—Finalmente termine—observando finalmente la estancia limpia, llevaba unos días observando a su publicista y lo había ayudado, no era tan difícil, solo era cuestión de practica

También había estado ensayando cocinar, su comida no era que fuera digna de un restaurante pero al menos era comible por lo menos sabía que no terminaría en el basurero como lo había hecho el publicista con unos de sus primero platos

Ese día ella había dado de comer a ambos primos aunque Esteban había fingido que estaba bien, su publicista había sido sinceramente cruel pero eso la ayudado a mejor, solo quería ayudarlo ya que no toda la vida el haría todo por ella

Ya llevaba un mes en aquella casa y no estaba del todo mal, se había acostumbrado a ella y la ausencia de algunas cosas pero le gustaba estar todas las tarde con su publicista, salir de compras con él, ordenar juntos, ir a visitar a su suegra, ayudarlo con algunas cosas del trabajo y la mejor parte del día era que terminara durmiendo con el

—Prepara algo de café—dirigiéndose a la cocina, se sentía tan cómoda y libre, eso era todo lo que necesitaba, no necesitaba tener tanta etiqueta, no necesitaba estar perfecta todo el tiempo, Adam le había dicho que se veía perfecta de todas formas que le gustaba más esa faceta de ella, se veía despreocupada como si nada le afectara

Antes se había vuelto loca si alguien la viera con lo que llevaba puesto que era un mono holgado y una camisa de tiras, su cabello estaba recogido con forma de cebolla, si su madre la viera le daría un ataque al corazón

Pone la cafetera a funcionar y si dirige a la estancia al escuchar que llamaban a la puerta, decide abrir porque estaba esperando a su prima, almorzarían juntas pero aún era un poco temprano, al abrir se sorprende al ver a sus padres que la veían igual de sorprendidos que ella

—Greys ¿eres tú? Dios no te reconozco ¿Qué es esa ropa?

—Semanas sin vernos madre y es lo primero que me dices, también te extrañe—dándoles un lado para pasar—preparaba café ¿quieren una taza?

—Claro hija—tomando asiento—linda casa pero es un poco pequeña

—Es súper acogedora—entrando a la cocina, se suponía que sus padres irían a visitarla para ver su avance con el chico—me encanta—saliendo con las tres tazas

—Pero sí parece una casita de te—la chica toma asiento sonriendo

—Es el hogar de Adam y a mí me encanta, no me importa el tamaño, es perfecta además tiene un buen tamaño para la cantidad de personas que viven en ella

—Supongo que tienes la razón, noto que te encuentras muy bien dentro de lo que cabe—viendo su vestimenta— ¿Por qué la ropa?

—Me hace sentir cómoda y además estaba limpiando un poco

— ¿Limpiando? ¿Ese salvaje te obliga a limpiar? Luis te dije que era una mala decisión que la dejáramos en manos de ese hombre

—No me obliga, Adam me trata como una princesa pero me gusta ayudarlo, lo hago porque realmente quiero hacerlo, de hecho he aprendido hasta a cocinar, te dije que necesitaría esas clases de cocina

—Era algo que no se supone que necesites, debes tener empleados que haga ese trabajo para ti ¿Por qué malgastar tiempo en eso cuando podía invertirlos en otra clases de cosas?

— ¿Qué clase de cosas? ¿Cómo tocar el piano? Eso no me está sirviendo en este momento, no sabía hacer las cosas más básicas y Adam se ha tomado el tiempo para hacerlo ¿sabía que puede dañarse el regular del agua? Adam olvido darle mantenimiento y tuvimos toda una semana sin agua caliente, pensé que esas cosa no eran necesarias ¿alguien lo hace en la mansión?

—No lo sabias porque no tienes por qué preocuparte por esos detalles hija

—Es importante si tienes que mantener una casa en orden, también he ido de compras con él, fue fantástico me dejo comprar un enorme helado, también fuimos a almorzar con sus tíos, su madre es una excelente cocinera, todos se sorprendieron que fuéramos pareja pero no saben lo amable que fueron, la señora Lorena me enseño como preparar unas galletas

—Me parece que son cosas horribles ¿Por qué no hace las compras él?

