Jimin y Jungkook, se encuentran distanciados. Ambos estan sumergidos en un profundo sueño en el que ambos son felices junto a sus mellizos.
Uno postrado en una camilla de hospital, y otro acostado en la enorme cama en la que ama y consiente a su hermoso ángel.

Jungkook, recuerda que sus mellizos se han quedado junto a él, al no sentir el calor de sus hijos sobre él, abre sus ojos de golpe y se queda sentado en su cama, calmando su respiración.

-Al parecer, Jimin, despertó, pero no quiere ver a nadie -escucha una voz.

Jeon, gira su rostro hasta la puerta de la habitación, encontrándose con la mirada de JB.

-Prepara el auto, saldremos en unos segundos -le ordena.

JB, asiente y luego cierra la puerta de la habitación dejando sólo a su jefe.

Deja salir un enorme suspiro, no sabe cómo decirle a su hermoso ángel que ha perdido a su hijo, es lo único que a él le preocupa ya que no sabe cuál será la reacción que Jimin, tendrá al saber la dolorosa noticia.

Por su parte, se encuentra feliz que el amor de su vida este con bien, pero por otra, lamenta mucho el saber que pudo haber sido padre de nuevo, pero por cosas del destino, Jimin, ha tenido que perder a ese nuevo ser que se supone sería el nuevo miembro de la familia.

Jeon, se ducha y se viste lo más rápido que puede, baja a la sala y termina de darle la comida a Daewan, mientras Jin, alimenta a Injae.

Su corazón late desenfrenado no sabe cómo Jimi, reaccionará, no sabe cómo lo tratará tiene demasiado de no verlo, demasiado tiempo buscándolo y no dando con su paradero, espera que Jimin le permita acercarse y poder demostrarle que estará para él, ahora y siempre no importando lo que suceda o lo que pase.

-¿Tienes miedo?

Jungkook, deja caer la cuchara que sostiene en su mano al pequeño volt que contiene cereal, al escuchar la pregunta que Jin, le ha hecho.

-De su reacción y su rechazo. Sí -toma un pequeño pañuelo y limpia la boca de su hijo.

-No lo presiones, él sabe que te necesita y sabe que solo tú y él sienten el mismo dolor por la pérdida de su bebé -dice Jin, tratando de poder relajar a Jeon.

-Jimin, es muy testarudo y orgulloso, pero sabe que te necesita en estos momentos, solo deja que el actué antes, no trates de forzarlo a que pida tu cercanía deja que el pierda su orgullo y cuando él lo haga, tú solo hazle entender que estas de nuevo ahí para él -Jin, se pone de pie y lleva el volt vació hasta el fregadero. -Ya puedes ir a jugar con tus muñecas -le ordena Jin, con una sonrisa a Injae.

-Pero antes despídete de papá -la llama Jeon.

La pequeña y hermosa Injae, camina hasta llegar a donde se encuentra su padre para poder despedirse de él.

-Estas muy hermosa -la elogia Jeon, lanzándole un beso a su hija, observándola como un completo bobo.

-Injae, es tu perdición -se burla Jin, tomando a Dae en brazos para luego colocarlo en el suelo.

-¡Ome! -grita Daewan, Jeon, no entiende lo que su hijo quiere decirle.

-Se refiere a los Transformes -le explica Jin, con una hermosa sonrisa.

-Anotado -Jeon se pone de pie, se acurruca frente a Dae y le da un beso en su sien.

-Ve con tu Ome -se burla de su pequeño hijo.

-Antes que te marches. Bobby, te espera en el cuarto de reuniones al parecer quiere hablar contigo con respecto a la policía -le informa Jin, para luego tomar unos pequeños soperos colocando comida en ellos.

Jeon tomo una fuerte calada de aire y camina hacia el cuarto de reuniones para encontrarse con Bobby.

-Estoy aquí -es lo primero que dice cuando entra del cuarto frente a Bobby.

-Gracias por tu presencia.

Bobby, se retira el celular de su oreja y le señala la silla que se encuentra frente a Jeon, lleva el celular de nuevo a su oreja.

