-Zhiyin- la mano de su esposo se posó sobre su cuello y apretó aquel punto que lo ayudaba a tranquilizarse y le hizo señas con la cabeza dándole a entender que lo comprendía. Lo próximo que dijo lo hizo casi en un murmullo- Veré que quiere y después hablamos, vuelve-

Zhiyin pareció pensárselo pero al final dio media vuelta sin decir más ninguna palabra, pero hizo seña hacia el recién llegado de que lo tenía en la mira y desapareció con pasos pesados.

-Tú esposo es la bomba- Songhua se carcajeó- ya entiendo por qué no querías llevarlo. Me imagino la cara de tía cuando lo vea, ella es tan estricta. Aunque creo que a tío postizo le encantará-

-A qué viniste realmente Songhua- Fengxiao le prestó atención después de cerciorarse que Zhiyin estaba fuera de la vista de su primo. No había pasado por desapercibido que lo había recorrido de arriba abajo. Después de todo el menor no estaba correctamente vestido.

-¿Yo? ¿Qué pregunta? Si solo venía a verte y ponernos al día ¿Qué más?-

Pero Fengxiao no era estúpido. Si su primo estaba ahí era por algo, pero alguien tan impredecible como él era difícil de saber que tenía en mente. Al parecer si existía alguien más complicado que su esposo. Tendría que cuidar su espalda por su acaso.

Se giró y se encaminó hacia su estudio con las manos detrás de su espalda y le hizo seña a uno de los guardias de que se encargaran de los recién llegados. Tomó otro camino diferente por el que había vuelto Zhiyin para evitar encontrarse con él. Songhua lo siguió con una sonrisa repasando los alrededor de la secta.

-La última vez que vine no había tanto lujo. Se nota que estás invirtiendo en reformar. Las minas deben estar dando bastante-

-Lo necesario- dijo Fengxiao con voz seca. Sabía por dónde venía.

-Sabes, los tíos tienen en mente unas nuevas inversiones y después que lo analizamos nos dimos cuenta que podemos sacar más provecho si invertimos más, pero como sabes tenemos el presupuesto de cada mes contado-

-No mandaré un centavo más, además si mis padres quieren invertir un poco más deben saber cómo lidiar con las cuentas-

-Primoooo- Songhua protestó dejándose caer en el cojín una vez entraron en el estudio. Fengxiao se sentó con elegancia del otro lado de mesa y agarró uno de los rollos que tenía delante y siguió trabajando- Tienes mucho dinero, tu secta y el pueblo vive muy bien, no seas tacaño, por un poco que desvíes no pasará nada-

Fengxiao alzó una ceja.

-No- dijo rotundamente.

-Oh, ya entiendo- Songhua apretó los labios- es por tu esposo- la sola mención de esto puso en alerta a Fengxiao- Me imagino que necesitas comprarle cosas caras, muy caras. Tiene rostro de que le gusta la buena vida. Incluso hay comentarios de que le compraste un buen terreno-

-Eso no es asunto tuyo, pero no me quedaré callado si se refiere a Zhiyin- los orbes azules de Fengxiao se oscurecieron- Zhiyin tiene su propio dinero y no utiliza nada del mío para lo que quiere y no, no le gustan las cosas caras, es una persona bastante práctica-

-Interesante- sonrió Songhua- Entonces no debes tener problemas para darnos más dinero-

Fengxiao no respondió.

-Primo mira que puedes ser duro de roer. En ese caso porque mejor no nos dejas administrar una de las minas al menos por un tiempo. Vas a ser padre y de seguro no tendrás tiempo para encargarte de todo. Nosotros te daremos la ganancia, que crees-

-Hablas como si la mina ya fuera de ustedes. Lo siento pero no puedo. Firmé con Zhiyin la propiedad de las minas. Estas no pueden ser administradas por más nadie que no seamos nosotros o que le demos el permiso y Zhiyin no creo que lo de-

Songhua abrió grande los ojos.

