La flota de Darth Etray inició una copiosa lluvia de disparos sobre las naves que defendían Yavin IV, de inmediato Obi Wan desde su caza ordenó:

- ¡Rápido! ¡Acción evasiva!

Todos los cazas se desviaron de regreso a las naves capitales las cuales comenzaron a abrir fuego contra la flota enemiga.

Por mientras en el puente de mando del "Orgullo del Núcleo" Darth Etray ordenó a sus oficiales:

- Desplieguen todos los cazas disponibles, vamos a pulverizar a esa flota cueste lo que cueste y al mismo tiempo manden a los bombarderos hacia la superficie y para que devasten su preciado templo.

- ¡A la orden, Lady Etray! – contestaron los oficiales.

Rápidamente los cazas salieron de los Venator y de las bahías ventrales de los Victory y los Imperator dividiéndose en 2 escuadrones, el primero comenzó a volar alrededor de las naves capitales de la flota de defensa planetaria mientras que la hora mitad se dirigió hacia la superficie del planeta para comenzar el bombardeo, al percatarse esto Ahsoka le dijo a Anakin y Obi Wan:

- ¡Maestros! Hay naves que se dirigen al planeta ¿Qué hacemos?

- Tendremos que regresar – dijo Anakin.

A lo cual Obi Wan dijo:

- Ustedes encárguense de defender el templo, Rex y yo defenderemos la flota.

- De acuerdo, maestro – dijeron ambos ex jedi.

Y antes de separarse Obi Wan le dijo a Anakin y a Ahsoka:

- Que la fuerza los acompañe.

- Igualmente, maestro – correspondieron ambos jóvenes.

Anakin y Ahsoka regresaron al planeta mientras Obi Wan se dirigía hacia las naves capitales, entonces el maestro contactó al almirante a cargo de la flota para explicarle su plan:

- Almirante, aquí habla Obi Wan, Anakin y Ahsoka se dirigen hacia el planeta para resguardar el templo, necesito que divida sus fuerzas para que una mitad defienda el planeta y la otra defienda las naves capitales.

- Negativo – contestó el almirante droide – eso mermaría nuestras fuerzas reduciendo la esperanza de vida de nuestra flota de 20 minutos a solo 7 minutos.

- No se preocupe por eso almirante, los clones y yo haremos todo lo posible para ayudar a sus fuerzas en la defensa de la flota.

El almirante droide procesó a la solicitud de Obi Wan para finalmente acceder:

- De acuerdo, ordenaré a los cazas dividirse para ayudar a defender la superficie, por mientras contactaré con las flotas cercanas para que envíen refuerzos, pero advierto que las probabilidades de victoria en estas condiciones son de menos del 1%.

Acto seguido el almirante ordenó a la mitad de los cazas dirigirse hacia el planeta para unirse a Anakin y Ahsoka en su defensa del templo.

Más abajo en la superficie las alarmas comenzaron a sonar mientras el general a cargo de la base ordenaba:

- ¡Atención a todas las unidades! ¡Cazas enemigos han sido detectados penetrando en la atmósfera! ¡Preparando baterías antiaéreas y escudos deflectores!

A su vez en los hangares el Maestro Yoda junto a los demás padawans, maestros sobrevivientes y miembros del consejo subían a sus cazas para defender el templo y toda la base mientras en los alrededores los tanques, torretas, cañones y misiles comenzaban a apuntar hacia el cielo para derribar a las naves enemigas que poco a poco se iban acercando.

Una vez en su caza el Maestro Yoda le dijo a los demás Jedi:

- De nosotros la supervivencia de la base depende, claridad y concentración les pido.

- Como usted diga maestro – contestaron Plo Koon y Jocasta Nu.

- Que la fuerza los acompañe a todos – concluyó Yoda.