-Bien, infórmame todo lo que tenga que ver con Jeon, hablaremos de tu pago luego -corta la llamada y deja el celular sobre la mesa.

Abre una carpeta y luego coloca sus brazos sobre la mesa, observando a Jeon, detenidamente.

-Tengo el reporte que esperabas, pero desde ya te digo que estas jodido -le advierte Bobby a su jefe.

-Habla -le ordena Jungkook, sin temor a la advertencia que Bobby, le ha hecho.

-Logré detener a los agentes, un fiscal estuvo a punto de entrar al centro comercial. Conseguí un soplón, tengo la información que respecta al caso -toma dos papeles, uno en cada mano.

-Te escucho -musita Jungkook.

La mirada de Jeon, es serena y tranquila, sea lo que sea que le informe Bobby, va encontrar una manera para poder salir adelante sin que Jimin y sus hijos se vean afectados.

-Dos cuerpos hallados sin vida, la señora Lee -lanza una fotografía al centro de la mesa la cual, es vista con una breve mirada de parte de Jeon. -El segundo cuerpo sin vida, Kai, muerto por una explosión -al igual que ha lanzado la foto de la señora Lee, hace lo mismo con la foto de Kai.

Pero esta vez Jeon, no sólo le da una simple mirada a la fotografía, esta vez se inclina un poco en la mesa extendiendo su brazo para poder tomar la fotografía con una de sus manos.

-Él le colocó la granada a Jimin en sus manos -recuerda Jeon, sin dejar de observar la fotografía del cuerpo destruido de Kai.

-Al parecer, tu chico se las ingenió para devolverle la granada y lanzarse a la fuente -comenta Bobby. -Lamento mucho lo del bebé, espero que Jimin se recupere y puedan solucionar sus problemas -Jeon, deja de mirar la fotografía, alza su mirada y la conecta con la de Bobby al escuchar las palabras que ha dicho segundos atrás.

-¿Algo más que tengas para decirme? -pregunta.

A Bobby le queda más que claro que a su jefe no le interesan sus palabras de consuelo.

-Si no tienes nada más que decirme, será mejor que vaya a visitar a Jimin -se pone de pie siendo frío y sereno como siempre suele ser ante sus hombres.

-No debes salir de casa -murmura Bobby, obteniendo nuevamente toda la atención de su jefe.

-¿A qué te refieres con que no debo salir de casa? -inquiere, tomando asiento de nuevo, pero esta vez completamente molesto con las palabras que Bobby, le ha dicho.

-El fiscal que entró al centro comercial está detrás de ti, Jungkook. Al parecer, la señora Lee le brindó toda la información necesaria junto a Kai -contesta.

Y lo que menos esperaba estaba sucediéndole.

-El fiscal no iba por la puta explosión en el maldito centro comercial, él iba por ti, Jungkook. Él viene por ti y es en serio, viene por el pez gordo esta vez -agrega con seguridad, Bobby.

Jeon, suspira, lo único que quiere es poder ver a su ángel y tratar de arreglar las cosas, pero al parecer el destino no lo quiere de esa manera.

-¿Qué tan seguro estas de esto? -pregunta Jungkook, esperando una respuesta sincera de parte de uno de sus mejores hombres encubiertos.

-Estoy a un paso de descubrir que tan en serio va -dice.

El celular de Bobby, suena, observa a Jeon y luego contesta colocándolo en alta voz, para que su jefe pueda escuchar lo que le estan por informar.

-Bobby, el fiscal está en el hospital privado, los chicos de Jeon, lograron desaparecer sus armas e introducirlas a sus autos con la ayuda de las enfermeras. Él sabe que la pareja de Jeon, se encuentra en el centro comercial y que pueda que este internado en un hospital -le informan al encubierto.

Si Jeon no se sentía preocupado anteriormente, está más que seguro que después de escuchar lo que el soplón le informa a Bobby, su preocupación es más que evidente, no por su vida si no por la de Jimin.

-Tengo a uno de los hombres de Jeon cerca, haré que hable contigo -se escucha como alguien toma el celular.

