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Chaeyoung, no sabía bien por donde empezar, nadie se había movilizado, todos estaban exhaustos por tantos imprevistos de esa boda que pintaba para ser tan lujosa, exitosa y próspera; grande gente adinerada estaba reunida ahí. Mucha gente con buenos puestos, con cheques de millones y vida de lujo, otros tantos deportistas mediocres que gozaban de destruir fiestas, en esa fiesta hubo de todo, diferente nacionalidades, diferentes estatus sociales, todo, fue una fiesta que no se cerró a nada, es más, hasta tuvo tremenda famosa en ese lugar, cosa que Chaeyoung no sabia.

Estaba tan decaída y cabizbaja porque nadie le hizo caso a la voz de Dan y todo el mundo los observó atentamente como si fueran un trio de loquitos que pedían elefantes rosas, los veían como si estuvieran safados de la cabeza, y nadie, nadie quiso ayudarlos.

— No importa Chaeyoung, nosotros buscaremos en esos treinta y dos pisos, ¿Esta bien?— no iban a terminar en un día, eso era seguro. Solo eran tres personas, para quien sabe cuántas habitaciones había en todo el lugar, no era justo, no se sentía justo ¿Por qué todo lo malo le pasaba a Chaeyoung? Aseguraba que debía ir con un curandero a que la limpiara porque esa mala suerte no existía ni en viernes trece.

Aún así no se quiso dar por vencida, limpió sus prendas llenas de pastel y estaba dispuesta por empezar a buscar en todo el hotel, no importaba si no dormía, si las horas pasaban o los pies le dolían, no importaba, ella debía saber dónde está Myoui Mina, saber que rayos pasaba con ella, y porque la había dejado en plena fiesta.

Le debía toda una granja de animales a lado suyo, no podía irse como si nada, no podía dejarla ahí, se aferraba a la idea de que Mina era diferente a cualquier otro ser que conoció, era como una hada de campo, si, así mismo se la imaginaba.

Estaban por irse, cuando alguien llamó a Somi, la llamó casi con burla, como si no quisiera decir la verdad que conocía y fuera más por compromiso; a pesar de que llamaron a la novia, los tres fueron en caminito a ver qué era lo que el amigo de Axel, tenía por decirle.

Ellos se acercaron a la mesa de los seudodeportistas y todos se reían entre dientes ahí, es como si los años no hubieran pasado y Chaeyoung siguiera siendo carnada de esos idiotas.

— ¿Que pasó Alex?— incluso el simple nombre le irritaba a Chaeyoung, odiaba Alex, a Axel, a Juan y a George, y eso solo por mencionar a algunos, aún faltaban muchos que formaban parte de la lista negra de Chaeyoung.

Alex fingió inocencia, y con la mejor cara de mosca muerta, preguntó con voz demasiado fingida un...

— ¿A quien buscan?— como si él no fuera culpable de toda la estampida que llegó, como si él no fuera el mayor hijo de puta cancelado en todas las redes sociales, más en Twitter donde el odio por el usuario de @alex,h0t era hasta trending topic, por todos los comentarios que recibía en ese momento, las fans de Misamo era completamente defensoras.

— Estamos buscando a una chica, su nombre es Myoui Mina ¿La han visto? — todos fingieron demencia y se miraron entre ellos como si se preguntaran si la habían visto.

— No conocemos a nadie con ese nombre— saltó George con voz burlona, Chaeyoung giró los ojos con bastante molestia. Le molestaba de solo verles, estaba a nada de bajar el modo "treat people with Kindness" y volverse modo "bad blood" de Taylor Swift, y es que le caían tan, pero tan mal, que de verlos le dolía la panza por tal coraje que lo estaban haciendo pasar

— No se hagan idiotas, era la chica que estaba aquí, conmigo; que por cierto, les cayó la boca sin que ustedes dijera pio, ¿Ya la recuerdan? ¿O quieren que les recuerde lo que les dijo? — Alex sonrió como mucha sorna, como si supiera que eso ya no importaba, era el rey de los estúpidos, más que el príncipe encantador de Sherk.

— Oh, ya sé, la rubia con cara de maricona — Son respiró profundo para no caer en la locura.