—Bueno los primeros días lo hacía solo pero tuve curiosidad y ahora la hacemos juntas, me gusta salir con él, claro que hemos discutido pero son cosas pequeñas, Karina me dijo que esas cosas sucedían todo el tiempo

— ¿Discuten mucho? ¿No te ha golpeado? —la chica ríe, el chico seguro haría lo mismo después de todo él no lo haría ni en sus peores sueños

—Jamás haría algo así, solo son cosas pequeñas, al principio resulto un poco extraño, aburrido e incómodo pero Adam hace todo sencillo, he aprendido mucho sobre él, me ha dicho que mañana comenzare a trabajar con él ya que comienza a haber movimiento en el local ¿no es genial?

—Me alegra escuchar esto de ti, parece que las cosas van muy bien para ustedes, entonces creo que es hora de tener una cena con él para conocerlo—la chica frunce el ceño, eso no podía ser, su publicista apenas sabía comportarse ella porque estaba acostumbrada a su comportamiento pero sus padres no la verían con buenos ojos

— ¿Cena? —los ve asentir—Bueno Adam a estado un poco ocupado y creo que no se podrá por ahora

—Greys si digo que tenemos que por lo menos conócelo es porque debe ser así y será en la mansión, le diremos a Lucas que asista ¿te parece bien en una semana? — ¿sería suficiente para intentar conversar con el chico?

—Bueno está bien—no es como pudiera hacer cambiar de opinión a su padre

—Hija queríamos comentarte, Arturo fue hace unas semanas a la mansión a contarnos que lo haz golpeado ¿es eso cierto? Que todo por su hijo

—Él se lo merecía, no saben lo sínico que es—ve a su padre—no lo entenderías

—Bueno confiare en tu palabra pero no es de señoritas golpear a los hombres y menos si no te han hecho nada

—Lo se padre pero él se lo busco, me ha dicho que soy una caprichosa y no es cierto—suspira tomando su taza de café, la había olvidado, toma un poco

—Yo creo que él tiene razón de que quiera ver a su esposa e hijo pero no lo ha permitido, no debes meterte en eso, te has vuelto muy rebelde, no entiendo cómo estás de acuerdo con todo esto cariño

—Querida no es para tanto, Arturo a estado extraño últimamente pero no es nuestro asunto así que Greys no te involucres mucho, sé que lo haces por Adam pero son asuntos familiares—se levanta—Miguel quiere conversar una cosa contigo y a mí me gustaría conversar con el hijo de Elizabeth

— ¿Hablas de Marcos? ¿Para qué lo necesitas? Si fue grosero contigo me disculpo en su nombre, ambos son muy impulsivos

—Eso lo sé, tuve la dicha de conocerlo pero solo conversare con él, creí que vivía con ustedes

—Tiene su departamento pero creo que esta ahora con Adam, lo está ayudando en el local hoy, puede que lo encuentres y ¿puedo saber para que me necesita Miguel?

—Dice que no respondes sus llamadas y bueno no sé qué quiere conversar contigo, no le hemos dicho dónde te encuentras, aun no es sensato que todos se enteren de lo que tienes con ese...con Adam—la chica sonríe—lo mantenemos por ahora en secreto al menos que hemos accedido levemente

—Le dieron una oportunidad y eso es suficiente, ya luego veré que quiere Miguel

—De acuerdo—la abraza—estoy más tranquilo sabiendo que estas mejor

—Gracias padre, no debes preocuparte me cuidan muy bien

—Tengo que admitir que si se te vez más feliz, en fin cuídate hija

—Lo hare—acerándose a la puerta para verlos salir, estaba feliz de que sus padres accedieran por fin a conocerlo ahora el problema era convencer al publicista que se comportara una tarea un poco difícil

***

— ¿Cenar con tus padres? ¿De dónde sacas que quieren verme? —la chica observa al hombre que parecía más concentrado en su lectura que su conversación con ella ¿no podía al menos fingir interés?