-Bobby soy Nam, el maldito fiscal busca a Jimin para poder conseguir el paradero de Jungkook, logramos subirlo de nivel y cambiarlo a una habitación donde solo se encuentran niños. Ese maldito quiere a Jungkook, será mejor que no venga, Jimin se encuentra bien, despertó, pero no quiere ver a nadie, él simplemente cierra sus ojos y coloca sus manos en sus oídos cuando ve a alguien frente a él -informa Namjoon.

Se supone que esas palabras deben calmar a Jeon, pero no es así, al escuchar la condición y la manera en la que Jimin, actua lo único que le causa era dolor en su corazón.

-Pregunta si el fiscal se retirara -le ordena Jeon a Bobby, el cual hace lo que le ordena al instante.

-Esta por retirarse, pero quedará una patrulla con ocho agentes -informa el soplón.

-Necesito sacar a Jimin. Namjoon, necesito que agilicen el alta médica, Mark y JB, irán conmigo, necesito que busquen una salida segura y en la que no podamos ser vistos -los ojos de Bobby se ensanchan al escuchar lo que Jeon, dice.

-Iré por Jimin, me importa una mierda si hay oficiales, por mi puede haber una puta muralla y buscaría la maldita forma de escalarla con tal de llegar a mi ángel -sale del cuarto de reuniones y se encuentra con Mark y JB, en la sala.

-¿Están listos? -pregunta a ambos, mientras se coloca su chaqueta.

-Claro -responde Mark.

Por su parte, JB, solo carga una de sus armas y esa es la única respuesta que a Jeon, le basta para saber que él también se encuentra listo para lo que se avecine al llegar al hospital.

-Esta todo listo. Nam, encontró una salida con la ayuda de una de las enfermeras, esa será tu entrada Jungkook, y la salida para todos -le indica Bobby.

Jeon, carga sus armas y luego las coloca en su cartuchera.

-No saldré de ese hospital sin Jimin, si por alguna razón soy detenido quiero que se vayan, no quiero que se han descubiertos y detenidos junto a mí -ambos hombres se ven entre sí luego de las palabras que Jeon, les dice al casi estar a punto de llegar al hospital, donde en la parte de enfrente se encuentra un auto de policía.

-El fiscal esta fuera -informa Bobby, por el intercomunicador.

-JB, se mis ojos Mark, ve por el auto de Mino.

Sale del auto siendo cuidadoso entrando por la salida que Nam, habñ descubierto.

-Jungkook, esta por entrar -informa Mark, para alertar a los hombres que se encuentran dentro del hospital.

Jeon, es guiado por JB el cual apunta con su arma siendo sigiloso, el personal médico cuando los observa ignora su presencia y señalan el camino en el cual se encuentra, Jimin.

-Jungkook -susurra Nam, al observar a su amigo.

-Jimin, está en el siguiente piso, en la tercera habitación. Mino, se encuentra con él -le explica.

Jungkook asiente y graba en su mente lo que Nam, le ha informado.

-Sal de aquí, ellos ya te vieron, pero no saben que trabajas para mí, al menos no aún. Vete, JB se quedará junto a mí, Mino me ayudará a sacar a Jimin de aquí, ve con Jin y los mellizos -Jeon extiende su mano y la estrecha con la de Nam.

Mientras Namjoon se marcha junto a D.O y Taehyung, Jeon y JB, suben las escaleras para poder llegar al piso en el que Jimin, se encuentra, cuando terminan de subir las escaleras cuenta mentalmente la tercera habitación, la localiza y camina hacia ella siendo cubierto por uno de sus mejores asesinos.

Jeon quiere abrir la puerta, pero no puede así que decidie dar unos cuantos golpes a la puerta, esta se abre lentamente dejando ver el rostro de Mino, cuando este se percata que se trata de Jungkook, abre rápidamente y deja que tanto su jefe y JB, entren.

-Está detrás de esa cortina -Mino, señala la cortina que impide que Jimin, este al descubierto.

-Bien -susurra Jeon, guarda su arma y trata de parecer relajado.

-Espera, llévale estás.

JB le da un ramo de flores que seguramente algún familiar ha llevado para algún paciente, Jeon, las toma dudoso y emprende su camino hasta estar frente a Jimin.