— La misma cara de maricón que tienes tú, Alex.— le dijo Chaeyoung con una sonrisa, para ella no era un insulto realmente, pero sabía que para ellos era como desheredarlos, la homofobia que se cargaban era bastante fea.— y todos en esta mesa, en realidad. Es más, me voy a ir armando Ships, ¿Me ayudas, Dan?

— Claro que sí, Chaeyoung, será como en los libros que me leo en Wattpad.— confesó él y comenzó a ver las feas caras de todos los presentes en esa mesa. Algunas de las chicas fueron amigas suyas, pero se veían tan mal estando calladas, que sintió lástima por ellas por estar casadas con hombres imbéciles

— Oh cállate, nosotros sabemos quién esa rubia idiota que tenías a lado, que por cierto...— Axel remarcó eso viendo a Chaeyoung como si ella supiera todo lo que le daba miedo a Chaeyoung— Desapareció.

— Seguro es el karma, porque tú desapareciste así ¿Lo recuerdas?— dijo Alex con burla nuevamente, como si quisiera humillarla ahí, el problema era que Chaeyoung ya no se quedaría callada nunca más

— Ay pobrecito, me amabas tanto que sufriste mi partida, te entiendo, si yo fuera tu, también me enamoraría de mi.— lo miró con lástima fingida, le sonrió plenamente y el otro se puso colorado del enojo.

— Eres una hija de...— Axel lo interrumpió con un movimiento de su mano, como si tuviera completo control de ella.

— Yo no sé quién es Myoui Mina, pero si se quién es la chica que estaba a tu lado.— trataba de meterle cizaña para que la espina de la duda se clavara en Chaeyoung, no había motivo, solo quería molestar.

— ¿Ah si? ¿Quién?— trató de que no fuera muy obvio, pero tragó saliva nerviosa, aún habían inseguridades que le llegaban muy dentro suyo.

— Es Myoui Sharon— le dijo con una sonrisa fea, Son frunció los ojos— deja que te lo muestre.— sacó su celular y googleo el nombre y ahí le apareció la foto de Mina en un escenario y toda la información que podría poner Google.

— ¿Qué?— ni sabía que decir en cuanto vió que en efecto, ese era su Mina, su Mina era una mujer con fama, quién había estado aquí, y es por eso que toda esa gente llegó.

Todo llegó a su cabeza como si fuera un rompecabezas con piezas completas; por eso mismo le preguntó dos veces si no la conocía, por eso mismo no quería salir de ahí, todo fue completamente claro, es por eso que tenía una Manager, es por eso que se tuvo que alejar, no era nada de lo que su cabeza a había mencionado, no era su novia, no estaba casada, no era una villana, nada; solo era una famosa, no sabía que era peor.

— Así es, Chaeyoung. Pasaste de ser el secreto de Somi a ser el secreto de una Idol, eso es escalar de nivel, Chaeyoung— secreto, secreto, secreto. eso retumbó en su cabeza, Dan vió mal a Axel y Chaeyoung solo susurró

— No... No puedo creerlo, ella, ella es una...— estaba completamente en Shock.

— Si, una famosa, eres estupenda, Chaeyoung, te ligaste una grande.— no, no quería eso. No quería ser secreto de nadie más, ni quería volver a estar en la sombras.

— Por cierto Dan, si no lo sabías, aquí estas dos "mejores amigas", eran más amigas ¿Lo sabías?— Dan no lo sabía, pero solo sonrió y asintió, no sabía pero lo sospechaba, las noches en las que lloró Somi con culpa, él fue testigo de las veces en que Somi estuvo viendo el teléfono pero no tenía el valor de llamarla, lo sospecho, eso no lo hacía por alguien que fue simplemente tu amiga, él lo sabía, sin saberlo realmente.

— También sé que ustedes son unos idiotas más cerrados que una roca, además de que arruinaron mi fiesta eso les saldrá demasiado caro. Pero como soy tan bondadoso, solo ustedes limpiarán todo, toda la recepción...¿esta bien?— todos se quedaron boca abierta, atónitos por no saber que era lo que salía de la boca de Dan, Somi estaba muda

— ¿Que?— se atrevió a articular Axel.

