
Capítulo 22: Razones
La chica observa algo aburrida a las personas trabajar, el chico la había llevado nuevamente a hacer otras escenas, no pudo hablar mucho con el camarógrafo porque el publicista parecía más cerca de él, no le desagradaba porque se había alejado de la mujer pero estaba un poco confundida porque había parecido molesto, la pregunta era ¿Por qué?
Ya había terminado las tomas que le había pedido ahora se encontraba sentada viendo a los empleados pasar ¿podía volver a su habitación?
—Señorita Gómez le traje una bebida
—Ella sonríe tomándola
—Gracias Cristian, sabes si hare otras tomas
—No sabía que llevaba prisa por volver pero le preguntare al jefe
— ¿se puede saber qué haces Cristian? ¿No deberías estar revisando las tomas?
—Fue por algo de beber y supuse que la señorita Gómez quería algo también
—Ya se lo entregaste puedes retirarte
¿Por qué ese hombre rodeaba a su jefa? Y la pregunta era ¿Por qué ella lo permitía? Se había conocido hace unas horas y ella había aceptado salir con el ¿Por qué? Eran parejas, él no tenía permitido acercarse a mujeres y ella podía coquetear con otros hombres, no le parecía justo
—Como ordene, nos veremos—alejándose
—Adam ¿puedo retirarme? Si es que ya no me necesitas pensaba pasar a visitar a Marcos antes de ir a mi habitación
Recordaba que el chico estaba bastante enfermo y le preocupaba su salud pero quizás el hombre no lo tomaría bien, teniendo en cuenta lo que sucedió la última vez que salió con el hombre
—No puedes, solo permanece donde pueda verte
—Pero me aburro un poco ¿puedo ayudar con las tomas?
—No, solo mantente lista por si te necesitamos—alejándose
— ¿Por qué esta tan molesto? —frunce el ceño al ver como aquella mujer se le acercaba nuevamente ¿Por qué lo buscaba tanto? —No puedo quedarme a observar como coquetean durante todo el día—susurra
Se levanta de su asiento y se acerca a la pareja que parecía concentrada conversando pero se detiene al escuchar la pregunta que le había hecho al publicista
—Adam ¿te gustaría salir conmigo? Me gane una reservación en un buen restaurante y creí que podíamos ir a cenar ¿Qué opinas?
Esa era la gota que había derramado el vaso aunque no debía perder la paciencia frente a tantas personas pero ¿Cómo evitar eso? Pero seguro no era necesario ella había sido clara con sus condiciones, no podía aceptar
—Creo que no estaré ocupado ¿Por qué no?
—Enserio, no te arrepentirás, bueno iré a continuar con mi trabajo—alejándose
¿Cómo se había atrevido aceptar? ¿Todo lo que había pensado era verdad? ¿Él ya se aburrió de ella? Quizás porque no consiguió más que un beso
Si era su manera de decirle que ella no era suficiente estaba de acuerdo, no insistiría más con el hombre
Vuelve a su asiento sin que el chico notara que se había movido pero parecía concentrado más en las acciones del camarógrafo, ese chico le agradaba, le había caído en el momento perfecto
***
Bien ya estaba lista para su paseo, de vuelta al hotel había ido sola porque el publicista se quedaría a arreglar unas cosas con el camarógrafo que esperaba que pudiera darle tiempo de llegar
Ya estaba cerca del lugar acordado, no había tardado mucho en arreglarse porque decidió no esforzarse tanto, solo pasearían un poco
— ¿Adam? —Viendo al chico fuera del hotel— ¿Qué haces aquí afuera?
Un momento, él tenía una cita con la tal Emily, que tonta era ¿Por qué otra cosa estaría allí? Pero ella no le había mencionado nada sobre su cita pero seguro escucho algo cuando hablaba con el hombre en el restaurante
— ¿No es obvio? Te estoy esperando—ella frunce el ceño extrañada—Porque no pienso permitir que salgas con ese hombre
En algún punto de la conversación se había perdido o ¿había escuchado bien? ¿Por qué de la nada hacía eso?
—No eres gracioso, casi caigo pero dime ¿esperas a alguien?
—No es una broma—la toma de la mano—volverás conmigo a la habitación
¿Por qué se arreglaba tanto para salir con otro hombre? Estaba loca si creí que iba a permitir que saliera con alguien que no era el
—Creo que te estás pasando con la bromita—liberándose—Se porque estás aquí ¿me quieres llevar de vuelta a la habitación porque no quieres que te descubra?