—Que vinieron esta tarde a verme y mi padre me lo ha dicho—lo ve fruncir el ceño y cerrar el libro para dejarlo de lado, había conseguido su atención

—Creí que aún estaban molestos por algo te quitaron todo y tu deberías también estarlo, te dejaron sin nada solo porque no quisiste casarte con ese abogado de juguete y tú quieres que vaya a cenar con ellos como si nada

—Eso es correcto, no es tan malo, te dije que tarde o temprano aceptarían y si estoy aquí contigo es porque lo necesitas

—La verdad al principio solo agotabas mi paciencia—la ve cruzarse de brazos—es la verdad, yo soy el que te cuido, hago lo que puedo pero que te encuentres bien no es gracias a ellos, si no a mí, deberían estar aquí pidiéndomelo personalmente

—Estas siendo muy arrogante Adam, son mis padres y no me gusta estar así con ellos, necesito que vayas a cena para llevar todo esto en paz y menos de lo que esperas estaremos como antes

—Lo dirás para ti porque recuerda que no trabajo para ti, así que solo lograras tener todo tu dinero de vuelta ¿tan mal vives conmigo?

—Claro que no, esto no es porque quiera volver por los lujos, sino porque quiero que mis padres te conozcan y sepan lo maravilloso que eres, que sepan que no eres la personas que dicen que eres—lo ve— ¿recuerdas cómo te sentiste cuando estas peleado con tu madre? Así me siento yo, solo quiero estar bien con ellos y te acepten como mi pareja

— ¿Maravilloso? Parece que no me conoces, muchos me consideran desagradable y vaya que tienen razón, Greys no les agradare a tus padres

—Claro que lo harás, quizás no te das cuentas de lo encantador que eres, en la boda tú le caíste...—lo ve sonreír—mal ejemplo

—No me digas, sería perfecto que Marcos asista, es bueno para estas cosas

—Ni se te ocurra, me daré cuenta y si lo haces te aseguro que hasta hay llego lo nuestro, no puedes ser tan insensible Adam, no me gusta que me engañes de esa manera y no pienso permitirlo, sé que la última vez te perdone pero solo porque lo necesitabas

—Entonces ¿estás conmigo por lastima? —sonriendo, la ve bajar la vista, muy pocas eran las ocasiones que podía ver a la chica nerviosa y le gustaba aprovecharlos cada vez que se presentaba, no era capaz de hacerle algo así, no estaba ni en sus planes no asistir a aquella tonta boda pero las cosas se le salieron de las manos, con solo recordarlo le ponía la piel de gallina

—Claro que no...solo fue como una coincidencia, igual te pensaba perdonar, no te dejaría por algo así, no querías ir con mucha razón y creo que la situación hubiera terminado muy mal si Marcos no hubiera ocupado tu lugar

—Ahora dices que no encajo para nada en tu entorno—la ve fruncir el ceño al parecer había descubierto su pequeño juego

—Se a lo que juegas Torres y ya deja de evadir el tema, es necesaria esta cena

—Eres muy molesta Greys Gómez—la ve—accederé ir pero solo si es aquí, me sentiré mas cómodo, eso o envió a Marcos—la ve que parecía pensativa, estaba seguro que no iba a poder a desenvolverse bien en aquella mansión, la última vez termino bebiendo de más y vomitando en su baño, eso había sido solo porque cenaría con sus padres y a él lo ignoraban ¿Qué iba a hacer si era el centro de atencion? Sería el ridículo

En su casa en cambio podía mantenerse ocupado, ya que sería el anfitrión, se sentiría más cómodo porque era su casa

—Hablare con mi padre pero si acepta tendremos que hacer algo contigo—el frunce el ceño—y la cena también, sobre todos tus modales

