza y rencor y odio la recubrió,vio como todo ya estaba listo para la luna de miel,los pétalos sobre la cama el changpagne en la cubeta sobre la mesa, las fresas con chocolate, velas aromáticas, bombones,odiaba ella odiaba esa habitación, la gran cama redonda con el diésel colgando de ambos lados, camino hacia la puerta q debía ser el baño. Y como no .... Era gigantesco ducha de hidromasaje una bañera redonda, salio ala puerta de la habitación y vio un vestidor ,recordó q no llevaba nada de ropa, tenia q ir de compras. Después de pasear de nuevo por la habitación, camino hacia la gran cristalería, abrió las puertas y salio ala terraza, las vistas eran espléndidas,el sol, el cielo azul, el agua clara, la arena blanca de la playa.

Sin duda estaba en el paraíso,sola pero en el paraíso

Esa era su luna de miel y q Dios fuera testigo q iba a disfrutarla, por supuesto sin el desgraciado de su marido ¡Q Sting se fundiera en el infierno!