— ¿De qué estás hablando mujer? No tengo ninguna necesidad de mentir
—Te escuche conversar con Emily ¿Qué me dirás? ¿Escuche mal?
—Señorita Gómez ya estoy aquí, lamento si te hice esperar
—Hola Cristian, puedes decirme Greys por hoy—sonriéndole
¿Qué se creía esa mujer? ¿Por qué le sonreía de esa manera? Ese hombre estaba loco si pensaba que saldría con ella
—Claro Greys pero…—ve al chico— ¿Por qué esta aquí jefe?
—Espera a alguien pero podemos irnos—el chico sonríe extendiéndole la mano
—Claro, vamos se dé un lugar perfecto para conversar
—De acuerdo soy toda tuya—le iba a tomar la mano pero es jalada y tomada por la cintura por el joven publicista— ¿Adam?
—Escúchame claramente Cristian y no te lo diré como tu jefe si no como hombre, si te vuelve acercar a Greys tendrás que atenerte a las consecuencias ¿está claro? No tengo pensado compartirla
—Señor yo no sabía que ustedes dos salían
—Ahora lo sabes, nos vemos en el trabajo y que nadie se entere de esto—alejándose con la mujer— ¿Qué se cree ese imbécil? —deteniéndose frente a la playa
—Adam—alejándose— ¿Qué crees que haces? No tienes el derecho
—Lo tengo, esta tarde no te dije nada porque estamos en horas laborales pero ahora no es así—la ve—tengo todo el derecho eres mi pareja ¿no?
—No te comprendo, saldrías con la tal Emily ¿no? ¿Por qué haces esto?
—Ella me pregunto y yo acepte pero luego le dije que no iría porque tenía una cita con alguien más importante—voltea la cara—quería aclárate alguna cosas porque desde un principio acepte porque no es justo que tú puedas coquetear con otro hombre y yo no así que…—la ve—te pediré que ese trato vaya para ambos
La chica lo ve algo extrañada ¿Por qué esa repentina actitud? ¿Desde cuándo le importaba lo que ella hacia?
—Pensándolo bien no te lo pido, sino que te lo exijo, tiene que ser justo
— ¿estas celoso Adam? —acercándoselo, lo ve fruncir el ceño
—Por supuesto que no pero ¿Qué clase de hombre le agrada que su novia este con otro hombre? —La ve sonreír— ¿Por qué sonríe?
—Estas celoso, creí que era la única—se lanza sobre el abrazándolo haciendo que ambos cayeran sobre la arena
Sabía que el chico no lo diría abiertamente pero está segura que estaba celoso, eso significaba que si la quería, no se le había pasado por la mente darle celos, creyó que eso no funcionaría con el
Un momento ahora que recordaban ¿había caído al suelo? Era algo extraño porque el chico tenía la fuerza suficiente para atraparla
—Greys… ¿te volviste loca? —la chica lo observa— ¿Qué sucede?
— ¿te lastimaste? —sentándose el hace lo mismo— ¿algo que no se sepa?
—No sé de qué estás hablando—la ve tocarle la frente— ¿Qué haces?
—Estas ardiendo en fiebre, vamos al hotel—levantándose
—Estoy bien—imitándola—y quizás si lo estaba, solo un poco
—Esto es grave, lo admitió ¿debería llevarte a un hospital?
—Estoy bien—la toma de los brazos—pero no vuelvas a salir con otro chico que no sea yo ¿entendido? —La ve asentir—yo prometo lo mismo—se acerca—te extrañe un poco—uniendo sus labios en un suave beso
Sabía que estaba asi por la fiebre pero no estaría mal aprovecharse un poco de su estado, él debía enfermarse más seguido
***
La chica observa como el hombre aun dormí pacíficamente pero se preguntaba ¿Cómo pudo verse tan bien estando tan enfermo? Para su suerte ya la fiebre le había bajado un poco gracias sus cuidados
—Es extraño, estuve cerca de Marcos y no me enferme, será porque se ha descuidado un poco—lo ve removerse un poco—Adam
—Greys—observándola— ¿aun sigues aquí?
—Alguien tenía que cuidarte, no podía irme y dejarte así ¿Qué clase de novia seria? —Lo ve sonreír— ¿Qué sucede?
—Que de verdad me gustas mucho—le acaricia la mejilla—no sé cómo no me di cuenta antes, no creo que sea simple atracción
—Cuando mejores terminaras insultándome aunque no me desagrada
—Greys te quiero ¿no te iras de mi lado?
