Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

51. Antojo de...ti 💕

—¿De qué? —la sonrisa de Magnus era enorme.

Alec también sonrió. Era raro, pero se sentía muy feliz, absurdamente feliz cerca de Magnus. Lo abrazó y habló cerca de su cuello: —Adivina.

—¿Helado? ¿Chocolate? ¿Fresas con chocolate? —Magnus hablaba de prisa, emocionado—. ¡Dame una pista!

Alec sintió que se sonrojaba por lo que estaba a punto de decir. ¿Cómo había llegado a esto? ¿Cómo pasó de no querer estar cerca de Magnus, de morir de miedo y vergüenza por ser juzgado y señalado como malo, a pedir lo que estaba por pedir?

—Quiero estar contigo, sólo contigo, solos. Quiero no tener que dar explicaciones a nadie. No preocuparme por lo que los demás dicen. Quiero poder abrazarte, besarte, sin miedo, sin pensar demasiado en lo que significa.

Magnus se quedó en silencio un momento, después sonrió, tímidamente esta vez. —¿Eso es un antojo, Alexander?

—Sí. Tengo antojo de mi encadenado —una de sus cejas se alzó y después los dos se rieron.

—Podemos ir a mi casa. No hay nadie ahí y tal vez esté un poco sucia... Es a donde habría ido si no te hubieras visto obligado a tenerme aquí, a aceptarme aquí...

Esta vez fue Alec quien se quedó en silencio un momento. Habló cuando pudo mirar fijamente los ojos verde dorado de Magnus, tan brillantes últimamente. Inesperadamente se arrodilló frente a él. —Perdóname.

—¿Por qué? —Magnus apoyó sus manos en los hombros de Alec, intentando ponerlo de pie de nuevo, mientras él aferraba sus caderas.

—Porque fui malo contigo, fui grosero. No quería tenerte cerca, tocarte —dejó sus manos moverse hacia su vientre en ese momento—, no quería verte ni que te quedaras aquí, incluso cuando estabas embarazado de mí...

—No hay nada que perdonar, Alexander. Para mí tampoco fue fácil, pero fue diferente para ambos. Tal vez yo me aferré a mis hijos, a la idea de ser padre, de tener algo sólo mío, algo que hacía que valiera la pena este experimento...

—No es sólo tuyo. Es mío también. Y creo que tardé mucho en entender eso.

—Porque fuimos obligados. Y, de nuevo, yo me aferré al embarazo, tú no sabías qué hacer, cómo actuar... Es difícil, pero ahora estás aquí... ¿Y sabes qué?

Ofreció su mano a Alec, él la tomó sin dudar, poniéndose de pie después de besar el vientre de Magnus.

—Creo que tengo mi primer antojo y también es pasar tiempo contigo. Vamos a mi casa, sólo tú y yo.

—Y ellos —Alec acarició su vientre.

—Y ellos —Magnus sonrió, entonces empezó a hablar sin parar, todo lo que había tenido que guardarse antes—.  ¿Has pensado nombres? Nunca te pregunté porque no quería tener nada que ver con esto, pero ahora que has cambiado de opinión, ¿has pensado nombres? ¿quieres niños o niñas? ¿cómo los imaginas? ¿lo has imaginado...? ¡No les hemos comprado nada! ¡Deberíamos ir de compras!


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro