—Pásame las toallas de los mellizos —le pide Jimin a Jungkook, el cual, se encuentra recargado en el marco de la puerta del baño con Sang en sus brazos.

Jeon toma las toallas y como puede las hace llegar hasta Jimin.
El menor toma la tolla de su hijo, lo saca de la bañera y se dispone a secar su cuerpo y luego enrolla la toalla en el cuerpo de su hijo.

—Ve con Jin —le ordena.

El pequeño asiente.

—Vas a tomar un baño, Sang —habla Jeon con su hijo menor, mientras le retira la ropa.

—Appa, huele ico —dice Injae, inhalando el aroma del cuello de Jimin.

El rubio, abraza a su hija e inhala el aroma al jabón del cuerpo de su hija, haciendo que esta comience a reír fuertemente.

—Ve con Jennie —le ordena a Injae.

—Bye, Sang —se despide Jae, agitando su pequeña mano en dirección de su hermano menor.

—Dile adiós a tu hermana —susurra dulcemente, Jeon, tomando la manita de Sang y agitándola suavemente.

Jimin coloca una pequeña esponja de baño para colocar a Sang sobre ella, pero mientras lo hace no evita reír por la forma en la que Jungkook habla con Sang, aunque el pequeño no le entienda absolutamente nada.

—Todo está listo —anuncia el menor, sosteniendo la esponja con sus manos, para que Jeon coloque a Sang sobre esta.

—¿Pensaste lo de visitar nuestras empresas? —inquiere el pelinegro, mientras lentamente coloc a Sang sobre la esponja en forma de oso.

—Sí. Creo que podemos ir ahora —contesta el rubio, observando a Sang y luego a Jungkook.

—Le pediré a Nam, que informe que nos presentaremos —menciona de inmediato el mayor.

Jimin intenta quitar un mechón de cabello de su frente, pero no puede hacerlo debido a que sostiene la esponja en la que se encuentra, Sang.

—Déjame ayudarte —musita Jeon, retirando el mechón de la frente del menor, colocándolo atrás de su oreja. —Eres tan lindo —lo elogia.

Jungkook se acerca a Jimin, para depositar un beso en una de las rosadas y regordetas mejillas del menor.

—Y tú tan guapo —corresponde el cumplido. —Ahora toma la esponja más chiquita y lava a Sang —le ordena el rubio, luego de dejar un pequeño beso en los labios de Jeon.

Después que ambos bañaron a sus hijos, se alistan.
Jimin, por su parte, se cambia la ropa que ha utilizado para su visita al médico, ya que había presenciado pequeños dolores y para prevenir decidió pedirle a JB que lo llevara al médico, ya que Jungkook, tenía asuntos que resolver con enorme cargamento que debía ser enviado a Japón.

—Quítate la corbata —le ordena el menor, ganándose una mirada cuestionadora de su prometido. —Te verás mejor sin ella —agregael rubio, camina hacia el pelinegro con una chaqueta en sus manos, la cual, entrega a Jeon para poder retirarle la corbata.—Ven acá —le pide Jimin, tomando la corbata del mayor, tirando de esta hacia él para estar más cerca uno del otro.

—¿Qué dijo el médico? —pregunta Jungkook, mientras su ángel le retira la corbata con sumo cuidado.

—Dijo que debo ser un poco cuidadoso, descansar y cualquier cosa recurrir a él —responde.

Cuando Jimin retira la corbata del cuello de Jeon, lo observa y luego lanza la corbata a la cama.

—Bien, cuando regresemos vas a descansar. Hare todo por ti —menciona el pelinegro.

Jungkook acaricia las mejillas de Jimin, mientras este le desbrocha dos botones de la camisa.

—Mucho mejor, te ves justo como me gustan —dice el menor, dejando unos pequeños golpes en el pecho del mayor.

—¿Y cómo se supone que te gustan? —inquiere en voz baja, Jeon, mientras abraza a Park y coloca su rostro entre el cuello del menor.

—Como tú —se ríe tímidamente, Jimin, mientras deja pequeños besos en el cuello del mayor.

—Perdón por la interrupción, pero tu amigo Tae, está volviéndome loco, me llama cada dos minutos —informa JB, el cual, está en la puerta de la habitación observando descaradamente como Jungkook mima a Jimin.

—Mierda, lo olvide —musita Jimin, alejándose de Jeon. —Debemos ir a la prueba de nuestros trajes, y debo elegir las sillas —comenta, saliendo de la habitación.

—No olvides mi chaqueta —alza su voz, cuando está fuera de la habitación.

—Jennie, cuida de los mellizos y de Sang. Mino, está por venir para estar de seguridad —le ordena Jeon a la chica, mientras le coloca la chaqueta a Jimin.

—Si algo sucede llama a Jungkook —le pide el rubio, el cual, se acerca a Sang.