Bien comenzaba a delirar de la fiebre ¿Por qué se sentía de esa manera? No tenía muchas fuerzas ¿Por qué de la nada le decía eso? Se estaba volviendo loco
—Creo que terminarías tu alejándote que yo—le toma la mano—Adam ¿Por qué no me has buscado todos estos días?
Pensaba aprovechar la debilidad del chico para sacarle algunas cosas, estaba mal pero el chico nunca le respondía lo que quería escuchar y esa era una oportunidad que aprovecharía
—No me he sentido bien por lo que vez combina eso con el trabajo, lo lamento no debí alejarme por eso te fuiste con ese hombre
—No lo hice por eso, solo quería distraerme, contigo ocupado y Marcos enfermo—frunce el ceño—aun no voy a ver cómo sigue, tu fiebre bajo un poco así que iré a verlo un rato no tardo—levantándose lo ve sentarse a la orilla de la cama—descansa un poco mas
—Tengo hambre ¿puedes hacer algo?
—Ordenare que traigan algo, ya vuelvo—el chico la sostiene de la mano
—Greys no te vayas—la chica lo ve—acompáñame a comer
¿Por qué tenía que irse con otro hombre? ¿Él no era suficiente? ¿Por qué pensaba en otro cuando él estaba en ese estado?
—Solo será unos minutos solo subiré a… ahora que recuerdo no sé cuál es la habitación de Marcos ¿tú sabes?
—No pero me llamo diciendo que ya se encontraba mejor—la jala haciendo que se siente sobre sus piernas—te dije que se te ve muy bien ese vestido
Se estaba rindiendo ante aquella debilidad que sentía, podía solo ignorar algunas cosas después si ella se lo mencionaba
— ¿Por qué no te recuestas? Me quedare un poco mas
Le encantaba esa parte del chico pero su deber era cuidarlo cuando estaba enfermo y no debía aprovecharse de el
—Está bien—obedeciéndola—pero tengo hambre
—Ordenare algo, ya vuelvo—levantándose para salir—Aprovechare para ir con Marco, preguntare en recepción su habitación—acercándose a la salida
—Puede que esté enfermo pero no tonto—la chica se sorprende al ver al chico acercarse— ¿Por qué tienes que pensar en otro?
—Solo veré como sigue, no hay razón para que estés celoso
—Si las hay, fuiste tú la que se besó con el ¿Qué crees que hará en ese estado? Y tú eres tan tonta que no te resistirás, ¿Cómo quieres que no lo esté? —Se le acerca—eres mía Greys recuérdalo
—Te estas pareciendo a Miguel, no soy ningún objeto ¿no puedes confiar?
—No me compares con él, solo no quiero perderte—lo ve alejarse y sentarse en el sofá—ven que quiero contarte algo
—No creo que sea necesario, deberías volver a la cama
—Toma asiento a mi lado—ella suspira haciéndolo, el chico la abraza—eres tan hermosa—besando su mejilla
Bien si el chico continuaba así, no sabía que pasaría y él era el enfermo entonces ella terminaría haciendo algo que no debía, tenía que alejarse un poco de el
—Adam aun no ordeno tu comida ¿me sueltas?
