Esposo mío...
Tanto Yanhuan como Yanfeng se miraron consternados ante aquella noticia. Si había dicho que era el padre de Zhiyin se imaginaban que fuera el de Fujie, porque el de Zhiyin original ya sabían que no era de esa época. Sonaba absurdo, pero ellos ya lo habían asimilado. Sin embargo, no podían estar seguros de ello porque simplemente se los dijera, en esos tiempos donde todo estaba turbulento tenían que tener más cuidado de lo normal.
-¿Cómo podemos creer en sus palabras?- Yanhuan frunció notablemente el ceño refiriéndose a todo.
El hombre que se notaba cansado no pareció molestarse por sus palabras y sonrió gentilmente. Se inclinó y rebuscó en el borde interno de su bota hasta sacar algo brillante con un cordel tejido en hilos de seda. Para ese momento estaba sucio, pero todas las partes del hombre estaban en ese estado agregando sangre seca.
Lo puso encima de la mesa y al quitar la mano ambos gemelos pudieron ver el emblema de la secta en medio del medallón de jade con incrustaciones de oro. Que lo tuviera junto a él y además envuelto en una pequeña capa de cultivo espiritual solo significaba que estaba diciendo la verdad en cuanto a que era el líder de una secta.
Ahora la segunda parte, más importante y seguro más difícil de comprobar.
-Disculpe nuestra rudeza líder de secta, pero sabrá que estamos en unos momentos bastantes tensos- Yanfeng hizo una leve reverencia a modo de respeto. Ellos podrían estar a cargo de la secta en ese momento, pero ahora mismo Jianwen tenía el rango superior.
-No es problema- Jianwen les dijo con voz cansada- los entiendo.
-Ahora- Yanhuan por su lado aún estaba con las defensas levantadas al cien. Si, perfecto, era el líder de una secta ¿Y? Muchos lo eran y podían venir a hacer daño- ¿Cómo puede demostrar que es el padre de nuestro Joven maestro Zhiyin- el gemelo lo había pensado, pero no encontraba forma que pudiera demostrarlo como tal, aunque verdaderamente si miraba detenidamente al hombre encontraba rasgos similares con el rostro de Zhiyin
Al parecer Jianwen no estaba muy preocupado pues su rostro estaba relajado y solo sonrió levantándose. Los dos gemelos se pusieron en alerta viendo como el líder llevaba sus manos a su fajín y comenzaba a desatarse la ropa.
Segundos después este se giró y bajó la túnica dejando completamente visible su espalda. Y no era por la forma musculosa y atractiva de esta, o por la sangre y las heridas que se encontraban por la que los dos gemelos suspiraron sino por las marcas de varias flores rojas completamente abiertas esparcidas por toda la piel esparcidas como una laguna hermosa, como tatuajes pulcramente realizados... muy similares a los que su señor comenzaba a tener en su espalda.
-Eso...- la voz de Yanfeng tembló.
-Por la forma en que reaccionan estoy seguro que ya lo vieron en su señor. Era de esperarse después de comenzar a despertar su poder- Jianwen se giró y comenzó a arreglarse la ropa- Solo los que pertenecen a la familia Han pueden portar tal emblema en su piel junto con el poder y la responsabilidad que eso conlleva. Y el de Zhiyin ha comenzado a extenderse muy rápido.
Ante esto los ojos de ambos gemelos se abrieron muy grandes y Yanhuan casi lo agarra de la túnica sino fuera porque su hermano lo detuvo.
-¿Vio a Zhiyin?- se olvidó de todo el protocolo- ¿Dónde está? ¿Está vivo? ¿Está bien?- sus preguntas fueron rápidas y casi incomprensibles.
Jianwen se dejó caer nuevamente, su cuerpo no estaba en el mejor estado. Asintió.
-Está en una isla, la misma donde terminamos atrapados y nos costó mucho trabajo salir.
Los ojos de Yanhuan se pusieron rojos.
-Si lo vio, por qué no lo trajo con usted, acaso no es su padre- gritó tan alto que desde afuera se pudo oír.
El rostro del otro hombre estaba sumamente tenso.
-Acaso crees que quería dejarlo allí- la voz de Jianwen era lenta y cargada de resentimiento... resentimiento a él mismo por haber tenido que dejar a Zhiyin atrás- Donde se encuentra en estos momentos no es fácil salir y más cuando eres un ... esclavo.
Ante la mención de aquella palabra fue Yanfeng el que tembló y su hermano tuvo que sostenerlo para que no colapsara.
-El señor Zhiyin... ¿esclavo?
Jianwen asintió.
-Dalai y yo nos infiltramos en la isla después de enterarnos de un nuevo cargamento de esclavos. Yo ya estaba al tanto de la desaparición de Zhiyin, solo no me había presentado antes pues no estaba muy seguro, pero Dalai reunió la información que me lo confirmó. Una vez dentro nos enteramos que él había sido designado al burdel.
-Al burdel- Yanfeng cada vez se ponía más pálido- Mi pobre señor- sus ojos se llenaron de lágrimas- ¿Por qué él? Todo lo que le habrán hecho.
Yanhuan lo apretó contra su pecho con los dientes apretados y conteniéndose. Mantener el control en ese momento era lo mínimo que podía hacer. Jianwen siguió.