Por su parte, Jimin, solo piensa en sus hijos y en el hermoso rostro de Jungkook, escucha unos pasos y ve una sombra acercarse a través de la cortina, rápidamente alza sus manos y las coloca en sus oídos, cierra sus ojos fuertemente haciendo presión en ellos.

Un fuerte suspiro es lo que Jeon, suelta al estar frente a su hermoso y amado ángel, su corazón duele al verlo en esa condición, esta seguro que si pudiera cambiar algo, cambiaría todo lo que Jimin, sufre por mucha alegría.

-Jimin -susurra, dando pequeños pasos hasta llegar a la camilla quedando frente a frente.

-Jiminie -alza un poco más su voz Jeon, dejando de lado a las personas que está cerca.

Las manos de Jimin, dejan de ejercer presión en sus oídos, pero no las retira en ningún momento y mucho menos abre sus ojos.

-Mi amor -musita Jungkook, con voz temblorosa, dejando las flores sobre la camilla.

El corazón de Jimin, da un vuelco al escuchar esa voz que todo su cuerpo reconoce, sabe que es Jungkook, su voz lo dice todo, y todo de él lo reconoce sin ningún problema. Sus manos comienzan a descender lentamente hasta colocarlas en los costados de su cuerpo, aun con sus ojos cerrados pequeñas lágrimas comienzan a recorrer el rostro golpeado de Jimin.

-Mi hermoso ángel -susurra Jeon, con nudo en su garganta.

Esas palabras son más que suficiente para que Jimin, abra sus hermosos ojos y observe al amor de su vida frente a él, mirándolo con sus ojos nublados debido a las lágrimas que retiene en su retina.

-Jungkook -solloza Jimin.

-Estoy aquí, cariño -responde Jeon, sin acercarse a Jimin ya que no quiere presionarlo.

-Mi amor -jadea desconsolado el menor, extendiendo sus manos frente a Jeon, dándole a entender que necesita ser abrazado y sostenido por esos fuertes brazos que lo llenan de paz y tranquilidad.

Jungkook, se acerca por completo a Jimin hasta tomar asiento en la misma camilla, dejando que su hermoso ángel se aferré fuertemente a su cuello, empapando de lágrimas la chaqueta que el mayor se ha colocado. Los sollozos y lágrimas por parte del rubio son imparables, se siente destrozado, si bien a un no sabe del todo que su bebé no se encuentra más en su estómago, pero el dolor que siente a lo lejos en su parte maltratada le hace tener una idea.

-¿Sabes lo del bebé? -hipa en el oído de Jeon, el cual asiente al instante aferrándose a la cintura del menor. -Quise decírtelo, pero mi orgullo es más grande -Jimin se aferra al cuello de Jeon, como si dependiera de él para poder seguir en sus cinco sentidos.

-Jimin, mi amor -musita Jeon, sobre el cuello de su amado. -Debes saber algo -tomo las manos del rubio, y hace que suelté su cuello, para que ambos queden frente a frente.

-Él bebé, realmente me emocioné. Mierda, un nuevo bebé, me sentí feliz, y aun lo soy, el que estés con bien y sentir tus manos tocándome es la gloria, necesito que seas fuerte y recuerdes a los mellizos. ¿Entendido? -habla Jungkook.

Jimin, asiente rápidamente, no entiende porque Jeon le da tantas vueltas al asunto, él nunca es así.

-Lo que tengas que decir, dilo -le pide el menor, tomando la mano de Jungkook, fuertemente.

-Tienes un hematoma en tu estómago, si te sientes un poco adolorido es porque el médico tuvo que realizarte una pequeña cirugía.

Los ojos del menor se ensanchan, al mismo tiempo que tomo más fuerte la mano de Jeon.

-Perdiste al bebé -confiesa Jungkook.

El menor, mueve su cabeza de un lado a otro, con la mano que no se aferra a la de Jeon, toca su estómago.

-No -solloza-Mi bebé...

Suelta la mano de Jeon y la lleva a su estómago, si Jimin, lloraba anteriormente ahora llora el doble, simplemente no sabe que decir y que hacer, el saber que ha perdido a su hijo le destroza el corazón y demasiado.

-No es tu culpa -susurra Jeon un poco dudoso por lo que ha dicho.