— ¿Son sordos o muy pendejos?— le preguntó Dan a Chaeyoung.

— Ambos — le aseguró

— Ustedes deben limpiar todo el salón si no quieren que presente cargos legales por filtrar información y locación de una famosa. Además de invasión a vida privada y perjuicios a mi persona no olvidemos que el hotel es de lujo y esto los dejara en un horrible desajuste, pues estoy seguro que hablan mal de su seguridad. ¿Quieres que continúe o ya traigo los cepillos?— Todos quedaron callados.

— No nos puedes acusar de eso.— articuló Juan por primera vez en la noche.

— Oh claro que si, si puedo ¿Quieres ver?— le amenazó pero Axel acepto, no podía tener algo legal en su carta, los del trabajo no lo dejarían continuar trabajando.

— Lo haremos — aceptó.

— Así se habla.— felicitó falsamente— Chaeyoung, debemos ir a las habitaciones de hasta arriba, son tres, creo, ellos deben estar ahí.

— Seguro.— ambos de la mano caminaron directo al ascensor, con Somi detrás de ellos, salieron del salón y pasaron a la recepción, los tres se dirigieron al elevador y entraron, no había nadie para su suerte y nadie subió en el camino, el silencio esta vez no fue incómodo, Dan llevaba a las dos de ambos brazos y veían como cambiaba los colores del número del ascensor dependiendo el piso donde pasaban, está el hombre que atendía el elevador ahí parado, ignorando a los tres habitantes del elevador, eran 32 pisos y el elevador no tardó mucho en subir, la musiquita del lugar era tranquila, un Jazz bastante parecido al que escuchaba en la recepción de su oftalmólogo.

Llegaron al piso y entonces las manos de Chaeyoung sudaron demasiado, si la música la había tranquilizado ahora ya no más, no había más música que tranquilizara sus pasos y se sentía tan patética ahí, que se estaba arrepintiendo, nunca había buscado a nadie, dejaba todo ir; no buscó a la chica que le dio su número en el café, ni tampoco a la vecina que le coqueteó con descaro, no buscó a Somi cuando se fue, ni buscó a su familia nuevamente, Chaeyoung acostumbraba a no buscar por pena, pero esta vez su cerebro le dijo: Mina vale la pena.

— Hay dos puertas, la de enfrente está vacía porque es la que nos dieron para hospedarnos, así que no perdamos el tiempo y toquemos en estas dos; tu tocas en la derecha y yo la izquierda, Somi, tu vigila el ascensor, mi amor — Somi asintió y se quedó parado en el elevador, de pie a espera de que ese ser, que le caía mal si somos sinceros, llegará.

— Entendido.— quedó como un guardia del elevador mientras el señor del elevador cerraba las puertas.

Chaeyoung no se hizo esperar, era introvertida, si. Pero eso no importó mucho esa noche; tocó la puerta, una, dos, tres veces y esta no se abría desesperándola al momento, temía que por más que tocara nadie abriera, Dan, al ser introvertido poco menos que Chaeyoung, pero lo era de igual manera estaba planeando mentalmente que decir, estaba planeando el monólogo mientras escuchaba los toquidos de Chaeyoung, no tocó, seguía planeando que decir para no meter el pie y cagar todo.

Tardaron tiempo en abrir la puerta que Chaeyoung tocó, pero en el momento en que la puerta se abrió, la puerta de Dan, que aún no era tocada, se abrió al mismo tiempo.

Chaeyoung miró a la mujer enfrente de ella, con cara de amargada y con superioridad en la mirada, esto no podía ser posible, esta mujer no era Mina, esa mujer con pelo canoso y como cincuenta años no era Mina

— ¿Se te perdió algo, niña?— preguntó al verla callada, la mujer odiaba que interrumpieran su sueño y Chaeyoung lo había hecho, para después no decir nada.

— Lo siento, me equivoqué de lugar y...— quería justificarse, de verdad iba a hacerlo, pero la mujer le interrumpió de inmediato y no la dejo terminar.

— Si, si, si, como sea.— le cerró la puerta en las narices, ella se alejo de la puerta de espaldas a Dan.