—¿Volverán pronto? —pregunta la chica.

—No lo creo —responde Jungkook, luego de haber escuchado lo que su ángel debe hacer.

—Jimin, no olvides ir a la prueba de sus trajes —le recuerda Jin.

—Vamos para allá —dice el menor, con una sonrisa en su rostro.

—Cuídense mucho —pronuncian Jin y Jennie, mientras JB, suena el claxon de la camioneta una y otra vez, provocando que Jeon, bufe.

—Tranquilo, cariño —le pide Jimin, sonriendo, mientras sus hermosos ojos desaparecen.

—Debes abrigarte bien —habla el mayor, deteniéndose antes de entrar a la camioneta, frente al menor.

Abotona cada botón de la chaqueta de Jimin, toma los guantes que se encuentran en la chaqueta y se los coloca, acomoda el cuello de la chaqueta para que su cuello este cálido, el claxon suena de nuevo y Jeon olvida lo que Jimin le ha dicho anteriormente.

—Voy a golpear tu maldito rostro contra el volante, si continúas tocando el puto claxon —verbaliza furioso, Jungkook, dejando que Jimin entre primero a la parte trasera de la camioneta, mientras no para de reír por el poco autocontrol que su prometido tiene.

—Me encanta tu paciencia —bromea el menor, entre pequeñas risas.

En una de las mejores tiendas para bodas se encuentra, Taehyung, desesperado por la irresponsabilidad de Jimin. Se siente humillado por los encargados de la tienda, los cuales, lo miran como si no fuese a comprar nada y todo lo que hace es quedar en ridículo por no tener la cantidad de dinero necesario para comprar los trajes que ha elegido, excusándose en su celular.

Taehyung camina de un lado a otro con su celular en una de sus manos, se detiene al observar a través de las puertas de vidrio como una enorme camioneta negra lujosa se estaciona frente al local, camina hacia la puerta de la tienda y la abre esperando que su amigo y Jeon, bajen del vehículo.

El primero en salir es JB, luego de apagar el motor de la camioneta observa hacia todos lados en las afueras del local, después camina a paso rápido hacia la entrada del local en la cual se encuentra Tae, sosteniendo la puerta.

—Taehyung —saluda JB, cuando pasa frente al amigo de Jimin, mientras desenfunda su arma y camina dentro de la tienda de ropa observando todo el lugar, incluyendo a los trabajadores que lo observan con un poco de miedo.

Cuando está seguro, alza su mano en dirección a la camioneta, la puerta trasera se abre rápidamente dejando ver como Jeon sale de una manera tan sexi dejando a todas las trabajadoras con la boca abierta, sus ojos curiosos y brillosos viendo al hombre guapo y millonario que se ha bajado de la camioneta.

Jungkook, extiende su mano hacia dentro de la camioneta para ayudar a Jimin, cuando ambos estan fuera, el mayor cierra la puerta de la camioneta, acomoda su saco gris para luego tomar la mano del menor y entrelazar sus dedos, y entrar a la tienda bajo la atenta mirada de todos, y la mirada furiosa de Taehyung.

—Parecen una pareja famosa —dice Tae, haciendo reír a Jimin. —No te atrevas a reírte Park Jimin, no cuando has tardado en venir. Todos me han visto como si no tuviese dinero para comprar sus trajes —se queja, mientras Park, deja de reír y suelta la mano de Jeon, luego de escuchar que las personas que atienden la tienda ven de menos a su amigo.

—No hagas algo loco —ruega Jeon al menor, luego de observar cómo mira a todos los que atienden la tienda.

Taehyung le entrega el traje a Jungkook, y observa a Jimin.

—Ve aprobártelo, cariño —le pide el menor—. Pero antes, déjame tu billetera.

Jeon no evita sonreír, sabe que Jimin trama algo, sin renegar la saca de su saco y la dejo en las manos del menor.

JB acompaña a Jungkook, mientras Jimin, busca un traje para su amigo. Jeon regresa, diciendo que su traje le queda perfecto y que le gusta, el rubio, toma su traje y el de Taehyung, ambos van al probador y se colocan los trajes.

—Te ves hermoso —dice Taehyung, asombrado.

—Tú también —habla Jimin, admirando a su amigo.—Quitémonos esto para que pueda darle una lección a todos estos imbéciles —recita el rubio, dejando con la intriga a Taehyung.

Ambos regresan y van directamente a la caja, Jungkook y JB, se encuentran en la puerta del local listos para observar lo que Jimin está por hacer.

—Nos llevaremos ambos, incluyendo este —indica Taehyung, colocando los tres trajes sobre la mesa de la caja registradora.

—Su precio es...

—Dijo que nos llevaremos los tres —interrumpe Jimin a la chica—. ¿Qué parte no entendiste?