Al ver a su ángel en esa condición decide ponerse de pie. Jimin, siente el vació que el cuerpo de Jeon, ha dejado en la pequeña camilla, alza su rostro repleta de lágrimas y lo observa con su vista nublada del sin fin de lágrimas que no es capaz de retener.

-No me dejes -suplica, tomando de nuevo una de las manos de Jeon.

-Jamás lo haría, mi amor.

Jungkook abraz a Jimin fuertemente, como si con ese abrazo tratara de decirle lo mucho que lo siente y lo mucho que lo lastima verlo en esta situación.

-Jamás te dejaría, a menos que tú me lo pidieras -dice el mayor, besa la sien de Jimin, y junta sus cuerpos para sentir el calor el uno del otro.

-Te amo, Jimin, y esto no cambiara nada del amor que siento por ti, cariño, mi vida depende de ti. El tenerte entre mis brazos es mi regalo más preciado -Jeon empieza abrir su corazón, si bien espera que la reacción de Jimin, sea distinta, espera que él no cambie con el pasar de los minutos.

-Jeon, debemos irnos, el fiscal esta por volver y el policía a cargo de esta misión te quiere si o si -habla Mino, detrás de la cortina.

-¿Qué sucede? -pregunta Jimin, con cierta confusión.

-En el edificio hay policías, me quieren a mí, te debo sacar de aquí -responde.

Se aleja de Jimin, se retira su chaqueta y la coloca en la camilla dejando a la vista del menor las dos armas que carga cerca de su estómago guardadas en la cartuchera.

-Ven acá -le pide, retira la sábana de las piernas de Jimin, observando las contusiones que tiene sobre ellas. -Colócate esto -le ayuda a colocarse la chaqueta, mientras él rubio, permanece sentado en la camilla. -¿Crees poder caminar? -indaga Jeon, se acurruca y le coloca unas pantuflas.

Con un poco de dificultad, Jimin, se pone de pie, da unos cuantos pasos y siente unas leves molestias.

-Me duele un poco nada más -se queja Jimin, observando a Jungkook.

-Te cargare -abre la cortina y ve a Mino y a JB.

-Es hora de salir. Mino, iras al frente, yo al medio, cargare a Jimin. JB, iras atrás, cúbreme, informen que vamos hacia fuera -da la ordenes, Jeon.

Mino, abre la puerta y observa el panorama de afuera de la habitación, mientras se comunica con Mark y los demás.

-¿Qué pasara si te ven? -pregunta Jimin con voz temblorosa.

-No lo harán, y si lo hacen debes irte sin dudarlo -contesta, tomando el rostro de Jimin con sus manos, acariciando las mejillas regordetas de su hermoso ángel, para luego lentamente juntar sus labios en un dulce beso que ambos necesitaban.

-Te amo -susurran ambos sobre los labios del contrario.

-Es hora -escuchan.

Jeon, toma de los muslos a Jimin, y lo carga mientras que Jimin, se aferra al cuello de Jungkook, con una de sus manos y con su otra mano se aferra a la camisa de Jeon.

-Jungkook, tu arma me lastima -chilla Jimin.

-JB -pronuncia Jeon, el mencionado retira el arma y la guarda en la parte trasera de su pantalón.

Mino se encarga de despejar el camino para poder salir a salvo y no ser vistos por los agentes policiales, una enfermera se percata de ellos esta tomo una bolsa con medicamentos y una prescripción médica, se coloca al lado de Mino, para servir de sombra mientras Jeon, traslada en sus brazos a Jimin de un lado hacia otro.

-Estamos cerca -habla la enfermera para todos los hombres armados a excepción de Jimin.

-¿Te encuentras bien? -pregunta un poco preocupado, Jeon, al escuchar un pequeño quejido proveniente de los labios de Jimin.

-Lo estoy, tranquilo -deja un casto beso en los labios del mayor, para que este se tranquilice.

-Mierda -bufa Mino, molesto.

-¿Qué ocurre? -pregunta JB.

-El oficial a cargo y el fiscal están de espaldas a nosotros -responde molesto.

