Fengxiao fue esta vez el que arropó a Zhiyin después de desvestirlo y ponerlo más cómodo. Se había quedado dormido contra su hombro mientras le hablaba sobre como producir ellos mismos sus propias telas y aunque él no entendía muchos de los conceptos o palabras raras que utilizaba su esposo, todo indicaba que serían beneficiosos sus conocimientos. Pero Zhiyin se había saltado alguna de sus siestas acostumbradas a lo largo del día por lo que se quedó rendido después de algunos bocados.

-Yanhuan tráeme los documentos que tengo pendiente, me quedaré con él así que los revisaré aquí- le pidió al gemelo sentándose en la cama al lado del menor. Ya estaba al tanto de que había mandado a Yanfeng a resolver gestiones.

-Si, mi señor- Yanhuan salió regresando minutos más tarde con varios pergaminos y entregándoselos.

Era entrada en la madrugada cuando sintió como su esposo hacía sonidos de protesta con la garganta y pensó que estaba teniendo una pesadilla por lo que le acarició el hombro suavemente para tranquilizarlo sin separar la mirada del documento delante de él. Pocos segundos después Zhiyin lo volvió a hacer pero esta vez se removió y encogió sus pies adoptando casi una posición fetal. Abrió un poco sus ojos humedecidos y apretó los dientes.

-¿Zhiyin, qué ocurre?- Fengxiao soltó lo que tenía en las manos y se inclinó preocupado.

Pero su esposo no respondió, se pasaba la mano por su panza y respiraba profundo, había pequeñas gotas de sudor que comenzaba a salir en su frente.

-¿Tienes problemas con el embarazo?- buscó algo para secar el sudor pero la mano del menor detuvo su muñeca.

-El renacuajo está pateando no es nada para preocuparse- fingió una sonrisa a pesar de las diversas pulsadas de dolor que atacaban su panza, espalda y cadera dejándolo sin aliento -Si lo acaricias un poco se calmará y me dejará dormir- le pidió agarrando su brazo con la otra mano.

-Al menos déjame llamar al médico para que te revise- Fengxiao agarró sus manos para soltarse pero el agarre de Zhiyin era firme.

-En serio, estoy bien- jadeó un poco -Seguro que está alterado a causa de lo que hicimos ayer- desvió el tema - Vamos, acarícialo, solo está molesto porque no le hemos prestado la atención necesaria- sonrió agotado, no quería preocupar a su esposo más de lo que ya lo hacía.

-Mañana mandaré al médico a revisarte- besó su frente aún renuente. Bajó la mano y comenzó a tocar la panza por arriba de la túnica. No podía sentir que nada se moviera adentro pero él no era quien tenía el embarazo.

Zhiyin no sintió alivio hasta después de largos minutos que creyó fueron horas pero fingió mejorar en cuanto su esposo lo había tocado, no quería ver la expresión de angustia. Fengxiao había dejado los documentos a un lado y se había acostado junto a él poniendo la cabeza del menor sobre su brazo acomodándolo. Zhiyin cerró sus ojos y no supo si era por el agotamiento producido por el dolor pero apenas se podía mover. Su renacuajo no se estaba portaba nada bien esa noche. Y debido a eso, para cuando amaneció él no había podido volver a dormir.

-¿Estás seguro que estás bien?- Fengxiao se sentó a su lado después de cambiarse y pasó la mano por su frente echándole el cabello hacia atrás. Fruncía el ceño preocupado, a pesar de que su esposo había estado todo el tiempo con los ojos cerrados, se había percatado que no había conciliado el sueño.

-Esposo mío, solo estoy cansado- Zhiyin se sentó en la cama, al menos el dolor se había ido nuevamente pero estaba sin fuerzas- Después de desayunar estaré como nuevo- decía aquello pero solo con pensar en comida le daba náuseas, vaya mañana tan prometedora.

Fengxiao no estaba muy complacido pero su esposo parecía que estaba mejor a pesar de que sus labios estaban un poco descolorido.