—Cuando Estaba en la secundaria conocí a una chica su nombre era Sofía en esa época solía trabajar mucho porque cuando me graduara de la universidad quería abrir un local, toda gran empresa comienza con algo pequeño, yo trabajaba todos los días para comprar en un futuro mi local
—Adam creo que no deberías contármelo además nuestra relación es…
El chico le estaba contando seguramente una de las razones porque quería ser el esposo de su antigua prometida y él porque era así o eso había descifrado pero en su estado seguro no lo hacía muy consiente
—Quiero que lo sepas así que escúchame—la ve—Sofía se convirtió en mi novia, me gusto a la primera y no era chico que me gustara una chica
—Eso me cuesta creerlo un poco, fuiste al que conocía que termino con una taza de café sobre el por pervertido
—Esa era otra etapa de mi vida antes era así, el punto es que eso sucedió cuando faltaba un año para graduarme, al salir de la secundaria me propuse a casarme con ella, mi familia dijo que era muy mala influencia, vaya que lo era
—No crees que eras muy joven para casarte a esa edad
—Lo era pero tenía mis motivos, amaba a esa mujer pero no a sus padres, ellos era consumidores en el ambiente que vivía no era sano, ella no era consumidora por eso quise casarme lo antes posible con ella, comprar una casa y esas cosas
—Hay entra el dinero que reuniste supongo
—Sí, le comente sobre mis planes y el dinero que tenía guardado ella acepto, está muy contenta con todo eso pero un día escuche un rumor de que un hombre la seguía, converse con ella y era cierto, no quiso poner la denuncia por miedo, la protegía todo lo que podía hasta que un día desapareció
— ¿la secuestro ese hombre? —lo siente reforzar un poco el abrazo parecía que le dolía
—Yo la amaba mucho, hubiera hecho cualquier cosa por esa mujer—suspira—y lo hice, recuerdo que puse la denuncia, la policía la estaba buscando pero no daban con ella, días después de que desapareciera el hombre me llamo, me pedio una cantidad de dinero para cambiarla por ella, me la puso al teléfono, ella lloraba parecía que sufría mucho
Le dolía tener que recordar eso pero quería que la mujer lo supiera, no sabía si era por lo débil que se encontraba o porque simplemente no quería ocultárselo
—Debió dolerte mucho escuchar eso
—Sí, saque todo el dinero que pidió y fui a verlo, no le avise a la policía porque dijo que lo iba a saber, al llegar ella estaba atada e hicimos el intercambio por suerte no le hizo nada, la lleve al hospital y ella parecía bien, creí que iba a tener algún trauma pero parecía la misma, no me comento nada de lo que había pasado
—Es un poco extraño, si fuera estado en su lugar hubiera necesitado un tiempo
—Ella parecía normal, comencé la universidad, en esa época tuve varios problemas con mi padre por la carrera que tome y mi novia la cual insistía en casarse pronto pero no tenía ya el dinero así que termine quitándole prestado a Esteban que pensaba regalarle una tienda a su madre, parecía que era el único que me entendida y me lo presto
—Esteban es un buen hombre después de todo, se nota que son muy unidos
—Nos criamos juntos desde pequeños pero ese no fue el punto, le di el dinero a Sofía para su vestido y lo que quisiera prepara, yo me encargue de la iglesia
—Una vez mencionaste algo sobre un corazón roto ¿eres tú?
—El día de la boda no pareció y Esteban ese día me dijo que Hubo un incendio en su casa, fue corriendo a buscarla pero encontré que estaba con una maleta con el hombre que la había secuestrado—lo siente alejarse—la casa estaba en llamas y ella me vio sonriendo, no entendida nada—aprieta los puños—“fuiste muy ingenuo Adam, gracias por el dinero, si te sirve de consuelo si me casare pero no contigo con el dinero que te robamos podremos vivir muy tranquilos y al fin Salí de esta pocilga, hasta pude deshacerme de mi madre, espero no volvernos a ver” fue lo que me dijo, lo recuerdo muy bien
— ¿Por qué no la detuviste? ¿Por qué no hiciste nada?
—Me paralice, solo vi cómo se iban en una moto, me sentía tan desolado
—Debió ser duro—acercándosele—gracias por contarme esto, veo porque eres así con las mujeres ahora—se pone frente a el—pero ahora estoy yo
—Supongo—le acaricia la mejilla—eres una gran mujer Greys
—Gracias, bueno iré a ordenar la comida, recuéstate
—Está bien—volviendo a su habitación, recostándose en la cama
¿Por qué le había confesado todo eso? Era algo que no le gustaba revelar, luego de eso había tenido muchos problemas con su familia y tuvo que trabajar duro para pagar el dinero de su primo
Aunque ahora que le había contado eso a su jefa se sentía más tranquilo y esperaba que cuando le digiera todo lo que debía decirle fuera tan compresiva como lo había sido porque estaba decidido a decirle toda la verdad
Tenía sentimientos por ella y aunque no quería hacerlo había quedado prendido de ella, lo supo desde el momento que ella le dijo sobre el beso con Marcos, se había sentido tan extraño y luego verla con ese hombre, jamás había sentido tanta rabia y aunque no lo demostró, se había molestado pero cuando supo que ella sentía lo mismo, todo se había ido porque significaba que ella sentía lo mismo que el ¿no?
Un momento ¿desde cuándo era tan patético? No quería sentirse así pero no tenía remedio luchar contra eso aunque pensaba ir lento porque aún no estaba del todo seguro
—Ya la traerán en unos minutos—sentándose junto a el— ¿Cómo te sientes?