-Necesitamos una maldita distracción. Mark, piensa en algo -se comunica JB, por el intercomunicador.

-Taehyung, va hacia dentro -escuchan.

Jimin, al instante conecta su mirada con la de Jungkook.

-Alguien que lo detenga -ordena Jeon, molesto, por el descuido de Mark y Namjoon.

-Demasiado tarde, el chico loco está frente al fiscal y el oficial a cargo.

JB realmente creía que Taehyung, es un maldito loco, pero un loco que hace lo que sea para que su amigo este con bien.

-¡Por favor, ayuda, no respiro! -se escucha el grito proveniente de la voz del amigo de Jimin.

-Es nuestra salida. ¡Ahora! -grita JB.

Mino regresa a su posición, la enfermera corre adelante y luego la siguen los demás.

-Rápido, Jeon -alza la voz JB, para que Jungkook, se agilice y salga del posible ángulo de visión.

-Gracias.

Mino hace una reverencia ante la enfermera, la cual, no deja de observar el arma con un poco de temor.

-No la lastimaremos -le asegura Mino, para tranquilizarla.

-Son los medicamentos del joven, y una prescripción médica -le extiende la bolsa de pastillas y el papel a Mino, mientras la puerta trasera de emergencias del hospital es abierta dejando a la vista a Mark, Namjoon y a D.O, con dos autos listos.

-Debemos irnos -dice Jeon.

Al escuchar eso, Jimin, se remueve en los brazos del mayor para que este lo coloque en el suelo.

-Jimin -susurra Jungkook, empezando a asustarse del posible comportamiento de su pareja-. Todo estará bien, mi amor.

Jimin observa a Mino y a Mark. Luego mira a Jungkook el cual le extiende su mano, pero el rubio, simplemente lo ignora.

-Nada está bien, Jungkook, acaso no te das cuenta -habla fuerte y claro Jimin.

Ydesde ese momento Jeon, sabe que la conducta de su ángel ha cambiado.

-Jimin -pronuncia el mayor, intentando llegar a él, pero el menor lo esquiva caminando hasta donde Mino, se encuentra.

-Deben irse -interrumpe la enfermera.

-Todo esto está mal. Mierda, perdí a mi bebé, lo he perdido todo y es toda tu maldita culpa -espeta el rubio.

Y nuevamente, Jimin, llora frente a Jungkook, destrozándole más su corazón.

-Déjame solucionarlo, ven conmigo -le pide con voz temblorosa, Jeon.

-No entiendes, Jungkook. Lo único que tengo son mis hijos, a mi hermana y a ti, pero la policía te busca, no quiero perder y sufrir más de lo que he sufrido. Estoy harto de esto -habla Jimin, aferrándose a la cintura de Mino, utilizándolo como escudo.

-Debemos irnos -esta vez quien interrumpe es Nam.

-¡Cállate! -grita Jeon con lágrimas descendiendo su rostro. -Sé que me equivoque, sé que te lastimé, pero por todo el amor que nos tenemos te lo pido. No te alejes de mí de nuevo -le implora Jungkook a su hermoso ángel.

-Debemos irnos -repite Namjoon.

Mino observa a Jimin, sabe a donde debe llevarlo. Mark se coloca al lado del rubio, decidido esta vez a ir con él.

-No iré contigo, Jungkook -dice Jimin, luego de aclararse la garganta.

-¿Qué hay de nuestros hijos? -pregunta Jeon, desesperado, buscando la manera de poder retener a ese hermoso ser que se ha convertido en su todo y en su nada.

-Que Namjoon los lleve a mi -responde el menor.

Mino entra a uno de los autos, Mark, abre la puerta trasera para que Jimin entre.

Se gira dándole la espalda por completo a Jeon, cuando está a punto de entrar aun derramando lágrimas de sus ojos, reúne las fuerzas necesarias para poder decir las últimas palabras al amor de su vida.

-Te amo, Jungkook, pero no quiero sufrir más.

Jimin alza su pierna e introduce la mitad de su cuerpo al auto, observando a Jeon frente a él.

-¡Jungkook, mierda. Debemos irnos! -exclama Namjoon, entrando al segundo auto, mientras JB, espera que Jeon reaccione.