-Terminaré el trabajo temprano y volveré, mientras tanto descansa- besó la coronilla de su cabeza.

-No creo que a tu hermana le guste oír eso, después de todo ayer me salté las clases- Zhiyin sonrió- No te preocupes por mí, siento que si me quedo entre estas paredes va a ser peor. Iré a dar mis clases para ser un mejor segundo líder de secta y tú te irás a trabajar sin tanta tensión. Entendido- Zhiyin le acarició el pecho con voz despreocupada.

Fengxiao apretaba los labios pero al final accedió. No quería separarse de él pero tenía demasiado trabajo acumulado y como líder no podía dejarlo para después.

-Más tarde hablaremos de lo que me contabas ayer y te quedaste a mitad, me parece muy buena tu idea sobre la tela-

-Entonces te gustará más saber lo otro que tengo en mente- alzó los brazos y los enredó en su cuello besando su mejilla -Solo te adelanto que tiene que ver con lo que te preparé y a ti te gustó tanto- le murmuró al oído recibiendo un ligero temblor en los hombros por parte de su esposo y sonrió.

-Pues ya estoy intrigado- Fengxiao buscó sus labios y dejó caer los suyos. Zhiyin no le puso resistencia, no tenía ni ganas ni fuerzas, solo quería dejarse llevar por aquel hombre que definitivamente se había hecho un lugar en su corazón.

Alguien carraspeó su garganta detrás de ello. Ambos miraron aun con sus labios húmedos de saliva y estaba Yanhuan con el rostro hacia el otro lado evitando sus muecas acusadoras.

-Te juro que la próxima vez que nos interrumpas, Yanhuan, te castro- le amenazó Zhiyin soltando a su esposo, al menos le quedaba energía para pelearle.

-Ayúdale a cambiarse- Fengxiao pasó por al lado del gemelo en dirección a su oficina. No sin antes darle una última ojeada por encima del hombro.

Yanhuan suspiró dejando caer sus hombros una vez su superior se fue.

-¿Por qué tengo que hacer las tareas de mi hermano?- protestó pero de igual forma buscó las túnicas de Zhiyin en el armario y las acomodó a un lado.

El menor solo sonreía levemente. Sentía que todo su cuerpo pesaba considerablemente y estaba entumecido por zonas, además no creía que fuera capaz de consumir algún alimento sin devolverlo. Se corrió la colcha y salió lentamente de la cama pero cuando fue a levantarse cayó sentado otra vez en la cama.

-¿Estás bien?- Yanhuan se acercó a él notando lo cansado de su aspecto a pesar de que se había quedado dormido muy temprano- Acaso mi señor se sobrepasó en la noche o tal vez tú-

-Cállate Yanhuan- jadeó Zhiyin sabiendo que el gemelo se imaginaba que habían tenido otra intensa noche de sexo que todavía no llegaba- El renacuajo estuvo toda la noche pateando, casi no he dormido nada- puso las manos en la cama y se impulsó logrando levantarse -Ayúdame a vestirme, no quiero que Suji me regañe aún más por llegar tarde-

-¿Está seguro?- no parecía muy convencido.

-Solo estoy cansado, vamos- caminó hacia la ropa y dejó que el mayor lo desvistiera y pusiera cada una de las prendas que usaría ese día.

Zhiyin se imaginó que Suji le regañaría por saltarse las clases, en eso no había problemas, aunque esta vez increíblemente lo felicitó por el logro en la compra de las telas, seguro porque sabía que podía gastar sin limitaciones. Lo que no se esperaba era que esa mañana la muy distinguida Langli los acompañaría en la lección. Ya tenía que aguantarla debajo de su propio techo, también a su lado era algo que estaba más allá de su paciencia.

