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Narra Tomura

Escuche la respuesta que quería y con una sonrisa de oreja a oreja permití que bajara un poco las piernas, me sorprendí cuando me rodeo con ellas y de alguna forma entré más profundo que no pude evitar jadear ante la exquisita sensación. 

-No escapes.

- ¿Qué?

Me saqué uno de mis guantes otra vez para estirar mi mano hacia las cadenas que contenían sus muñecas, solo bastaron un par de segundos en desintegrarlas, no tuve tiempo de nada mientras él se impulsaba de la pared y rodeaba mi cuello con sus brazos. Me estremecí al sentir su aliento en mi cuello ansioso de que me mordiera.

-Ahh~

Solté un gemido sorprendido por el placer que sentí cuando me mordió el cuello, me estremecí cuando continuó dejando besos húmedos y mordidas suaves. Ante esa atención no pude contenerme, empecé a moverme nuevamente jadeando. 

-Ha...ahh..haa~

Sonreí sin aliento al escucharlo gemir en mi oído. Todavía no lograba que gritara mi nombre, algo que se puede lograr fácilmente si cambiaba el insufrible ritmo lento que estaba manteniendo. 

Queriendo una base firme para poder joderlo como corresponde, me coloqué el guante sobrante como pude y afirmándolo bien nos moví al suelo donde lo recosté. Mantuve una mano en su cadera y la otra la apoyé junto a su cabeza para tener donde afirmarme. Acomodándome bien entre sus piernas empecé a embestirlo con fuerza y rapidez. 

- ¡Haa! ¡Ahh~! Nhg...nhg

Lo vi morder su mano con un notable sonrojo en sus mejillas, insatisfecho tomé sus manos y las dejé en mis hombros, él no tardó en completar el movimiento rodeándome con sus brazos hasta dejar sus manos en mi espalda. Con cada embestida que daba sus uñas se clavaban en mi piel, hasta que simplemente empezó a rasguñar mi espalda, sentir sus uñas pasar por la zona me provocó demasiado placer que mi respiración se alteró lo suficiente para igualar sus gemidos con los míos, aunque mucho más roncos. 

-Di mi nombre~ -Jadee- dilo héroe~

-Shi-shigaraki~! N-no me di-digas ahaa ha...de esa forma~

-Izuku~ -Gruñí acelerando mis estocadas- Mi nombre izuku~ dí mi nombre~

- ¡¿Tomura~?! 

-Si~

Seguí embistiéndolo con más fuerza escuchando con satisfacción sus gemidos que intercalaban en gritar mi nombre, algo que había deseado mucho se cumplió por fin. Con el pecho agitado me incliné sin dejar de moverme para dejar más marcas en su piel sintiendo las uñas de Izuku en mi espalda y sus gemidos llenar el ambiente. Me separé un momento y me tensé al ver lágrimas correr por sus mejillas. 

- ¿Te duele? -Cuestioné bajando un poco el ritmo y menguando en fuerza.

-N-no~ -Gimió

- ¿Y por qué lloras? -Pregunté confundido lamiendo sus lágrimas. 

-Es...de-dema-demasiado para mi~ ha... ¡Ah!

Narra Izuku

Nunca en mi vida había sentido tanto placer como ahora y diría que lo mismo para Tomura. Se inclinó nuevamente hacia mi sin dejar de moverse como una bestia, pensé por un momento que retomaría sus marcas, pero me sorprendió al besarme. Sentir sus labios sobre los míos mando una corriente de puro placer que no pude evitar corresponder el apasionado beso que lograba contener mis fuertes gemidos. 

Jadee entre el beso ante una embestida particularmente fuerte lo que le dio pase para meter su lengua. Al principio fue algo torpe y ansioso lo que me indica que definitivamente también fui su primer beso. Sonriendo ante la idea lo rodee cómodamente con mis brazos subiendo una de mis manos a su cabello, enredé mis dedos en las hebras celestas para acercarlo más hacía mí, incliné la cabeza a un lado permitiendo una mejor posición para el beso y me gané un jadeo de su parte. 

Estuvimos compartiendo un beso lánguido y desordenado por un tiempo hasta que tuve que separarme por un poco de aire, fue ahí que no pude contener el grito que salió de mi pecho ante el repentino placer que me mareo y me hizo arquearme lejos del suelo, había dado justo en mi próstata y no pude evitar gemir cuando se mantuvo presionado ahí repentinamente quieto.