-¡¿Qué hay de mí?! -suelta, frustrado Jungkook.

Alza sus manos y su voz, sin dejar de observar a su hermoso ángel, el cual, esta a punto de alejarse de él una vez más.

-No lo hagas más difícil -susurra Jimin, y luego cierra la puerta del auto de un azote.

-Jungkook, sube al auto -le pide Mark, antes de subir al auto junto a Mino.

-¡Deben irse ahora! -grita desesperada la enfermera al observar que la policía se dirige hacia la salida de emergencia.

JB, camina hasta donde su jefe se encuentra, manda toda la cordura y respeto que le tiene a Jeon a la mierda, cuando observa que Mino arranca el auto y dentro de este va Jimin.

Jungkook, esta a punto de dejarse caer al suelo sobre sus rodillas, pero un furioso JB, aparece intentando hacerlo reaccionar de manera distinta.

-Deja de actuar débilmente.

Golpea el abdomen de Jeon, lo toma con fuerza del rostro y lo ve fijamente.

-¡Por aquí! -se escucha la voz de uno de los policías alertando a los demás.

-Mal momento para ser débil, Jeon -bufa molesto, JB, el cual arrastra el cuerpo de Jeon a la fuerza hasta el auto.

-¡Cúbrase! -le grita Nam a la enfermera.

-Entra de una puta vez -le ordena JB, empujando el cuerpo de su jefe hacia dentro del auto.

-Alto allí -se escucha a lo lejos.

JB, carga otra de sus armas y mientras lo hace un disparo pasa cerca de su rostro.

-¡Voy mandarlos al infierno, hijos de puta! -exclama, se gira y comienza a disparar.

El sonido de las balas basta para que Jeon, regrese a la realidad, saca su arma y observa a Nam el cual se encuentra esperando que JB, entre al auto.

-JB, adentro -ordena Jeon-. Nam, cúbrelo.

El nombrado suelta el volante y al instante comienza una ráfaga de balas en contra de los policías, para poder cubrir a JB.

-¡Detente! -grita Jeon. -Entra ahora -le ordena a JB.

Jungkook, baja la ventanilla de la puerta trasera del auto solo un poco para poder sacar el cañón de su pistola, cuando logra lo que quiere, comienza a disparar cubriendo a JB.

-Arranca de una puta vez -bufa JB, cuando se encuentra dentro del auto.

JB, baja la ventanilla y saca la mitad de su cuerpo disparándole a los policías. Jeon, hace lo mismo, una patrulla se encuentra detrás de ellos, ambos se observan.
Jungkook, cambia de arma con JB, ahora es Jeon quien manipula la sub ametralladora comenzando a disparar al motor del auto.

-Deja que se acerca más -le pide a Nam. -Apunta al tanque de gasolina -le indica a JB.

Ambos hacen lo que Jeon, les ha ordenado tal cual, la gasolina de la patrulla comienza a esparcirse por toda la calle, Jungkook, alza una vez más el arma larga y apunta directo al motor y luego al tanque de gasolina.

-¡Acelera! -grita Jeon junto a JB, para luego entrar al auto y acomodarse en los asientos.

Segundos después una explosión ocurre a unos cuantos kilómetros. Nam, continúa conduciendo observando de vez en cuando a Jeon por el retrovisor.

-¿Hacia dónde? -cuestiona Namjoon a Jungkook.

-Aun hotel lejos de casa. Dile a Jin que lleve a los mellizos con Jimin y que no regrese a casa -ordena seriamente.

-JB comunícate con Bobby, dile que me informe cada movimiento de ese maldito fiscal y quiero la identidad del maldito oficial a cargo de mi captura lo más rápido posible.

Se deja caer débilmente sobre el asiento trasero del auto, lleva su antebrazo sobre sus ojos para cubrirlos, unos segundos más bastan para que lágrimas recorran de nuevo su rostro bajando hasta su cuello.

Solo Jimin puede causarle sensaciones de este tipo, no sabe cómo hará, pero estará de nuevo con su ángel y sus hijos, pero primero buscará la forma de deshacerse del oficial y del fiscal que quieren su cabeza para meterlo tras las rejas.