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Esposo mío, como que te estás contagiando conmigo

Zhiyin iba caminando al lado de su esposo, sosteniéndose de su brazo. No sabía por qué, pero sus piernas estaban algo inestables y le costaba caminar un poco. Por suerte su esposo caminaba lento haciendo que el trayecto fuera mucho mas fácil.

-Ahhh- soltó sin pleno aviso tocándose la barriga, doblándose en el proceso.

Fengxiao a su lado lo miró preocupado sosteniéndolo más fuerte, había notado el estado de Zhiyin desde antes e intentaba ir a la par de él. Aun así, sabía que algo no estaba del todo bien, después de todo habían pasado buen susto durante la noche.

-¿Zhiyin?- había angustia en su voz.

-Tu maldito hijo me quiere dejar sin costillas- una marcada mueca se mostraba en el rostro del menor sobándose la zona que había sido pateada con fuerza. Su renacuajo estaba realmente intranquilo, era como si quisiera decirle algo y le mandaba olas de dolor cada vez que le daba la gana- Aun no es tiempo que salga- jadeó enderezándose con ayuda de su esposo, su hijo no volvió a patear de nuevo y volvió a estar tranquilo, al menos de momento. Solo había sido una pero realmente, cada vez que lo hacía, casi le sacaba el alma del cuerpo.

Definitivamente consideraba a las mujeres embarazadas mucho más que antes. Y este sería su primero y último hijo.

-Él próximo lo tienes tú- le espetó a su esposo pellizcando su mejilla.

Fengxiao inclinó la cabeza sin comprender mucho sin quejarse por el apretón sobre su rostro que dejó una pequeña marca rojiza en su blanca piel.

-¿Próximo qué?-

Zhiyin resopló.

-Próximo hijo. Acaso no querías tu propio equipo de futbol, pues adelante, tenlo, pero lo llevarás tú en tu barriga- le palmeó el duro abdomen a su esposo- Yo mismo te preparo la píldora de embarazo.

Entonces se quedó pensativo por un momento y se tocó la barbilla.

-Pero entonces perderías esos duros y ricos abdominales que tienes- puso sus labios en un puchero- No quiero que se vaya mi tabla de lavar- Ahhhhh, maldito Fengxiao, me rompes la cabeza- gritó

Y su esposo se quedó completamente ido con los bruscos cambios de humor de su esposo. Normalmente eran cambiantes, pero no tantos en menos de un minuto. El embarazo definitivamente hacía locuras en las personas.

-Ah- volvió a gemir Zhiyin y se pasó la mano por la enorme barriga

El rostro serio de Fengxiao estaba inesperadamente pálido y lo sostuvo aún más preocupado.

-Esposo mío, no me mires así, te juro que esta vez no me pateó, solo se acomodó- le acunó las mejillas entre sus manos y le besó la punta de la nariz- El renacuajo está ansioso de vernos. Está aburrido de estar solo allá adentro.

-Pero te está haciendo sufrir- la voz de Fengxiao sonaba dura, porque sería su hijo y todo, pero para él, el número uno era Zhiyin, y en estos momentos este no la estaba pasando para nada bien.

Zhiyin no pudo evitar sonreír. Fengxiao era más sobreprotector de lo que se esperaba y estos últimos meses de seguro le estaban sacando canas, aunque era difícil saberlo con lo espeso, largo y oscuro de su cabello. Ya después se entretendría con su hijo a buscarle las canas en ese matojal de envidia para cualquier mujer.

-Ya estoy bien. Mira- alzó los brazos a cada lado de su cuerpo y dio un paso atrás- Ya pasó. Solo fue una pataleta del momento- decía eso, pero rezaba por no recibir otra porque realmente él mismo agarraría el primer cuchillo que se le pasara por delante y se cortaría la barriga.

Fengxiao asintió y le agarró las manos para estrecharlo en su pecho. Algo dentro de él lo mantenía incómodo, ansioso. Prefería que estuvieran en su secta, con todo lo que los rodeaba y que conocían. Estarían en la secta donde nació, se crio y vivió muchos años, pero estar rodeados de personas que nunca lo habían mirado amorosamente no era nada agradable.

-¿Vamos? Suegrita querida me vendrá a buscar y me arrastrará de las greñas si nos seguimos demorando- Zhiyin le dijo palmeando su espalda para que lo soltara.

Había notado los miles de nudos en esta. Su esposo estaba sumamente tenso. Solo él que ya lo conocía podía notar la incomodidad en aquel hombre que solía mantener su rostro neutral. A pesar de que no solía mostrar emociones, Zhiyin había aprendido a reconocer como se sentía su esposo, sobre todo por sus ojos, estos eran el alma de él. Era normalmente de un azul muy claro y limpio, pero dependiendo de cómo se sintiera cambiaba la tonalidad, siendo casi negros cuando estaba molesto.

Fengxiao asintió, aunque esta vez aferró la mano del menor mucho más fuerte, al punto que casi le estrujaba los dedos inconscientemente una vez estuvieron llegando al lugar de la ceremonia. En consecuencia, Zhiyin tuvo que pisarle duro el pie para que le prestara atención.

-Demonios, esposo mío, tú también- sacó los dedos de su agarre y sacudió la mano en el aire para relajar sus dedos- Tú y tú hijo me van a llevar a la tumba de una maldita vez. Se piensan que soy tan fuerte como ustedes. Bestias- le gritó sin pensar en donde estaba y rodeado de quienes.

