—¿Lo perdono?

Gokū agarra Vuelo para dirigirse a su casa.

(...)

—Bien, eso es lo que —se paró del sillón— pasó, tengo que esperar a su respuesta... ojalá y sea positiva... —dijo desanimado cargando a Reiko— ¿Me entienden?

—Sí, papi, y mamá, ¿oor qué no habló?, para ser más específica, ¿por qué creyó, y por qué salió volando cuando querías decirle el incidente?... —preguntó Yuki con confusión.

—No sé, solo hay que esperar... no la odien, ella es tierna es de un corazón que yo quisiera tener, por favor no la odien —reclamó el príncipe.

—¿Pa-pá? —dijo la más chica de todos sus hijos...

—Papa, ¿y si fuera al revéz? —preguntó Goki.

—Destruyo a esa persona, y... ustedes saben —dijo el sayayin mayor ruborizándose.

—Ay, papá...—dijo Gogetta agachando su cabeza—*Se escuchan los ruidos de la llave de la puerta principal* 

—¡Vayan a su cuarto, ¡Vayan! —reclamó susurrando a sus hijas e hijos— Hola, ¿qué decidiste?

—He...perdonarte, perdóname —se lanza hacia Vegeta y su hija menor.

—Mi amor, no te preocupes, sé que los 2 cometimos errores, pero lo importante es el amor entre los dos. —el príncipe de los sayayin comienza a subir a su pareja en su habitación, los dos quedan dormidos.