- ¿Qué fue eso? -Jadeo en mi oído, debí haberlo apretado. 

-M-mi punto du-dulce~ ah...

-Es...¿Aquí?

- ¡TOMURAAA!

Se sobresaltó un poco con mi grito, pero no perdió el tiempo en moverse con tal precisión que nunca fallo en dar en el lugar correcto. Me pesó nuevamente y yo solo pude pasar mis manos por su cuerpo y rasguñar con fuerza su espalda, supe que no le dolió cuando soltó un gemido en el beso. 

De repente se separó y no me quejé por la falta de besos cuando empezó a dejar marcas por mi cuello, hombros y pecho sin dejar de moverse y dando embestidas certeras en mi próstata que nublaba mi vista del puro estasis. 

-Ahh...mmhg... ¡Ahh!

Lo estaba disfrutando tanto ahora que no me contenía. Sin embargo, esto sería mucho mejor si pudiera verlo, quiero saber si lo disfruta tanto como yo, si está tan desastroso como supongo estoy yo. Con la decisión tomada pasé mis manos por su cabello suave y lo tire un poco llamando su atención que llego junto con un beso y una fuerte estocada en mi punto dulce que me hizo gemir en el beso.

-Quierooo... ¡aah! haaa!

- ¿Qué...quieres?

-ver...te To-tomura~

- ¿Quieres verme héroe? -Cuestionó con la voz cortada, claramente se esfuerza por hablar sin gemir.

-Sí, sí.. ¡haa! ¡¡Aah!!

Sentí como la venda fue sacada por mi cabeza despejando mis ojos, parpadee un par de veces para aclarar mi vista y acostumbrarme a la pequeña claridad de la habitación oscura. Una vez enfocado después de no poder ver por meses lo primero que apareció frente a mi fue Tomura. 

Tomura con su rostro cerca del mío, su cabello desordenado que se le pegaba al cuello y a la frente, sus ojos rojos mirarme con la pupila dilatada, oscurecidos por la obvia lujuria. Sus mejillas ligeramente sonrojadas, sus labios algo hinchados por todos los besos que nos hemos dados ligeramente separados dejando escapar jadeos contantes. Fue que pasee mis ojos por su cuerpo que se me escapó el aliento, es malditamente atractivo. 

Su cuerpo pálido perlado en sudor, sus brazos fuertes, sus hombros anchos y lo impresionante de su abdomen marcado como una tableta de chocolate, me sonroje al ver donde exactamente estábamos unidos levanté mi vista a sus ojos cuando lo escuche jadear más fuerte ¿Lo habré apretado? Me cuestioné subiendo una de mis manos hacia su cabello despejando su cara, jadee ante un ritmo más lento, claramente más enfocado en verme que en moverse. 

- ¿Por qué querías verme?

-Veo injusto que solo tú pu-puedas ver.

-Eres un pervertido héroe~ ¿Tanto disfrutas esto?

-N-no te hagas el inocente tú también lo estas disfrutando ¿So-soy tú primera vez Shigaraki-kun?

-Sí -Mascullo entre dientes. 

Empezó a moverse nuevamente y no pude evitar mirarlo, como cerró los ojos jadeando y dejándose llevar, su expresión delataba por completo el placer que estaba sintiendo, uno que compartía perfectamente. 

No pude permanecer concentrado mucho tiempo cuando sus embestidas tomaron más fuerza, solté varios gemidos cuando repentinamente se separó manteniendo una pose sentada mientras me jodía, yo solo pude levantar mi cadera para encontrarlo en cada embestida deseando que aumentara el ritmo. 

- ¿Dónde está? -Susurró agitado.

- ¿Qué estas...? ¡Aah!

Miré hacia otro lado soltando gemido agudos, había encontrado mi próstata otra vez con una precisión infalible. No pude contener mi voz cuando hizo lo que desee, sus embestidas fuertes y rápidas, pero que aún así podía sentir con claridad como entraba y salía, el momento exacto en que su polla se estrellaba contra mi próstata sacando gemidos que ni siquiera sabía que podía producir. 