—Creí que era maravilloso como estaba y eso lo acabas de decir

—Para mí lo eres pero no para mis padres no, así que a partir de ahora comenzara un pequeño tutorial que yo organizare para que puedas ser aceptado—él lo ve confundido, no le gustaba para nada eso

***

El chico se encontraba sentando frente a su novia que estaba leyendo algunas anotaciones que tenía en su cuaderno, era fin de semana y en vez de salir en una triple cita con Marcos y su primo junto a sus parejas, ellos se había quedado a estudiar ¿Cómo había aceptado eso? Claro la chica lo había amenazado con nada de sexo si todo salía mal, los padres de la chica era exigentes y ni hablar de su madre, encima tenían que organizar todo

Los padres de la chica había aceptado que lo conocieran en su casa aunque Greys pensó que mejor sería un restaurante pero él se mantenia firme con su idea, después de todo si iba a ser el hazme reír de los padres de Greys que fuera en su casa y que solo fueran ellos que lo criticaran

—Bien, hice una lista de tus defectos—viéndolo que estaba recostado en el sofá y veía en el techo, pensado en quien sabe que, a veces quería saber que era lo que tanto pensaba, solía verlo un poco distraído—Adam

—Sabes preferiría estar en el cine y ver la película que se estrenaría, saldría una nueva de piratas ¿Por qué no podemos ir al estreno? Marcos y Esteban estarán toda la semana hablando de ella

—Sé que te encanta pero esto es importante ahora cuando mis padres lleguen, debes ofrecerles asiento en la mesa y ayudarlos a sentarse

— ¿Tiene alguna deficiencia? —La ve fruncir el ceño— ¿Qué? Saben sentarse ellos solo, no es como si fueran unos niños

—Es de caballeros hacerlo, al menos es la costumbre hacerlo

—Cuando fue la cena en la mansión no vi a nadie haciendo algo por el estilo

—Porque llegamos a un acuerdo que dejaríamos de lado las etiquetas porque no tienen esa costumbre

—Entonces ¿Por qué debería hacerlo? Es mi casa no se supone que ellos debería acatar las mías, es lo más lógico

—Adam solo tienes que ofrecerles el asiento ¿es mucho pedir?

—Vale pero solo digo además si es de caballeros ¿Por qué debería ofrecerlas a tu padre? Él es un hombre ¿no?

—Solo es cortesía ahora si la cena no está preparada porque acostumbran a llegar temprano podemos ofrecerle una taza de café, les gusta a toda hora y llevarlos a hacerlos en el sofá

— ¿No tendré que cargarlos? Porque el sofá no puedo moverlo además si sabemos que pueden llegar temprano ¿Por qué no adelantarnos a ellos y cocinamos temprano? O algo más simple ordenemos comida—ve a la chica que parecía molesta— ¿Qué? Solo pregunto, el deber del profesor es aclarar las preguntas del alumno ¿no estamos en una especie de clase?

—Eres muy insoportable ¿puedes tomártelo enserio?

—Lo hago, solo pregunto pero como quieras yo cocinare porque aún no lo haces perfectamente ¿quieres que sea salmón a la plancha? o ¿langostas? He visto en televisión que eso le gusta a los ricos pero son un poco costosas ¿Qué comerían? Sugeriría el menú que comimos en aquella cena pero la verdad que no si quiera le presente la atención a la comida porque estaba pensando en porque me habías obligado a quedarme cuando parecías tan cómoda y conversado tranquilamente, si no es porque me sentí mal no me prestas atención

—Tu hacías las cosas más interesantes ese día esperaba que hicieras lago para...Adam ya deja de hablar tonterías, te dije que yo elegiré la comida

—Lo olvide, no te molestes pero ¿de verdad me prestabas atención esa noche?