Todos los cazas Jedi salieron de la base escoltados por una docena de cazas droide que se habían quedado para defender la base, mientras que a la distancia los capitanes droides vigilaban el cielo hasta que finalmente divisaron a los cazas, entonces al unísono ordenaron abrir fuego haciendo que una intensa descarga de disparos y misiles emergieran de los tanques y torretas ocultas en la frondosa selva a la vez que los cazas imperiales tomaban acción evasiva intentado esquivar los disparos y bombardear las posibles ubicaciones de los emplazamientos antiaéreos al mismo tiempo que la fuerzas de defensa del templo salía a encontrarse con los cientos de cazas imperiales que inundaban el cielo iniciando una feroz batalla en los cielos de la boscosa luna de Yavin IV.

Por otro lado, en Mandalore se estaban dando también de forma simultánea 2 masivas batallas, la primera de ellas se libraba en la órbita de aquel planeta entre la mega flota imperial del almirante Yularen contra la flota planetaria y los refuerzos comandados por el recientemente promovido almirante Mar Tuuk donde las naves de ambos bandos intercambiaban una masiva lluvia de disparos cayendo cruceros de ambos bandos a cada minuto que pasaba a la vez que los cazas Confederados se batían a duelo contra los cazas Imperiales adornando el espacio con copiosas explosiones y escombros.

- ¡Intensifiquen el fuego delantero! ¡Concentren los disparos a los motores y puentes de mando de los cruceros enemigos más cercanos! – ordenó Mar Tuuk.

- ¡Roger, Roger! – respondieron los artilleros.

- ¡Que nuestros cazas separen a los cazas enemigos de sus naves capitales! Hay que privarlos de sus defensas para después pulverizarlos, también necesito que envíen refuerzos a la superficie.

A su vez en la superficie de Mandalore también se estaba llevando a cabo una intensa batalla entre los cazas Mandalorianos comandados por Bo-Katan apoyados también por los cazas droide contra los cazas imperiales los cuales revoloteaban alrededor del domo de la ciudadela intentando bombardearlo mientras que las baterías antiaéreas de la misma mantenían un fuego constante contra los cazas enemigos:

- ¡No los dejen acercarse a la ciudad! – ordenó Bo-Katan.

- Cómo usted ordene – respondieron los demás pilotos.

Luego la mandaloriana se comunicó con las defensas de la ciudad:

- Intensifiquen la potencia del fuego antiaéreo, nosotros trataremos de alejar a los cazas imperiales.

- Entendido – respondieron desde la ciudad.

Poco a poco más cazas droide provenientes del espacio comenzaron a reforzar las defensas en Mandalore empujando lentamente a los cazas imperiales sin perjuicio de las pérdidas que poco comenzaban a llover por los alrededores de la cúpula.

De regreso al espacio el Almirante Yularen comenzó a notar que lentamente la balanza se inclinaba a favor de los Separatistas por lo cual y tras ser notificado de la llegada de la flota de Darth Etray al sistema Yavin, ordenó a sus naves iniciar los preparativos para reforzar la flota de Etray:

- Ordenen a los cazas regresar a las naves, ya es momento de retirarnos.

- Copiado, almirante – respondieron los oficiales.

Desde la nave insignia de aquella mega flota ordenaron a todos los cazas regresar a los Venator para marcharse, al notar aquello Mar Tuuk ordenó a sus cazas perseguir y derribar a cuantos cazas imperiales pudieran mientras que las naves capitales intentaban lo mismo con los destructores del Imperio.

En la superficie, los cazas liderados por Bo-Katan comenzaban a repeler a los cazas imperiales cuando notaron que los mismos comenzaron a retirarse de regreso a la órbita del planeta.

Finalmente la mayoría de los cazas alcanzaron a llegar a sus respectivas naves capitales para que estas rápidamente entraran al hiperespacio dejando tras de sí a los destructores y cazas dañados que superaban el centenar los cuales en su mayoría terminaron por ser destruidos por la flota de Mar Tuuk mientras otras simplemente se rindieron siendo capturados por los droides, pero la alegría sería efímera ya que rápidamente llegaría la señal desde Yavin IV informando del ataque masivo liderado por Darth Etray antes de perderse dicha transmisión a lo cual Mar Tuuk ordenó retransmitirme el mensaje mientras él preparaba su flota para ir hacia Yavin a reforzar a las escasas defensas de aquel planeta.