— Dan, te juro que esta señora es muy rara...— se giró y Dan, el pobre estaba en Shock, la verdad es que no entendía como es que esa chico era tan guapa, una mujer con maletas estaba con cara de odio... La misma chica alta, su manager, Dan estaba boquiabierta por lo bonita que era Jeongyeon y Jeongyeon estaba completamente seria. Sin saber que le pasaba al chico. Dan reacciono rápido y comenzó con su discurso.

— Buenas noches señora, disculpe, solo quería saber si en este lugar, se encuentra Myoui Mina.— se felicitó internamente por lo bien que le salió ese discurso que se repitió mentalmente más de seis veces.

— No, no está aqui, ¿Quien eres tu?— genial, pensó Jeongyeon, lo que me faltaba; reporteros retos.

— ¿Yo?— la chica se señaló a ella misma— soy Dan, el novio.

Jeongyeon comenzó a carcajearse en ese mismo momento, una risa que hasta le dolió el estómago por tanto, ni Chaeyoung, ni Dan entendían.

— Imposible, Myoui Mina no gustaría de usted, no puede ser su novio.— Jeongyeon más que nadie sabía que en efecto, su amiga gustaba de las mujeres y no de hombres, es por eso que de rió como una loca

— No, o sea, no soy su novio, si no el novio de la fiesta donde estuvo.— Jeongyeon paró en seco, puso la cara seria y comenzo con su discurso para nada esperado, sabía que amiga debía pagar daños si es que los hizo.

— Oh, entiendo. ¿Hizo algún daño?— Dan negó rápidamente y Son estaba tan callada, que se sentía una piedra.

— ¡Usted la conoce!— exclamó Dan divertida, Jeongyeon solo asintió.

— Si, pero no está y ya es hora de marcharme.— pidió para que ambos se quitaran de la puerta, no creía que los fans llegarán a ese extremo de buscarla en su habitación, eso rozaba a el acoso, capaz el novio era un fan más y la estaba buscando por fama, era eso o pagar daños.

— Oh, por favor, déjeme verla. Mi amiga la busca.— pidió en suplica y puso sus manos juntas para suplicar, Jeongyeon solo negó.

— Chico, si Myoui Mina rompió, tiró o arruino algo, mándeme por correo el costeo de los daños y yo lo depósito.— le quitaría dinero del banco a Mina para pagar y listo, no había problema.

— ¿Bromea? Me dió la mejor boda de la vida, pero Chaeyoung lo busca enserio, solo quiere despedirse.— ese nombre... Chaeyoung, lo había escuchado, ¿Chaeyoung? ¿Chaeyoung? De donde lo recordaba...

— ¿Quien dijo?— repitió de nuevo.

— Chaeyoung — repitió y entonces la coreana cerró la puerta en cara de ambos. Genial, estaba perdido todo, Chaeyoung tomó el brazo de Dan quién se puso furioso al instante y la jalo un poco del brazo.

— Ya vámonos Dan.— Dan asintió y con los ánimos bajos le siguió.

Se giraron con dirección al ascensor, con los hombros caídos y creyendo que la guerra había terminado, error, fue un error y lo supieron en cuanto escucharon que de pronto la puerta se abrió, Chaeyoung no tomó en cuenta que salieron tres mujeres en seguida, seguidas de la coreana que conocieron anteriormente, las tres con maletas y con poco tiempo, Mina parecía que peleó con todo el mundo pues estaba agitada cuando gritó el nombre de la chica de la noche.

— Chaeyoung.— dijo para detenerla y lo cumplió, Chaeyoung se giró feliz y sin pensar más, corrió a los brazos de Mina.

— ¡Mina!.— gritó en cuanto llegó a sus brazos y Mina la recibió como si hubiera pasado años sin verse.

— ¡Chaeyoung!— volvió a decir su nombre y Chaeyoung enterrada en su cuello olió ese perfume con olor a frutas cítricas que le gustaba.

— Mina.— repitió de nuevo, Mina la abrazaba por la cintura y la elevaba del cielo

— Nayeon— dijo la misma Nayeon y su amiga le siguió.

— Momo— Momo se presentó siguiendo el juego.

— Yo soy Dan.— también les siguió el novio.

— ¿Que no estábamos presentándonos?— preguntó Nayeon cuando Mina les miró mal.