-Estás loco primo. ¿Cómo le das parte de la propiedad de tus tierras a alguien que te ha engañado? Hasta el hijo que crece en su barriga no es tuyo-

Fentgxiao dejó el rollo de papel y lo miró ceñudo.

-¿Qué dijiste? ¿Quién te dijo eso?- gruñó.

Songhua se separó un poco de la mesa.

-Primo no te pongas así conmigo. Lo oí por ahí. Alguien lo comentó- una gota de sudor corrió por su frente- pero acaso me equivoco. Tío te estuvo advirtiendo, esa persona solo se está aprovechando de ti-

-Cállate- Fengxiao le dijo suave pero demandante- Zhiyin es mío, el hijo que tiene en su barriga es también mío. Y no hables de él como si lo supieras todo-

El mayor chasqueó los dientes.

-Está bien, no me importa tu esposo. Es lindo a su forma pero no me gustaría tener al alguien tan traicionero a mi lado- al terminar de decir esto sintió como su garganta se sofocaba. Delante de él el aura de Fengxiao se volvía oscura a su alrededor. Había molestado realmente a su primo pero no podía rendirse. Tenía la intención de convencerlo para que aumentara el envío de dinero a su secta, Hongsu.

Songhua estaba acostado en la cama boca arriba. Había una expresión totalmente seria en su rostro y un brillo inusual en sus ojos.

-Primo parece realmente intoxicado por ese hombre- recordaba la forma en que hablaba sobre él.

Se le había negado a todos los pedidos, no importara cual fuera. Al final Fengxiao no había cedido a enviar más dinero y eso lo había molestado. Al menos había podido parar la noche en la secta para descansar después de un largo viaje. Todavía tendría una segunda oportunidad. Recordó entonces que debía darle algo que tenía guardado dentro de su túnica y se levantó.

Era casi la madrugada. Fengxiao hacía mucho lo había dejado e ido a descansar, pero conociéndolo de seguro no estaría durmiendo. Tal vez podría usar eso de excusa para convencerlo. Con más entusiasmo que antes se levantó y se encaminó hacia la habitación del líder. Notó que la única que tenía la luz encendida era la de él a través de la puerta por lo que no se había equivocado. De seguro su esposo se había ido a dormir en su habitación, no había ninguna más encendida y era de conocimiento público que dormían separados. Excelente oportunidad.

Se acercó sigiloso sabiendo que su primo de seguro lo detectaría dado su alto cultivo cuando escuchó gemidos del otro lado de la puerta. Eran leves, amortiguados por la distancia pero audibles. Songhua detuvo el movimiento de su mano que estaba a punto de tocar.

-Esposo mío, más suave, es muy profundo-

Esa voz la reconoció a pesar de estar más grave. Ese era el chico todo desaliñado y mal hablado con una inmensa panza que le había lanzado una maceta y sacado la lengua. Estaba allí dentro.

-Fengxiao bebé, así, más, Ah-

La expresión de Songhua se ensombreció a tal punto que sus ojos se volvieron dos piedras carbón. Apretó tanto sus puños que dolieron.

-Así, ah, más rápido-

Songhua tembló ligeramente y alzó una mano para abrir la puerta.

-¿Qué está haciendo?- fue interrumpido.

Yanhuan apareció saliendo de su cuarto ajustándose la túnica y con su espada en la mano. Aún descalzo se acercó con el rostro desfigurado por el ceño fruncido. El cabello que siempre llevaba en una coleta estaba disperso sobre sus hombros y espalda haciendo que se viera un poco más imponente de lo que naturalmente era.

-Solo quería hablar con  mi primo- Songhua sonrió inocentemente, algo que no le pegó para su edad.

-Fengxiao suave, vas muy rápido- se escuchó desde dentro seguido por un gemido por parte de las dos personas que tenían el acto carnal y Yanhuan utilizó toda su fuerza de voluntad para no enrojecer.
-Lo siento pero me parece que nuestro líder está ahora mismo muy ocupado-

El otro hombre se tocó la barbilla.