Por su parte Bo-Katan informó que no tomaría parte de la misión ya que consideró que era mejor quedarse en Mandalore para constatar los daños a la ciudad y liderar las defensas planetarias por lo que también solicitó a Mar Tuuk disponer una pequeña flota para el efecto.

Mientras tanto en Dathomir la batalla también era intensa, Tarkin aprovechó la brecha que se estaba creando en la flota planetaria para mandar cazas a la superficie a bombardear la fábrica droide que se estaba construyendo en la superficie de aquel fantasmal mundo, pero las defensas antiaéreas y los cazas de mi flota rápidamente fueron enviados a reforzar a las defensas de superficie para intentar minimizar los daños, me pude dar el lujo de realizar ese movimiento solo porque la flota de refuerzo en forma de cuña había conseguido romper a la flota de retaguardia comenzando su ataque contra la flota de Tarkin la cual tuvo que desviar su lluvia de disparos para proteger la retaguardia, al mismo tiempo Tarkin, ya enterado de la llegada de Darth Etray a Yavin, ordenó a su flota y a la flota de retaguardia cerrarse sobre ambas flotas Separatistas para tener una línea continua de ataque y a la vez tener el paso libre para saltar al hiperespacio, la mitad inferior de la flota de retaguardia fue rápidamente embolsada por nuestras naves, pero Tarkin decidió prescindir de esas naves ya que de todas formas el objetivo principal era destruir Yavin, el bombardeo a Dathomir era solo parte de la distracción planeada por Etray para concentrar la flota separatista lejos de Yavin.

Los minutos pasaron mientras la batalla continuaba estando bastante nivelada, pero poco a poco la superioridad de nuestros cazas comenzó a causarle problemas a Tarkin lo cual se vio reflejado en la destrucción de varios Venator y un par de destructores Victory en poco tiempo, entonces recibí una transmisión importante Mar Tuuk quien me dijo:

- General Grievous, la flota de Imperial en Mandalore se ha retirado, pero recibimos un reporte de otra flota Imperial masiva atacando Yavin IV, sus defensas han sido mermadas, pero ya iremos a reforzar ese frente.

- ¡Maldición! Los Imperiales seguro que usaron el ataque a Mandalore y Dathomir como distracción para aprovechar de atacar Yavin IV, de acuerdo almirante, vaya lo más rápido posible, pronto también pondré rumbo a Yavin IV cof... cof...

- A la orden, General – dijo el Neimoidiano.

Luego de eso dije:

- No me extrañaría que la flota que atacó Mandalore vaya a reforzar a Yavin, espero que las defensas puedan aguantar lo suficiente o si no el planeta será un desierto infernal para cuando lleguemos, muy bien ¡Acabemos con esto de una vez! Si Tarkin no quiere ceder lo obligaré a ceder ¡Que los cazas comiencen con los ataques kamikaze! ¡Desvíen la energía de los escudos hacia las baterías principales!

- Roger, Roger – respondieron todos.

Tras mi orden las naves de mi flota intensificaron sus disparos mientras los cazas se volaban a toda velocidad impactando contra los puentes de mando de las naves imperiales y contra sus motores al mismo tiempo que nuestros disparos comenzaron a causar destrozos en las naves imperiales que teníamos más cerca, ante eso Tarkin consideró:

- Bien ya hemos sufrido suficientes daños, refuercen los escudos deflectores de popa, que los cazas regresen y pongan curso al sistema Yavin ¡Ahora!

- ¡Sí, almirante! – respondieron todos.

Rápidamente las naves de la flota de Tarkin dieron media vuelta para proceder a saltar al hiperespacio mientras unas cuantas eran pulverizadas por los cazas y por nuestra artillería para finalmente escapar de Dathomir, a lo cual rápidamente ordené poner rumbo a Yavin para reforzar la defensa de aquel planeta no sin antes disponer de una flota defensiva de al menos un centenar de naves.