Podía haber sido de forma inconsciente pero la verdad era que el líder de la secta Tongli era realmente fuerte. Zhiyin se cuestionó que realmente si este se contenía cada vez que estaban en la cama haciendo sus cosas mormonas, porque dado lo que había visto, este lo trataba muy suave. Ya tendría que provocarlo más adelante. Se preguntó si era de esos hombres que te dejaba jadeando y casi desfallecido en la cama. Eso sería realmente interesante de experimentar. Ya su esposo se lo había advertido pero la emoción de saber si era reamente verdad le atraía mucho.

Una sonrisa extraña se posó en sus labios, pero un pequeño carraspeó de una garganta lo hizo mirar hacia el lado encontrando que varias miradas estaban posadas en él. Una gota de sudor cruzó por su sien.

-¿Esposo mío?- y se pegó a él rápido recomponiéndose. No le gustaba ser el centro de atención de aquella forma. Lo ponía ansioso y más cuando estaba tan vulnerable con el estado de su cuerpo.

-Tranquilo- Fengxiao a su lado le rodeó la cintura por detrás y lo estrechó más contra él de forma protectora.

Zhiyin se percató que estaban delante de un pasillo despejado que daba a un templo a varios metros de ellos. Dos columnas altas, gruesas y con sellos sobre ellas hacían de límite entre la entrada del pasillo. El templo no era tan grande, pero si alto. Zhiyin recordó que antiguamente se usaban para concentrar la energía espiritual en la cumbre y así poder catalizarla mejor. La cúpula superior estaba hecha de cristales especiales. Nunca se imaginó que sería testigo de una de esas magníficas edificaciones, ni que allí estuviera alguna. Bueno dado que esta era una secta con bastantes años debía ser una cosa obvia.

Pero no era solo eso lo que le llamaba la atención. Ellos dos habían llegado encontrando a La pareja, el actual líder de secta Xingyun y Pinting, donde a su lado se encontraba Hanyi. Los tres vestidos de blanco. Frente a ellos, al lado de la otra columna y repasando con la mirada a Zhiyin de arriba abajo se encontraba un hombre algo entrado en edad, su cabello estaba completamente de blanco, aunque su cuerpo no se doblaba como si estuviera cansado de los años. Detrás de él había un grupo de cuatro guardias que tenían sus ojos cerrados.

Fengxiao llevó a Zhiyin hacia donde estaba su familia. Estos lo recibieron auqneu la tensión se notaba en el ambiente. Zhiyin pot su parte no podía quitarle los ojos a ese grupo frente a ellos. Se estremecía solo con su presencia.

-Esposo mío, quiénes son ellos- se acercó más a él intentando fundirse con él lo más que podía. Ahora mismo solo confiaba en él, y en Yanhuan que se había quedado en los alrededores verificando junto al resto de la guardia si había algún movimiento inadecuado.

-Ese es Li Tianyu. El actual cabeza de la segunda rama de la familia Yu y el padre de mi primo, Songhua. Es el esposo de la hermana de mi abuelo. Por lo visto él vino personalmente a ver que estaba ocurriendo-

Zhiyin desvió la mirada hacia su esposo.

-La cosa de la familia de ustedes es desde muy atrás. Demonios ustedes que son curieles creando gente. Por eso es que se crean todas estas malditas intrigas palaciegas de mátense y que sobreviva el que pueda- le murmuró a su esposo para no ser aún más el centro de atención –Por eso cuando tengamos el equipo de futbol lo voy a criar con puño de hierro. Nada de discusiones entre ellos-

Fengxiao alzó una ceja.

-Acaso no dijiste que el equipo de eso que acabas de mencionar lo llevaría yo-

Zhiyin abrió la boca para después quedarse sin palabras. Puso sus manos en su cintura fingiendo estar indignado.

-Esposo mío, como que te estás contagiando conmigo. ¿Dónde está el Fengxiao serio que apenas podía responderme antes ¿Eh?

Fengxiao solo inclinó ligeramente la cabeza.

-¿Deseas que sea como antes?

Zhiyin pestañeó para después agitar ferozmente la cabeza casi despeinándose.

-No, no cambies por favor- se aferró a su brazo- Me voy a pegar a ti como una garrapata para que te sigas contagiando conmigo, pero no vuelvas a ser el imbécil de antes-

-¿Mi hijo un imbécil?- la ceja de Pinting palpitar al escuchar a la pareja que parecía al mundo.

-Suegrita querida, no se meta que esto es cosa de pareja- Zhiyin le dijo sin mirarlo, sus ojos estaban fijos en su esposo.

-Este niño maldito. Le tendré que dar unas nalgadas para que aprenda- protestó Pinting pero en su voz no había la acidez del principio, después de todo se sentía realmente bien después de una buena noche junto a su esposo, y los consejos dado por este mismo niño maldito. Por esta vez se lo dejaría pasar.

Fengxiao por su parte simplemente asintió con la cabeza. Y otra vez se quedaba sin argumentos para responderle, porque Zhiyin podía ser muy perspicaz a la hora de hablar y a veces su cerebro no podía seguirle el ritmo.

En eso los pasos de alguien corriendo se acercó.

-Ya el Gran Cultivador está aquí.

Y al escuchar eso, Zhiyin no supo por qué, pero se estremeció con una mala sensación. Y su instinto solo el dictó que saliera corriendo. Solo que esta vez no podía hacerle casi a este, porque quien pagaría las consecuencias sería el renacuajo en su panza.

Volví por aquí, después de casi dos meses. Pero ya Zhiyin está de vuelta.

Feliz año nuevo a todos y síganme en mi perfil de Facebook que estaré dando noticias de mis libros. Y sobre todo el primer tomo en físico de Enamorado de un idiota en físico con ilustraciones hechas de mi propia mano.

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