-Hasta donde tenía entendido, ellos no tenían una buena relación. Incluso pensé que no dormían juntos-

Yanhuan apretó más fuertemente la espada y sonrió de forma falsa.

-Ah, Esposo mío...que rico, sigue así, en ese punto. Ah- otra vez se escucharon los gemidos desde adentro que esta vez solo venían de un lado.

-La verdad es que llevan bastante tiempo durmiendo junto, todo lo que comentan por ahí son simples comentarios que no tienen basamentos. Además nuestro Joven señor es bastante insaciable aun si está embarazado y tiene el tiempo de la noche de nuestro líder bastante ocupado y es sabido que nadie puede interrumpirlos. El señor Zhiyin suele despertar de muy mal genio sin es estorbado-

Songhua entrecerró los ojos.

-Disculpa- arrastró las palabras- La verdad no tenía idea, gracias por corregirme- miró nuevamente la puerta dándose cuenta que el sonido había dejado de salir. Como si hubiera sido bloqueado completamente. Bufó y se dio media vuelta- No te preocupes, puedo hablar con él mañana y caminó de vuelta hacia su habitación. Yanhuan se mantuvo en guardia hasta que desapreció por la esquina.

-¿Hermano?- oyó la voz de su hermano que apareció poniéndose una túnica para tapar su desnudez -¿sabes que intenciones tenía?- había dejado que su hermano lidiara con todo el problema a pesar de que él estaba del otro lado de la puerta de su habitación con la espada en la mano en caso de que tuvieran que proteger a sus señores. Incluso había sido él el que había detectado la presencia de Songhua.

-Nada- Yanhuan lo atrajo y le besó la cabeza- Ve a dormir. Me quedaré vigilando, nunca he confiado en la familia del líder y no sé qué pueda ocurrir- vio a su hermano asentir y le besó lo labios suave- No terminamos lo de hoy pero me aseguraré de pagarte mañana doble-
Yanfeng le sonrió.

-Será mejor que me vaya a dormir o creo que me quedaré aquí contigo y necesito energía para tratar con el señor Zhiyin- le besó la mejilla y dio media vuelta hacia su habitación.

Dentro Fengxiao movía sus caderas dentro del cuerpo de su esposo aunque su atención todavía estaba fija en lo que ocurría afuera. Había lanzado un hechizo en dirección a la puerta silenciando todo el sonido después de comprobar que Songhua era consciente de lo que estaba haciendo. Debía dejárselo claro, aunque no había medido su fuerza y ahora tenía a Zhiyin casi desfallecido por la sobreexcitación a la que lo había sometido.

Detuvo el movimiento de sus caderas mirando el rostro jadeante debajo de él. Nunca más volvería a tener sexo sin estar pendiente o su pareja volvería a sufrir.

Era entrada la mañana. Fengxiao se levantó como costumbre dejando a Zhiyin durmiendo totalmente exhausto. Si su vida sexual era así de intensa con una inmensa panza que los retenía no se imaginaba como sería sin ella. Zhiyin era bastante caliente y después de probar una buena noche de sacudidas parecía adicto a eso o a él. Sonrió y besó su frente. Tenía trabajo que hacer y mientras más temprano mejor.

Estuvo bastante tiempo en su estudio. Había preguntado por su primo y su gente y le había dicho que todavía estaban durmiendo. Fengxiao no se lo creyó y menos cuando un discípulo entró corriendo diciendo que Songhua había desaparecido de su cuarto dejando a sus hombres todavía allí. Y poco después que Zhiyin...también.

Un capítulo desde el punto de vista de Fengxiao, para cambiar un poco el ambiente.

¿Qué creen que le pasó a Zhiyin?

¿Cómo piensan que reaccionará Fengxiao ahora que sabe que tanto Songhua como Zhiyin desaparecieron a la vez?