–¡KAKAROTO!

–¿Qué pasa, Vegeta?

–¡¿POR QUÉ SIEMPRE TERMINAS COQUETEANDO CON ESAS MUJERES, EH!? —dijo agarrando su muñeca apretándola.

–¡Tranquilo!, ¡Por dios! Es Bulma, ya la conoces...¡Suéltame! —Dijo tratando de quitarse de encima.

–Vegeta, deja los celos, eso arruina una bonita relación... —dijo la chica peli-azul parándose de la silla en donde se encontraba.

–Yo, ¡Tsk! —tranquilizándose, soltando al menor— perdón —va con el menor abrazándolo— perdón... sólo vámonos...

–S-sí, amor, adiós, Bulma...—haciéndole señas—  *adiós Bulma, gracias*

–Cuídense, me cuidan a los niños...

–Adiós, Bulma, el embarazo suele tener problemas.

–Yo soy preventiva —mitiendo.

–P-pero tú lo estás... ¿No?  —dijo arqueando una ceja de confusión—

–¡Uy! Si, sí estoy embarazada, ¿contento?

—Sí, adiós, felicidades...

–Adiós...

/escritora ;D/

Ya han pasado muchas cosas, Gokū y Vegeta tienen 5 hermosos niños, ha decir verdad, Vegeta quiere una familia de muchos integrantes... Bulma está embarazada del Rey Vegeta, sí, sonará absurdo, era lo que quería.

–¿Por qué eres celoso?, apenas y me acerco a una mujer u hombre, y yame andas regañando.... ¿Por qué?

–Eres mío, de mi propiedad... pero, es inevitable ser celoso...

–Claro que puede ser  inevitable... —le da un beso corto al mayor— Te amo...

–Nuestros niños han de haber hecho un desastre —sacando una gotita al estilo anime— ¡Ya llegamos!

–¿A dónde fueron ma'?

–Fuímos con Bulma, Veggeto... ¿Por qué, querías ir?

–Si... —agacha su cabeza.

–Gogetta, dime, ¡¿por qué fregados huele a gas?!

–Este, yo... quería preparar algo...pero no, perdón mamá, no lo volveré a hacer.

–No importa... ¿Mh? ¿Dónde Yuki, Reiko y, Goki?

–Están en el cuarto de Reiko... —dijo un poco frío.

–Gracias, Vegetto...

La pareja sayayin se dirijió al cuarto de Reiko.

–¿Por qué no vienen a saludar, chicas? —dijo recargándose en la puerta.

–Perdón, ma' es que es tan tierna Reiko, y muy linda..aww —dijo Yuki sin mirar a Gokū.

–Ya veo, bueno, las espero abajo para comer. —se fué a la cuna de Reiko y la carga. ¿Quién es esta bebé hermosha, boñita? —dijo Gokū poniéndola en su pecho pa' darle de comer— Bueno, ¿bajan?

–Si, ma' la última en llegar es una insecta de mier- —dijo Goki corriéndo rumbo a la cocina.

–¡Goki!

–Perdón.

–Eso es trampa Goki —voló Yuki hacia la cocina.

Mientras que Gokū le daba de comer a Reiko, se aparece Vegeta, con una cara de perrito regañado...

–¿Qué pasa, amor? —dijo Gokū girándose hacia su amado.

—corre hacia Gokū— Perdóname... perdón

–¿Por qué? —dijo confuso.

–¡Por celoso! ¿Por qué más?

–Los celos no se pueden evitar —dándole un beso en la nariz— es la confianza, que no se puede perder, los celos... mmm... puede que si, pero lo que jamás, jamás, se debe perder, es la confianza —dijo el clase baja casi por llorar.

–Eso... no me lo esperaba... vamos con las criaturas —dijo el mayor dirijiendo su mano a la mejilla del menor para luego plantarle un beso en la boca...

–Si, solo deja le doy de comer a eshta bebé bonita

–Bueno, nos vemos abajo —bajó la voz hasta que no se escucha— mi insecto~