Además la mujer respondía con exactitud cada una de las preguntas sobre etiqueta que hacía Suji mientras Zhiyin buscaba concentrarse, el agotamiento estaba pasando factura sobre todo a su espalda tiesa. Era como si ella se hubiera preparado desde hacía mucho tiempo para formar de la secta, bueno, tal vez si, ella era la que estaría en su lugar si el anterior Fujie no se hubiera atravesado. Miraras como miraras él parecía ser el villano de la hermosa historia de amor.

Resopló enderezándose en el cojín y se acomodó la panza.

-¿Tan aburrida es mi clase?- Suji le reclamó.

-Para nada cuñada pero te vi tan entretenida con tu nueva estudiante que no pensé que me notarías- Zhiyin sonrió inocentemente.

-Llevas toda la mañana sin prestar atención o responder, acaso piensas que hago esto porque me gusta- la mujer se levantó indignada, nada fuera de lo común- iré a notificarla a mi hermano-

-Buena suerte con eso- Zhiyin le dijo adiós con la mano. Eso significaba que las clases habían terminado.

La mujer salió disparada del estudio en dirección a la oficina de Fengxiao y abrió la puerta. El líder solo alzó la mirada para devolverla después a sus escritos.

-Qué vienes a decirme de lo que ha hecho mal Zhiyin hoy-

-Fengxiao, no ha prestado atención en toda la mañana, está como dormido. Eso pasa porque lo tienes muy mimado, debes ser más disciplinado con él. Mira a Langli, ella respondió todas mis preguntas elegantemente y con palabras perfectas, ella si es un buen ejemplo para la secta-

Fengxiao ni siquiera le prestó atención.

-Y no creo que Langli le hubiera importado algo tan importado como la economía de la secta, a menos que fuera gastar el dinero- cerró el manuscrito delante de él -Sabías que el otro día cuando Zhiyin y yo salimos él eligió las cosas más baratas que pudo a pesar de que podía comprar lo que quisiera, sabías que gracias a él no tendremos problemas estos tres meses y los hombres no tendrán que trabajar extras en las minas, sabías que buscó una forma de que podamos realizar nosotros mismos nuestras propias telas sin necesidad de gastar tanto dinero-

Suji se quedó sin palabras y miró al suelo de cierta forma, avergonzada. Eran tantos los rumores que últimamente se estaban diciendo de Zhiyin que ya no sabía cuáles eran reales y cuáles no. Incluso había oído que se había gastado una gran cantidad de dinero saqueando al líder, pero por lo que decía su hermano no era así. Y Fengxiao nunca mentía.

-Zhiyin pasó toda la noche con dolores por el embarazo e intentó ocultarme su malestar, hoy me dijo que estaba mejor e insistió en seguir su rutina, el doctor está en el pueblo y llegará dentro de poco- el hombre continuó -No lo sigas presionando-

-No era más fácil decirme eso- Suji alzó la cabeza -Si hubiera sabido que mi sobrino no lo había dejado dormir hubiera corrido la clase para más tarde-

-Él no quería quedar mal ya que a la de ayer no fue- concluyó.

La mujer dejó salir un respiro.

-Está bien, no te diré más nada sobre él- levantó las manos exasperadas -le diré a mis doncellas que lo lleven al cuarto y que lo atiendan-

-Espera- Fengxiao se levantó -Yo iré contigo, es casi la hora del almuerzo y quiero asegurarme que coma- estaba preocupado que estuviera solo en el cuarto -Yanhuan manda a preparar la comida-

Los dos hermanos salieron y caminaron por el pasillo. De pronto un grito llegó del estudio y ambos corrieron quedándose petrificados con la imagen. Langli tirada en el suelo torpemente entre un reguero de pergaminos y tinta que manchaba su hermosa túnica, con la nariz choreando sangre y frente a ella Zhiyin enfocándola con odio en sus ojos.

Confieso, de todas mis historias esta es la que más disfruto escribiendo por eso la actualizo tanto, así como mi personaje preferido es Zhiyin, nunca pensé que de mi mente saliera alguien así, pero entre su carácter rebelde, su inteligencia, su picardía, su sensualidad y su toque de humor me hace el día.