— No, esfúmense—pidió, dios, estaba tan nerviosa al creer que no iba a verla otra vez y aquí estaba la castaña, se sentía tan bien así, con ella abrazada de esa forma.

— ¿Tú eres Chaeyoung? — la mencionado asintió tímida —Yo soy Nayeon mucho gusto. No sabes cuánto ha hablado de ti Mina, que granjas, caballos y no sé qué más cosas, eres muy conocida aquí — Chaeyoung enrojeció al mismo tiempo que Mina.

— Cállate Nayeon.— Nayeon le sacó la lengua y quería volver a pelear con ella, pero decidió no hacerlo.

— Si bueno, mi amor, es hora de irnos.— se giró con sus maletas y de la mano de Jeongyeon caminó dos pasos hasta que vió a alguien parada en el ascensor— ¿Ella quien es?

— Ella es mi esposa, yo soy Dan un gusto conocerles, las Googlee hace un rato, es un placer verlas aquí en persona.— estaba tan nervioso de ver a chicas con esa fama que se cargaban, era rarísimo que él conociera famosos en persona, y al estar enfrente de ellas estaba nerviosísimo

— Hola Dan, me da gusto verte, el placer es mío.— le devolvió el saludo Nayeon, aún de la mano de su novia

— Espera... ¿ella es tu esposa?— habló Momo cerca del novio.

— Sip, apuesto que tú eres Momo.— Momo asintió y le dio la mano como saludo.

— Esa misma, un gusto. — le dió un apretón y la soltó — Por cierto, es hora de irnos... ¡Ay mierda Nayeon ella es Somi!

— Mi amor, agarrame la maleta un segundo, le doy una patada y corremos — dijo Nayeon mientras le daba la maleta a su novia, pero Jeongyeon no la dejó, la tomo más fuerte de la mano.

— No patearás a nadie, Nay — dijo con frustración.

— Es rapidito— hizo un puchero

— No, no mi amor.— le hablaba con tanto cariño que se sentía en el aire tanto amor.

— No me dejas hacer nada divertido— Jeongyeon le dió un besito y negó.

— ¿Por qué me quieres patear?— le pregunto Somi con miedo a que sí la pateara.

— Todavía preguntas, tonta — dijo Momo sacándole la lengua como un buen insulto.

— ¿Se conocen ?— preguntó Dan y su novia negó.

— No Dan, gracias al cielo no. Pero me contaron historias de ti.— habló Nayeon dándole una mala cara.

— Nosotras ya nos vamos, Nay, mi amor vamonos que nos esperan. Mina, es hora de irnos.— dijo Jeongyeon dirigiendo a todos al ascensor, cuando pasaron a lado de Somi, la chica se alejó con miedo a Nayeon y a Momo que la miraban mal, genial, ahora le caía mal a cantantes de fama mundial

— Dame cinco minutos.— pidió Mina y Jeong no pudo negarle nada.

— Te espero abajo

— Nosotras también nos vamos, Somi, necesito contexto de esa historia.— dijo Dan mientras la tomaba del brazo y los cinco bajaban por el ascensor.

Está de más decir que en ningún momento ambas se separaron, esta de más decir que el abrazo no se rompió, Chaeyoung continuaba aferrada a Mina y Mina a Chaeyoung.

— Con que eres una famosa... Cómo debería llamarte ¿Mina? ¿Myoui Sharon?... ¿Quien eres?— estaba enamorada de alguien que no sabía quién era.

— Para ti soy Mina, mucho gusto — soltó una risita y le vibró el pecho, esa vibración la sintió en la mejilla.

— Bebé a una famosa, soy afortunada — no quería soltarla, le envolvió el cuello fuertemente y enterró más su cabeza al pecho de la chica. Eso se sintió tan bien para ambas.

— Yo bese a un ángel. Soy más afortunada.— Son sonrió fuertemente.

— Fue buena noche, gracias por todo.— le dijo lo que sentía y más que el sentimiento que brincoteaba su pecho y que todos llamaban amor, ella sintió gratitud porque logró abrirle los ojos.

— Gracias a ti por aparecer en mi vida, Chaeyoung, te juro que fueron las mejores horas de mi vida.— horas... Solo eran eso, Horas.