Y mierda, no sabía que tenía tantas ganas de dejar marcas hasta que él se alejó, quiero volver a tener mis manos en su espalda, quiero rasguñarlo y besarlo, pero está demasiado lejos para alcanzarlo. 

Narra [Tomura

Cada vez que lo embestía me succionaba y era exquisito, solté una de sus piernas para acercarme a su cuerpo, lo hice rodearme con solo una de ellas. Me sorprendí gratamente de que con cada embestida él me encontraba a mitad de camino igualando mi ritmo, era perfecto.

Mire sus ojos estaban llorosos por el placer, sus pupilas dilatadas y sus ojos oscurecidos de placer. Curioso me acerque para mirar más de cerca y grande fue mi sorpresa cuando él me atrapó entre sus brazos pidiendo más entre gemidos, lo bese sin despegar mi mirada moviéndome con fuerza Midoriya estremeciéndome al sentir sus uñas en mi espalda. 

-Tus ojos...-Murmuré jadeando

Él los cerro tirando la cabeza hacia atrás mientras gemía. Llamé su atención acariciando su pecosa mejilla, de verdad quiero volver a ver sus ojos, nunca los había visto tan opacos por el placer, tan dilatados que casi parecía tener corazones en ellos. Simplemente quiero ver más de esos lindos ojos verdes.

-Déjame ver -Ordené, y jadeé cuando obedeció, mierda. 

- ¿Qué...?

Alcance mis celular con una estocada para distraerlo, solo bastó una embestida más para alejarme solo lo suficiente para sacar una foto. Listo con eso volví al mismo ritmo de antes. 

Solo bastaron un par de embestidas para sentir mi vientre contraído y supe que estaba muy cerca de correrme, jadee cuando sentí una presión diferente en mi polla, supongo que él también está cerca por lo que redoble esfuerzos, quiero que se corra, dicen que se siente mucho mejor cuando tu pareja se corre antes que tú. 

-De...detente...me voy...¡¡ahh!! ¡¡Aaah~!!

-No lo haré

Lo empecé a besar con lujuria metiendo mi lengua para jugar con la suya, él me apegó más a su cuerpo rasguñando mi espalda lo que me sacó un gruñido bajo. Seguí embistiendo una y otra vez donde sé que le gusta y de repente se separó para gemir largo y tendido mientras su entrada me apretaba mucho más. Mis embestidas tartamudearon ante la exquisita sensación, oculté mi cara en su cuello mordiendo su hombro para callar el grito que obviamente soltaría cuando me corrí dentro de él. 

Jadeando me deje caer sobre su cuerpo todavía temblando levemente por la fuerza de mi orgasmo, en mi vida había sentido tal placer para dejarme tan letárgico. Me relaje cuando él me abrazó y empezó a acariciar mi cabello, joder, no sabía que se sentía tan bien acurrucarse con otra persona, nunca lo había hecho y era malditamente relajante cómo pasa sus dedos por mi cabello.

- ¿Cansado? -pregunto luego de un rato, cuando pudo respirar sin jadear. 

-Un poco -Mentí suavemente. 

Lentamente salí de él estremeciéndome ante la sensación, levante la vista cuando lo escuche gemir quedamente ¿Querrá otra ronda? 

- ¿Por qué? -Preguntó repentinamente. 

-¿Por qué qué? Dije sin dejar mi posición

- ¿Por qué querías violarme?

-No lo sé ¿Traumarte? Algo que claramente no funcionó cuando lo disfrutaste bastante. 

-Igual que tú- Se quejó

- ¿Ah?

-Por tus movimientos y lo cansado que te encuentras ahora mismo diría que soy tu primera vez, me sorprende que se la des a un héroe

-Cállate mocoso 

Le puse la venda otra vez para no ver esos ojos. Me levanté lentamente algo sudado y sintiéndome repentinamente sediento, mirando hacia abajo el desastre que es Izuku me incliné y lo tomé en mis brazos. Una vez seguro de que no se me caería caminé con él en mis brazos atento a sus expresiones, se ve mucho más cansado que yo. 

Una vez frente al lugar correcto coloque un dedo en la pared, solo pasaron un par de segundos para que se abriera la puerta a un baño. Entre a la regadera que contaba con bañera con él en brazos, una vez adentro lo dejé en el suelo para abrir el agua caliente y regularla a una temperatura adecuada. 

-Ponte en cuatro -ordené

- ¿Por qué?