—Voltea a mirarte cada vez que podía—bajando la vista a su libreta, no se había dado cuenta de lo mucho que solía prestarle atención al chico, pensaba mucho en el ¿Cómo no se dio cuenta que le atraía? —Tus chistes

— ¿Qué hay de malo con ellos? Son muy graciosos

—Y de mal gusto, también vulgares, no puedo permitirlos, nada de ellos, tampoco quiero insultos, ni comentes nada extraños sobre sus ropas, solo a mi madre como decirle lo bella que puede estar, tampoco quiero que les contestes sarcásticamente, suele serlo muy seguido, o burlarte de ellos

— ¿Puedo por lo menos respirar? —alzando una ceja

—Eso sí, tus modales, nada de comer rápido, es un mal habito, no quiero que bebas una vez que lo haces no te controlas, ni quiero que ni me beses, mucho menos tocarme, mi madre desaprueba las muestras de cariño en público, no solo ella es como una regla, suele verse con malos ojos, tampoco me comentes cosas que tenga que ver con sexo, se cómo eres, quizás solo puedes tomarme de la mano... no mejor no lo hagas puedes hacer algo extraño si te lo permito

— ¿Crees que soy un pervertido? ¿Qué puedo hacer con tu...? De acuerdo, no te la tomare ¿también me dirás como debo servir la cena?

—Primero es la entrada que será como una ensalada ¿por esta vez puedes contratar a alguien? No me gustaría que tuvieras que levantarte tantas veces, mi madre lo considerara descortés que nos deje solos

—Greys ¿sabes que no estoy para mal gastar dinero?

—Pero solo será por esta vez ¿puedes hacer algo?

—Dios me vas a volver loco, considere a alguien que lo hago por bajo costo pero no te quejes, entonces ¿algo más? ¿Quieres que me tiña el cabello? O quizás ¿me vista como de coctel? O quizás haga algún truco

—Vestirás de coctel, eso es seguro, como suele vestirse Marcos, sus trajes de abogados son muy elegantes y ni se te ocurra teñirte el cabello, sabes imitar a Marcos ¿Por qué no lo intentas? Como si fueras a unas de esas cenas que sueles remplazarlo cuando tiene mucho trabajo

—Entonces lo que quieres es que venga mi hermano y no yo— ¿de verdad le estaba pidiendo eso? Sabía que no solía comportarse muy bien pero ellos había ido para conocerlo a el aunque no la culpaba, quería que todo saliera bien

—No, tu estas bien Adam, te quiero a ti y no a él pero puedes por lo menos intentar comportarte como si se tratara de una cena con la reina de Inglaterra

—A ver si entendí ¿quieres que deje de ser yo?

—La última vez que hablaste con ellos las cosas terminaron muy mal, mi madre dijo en la boda parecías otro hombre que al que vieron en aquel local y no sabía la razón que tenía, de verdad quiero que todo salga bien, lo tengo planeado, tu madre hará la comida, es buena cocinera pero dirás que fuiste tú para que vean que si esto comiendo como se debe y debes comprar champaña, les gusta más que el vino, iremos luego a hacer las compras

—Haremos lo que quieras Greys pero no creo que quieras me conozcan a mí, se comportarme, siempre he fingido por mi padre cuando tenía visitas y ser el hijo educado, no quería problemas así que puedo hacerlo, no te culpo, mi personalidad no es la más perfecta aún me sorprende porque es que te gusto pero en fin no debes preocuparte, me comportare como quieras—se levanta—ahora iré a ver esa película, ¿quieres acompañarme? —viéndola

—Tengo que organizar algunas cosas respecto a la cena pero puedes ir, pienso ir a conversar con tu madre

—Como quieras—la besa—nos vemos luego—tomando su cosas para salir dejando a la chica sola

***

— ¿No estarán? —Viendo la puerta de la casa cerrada, llevaba un rato tocando y no salía a abrirle nadie— ¿debería haber avisado antes? Igual la señora Elizabeth no responde a su celular—tocando nuevamente logra escuchar unos ruidos, había alguien adentro ¿Por qué no le abrían?