—Mi cabeza duele un poco pero ya se me pasara
—Iré por unos medicamentos al baño, seguro en la caja de primeros auxilios hay—alejándose—esa historia es algo impresionante, comparado con lo que me paso a mí no es nada, yo me asegurare que no le pase algo así otra vez—pensando tomando el medicamente y regresando junto al chico— Adam quería preguntarte una cosa—entregándole el medicamento
—Lo que quieras—tomando el vaso de agua que tenía en su mesa de noche
— ¿Quién más sabe esa historia?
—Toda mi familia, por eso tuve el problema que mi padre y terminamos así
—Ahora comprendo, querías valerte por ti y no te salió bien pero si quieres…
—Ni lo pienses, no aceptare tu dinero, quizás acepte el empleo porque estoy cansado de todo la verdad, hace rato olvide ese sueño hace unos años, no tiene importancia—se escucha la puerta—debe ser la comida
—Ya vuelvo, espero y te guste lo que ordene—saliendo
— ¿Por qué me siento tan débil? Creo que debería tomar la palabra del doctor y descansar pasar unos días con Greys no suena mal—pensando
—Ya estoy aquí Adam—sentándose, él sonríe viéndola con la bandeja
— ¿Qué ordenaste? Espero que se algo delicioso
—Bueno lo es pero para mí, para ti una sopa te hará bien
—Creo que se me quito el apetito
—Si te lo comes te dare un poco de mi pastel ¿de acuerdo?
—No soy un niño al que puedes manipular
—Creí que te gustaría, es de chocolate ¿A quién no le gusta?
—De acuerdo—sentándose comenzando a comer
—Yo también te quiero—sonriéndole
—y te prometo que no pienso hacer nada parecido—el chico la ve—puedes confiar en mi—comenzando a comer
—Igual creo que tú eres la que debes temer, eres la del dinero
—No me preocupa, confió en que no eres esa clase de persona
—A pesar de lo que te he dicho y lo que he hecho ¿confías en mí?
—Claro, me mostraste una parte de ti que no conocía es mucho decir
—No te acostumbres es porque estoy débil
—Ya no lo pareces—lo ve terminar de comer—no era tan difícil
—Gracias por cuidar de mí, solo mi madre lo hace y Esteban pero es extraño que lo haga—la oye reír— ¿Qué es tan gracioso?
—No me lo imagino como enfermera—él sonríe tenía a veces unas ocurrencias
—Me pregunto qué pasa por tu cabeza
—Muchas cosas pero tú eres la que más pasa—lo toma del brazo—que tal si suspendemos la prueba
—Creí que todo iba bien ¿Por qué quieres detenerla?
—Siento que tengo información suficiente aunque solo fueron unos días pero estoy dispuesta a enfrentar a mi familia por ti
— ¿Qué hay de la mía? Mi padre no estará de acuerdo
—Pero me importa que tú lo estés así que no me tiene que importar nada más, tengo pensado pasar una larga temporada a tu lado
—Me gusta oír eso, entonces es hora de que haga algo—pone la bandeja de lado para que no le estorbara—Greys Gómez—hace que se recueste sobre la cama quedando sobre ella
— ¿Qué crees que haces? —el chico tenía una facilidad impresionante para ponerla nerviosa lo cual muchos no lograban
— ¿Quieres salir conmigo? Esta vez será de verdad
—Creí que ya lo hacíamos ¿no?
—Pero esta vez no será secreto aunque creo que Cristian no lo ocultaría así que es el momento perfecto para hacerlo
Eso significaba que su familia se enteraría pero ¿estaba lista para eso? Eso significaba enfrentar a todos lo que estaban en su contra y volver a la realidad, terminar el paraíso que estaba sumergida
No quería volver a la realidad pero al parecer su publicista estaba dispuesto a todo con tal de estar a su lado ¿Por qué ella lo dudaba? Tenía miedo porque jamás había deseado tanto algo
Ve al chico y cada una de sus facciones, él era un gran hombre dejando de lado sus defectos y tenía muchos pero estaba dispuesta aceptarlos
—De acuerdo, acepto Adam Torres—el chico sonríe uniendo sus labios con los de ella
Era algo que debía ir al paso de la chica pero estaba dispuesta a esperar por ella y aunque en su casa les esperaba muchos problemas estando junto a ella sabía que podía con cada uno de ellos
Nota de autora:
Por fin empezaron algo, dejeme decirle que aún falta por contar la historia de Adam y Marcos que aunque no aparecido mucho es un personaje importante
Lamento tanto el retraso donde vivo la señal es un problema pero con el favor de dios pronto dejara de serlo
Otra cosa está historia contara con dos partes y está está llegando a su final
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