Sofia se quedó impactada por unos segundos.
- ¿Iván..? -Chinos bufó con cierto dolor– ¿eso es todo?

-No entiendo ¿qué querías que dijera?

-¿Un te extrañé, quizás? -tenia ganas de llorar, no sabía disimularlo– por que yo si lo hice, mientras tanto tú ignorabas cualquier medio de comunicación conmigo.

La castaña contestó.
- yo también te extrañé -sus ojos se aclararon, mientras que él solo permanecía en shock– pero no podía hablarte, Jorge.

- ¿y por qué no? te necesitaba... -chilló la última palabra-

Andrea Zúñiga se acercó a Jorge.
- Nunca me necesitaste... -el dolor punzante en su pecho, nuevamente, ladeó una sonrisa forzada de lado, teniendo un corto contacto visual con ambos y cuando menos lo esperó, ella ya estaba a metros de distancia de Jorge, perdida entre la multitud, se sentía algo agobiada, hasta que chocó con alguien-

- ay perdón, perdón -se disculpó repetidas ocasiones, la mujer de cabello largo lacio, cejas bien delineadas y nariz fina la volteó a ver enseguida-

- ¿Sofía?-sonrió gustosa de verla

- ¿Kimberly? -su corazón palpitó a mil por hora, estaba parada frente a una de las mejores celebridades del lugar- wow, yo perdona es que estoy un tanto nerviosa, y no te vi y..

-tranquila, no pasa nada amiga -sonrió- relax, mira ¿que te parece si vamos a tomarnos una copita?

- si, me encantaría -se sonrieron, después fueron por una copa de vino- ¿y que me cuentas? ay perdón eso sonó muy directo.. ¿qué has hecho?

Kimberly rió tiernamente

-tranquila, estamos en confianza, eres mi amiga ahora, solo me he enfocado en grabar tiktoks, contenido para mi canal, ah y he llevado a Kima a la escuela, que desastre por cierto, por qué no quería entrar el primer día

-me imagino, Kima es una ternura, me alegra que sea muy estudiosa, esa niña será grande como sus padres y bella como su mamá

-ahora me caes mejor -rieron juntas- la verdad es que si, mi hija es un amor, pero ay hija de la, tiene un carácter, igualito al de su padre -bromeó.

-vaya, y dicen que las del carácter somos nosotras -reí nuevamente- es un placer conocerte, soy una gran fan tuya

Kimberly me abrazó
- y si eh, yo soy muy fan tuya también, te sigo en tiktok desde hace mucho, las bromas qué haces con tus amigos me sacan una sonrisa.

-por cierto, vinieron conmigo.

-vamos con ellos, muero por conocerlos.

Oliver e Ingrid se miraron entre sí al ver a las chicas caminando hacia ellos.
- No puedo creerlo..-ambos dijeron al mismo tiempo.

-estoy viendo a Kim Loaiza- sacó su teléfono- selfie -estiró su brazo para tomar una buena foto con todos.

- ¿ese es Oliverol? -Ingrid y Sofía se echaron a reír después de mirarse entre sí por las mejillas rojas de su amigo- ¿ese no es su nombre?

- No, si lo es pero... es una larga historia, desde la secundaria solían llamarlo así.

-¿y eso por qué?- la mayor se preguntó.

- nooo, por nada, están locas, no les hagas caso Kim -Oliver disimuló su vergüenza.

Después de hacerse amigos, quedaron en hacer un video juntos para su canal, al poco tiempo llegó JD Pantoja, claramente se volvieron amigos.

-Diego —sus ojos se cristalizaron al levantar su mirada.

-Sofí —este igual lloriqueó, envolviéndola en un gran abrazo– te extrañé cañón.

Secaron sus lagrimas después de sonreírse.
- Diego, lo lamento, enserio lamento todo -dijo la chica arrepentida, pues era su amigo- No quería dañarte, solo no pensé lo que hice..

- Oye -levantó su mentón- todos cometimos errores, lo que importa es que estás bien, y ahora eres toda una influencer, eso me llena mucho de orgullo mi hermana.. ¿si te puedo llamar así, no?

- ¿por que no, mi hermano?-volvió a abrazarlo, siendo recibida con caricias en su cabello.

Esta fiesta era para sacar todo el pasado, de abría un ciclo nuevo en su vida, tenía que volver a ser ella misma, esa chica alegre y positiva, Diego y ella terminaron de platicar, cuando se retaron entre todo un grupo de influencers a beber hasta quedar bobos en la pista.
La joven solo veía las luces a su alrededor, la música y la hacían sentir como una mariposa libre, una mariposa traicionera que sin querer había abierto sus alas incorrectamente nuevamente. y caído en el lugar equivocado.

A la mañana siguiente..

La cruda realidad de las fiestas llenas de alcohol y música, la jaqueca.
Se removió en la cama al sentir un gran peso en ella, Sofia y Jorge se levantaron abriendo los ojos lentamente al mismo tiempo.
Lanzando un grito que hizo ladrar a los perros de todo el vecindario.

— ¡AHHHHHHHH! –se miraron sin dejar de gritar, cubriéndose con la colcha.