¿Sería que sabía que era ella? ¿Será que no le agradaban tanto como creía? La madre de su publicista después de que le conto que había dicho todo se transformó totalmente, era la mujer amable que Adam le había hablado, ojala ella hubiera obtenido una madre como la que tenía el, porque la suya no la podía entender

Se sorprende al ver como finalmente ve la puerta abrirse, dejando ver el rostro del padre del publicista ¿Qué estaba haciendo hay? Su último encuentro con el no había sido el más amistoso ¿estaría golpeando a su suegra?

— ¿Qué hace usted aquí? —Frunciendo el ceño— ¿Dónde está Elizabeth? —quitándolo del camino para entrar para ver a la mujer en el sofá sentando viendo la pared—Señora Elizabeth ¿se encuentra bien? —acercándosele

— ¿Qué haces tú aquí? ¿Mi hijo no se ha deshecho de ti? Ya es para que se hubiera aburrido, escuche que tus padres te quitaron todo tu dinero

—Eso no es su problema además su hijo me ama además ¿Quién le dio el permiso para venir a verla?

—Ella me llamo—la chica ve a la mujer—solo quería hablar con ella, no sería capaz de hacerle nada, mi hermano no está por eso me llamo

—Señora Elizabeth ¿es eso cierto? Adam dijo que no debía comunicarse con el

—Arturo ¿Puedes irte? Ya luego hablaremos

—Como quieras, solo piensa en lo que te dije, con permiso—saliendo, la chica frunce el ceño, no le gustaba para nada aquello

—Querida por favor no le digas a Adam que he visto a su padre—la chica la ve—Soy una adulta y puedo encargarme de él, no quiero que la relación con su padre empeore más de lo que esta, aún tengo esperanza de que se lleven bien

-No creo que pueda lograr mucho, ese hombre no comprende a su hijo, es muy cruel con el además ¿Cómo puede estar tan tranquila después de lo que hizo?

-No creo que estés aquí para conversar sobre mi matrimonio-la chica la ve, estaba claro que la mujer no quería conversar del tema

-La verdad no pero ese hombre es tan sínico

-Todo lo que hace tiene una razón, no es el mejor padre ni mucho menos el mejor esposo pero es un buen hombre

-Entonces ¿no piensa divorciarse de el?

-No me dicho eso-sonriéndole-siempre hay que darles una buena lección a algunas personas para que realmente vean lo que pueden perder

-Es un alivio escuchar eso, pero el necesita cambiar mucho ¿no cree? Se nota que aún lo quiere pero cuando un hombre le hace daño no debe permitirlo

-Parece que Adam no te comento de mi primer matrimonio

-Él lo hizo-bajando la vista avergonzada-sé que no debo meterme pero...

-No te preocupes, se perfectamente que no puedo dejar que me dañen, aprendí mi lección pero Arturo nunca me ha hecho daño al menos no físicamente pero si mentalmente, pero no puedo pedirle que cambie porque sería un error total ¿Por qué pedirle que lo haga? Fue de él que me enamore siendo como es, si se lo pidiera no estaría enamorada

- ¿Adam de casualidad la ha llamado hoy?

-Ayer menciono que no vendría verme porque tenía algo importante que hacer, me pidió que le deseara suerte supuse que tenía que ver contigo pero si estás aquí debe ser del trabajo o ¿discutieron?

-No que yo sepa, solo preguntaba-sonriéndole-Le prometo que no le diré Nada a Adam pero si me entero que le hace daño no dudare en decirle

-Creo saber porque mi hijo te eligió, eres un amor, no te preocupes, se defenderme, luego te contare que fue lo que conversamos pero que sea nuestro secreto ¿de acuerdo?

-Como digas, no le diré a nadie-si el publicista se enterar se molestaría mucho y su madre tenía razón para no decirle

-Me parece bien ahora ¿Por qué no preparo un poco de café? Así me contaras el motivo de tu visita, creo saber de se trata, Adam también comento una cena importante con sus futuros suegros

-Tengo un plan en mente y necesito de su ayuda-siguiéndola por ahora quería concentrarse en la cena que tendría con sus padres

Continuara...