Jeon al escuchar a su ángel, introduce sus manos a los bolsillos de su pantalón mientras sonríe junto a JB.

—Es solo que son diseños nuevos, y su precio es demasiado alto —explica la chica.

Jimin saca la billetera de Jungkook de su chaqueta, la abre y saca un majo de billetes frente a la mujer, dejándola en completo silencio.

—Solo cóbranos y listo —espeta Park.

La chica, asiente un poco desorientada, le cobra y Jimin le paga sin rechistar la enorme suma de dinero por los tres trajes.

—A la próxima que lo veas mal de nuevo, hare que te despidan —la señala Jimin, para luego abandonar de la tienda y ser abrazado por Jeon.

Luego de salir de la tienda en la que compraron sus trajes, llegan a una donde alquilan sillas y mesas de todo tipo.

—Que sea rápido, Jimin —suplica Jungkook.

El menor de forma rápida elige unas mesas de acero circulares, y unas sillas color blanco las cuales sus invitados usaran durante la ceremonia, salen del lugar, dejan a Taehyung en el centro comercial donde pasará Yoongi por él, para luego ir a las nuevas empresas de Jeon.

—Estamos afuera —informa Jungkook, mientras se comunica con Nam.

Por su parte, JB y Jimin, comen nachos felizmente, esperando que Namjoon les informe que pueden entrar al lugar.

—Es hora de entrar —anuncia Jeon, interrumpiendo a su ángel y a JB.

Entran a la empresa, unas cuantas personas los observan y los saludan con una reverencia y con una sonrisa en su rostro.

Jeon se detiene frente al sinfín de trabajadores, hace una reverencia junto a Jimin y luego se dispone a hablar.
—Mi nombre es Jeon Jungkook, y soy el nuevo dueño de ambas empresas junto a mi futuro esposo.

Una nerviosa sonrisa se forma en los labios de Park.

—Sé que se preguntaran si hare cambio de trabajadores —todos asienten y murmuran un poco.

—La respuesta es no —dice Jimin con una sonrisa, aliviando a todos los trabajadores. —Continua amor —le pide el menor, luego que lo ha interrumpido.

—Gracias, cariño —susurra Jungkook, con una sonrisa ladina en su rostro.—Todo seguirá igual por el momento, pero más adelante se abrirán nuevas plazas para trabajar personalmente conmigo. Los interesados podrán hablar con Namjoon, mi mano derecha, y vicepresidente de las empresas —expone el pelinegro.

La mayoría asiente y presta atención a todo lo que Jeon dice.
Los que decidan trabajar para él ganarán más dinero, ya que se arriesgan un poco más. Por eso mismo se les duplicará el sueldo, los seleccionados serán las personas más necesitadas, idea que fue sugerida por Jimin, para beneficiar a los trabajadores que realmente necesitan el dinero para llevar alimento a su familia y esten dispuestos a transportar su cargamento.

Jimin y Jungkook, conviven unas cuantas horas con los trabajadores, cosa que es nueva para el mayor, pero que aprende bastante bien al observar a Namjoon, JB y a su ángel, hablar y sonreír con tanta facilidad a otras personas.

Cuando Jimin se siente un poco mareado y cansado decide pedirle a Jeon, que regresen a casa dejando a Nam, encargado de las empresas para poder llegar a casa y que Jel rubio descansase un poco y él pueda mimarlo y poder pasar un buen momento de juego con sus hijos.

De camino a su casa, Jungkook, recibe una llamada, la cual, atiende de manera rápida.

—¿Alguna novedad? —pregunta a Bobby.

—Jov, consiguió una fecha de encuentro con Revìch —le informa.

—¿Es segura? —indaga Jeon.

—Afirmativo, le enviare la cinta de grabación a D.O —es lo último que el infiltrado dice y luego cancela la llamada.

—¿Todo en orden? —pregunta JB, mientras observa a Jeon por el retrovisor.

Jungkook, asiente y segundos después recibe una llamada por parte de Kenji.

—Dime que también tienes buenas noticias para mí —le pide Jeon al japonés.

—Conseguimos la fecha para matar a Yuan —escucha.

Kenji, es directo y por eso es uno de los favoritos de Jeon.

—Tengo el audio —le informa el japonés.

—El día de mañana nos reuniremos en la mansión, los quiero a todos allí, corre la voz —le ordena a Kenji, para luego cancelar la llamada.—Tenemos las fechas —susurra Jeon para JB, el cual, solo asiente y sonríe satisfactoriamente.

Jungkook mira a Jimin, el cual, se encuentra a su lado con la cabeza sobre su hombro, toma su mano y la acaricia dulcemente. Su objetivo poco a poco se esta llevando a cabo.

—Pronto acabare con ellos —susurra Jeon, acomodando la cabeza de Jimin en su pecho, mientras coloca su brazo entre los hombros del menor—. Lo prometo, mi ángel.