-No se preocupen, él no estaba entre los esclavos que se prostituyen, su cuerpo... estaba muy herido debido a que le extrajeron a su hijo de una forma muy brutal. Estaba en recuperación y hacía actividades de limpieza temporalmente.
Aun así Yanfeng soltó un sollozo, su hermano le sobó la cabeza con la mandíbula tensa.
-Y...- le exigió seguir explicando.
-Dalai y yo lo reservamos toda una noche para que pudiera descansar tranquilo y hablar con él. No mucho pues podíamos ser oídos. Él... no puede hablar de momento- dijo Jianwen con rabia- Su poder completo y su voz fueron sellados con un hechizo alrededor de su cuello.
-Desgraciados. Si solo los atrapo los destrozaré a todos- la mano del gemelo mayor estaba tan apretada que sus nudillos estaban blancos.
-Quería llevármelo conmigo. Era lo que más deseaba, pero era imposible, al menos pagué para que estuviera a salvo junto al niño que lo cuidaba- Jianwen cerró los ojos y tomó aire- Es una isla perteneciente a alguien con mucha influencia, entrar fue la parte fácil, salir apenas posible y más cuando nos descubrieron. La vigilancia es demasiada en aquel lugar y mover a un esclavo es totalmente imposible. Al menos sabiendo su paradero íbamos a volver a buscar refuerzos, pero fuimos atrapados.
Las manos de Yanfeng se apretaron en el pecho de su hermano.
-Entonces... que esperamos... vamos a buscarlo- miró del líder a su hermano gemelo- Él debe estarnos esperando.
Jianwen apretó los labios.
-Eso... fue hace un mes.
Los rostros de los dos gemelos palidecieron.
-¿Qué?- dijeron a la par temblando.
-No perdamos las esperanzas, él debe estar bien, el tatuaje en nuestras espaldas no es solo decoración y si estuviera muerto su líder lo sabría. Solo debemos ir allí a buscarlo. Recemos que aún esté en el burdel y a salvo.
Yanhuan tragó en seco.
-Si no está en el burdel...
El líder alzó la cabeza y lo miró.
-Solo quedaría las canteras y esperemos que no esté ahí, la esperanza de vida solo es de pocos meses.
Los dos gemelos se estremecieron y Yanhuan miró hacia la puerta.
-Prepara todo, saldremos en minutos a buscar a nuestro joven seños- su orden fue definitiva y los dos discípulos afuera asintieron y salieron corriendo. Después se giró- Muchas gracias, al menos ya sabemos dónde poder buscar.
Después de tanto tiempo sin pistas al menos ya sabían la referencia del paradero de Zhiyin. Culpar a Jianwen por no poderlo sacar era algo inútil, dada las condiciones posiblemente no hubieran salido vivos.
De repente el suelo debajo de ellos comenzó a temblar y Yanhuan aferró fuerte a su hermano contra su pecho y Jianwen frunció el ceño. Una ola fuerte de cultivo sacudió los kilómetros a la redonda haciendo estremecer a todos los que estaban cerca incluyendo a la mayoría de los integrantes de la secta y todos supieron de quien se trataba,
Los gemelos aún jadeantes y cubiertos de sudor se miraron y salieron corriendo, aun sintiendo en el fondo, muy a lo lejos el llanto de un bebé. Ese era el hijo de sus líderes, debió haber sido perturbado para la energía de uno de sus padres, más específicos aquel cultivo demoniaco que habían sentido.
Acaso...
Los dos corrieron sin mirar atrás y sin dejar que los siguieran por seguridad para detenerse cerca de donde su líder estaba confinado, solo que ahora la atmósfera era diferente alrededor del templo. Todos los talismanes que habían sido pegados en las paredes se habían hecho añicos y el viento alrededor era denso y oscuro. Una espesa neblina se movía frenéticamente alrededor de las paredes y escalera sin permitir poder acercarse. El aire estaba tan pesado que los dos gemelos no pudieron dar un paso más.
Yanhuan se puso delante de su hermano cubriéndolo con su cuerpo por si acaso y solo les quedó esperar porque algo estaba ocurriendo, este suceso no había ocurrido antes, ni siquiera cuando Fengxiao entró allí.
De repente todo se esfumó. Tan rápido y de golpe que los gemelos perdieron el equilibro y cayeron al piso. Toda la densa bruma desapareció y no escuchó nada... todo fue suplantado por un silencio tan sepulcral que hasta respirar era un sacrilegio.
Yanfeng temblando y sin poder alzar la cabeza movió su mano hasta tocar la de su hermano y los dedos de este se entrelazaron con los suyos.
Fue entonces que la puerta del templo comenzó a abrirse lentamente, con un sonido chirriante que cortaba el aire y estremecía todo a su alrededor... los gemelos tragaron en seco y con movimientos muy medidos alzaron su cabeza para ver la silueta que iba saliendo del templo.
Un cuerpo grande enfundado solamente en una túnica blanca, con el cabello oscuro largo y desordenado, pero al menos... los ojos negros con los que había ingresado un mes antes ya no estaban... y habían vuelto a su color azul natural.
Los gemelos sonrieron. Su líder había despertado.
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