-Aun puedo matarte, hazlo.

Empecé a lavar su entrada sacando mi semen, él jadeaba y se retorcía, en verdad es un pervertido. Hice lo posible por ignorar sus pequeños gemidos y seguí limpiando desviando la mirada a su espalda llena de mis mordidas que tuve que desviar la mirada ante un escalofrío de placer que se concentró en mi polla. 

Cuando logré limpiarlo por completo empecé a lavarnos a los dos, Izuku necesitaba urgentemente un baño cuando solo limpiamos la sangre con agua fría, no ha tenido una ducha decente en bastante tiempo, así que me tomé mi tiempo disfrutando pasar mis dedos por su cabello sintiéndome algo engreído de que él se dejara estar.  

Una vez terminé de bañarnos nos sequé, una vez listo me vestí en silencio mientras él estaba no muy lejos temblando de frío y abrazándose a sí mismo.

-Quiero pedir mi favor -susurro-

- ¿Qué sería?

Me termine de vestir con mi ropa casual; zapatillas rojas, pantalones negros, una camiseta corte V azul oscuro y una sudadera negra con gorro tome a padre colocándolo en mi cara mirando a Izuku que tenía frio y le costaba estar de pie.

-Quiero...

-¿ Te duele mucho? -Lo interrumpí frunciendo el ceño.

-Bueno...Sí, considerando lo bruto que fuiste

-No me culpes por eso tú pedias más mocoso -Me defendí de inmediato, él prácticamente me suplicaba ir más rápido y fuerte. 

Me crucé de brazos frente a él, lo vi sonrojarse y murmurar un par de cosas que no logré escuchar, me alarmé cuando se tambaleo en su lugar, me acerqué cauteloso para luego tener que agarrarlo cuando casi se cae, él se apoyó en mi soltando un quejido. En verdad le duele si su cuerpo tiembla de esa manera, debe tener frío estando todavía desnudo, resignado me saco mi chaqueta y le colocó la prenda en los hombros viendo con sorpresa como se la puso con velocidad tapando todo su cuerpo, después de todo le llega hasta los muslos. 

-Shigaraki-kun...-susurro-

- ¿Cuál es tú favor? -pregunte cargándolo 

-Quiero que no me torturen más...

 -Poco probable

-Si me uno a tu liga...¿Me dejarían en paz?

-Un héroe como tú no haría eso, y como yo soy el líder no veo tu compromiso

-No quiero más tortura.

-Pero ya no te duele.

-Igual...por favor

-No se puede dije apegando su cuerpo al mío.

-Entonces sácame de aquí.

-No puedes huir.

-No me refiero a eso, me refiero al sótano...quiero subir y dormir en una cama, comer...

-Es solo un favor mocoso no te aproveches de tu vida extra

-Shigaraki-kun solo quiero descansar y tal vez algo de ropa y comida.

-Bien

Llame a Kurogiri y él apareció frente a mí. Pude ver la sorpresa pasar por su rostro de niebla, lo cual no es comprensible cuando tengo al héroe en mis brazos solo cubierto con mi chaqueta y ambos con el cabello húmedo. Daba mucho a la imaginación, pero no me voy a explicar, le prometí a Izuku mantenerlo entre nosotros y es lo que haré.

- ¿Qué pasa Shigaraki Tomura?

-Llévame a la cabaña.

-Pero sensei dijo...

-Dijo que lo pasáramos a nuestro bando y eso haré, ahora llévame a mí y a este héroe

-Bien ¿Algo más?

-Tres cosas, quiero que le compres algo de ropa, que nadie además de ti vaya a la cabaña y que no molesten

-Está bien

Entre en el portal que abrió y aparecí en la casa, caminé por esta hasta llegar a mi antigua habitación, lo deje en la cama y lo encadene de las muñecas a la pared con sus tobillos a la cama. No escuché ni una sola queja, solo se tapó con las mantas. Rodando los ojos cerré las cortinas dejando una oscuridad mucho más agradable. 

- ¿Dónde estamos?

-Una cabaña a las afueras de la ciudad nadie te encontrara aquí -Suspire- Ahora descansa 

Lo vi fruncir el ceño por un momento, pero me hizo caso y se acomodó mejor en la cama no tardando en quedarse dormido. De verdad necesita un descanso. 

Continuará