— ¿Ni si quiera cuando subes al escenario?— Mina negó sin que Chaeyoung la viera.

— Ni si quiera eso, Chaeyoung.— Chaeyoung se sentía mucho mejor que un concierto lleno de euforia.

— Mina...— comenzó pero la mencionada la calló con un beso al separarla de su pecho, le dió un besito en la boca y luego continuó.

— Chaeyoung, tengo que decirte ciertas cosas antes de que me vaya y tiempo no tengo. Yo soy una Idol, tengo 25, soy japonesa pero viví bastante tiempo en Corea, tengo un perrito llamado Ray y me gustan los pingüinos, me gusta el ketchup y me gustas tú, gracias por encender mi corazón, que ahora es tuyo.— no sonaba mecánico, sonaba como un ser que tiene sentimientos pero que se le acaba el tiempo antes de que la noticia de su ida del hotel fuera dada, no había tiempo, Chaeyoung odiaba por completo el tiempo en ese mismo momento.

— Mina, yo...— solo quería decirle algo.

— Consejo uno, sigue tus sueños, no te conformes nunca, así te guste ser lo que sea que quieres hacer y que no alcance preguntar, busca lo que eres, encuéntrate contigo misma; perdona tus daños, regresa a casa si gustas hacerlo, conoce gente nueva, baila de noche tu canción favorita, aleja la melancolía, sana tu corazón completamente, escucha Misamo, y aléjate de quien te haga daño, sino estás bien con ciertas personas ponles límites y se fiel a ti misma siempre ¿Okey?— todo eso se lo dijo mientras la tomaba de las mejillas y la veía directamente a los ojos, todo eso lo dijo con el corazón abierto y los ojos siendo las ventanas del alma confirmaban cada palabra.

— Gracias, Mina. Lo tomaré en cuenta.— dijo mientras Mina limpiaba una lagrimita que salía de los ojos de Chae, la conoció de un día y la despedida le dolía, genial lucía patética.

— Debo irme.— dijo mientras la soltaba y tomaba sus maletas.

— ¿Mina?— la mencionado la miró.

—¿Si?— preguntó. Solo dos palabras y la tendría ahí. Renunciando a todo, solo dos palabras.

— Gracias por todo esto, espero vernos otra vez.— vernos otra vez... No estaba impidiendo su partida, nada de eso, solo deseaba verla otra vez ¿Acaso Chaeyoung no era el ser más bueno de este planeta? No estaba siendo egoísta y Mina agradeció eso.

— Espero lo mismo Chaeyoung, confía en el destino.— le dió una sonrisa y le tomó la mano, caminaron al elevador, pero aún no la llamaban.

— Sigue tu camino— le sonrió Chaeyoung y Mina asintió.

— Y yo seguiré el mío.— citó a 5 Seconds of summer en su canción favorita del álbum Youngblood.

— Y si estamos destinadas, te veo ahí.— meet you there. La mejor canción del álbum para ambas.

— Te veo ahí, yo sé que estamos destinadas.— dijo Mina dándole nuevamente un abrazo, llamó al elevador mientras Chaeyoung le abrazaba.

— Si, solo no es nuestro tiempo— tiempo. Tiempo, solo era eso, tiempo, nada más.

— Hay mucho tiempo en el mundo.— demasiado.

— Adiós Mina— Chaeyoung la besó en ese entonces, un beso, roce de labios, no era algo que las ataba, pero si algo que amarró el hilo rojo a sus dedos con la promesa de volver a encontrarse, promesas no dichas, solo confiando en el futuro.

— Adiós Chaeyoung.— el elevador se abrió y Mina entró, la miró para poder recordarla siempre, para recordar su rostro, sus ojos, su nariz, las mejillas, el cabello, los labios, su lunar, recordar a quien amó en una noche, quería recordarla siempre que quisiera, le sonrió una vez más con un dolorcito en el pecho y entonces, la puerta del elevador se cerró.

— Estuve encantada de conocerte — susurró viéndola partir, eso fue lo quería decirle

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N/A: "I was enchanted to meet you" 😭😭😭 Yo lloro, en fin, cualquier error me lo hacen saber <33